Everyone is looking her - KIVI

11. Protegerla

Violeta durmió esa noche con Denna. Ambas acostadas en la cama tuvieron una conversación intensa. Violeta le había dado a su amiga un leve antecedente, y la rubia no paró de mostrar sus ganas de saber sobre lo ocurrido; la pelirroja le avisó que le contaría cuando estuvieran acostadas en la cama. El citado momento llegó, y aunque todavía no se habían metido debajo de las sábanas (Denna estaba bocaabajo en la zona de los pies mientras Violeta estaba en diagonal en la zona de las almohadas), la primera no podía estar más ansiosa:

-Dispara de una santa vez.

-Ay amiga, qué labios tiene -Denna gritó emocionada mientras Violeta hundió su cara en la almohada. Prosiguió- de verdad es que besa taaaan bien. A ver, resulta que salí a buscarla porque se fue enfadada como pudiste observar. Estaba indignada porque dice que la otra me trata fatal, y antes de que se fuera le dije que tenía razón. Iba a decirle que estaba enamorada pero me podían los nervios y, eso. Le respondí besándola.

-DE VERRDAD SI ES QUE YO SABÍA QUE SE ME DABA. Mi puta guiri se come lo que se quiera comer.

-Cállate, que suficiente sufro yo sabiendo que tiene una cola de lesbianas desquiciadas detrás de ella.

-Todas la miran a ella y... y ella te mira a ti.

Violeta hizo un puchero con la boca. Sentía que esa frase le había marcado. Había mucha verdad. Chiara podía elegir donde quisiera, pero Chiara siempre estuvo decidida en una sola persona, y era ella. Fue una hormiguita trabajadora, pero lo hizo tan bien que creó un monstruo con dependencia emocional de sus volteretas, un monstruo que sentía la necesidad de tocarle cuando la tenía cerca, porque había algo que la atraía a ella constantemente.

-Denna, estoy pillándome muchísimo.

-Lo sé, amiga. Siempre lo supe. Qué friendship crush ni qué coño. Tú solo querías que fuera tu brush para cepillártela.

Violeta se rió y le golpeó con la almohada a su amiga: -Idiota -reclamó entre sonrisas.

-Bueno, entonces ahora que está todo claro... ¿cuándo llamas a Julieta?

-Voy a hacer videollamada con ella por la mañana. Estoy decidida. Voy a hacerlo. Voy a dejarla y a vivir la vida que quiero vivir con mi Kiki.

-Sólo soy una chica enamorada de la relación de mis amigas. De verdad me sorprende cómo habéis podido aguantar tanto la tensión sexual que os traíais. Ese magnetismo, amiga... no se ve todos los días.

-Bueno, calla ya, que me pones nerviosa. Vamos a dormir que mañana es día intenso. Buenas noches.

-Buenas noches para ti también, que seguro que las tienes durmiendo con la camiseta ancha que te ha prestado indefinidamente.

-Aun huele a ella... -se mordió el labio-. Me mato, amiga.

-Te matará el amor. Ahora a dormir.

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Violeta apenas durmió en toda la noche. El tiempo se pasó entre sonrisas recordando su beso con Chiara, y suspiros imaginando la conversación que venía con Julieta. El momento había llegado, y Violeta empezó la videollamada con Julieta:

-Menos mal que das señales de vida -empezó Julieta la conversación, recriminando.

-Buenos días para ti también.

-¿Te parece normal lo que estás haciendo?

-¿Qué es lo que estoy haciendo, Julieta? -suspiró la pelirroja desesperada

-Me estás maltratando emocionalmente. Me tratas fatal. No me das explicaciones de nada, cuando nunca has sido así.

-Precisamente de eso quería hablarte. La Violeta de antes...

-¿La Violeta de antes? La Violeta de antes jamás me hubiese hundido de esta forma. Eres escoria. Y vas a hacerle mal a cualquier persona que se acerque a ti. Pobre Chiara.

-¿Chiara? -Violeta se puso en alerta. Podía admitir las barbaridades que soltaba de ella, pero no soportaría ni una recriminación a su guiri.

-Sí, no te hagas la sorprendida. Se te nota a leguas. De verdad que no sé qué le has visto, si es insoportable. Bueno, en el fondo ella me da pena, por tener que aguantarte. Y más sabiendo que las fans son de ella y no tuyas. A ver si te sigue aguantando cuando fracases. O a lo mejor te deja antes, por insoportable.

-Julieta eres una sin vergüenza -Violeta rompió en llanto-. Llevo martirizándome todos estos meses, tratando de gestionar la situación lo mejor posible para que no salieras perjudicada. He tratado de mirar por ti siempre, y me tratas así.

-Perdona, no sabía que la víctima ahora eras tú.

-No, joder! -gritó- Pero tú sabes perfectamente lo que es luchar por un amor caducado. No puedo más.

-Yo tampoco. Así que te dejo. Que te vaya bien, si es que eso es posible.

Julieta colgó, sin tan siquiera dejar a Violeta despedirse. La reportera estaba tratando de gestionar la situación pero estaba sobrepasándole. Quería llamar a Chiara, pero era un papel que no le correspondía. Llamó a Denna y se sinceró con ella. Trataba de pronunciar las palabras en medio del episodio de ansiedad:

-Después de todo lo que he hecho por ella... sé que es durísimo lo que le está tocando vivir, pero no puedo obligarme a enamorarme de alguien, y mucho menos obligarme a seguir estándolo.

-Vio, tranquila. Respira conmigo: inspira, expira... vamos, otra vez: inspira, expira... Lo has hecho lo mejor que se podía hacer, ¿me oyes? Has tratado de luchar por vosotras hasta que ha sido imposible hacer nada más. La relación estaba condenada al fracaso. Y digo la relación porque es el único fracaso de aquí. Tú no vas a fracasar, ¿te queda claro?

-Pero tiene razón... todo lo que toco, lo rompo. No puedo acercarme a Kiki, ella es pura luz y no me puedo permitir consumirla.

-Violeta Isabel Hódar Feixas o te callas o me encargo yo de coserte la boca con punto de cruz.

-Denna... no. Tiene razón. Lo sé. Y ella es la persona que habla con más criterio, ha vivido todo el proceso conmigo.

-¡Que te calles!

-¡Que no! Que te calles tú. Ni se te ocurra decirle nada de esto a Kiki.

-¿Qué vas a hacer?

-Protegerla. Protegerla de mí.

-Eres gilipollas.

-Últimamente me lo dicen mucho.