Lilith Myers, la encantadora hija del consejero John Myers, ha llevado una vida llena de privilegios en la estación Atlas, mientras observa la Tierra desde detrás del cristal. Pero bajo su sonrisa perfecta y su estatus de trofeo, Lilith guarda anhel...
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MAKES ME FEEL TICKLED AND MORE THAN TICKLES
A
mbos llegaron al comedor, Lilith seguía tambaleándose un poco de la resaca así que Bellamy volvió a colocar la mano en su espalda para estabilizarla como la noche pasada.
Las mesas ya estaban vacías, Lilith pensó mientras daba un vistazo, seguramente se había levantado bastante tarde, también se replanteo que nunca había estado en este comedor, y pocas veces en el de Atlas, ya que prefería desayunar junto a las chicas.
-Se que te prometí algo de comer y puedo ver que encuent-Se excuso Bellamy y Lilith rápidamente poso la mano en su hombro indicando que no le diera importancia-Con que haya café estoy feliz-.
-¿Cafe con resaca?-Bellamy la miró negando, como si regañara a una niña pequeña, por un momento le pareció tierno-No debes hacer eso nunca, ven anda, esperame aquí sentada-.
Bellamy la llevo a una mesa, mientras Lilith seguía sus órdenes y se sentaba en esta, colocando sus codos sobre la mesa y las manos en su cabeza mientras cerraba los ojos, vaya mierda de resaca, su cabeza le explotaria.
Bellamy regreso, sentándose junto a ella con una bandeja en sus manos, Lilith abrió sus ojos, notando un plato de patatas hervidas con verdura y un vaso de agua-¿No era lo que te imaginabas, eh?-Bromeo con una sonrisa juguetona, acercandole un tenedor.
-Eres muy lindo y considerado, gracias-Bellamy se quedó embobado por un momento, recordando como ayer Lilith se había dejado llevar y le había coqueteado un par de veces.
-Dime, por favor, que ayer no te conté ningún drama o llamé la atención-Hablo Lilith después de darle un bocado a las verduras, Bellamy negó con una sonrisa, haciendo desaparecer por un momento la preocupación sobre sus hombros.
-Tranquila, en verdad, fuiste bastante tierna y sarcástica-Confesó Bellamy, después de sus risas, Lilith se quedó en silencio, disfrutando el cosquilleo en su vientre por unos segundos.
-¿Tierna?-cuestiono aliviada-Me alegra que hayas visto a esa Lilith borracha y no la que se pone a hablar-añadió dándole otro bocado a las verduras, mientras otra cuestión aparecía en su mente.
Bellamy la observo comer embobado, perdido en los ojos y la sonrisa de la pelirroja-¿Me acompañante hasta casa, no?-Pregunto Lilith dudando, tal vez había sido un sueño de la chica.
-Sí, no te acuerdas?-Cuestionó Bellamy-No recuerdas casi nada de ayer, verdad?-añadio este con curiosidad, haciendo que la pena la consumiera, mientras negaba cabizbaja.
-¿Como sabías que te acompañe a tu casa entonces?-volvió a preguntar curioso, sobre lo que Lilith le había contado antes.
-Se ve, que tu compañía fue tan plácida que la Lilith borracha cuando le envió un mensaje a su amiga de que había llegado bien, mencionó que la habías acompañado y esta mañana leí su respuesta-Contesto Lilith avergonzada.
Bellamy trato de bajar la cabeza escondiendo su sonrisa, fallando estrepitosamente en el intento, Lilith había hablado sobre el con Keia-¿Keia?-preguntó esta vez el, recordando que la había mencionado ayer.
-¿La conoces?-Cuestionó Lilith perpleja, mientras Bellamy negaba con su sonrisa-No, pero la mencionaste ayer, me dijiste que le avisarías de que habías llegado-Confeso el pecoso con una sonrisa.
-¿Como si quiera lo recuerdas?-Susurró en forma de pregunta, llevándose otro bocado a su boca tratando de ahogar sus palabras.
Bellamy se apoyo en la silla con una leve sonrisa satisfecha sobre su rostro y esos rulos, que brillaban como sus oscuros ojos, Lilith paro por un segundo, dándose cuenta de que lo obserbava embobada de más.
-Como tu ebria, soy bueno recordando cosas-Bromeó utilizando las palabras anteriores de ella, mientras está negaba con una sonrisa.
-Gracias igual, por acompañarme y preocuparte-Confesó Lilith con una sonrisa, volviendo a sentir ese cosquilleo, Bellamy volvió a fallar escondiendo su sonrisa-No fue nada, ya te dije que era un privilegio para mi disfrutar de tu compañía-.
Lilith se volvió a sonrojar, notando como el calor subía a su rostro, y Bellamy sonría satisfecho.
Lilith soltó un suspiro observando como algunos miembros de el consejo pasaban por en frente del comedor, dirigiéndose a Fénix supuso esta, probablemente Simon los acompañaba y no tardaría en aparecer, sería una montaña de consecuencias para el muchacho si Simon lo veía y se lo contaba a su padre.
Lilith negó, con tristeza por tener que irse y más cuando estaba tan cómoda conversando con el muchacho, pero no permitiría que por su capricho de querer quedarse Bellamy sufriera las consecuencias.
-Debo irme a casa...-Susurró sin querer irse, aprovechando unos segundos más para apreciar el rostro del pecoso.
-¿Tu padre te espera?-pregunto por curiosidad, notando como una mueca había aparecido en el rostro cambiando la actitud de la pelirroja.
-No, mi padre ya debe estar junto al consejo pero mi estupido novio seguramente aparecerá pronto-A Lilith se le escapó el insulto, pero en ningún momento se arrepintió, mientras Bellamy recibía una punzada de tristeza pero un brillo de esperanza en sus ojos apareció cuando oyó el insulto.
Se notaba por lo que Lilith le había mencionado ayer y hoy con el desprecio al que se refería a el que no lo quería o había sido su elección tomarlo como a novio, Bellamy supuso que tal vez había sido idea de su padre y Lilith la tenía que haber aceptado, Bellamy rezo para que fuera así.
Lilith se puso de pie con pena, la sonrisa había desaparecido de su rostro desde que había visto a los miembros del consejo pasar frente a ella, pero la recupero cuando Bellamy se levantó junto a ella y esta le pudo dar un abrazo de agradecimiento.
Por un momento Bellamy deseo que tuviera una máquina para parar el tiempo, disfrutando la sensación de su tacto por más que unos simples segundos.
-Nos vemos pronto, si?-Hablo rápidamente sin arrepentirse, con un toque de esperanza en su voz, que había sido perfecto para que Bellamy ensanchara su sonrisa.
-Cuando quieras sabes donde encontrarme-El tono con el que Bellamy la coqueteo le desequilibro por un momento, pero no le dio importancia, disfrutando su sonrisa coqueta cuando lo hacía.
Asintió devolviéndole la sonrisa coqueta, para despedirse y salir del comedor con la mirada de Bellamy sobre ella, que no la aparto hasta que Lilith desapareció por los pasillos y el soltó un suspiro.
Como era posible que en dos días le gustará tanto Lilith Myers.
