6

326 13 0
                                    

Acá abajo.

Te pedí que te quedaras,
enfrentándome a la inminencia
de tu partida silenciosa.
Atestigué todas tus luchas,
y aun así
no cesaron mis súplicas.
Corazón egoísta,
me reprendo,
solo quieres retener.
Pero absurdos tus intentos,
lo que no es tuyo,
jamás lo podrá ser.
Es una ley inquebrantable,
poderosa, irreversible;
en vano resistir.
Te pedí que te quedaras,
no me imaginaba sin ti.
Hoy la vida es tan confusa,
no decifro bien quién soy.
El reloj me mira a los ojos,
su tic tac que me marea.
Quieren algo de mi
y yo anhelo con ansias
derribar la frontera.
Te pedí que te quedaras,
de verdad lo necesitaba.
Una injusticia que no comprendo,
con mi mente difícil de acallar.
Me siento sin un rumbo,
dando pasos al azar.
No sé adónde voy,
veo el mundo tan incierto.
Me da miedo equivocarme,
me da miedo el desconcierto.
Te pedí que te quedaras,
Y, con todo, volaste.
Partiste a otro lugar.
Mira hacia abajo:
yo todavía
toco el suelo
con mis manos.

EpifaníasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora