Como la noche y el dia (Yaoi)

29. Todo esto tiene una explicación

Este capítulo es largo y pasan un montón de cosas. Sobre la demora lo de siempre, que lo siento.

--- Seki ---

- En unos días os dan las vacaciones de navidad ¿no?

Hiromi y Riku están sentados en la parte de detrás del coche, desde el desayuno han estado pasándose con los cariñitos. Es la tercera noche que pasa Hiromi oficialmente en casa, me siento como si fuese una suegra envidiosa.

- Nos las dan mañana -Hiromi habla sin importancia

- ¿En serio?

- Riku ¿tampoco lo sabías? ¿acaso todos los rubios sois tont- Mi primo le da un codazo en el estómago y se calla.

- No me acordaba de la fecha de hoy. Hablando de eso, Seki, entonces mis padres vienen en nada.

- Lo siento Hiromi pero hoy va a ser tu última noche en mi cama, de momento, claro. -Paro mi deportivo en la entrada del instituto y me giro a guiñar el ojo al moreno.

- No lo voy a echar de menos, además, mi madre ya debe de haberse cansado de jugar a la buena madre y se habrá vuelto a largar con un nuevo novio.

El chico salvaje tiene la mirada perdida y triste. Supongo que va a pasar la navidad sólo o en casa de algún amigo, así que ¿por qué no en la de Riku? Sin planearlo con nadie abro la boca, de todos modos soy el que se encarga de la casa ahora mismo ¿no?

- Hiromi, vente a pasar la navidad con nosotros. -Los novios se giran a la vez hacia mi.

- Me encantaría

- Perfecto, entonces que te envíe Riku la hora algún día de estos. Ahora de momento moved el culo y salid me mi coche que tengo ganas de volver a la cama a dormir. -Los días que se ha quedado Hiromi, a la hora de dormir, han sido una odisea.

- ¿No tienes trabajo? 

- Hoy no. -La parejita me mira raro, como si los estuviese mintiendo.- Venga, que vais a llegar tarde a la clase de Toru.

- Ahora no nos toca inglés -Hiromi habla a la vez que sale del coche arrastrando a Riku tras él.

Me despido con la mano y voy directo hacia casa. Nada más llegar voy hacia mi cuarto y me tiro en la cama. Huele a los cigarros de Toru, maldito Hiromi.

Desde lo sucedido en la biblioteca no he vuelto a saber de Toru, han pasado ya un par de días y todavía me da vergüenza pensar en ello, no sé cómo actuar, pero alguien tiene que hacer algo, y si no lo hace Toru lo voy a hacer yo. Alcanzo mi móvil, que está en el bolsillo de mi chaqueta y pienso en mandar un mensaje. No, mejor no, puede que no me responda. Busco en la libreta de contactos a Toru y pulso el botón de llamada. Pasan unos largos segundos antes de que responda.

- ¿Toru? Soy Seki

- Lo sé ¿que quieres ahora? Estoy un poco ocupado corrigiendo exámenes

- ¿En serio? Súbe un poco la nota a Riku, que es probable que le haga falta.

- Ni de broma ¿Y? ¿Para qué llamabas?