Hell's Heaven [Radioapple] [Omegaverse] [M-preg]

Capítulo 11.

Adv. Adamsapple leve. Lililucy. Smut no explícito. Mención mpreg. Agotamiento y temas sensibles.

—¡Lucifer!

Después de la caída, ambos vieron el vasto lugar que ahora se consideraba el infierno, la oscuridad ahora obedecía a Lucifer, quien más poder tenía, y lo iba a ir consumiendo hasta volverlo un demonio angelical.

Lilith tocó suavemente la zona de los cuernos en su cabeza, extrañamente no le dolía, pero igual sangraba, su cuerpo apenas había sufrido cambios a comparación de Lucifer, que incluso el color de sus alas era distinto.

Asi que cuando lo vio, tuvo que correr a atraparlo, pues había perdido la consciencia, supuso que por la sangre derramada y la fatiga por haber tratado con tanta fuerza el mantenerse de pie ante el cielo.

Con suavidad lo tomó en brazos para ella poder sentarse y tener al antiguo ángel en sus piernas descansando.

No tenían nada, todo era un lugar vacío y desolado, oscuro y difícil de ver si era siquiera algo habitable.

De pronto, el cielo volvió a abrirse, Lilith en protección abrazó a Lucifer contra su pecho dispuesta a pelear si era necesario. ¿Qué más castigo querían darles?

Pero lo que salió de esos portales, la dejó sorprendida, estaban cayendo ángeles.

Sintió un movimiento, Lucifer había despertado, se veía desorientado todavía, pero como si estuviera guiado, empezó a caminar torpemente hacia donde los ángeles estaban siendo expulsados.

Abrió sus alas y fue volando rápidamente para intentar atraparlos antes de caer duramente en el suelo infernal, no quería que se lastimaran, pero debido a que estaba debilitado, al último ángel que cayó no pudo sostenerlo y cayó con él.

Lilith corrió lo más rápido que podía, pues no tenía alas para alcanzar la velocidad de Lucifer con estas.

Llegó y apartó al ángel que estaba encima para tomar a Lucifer quien tenía una mueca en su rostro, una de sus alas se había visto perjudicada.

—¡Su majestad!

Una de los ángeles llegó con los demás, eran siete en total, todos parecían haber sido tocados por la maldad, y sus alas ya no funcionaban, se estaban volviendo cenizas, habían sido desterrados del cielo.

—¿Qué les pasó?

Preguntó Lucifer mientras se mantenía de pie. Le explicaron que habían peleado en contra de los dictamenes del cielo y tocados por la oscuridad filtrada, no quisieron purificarlos, sino como si fueran una plaga, los botaron del cielo sin mayor consideración.

La oscuridad los estaba moldeando como a Lucifer, aunque los cambios parecían ser más bruscos.

—Lo lamento.