Entre Tiempos

Treinta y nueve

Había algo que Derek no podía sacarse de la cabeza.

-Tengo una pregunta.- dijo antes de darle más vueltas.

Los ojos de Dana no se levantaron de la pantalla de su computadora, simplemente alzó una mano y le indicó que hablara.

-No sé si eres la mejor persona para responder, pero eres mi amiga, así que supongo...-

-Derek, tengo todas las respuestas.- sonrió alzando la vista.-Siempre.- enfatizó.

Conocía a Dana lo suficiente como para saber que no iba a escucharla decir lo que quería oír, pero quizás necesitaba que alguien lo frenara un poco antes de tomar decisiones precipitadas y ella definitivamente era la persona indicada.

-He estado pensando...- dijo cruzándose de brazos.-Me sobra una habitación en casa, es una casa grande ¿sabes?-

-Ok...-

-Y esa habitación sólo está acumulando polvo, alguien podría darle un buen uso.- explicó.-Estaba pensando que a Marco le vendría bien un lugar...-

-No.- negó ella enseguida.-Ni siquiera voy a escuchar el resto.-

-Dana.- dijo exasperado.-No me hagas esto.-

-¿Qué?- preguntó.-¿Decirte que no deberías irte a vivir con un chico con el que has estado entrando y saliendo de una relación?-

-No ha sido...-

-Soy realista.- dijo apartando la computadora y mirándolo directamente.

-Primero, no hemos estado entrando y saliendo de una relación.- trató de aclarar.-Antes no era serio y ahora lo es, sólo cambió el estatus.-

-"Antes no era serio"- se mofó.-Desde que te diste cuenta de que lo querías ha sido tuyo en tu cabeza.- rodó los ojos.-Siempre ha sido serio para ti-

-¿"Mío"?- repitió con una risa.

-Y tú has sido suyo.- lo apuntó.-Así que técnicamente hace casi un año que están metidos en este tira y afloja donde están juntos y de pronto ya no lo están, no tienen una buena racha.- resolvió.

-Bien.- asintió, buscando su paciencia.-Pero ahora es diferente, estamos...-

-Si me dices "estamos enamorados" te juro que no te vuelvo a hablar.- advirtió.

-Iba a decir que estamos en la misma página, los dos sabemos lo que somos para el otro y ya no hay ambigüedad.- le recordó.-Estamos juntos.-

-Genial, pueden seguir estando juntos sin necesidad de vivir bajo el mismo techo.-

-Lo sé.- se frotó la cara algo frustrado.-No quiero que se mude a la casa para estar con él. Yo sólo...-suspiró.-Es un poco egoísta, pero necesito sentir que estoy haciendo algo por él, y la única forma en la que puedo serle útil es ofrecerle una habitación y ahorrarle la renta de los dormitorios.-

-Derek.- lo interrumpió alzando una mano.-Me pediste mi opinión, y en verdad creo que es una pésima idea.-

-Déjame ponerlo de otra manera.- dijo acercándose.-Si Ben o yo estuviéramos teniendo problemas en casa y esos problemas fueran lo suficientemente difíciles como para que no quisiéramos volver, ¿no nos ofrecerías dormir en tu sillón?- le preguntó.

-Sé lo que estás haciendo.- sonrió.-Pero es diferente, tú y Ben son mis amigos, siempre voy a estar para ustedes.-

-No veo cómo es diferente.-

-Marco es tu novio, los novios van y vienen.- declaró.

-¿Vas a odiarme si te dijo que tus novios son los que van y vienen?- preguntó cauteloso.