Si no te gusta, no mires [TERMINADA]

Capítulo 9.

- ¿Te vienes con nosotros Jade? - Me pregunta Zayn llegando a mi lado junto a los chicos, ya había terminado esa estúpida clase y me encontraba saliendo de la escuela.

- Claro - Me encogí de hombros, al fin y al cabo Zayn vivía al lado mío.

- Tengo hambre - Se queja Niall y yo recordé una barrita de chocolate que tenía en mi mochila.

- Toma - Se la pase y el me mira enamorado, yo solo fruncí el ceño.

- Te amo - Se me acerca y me da un abrazo mientras yo lo trataba de apartar.

- Si si, mucho amor - Lo aleje y los demás me veían divertidos.

Nos quedamos esperando al parecer a Justin, de saber que se iba a demorar tanto no hubiese aceptado la propuesta de irme con ellos. Algo cansada quise reclamar pero unos gritos me detuvieron.

- ¡Chicos! - Llega corriendo Ryan algo desesperado hacía nosotros.

- ¿Que pasa? - Le pregunta preocupado Louis.

- Justin está en grandes problemas 

- ¿Que le pasó? - Pregunta esta vez Harry.

- Alguien metió drogas en la mochila de Justin, estaba todo planeado ya que llegó la policía y se lo llevaron detenido - Me sorprendí. - Oh, estás aquí - Se percata de mi presencia.

- Debemos ir a verlo - Dice Liam y todos asintieron dándole la razón, yo claramente no iba a ir.

- ¿No vienes? - Me pregunta Zayn y yo hice una mueca.

- ¿Estás loco Zayn? - Le pregunta Ryan molesto. - Esta chica lo único que va a hacer es estorbar

Me di vuelta y comencé a caminar a mi casa, no me quería quedar con los brazos cruzados pero tampoco me podía aparecer ahí ya que ni los conozco, no llevo ni una semana aquí. No tengo una buena relación con Justin pero no tolero las injusticias.

Saqué mi celular para hacer algo y no me aburría, decidí marcar el número de mi mejor amiga.

- Jade de mi corazón, por fin te acuerdas de tu mejor amiga - Me dice al segundo que contesta y no pude evitar reír.

- Hola Ali - La salude divertida.

- ¿Cómo estas?

- Normal, los extraño mucho - Me puse triste.

- Nosotros igual - Suspira. - Hey... - Comencé a escuchar. - Suelta eso... Yo estoy hablando con ella... Vete... Ya te llamará marica - Reí

- Hola linda - Escuche y reí, de fondo se escuchaban las quejas de Alison.

- Hola Dani - No pude evitar sonreír como una estúpida.

- Debes rescatarme, Alison esta mas insoportable que lo común - Reí. - Auch - Escuche que se quejaba y a mi amiga chillando.

- ¡Cállate marica! - La escuche reclamar. - Terminé con Joseph - Me dice triste.

- Oh vamos Alison, no te puedes poner triste por un idiota como Joseph Bieber

¿Bieber? ¿En serio? Muy pocas veces escuché el apellido de Joseph y descubrir que puede tener una relación con Justin y con Chris me pone los pelos de punta. Los Bieber están en todos lados y todos pueden llegar a ser unos idiotas.

- ¿Sigues ahí? - Me preguntan.

- Si si, solo pensaba - Suspire. - Debo irme chicos, los quiero

- Te queremos - Volvieron a decir al mismo tiempo y yo sonreí mientras cortaba la llamada.

Entré a casa y lo primero que vi fue a mi padre leyendo un montón de papeles mientras que mi madre revisaba cosas en su computadora. Algo en mi cabeza se encendió y pese a no tener buena relación con ellos, sabía que estarían dispuestos a hacerme un favor.

- Oigan - Los llame y ellos me miran. - Necesito su ayuda en algo - Les dije algo incómoda, ellos ahora se veían muy sorprendidos, yo jamás les pedía algo.

- Cuéntanos - Me dice mi madre.

- Pues, a un compañero de la escuela le metieron drogas en la mochila, y llegó la policía, al parecer era todo planeado para que el cayera y se lo llevarán presos - Suspire. - No lo conozco mucho pero el no tiene la pinta de ser un drogadicto, y bueno, como ustedes se manejan con esto de las leyes y la justicia - Me encogí de hombros. - Quizás podrían ayudarlo

- Eso es muy grave - Me dice mi padre, ya, dime algo que no sepa ahora. - Pero yo creo que algo podemos hacer - Mira a mi madre y esta asiente.

- ¿Cómo se llama ese chico? - Me pregunta volviendo a mirar su computador.

- Justin Bieber - Ella empieza a escribir en su computador.

Luego de esperar a que ella terminará de leer algo en su computador me comentó que el padre de Justin estaba en prisión por ser un traficante y por tener unas deudas inmensas. Era muy baja la probabilidad de que dejarán a Justin libre pero podían hacer un intento.

- ¿Vamos? - Me pregunta mi madre, ellos ya estaban de pie preparados para irse.

- Bueno - Respondí incómoda, espero que esto salga bien, si no será estúpido que yo estuviese ahí.

En el auto mis padres venían conversando sobre lo que podía ocurrir mientras yo venía detrás metida en mis pensamientos. Quería que esto saliera bien, no se porque, peor la verdad es que quería.

- ¡Es la verdad! - Escuchamos ese grito desde una de las oficinas, luego unos gritos de un montón de chicos, ellos seguían ahí.

- Eres el hijo de Jeremy, no puedo creerte - Le dice el policía, mis padres se habían quedado conversando con la secretaria mientras yo escuchaba.

- ¡No me involucre con ese hombre! - Grita este desesperado. - El es un asco de persona

- No quiero más excusas baratas señor Bieber, le recomiendo que se consiga un abogado o alguien para que lo saque de esta, y después de eso hablamos - Sentí pasos y más gritos, en eso la puerta frente a mi se abre y yo quede paralizada. - Señorita Dankworth - Me saluda con una sonrisa y yo le sonreí incómoda.

- Hola Mike - Sentía la mirada confundida de los chicos puesta en mi.

- Buen día - Lo saluda mi madre y luego llega mi padre.

- ¿En que los puedo ayudar? - Nos pregunta amablemente.

- Venimos a hablar con el muchacho - Lo apuntan y este frunció el ceño.

La cara de desconcierto que tenían los chicos no tenía precio, se veían muy sorprendidos. Algo incómoda entré a la oficina junto a mis padres, yo venía con la cabeza agachada, estaba nerviosa, muy.

- ¿Quién de ustedes es Justin Bieber? - Pregunta mi madre parándose frente a los chicos, junto a mi padre, yo me quede algo mas apartada.

- Yo lo soy - Responde Justin levantando su mano. - ¿Quienes son ustedes?

- Mi nombre es Cathy y el es mi esposo Will - Se presentan.

- Supimos lo que te ocurrió y yo como abogado te quiero brindar todo mi apoyo, y mi esposa se hará cargo de investigar tu caso para que salgas de esto pronto

- ¿Es en serio? - Pregunta este sorprendido.

- Claro, nos encargaremos de tu caso y todo saldrá bien - Mi madre le sonríe amablemente, ni a mi me sonríe así.

- Muchísimas gracias - Le dice Justin emocionado, estaba a punto de llorar.

- Oh, no nos agradezcas a nosotros, agradécele a nuestra hija, ella recurrió a nosotros - Me sonroje tanto que parecía un maldito tomate, mientras que los chicos me veían sorprendidos.

¿Es tan difícil de creer que yo sea una buena persona y me preocupe por la gente? Malditos.

En eso mis padres salieron de la oficina y yo me quedé sola con ellos, todos en completo silencio, ellos seguían viéndome sorprendidos.

- Oh vamos - Me crucé de brazos. - Ustedes ni me conocen, no me miren como si esto fuera algo sorprendente, a parte, no soy tan mala persona - Rasqué mi cabeza nerviosa. - No es que sea cruel, simplemente he aprendido a usar menos el corazón - Me encogí de hombros tratando de quitarle importancia al asunto.

Continuará...

N.A: Nada que comunicarles. Cambio y fuera.