Hell's Heaven [Radioapple] [Omegaverse] [M-preg]

Capitulo 7.

Adv. Violencia física. Sangre. Temas sensibles.

—¡Argh!

La sangre dorada salpicó por aquel suelo consagrado, un serafín caía unos centímetros más allá con el cuerpo temblando, pero volviendo a levantarse.

—¡Deja de entrometerte, Lucifer!

Los Elders, considerados la mayor autoridad del cielo por debajo de Dios, estaban dando castigo al serafín menor, Lucifer y la primera humana de la Tierra, Lilith, por el haber permitido que el mal entrara en su nueva creación divina.

—N-No dejaré... que la lastimen...

El látigo dorado volvía a alzarse contra Lilith, quien estaba asustada por no entender porqué el cielo era tan cruel con ellos por un error que desconocían que pasaría.

Ellos solo querían otorgar libertad.

—¡AH!

—¡Lucifer!

Lilith se acercó al serafín que había caído al suelo otra vez al intervenir y ser quien reciba el golpe del látigo.

La mujer alfa lo tomó en brazos apegándolo a su pecho, Lucifer veía de forma borrosa, pues aquel látigo había caído en su ojo que ahora no podía abrirlo del todo, además que la sangre fluía desde su cabeza hasta su mentón.

—¡Basta! ¡Por favor! ¡No lo lastimen más!

Imploró Lilith mientras abrazaba a Lucifer con más fuerza. El látigo volvió a alzarse, pero una mano lo detuvo.

—Suficiente.

Sera, la serafín mayor, dio un paso al frente con seriedad, había visto a Lucifer moverse listo para recibir otro golpe.

Amor.

Profundo amor.

El serafín menor era el portador de la luz, quien llevaba alegría y amor a todos, quien solo un error lo había convertido en el enemigo del cielo.

Pero no dejaba de ser un ángel.

—Lucifer, portador de luz, por tus faltas, serás condenado al exilio, tu castigo continuará en las llamas del infierno, los pecadores tocaran tus puertas y el mal vivirá contigo. Lilith, tu alma será la primera condenada, tu destino es caer junto a Lucifer, y ambos serán envueltos en la oscuridad.

Con esas palabras abrió un portal, y bastó un empujón suave para enviar a aquellos dos enamorados a su destino.

Lilith abrazó a Lucifer y este a su vez la protegió viendo hacia el cielo que lo abandonaba.

Miguel estaba ahí, solo observando, pero se había retirado antes de verlo caer.