Debería escribir un diario en dónde relatara todos los momentos vergonzosos de mi vida...
— Esperen... — fruncí el entrecejo moviendo mi cabeza hacia un lado desconcertada por el repentino sonido que había llegado a mis oídos, inhalé profundo sintiendo como poco a poco mis sentidos se iban activando y el bullicio a mi alrededor aumentaba.
¿Qué es ese sonido tan repentino?
Jang-Soo... me da vergüenza abrir los ojos y que todos me estén viendo.
La oscuridad que tapaba mis ojos se dispersó dejándome abrir los ojos con lentitud y mirar a mi alrededor, logrando notar cómo la mayoría de los chicos estaban rodeando mi cuerpo, Jang-Soo tenía su cuerpo casi sobre el mío con una expresión preocupada mientras tomaba con delicadeza mi rostro, revisando de lado a lado con precaución. — No fue algo grave, parece que solo perdió el conocimiento de manera leve, no te preocupes — la voz de la soldado resonó en mis oídos.
Luego de unos segundos Jang-Soo se acercó a mí alejándome de los brazos del soldado y rodeando mi cintura con su brazo me levantó con suavidad, se detuvo un momento esperando que mis piernas se estabilizaran y me guió hasta las gradas. Una figura alta se acercó y dejó algo blanco sobre las gradas, Jang-Soo me sentó allí arrodillándose frente a mí.
— Soldado Yoon Su-Zu, ¿Puedes oírme? — por la manera en que se escuchó la voz, reconocí que había hablado la mujer soldado que nos había regañado anteriormente. Se colocó a mi lado y se agachó entrando en mi campo visual junto a Jang-Soo. Asentí en respuesta tomando la mano de mi novio y aferrándome a ella — Dime, ¿Sufres de ansiedad? — ¿Cómo? Levanté la mirada a sus ojos logrando enfocar su rostro un poco, incliné mi cabeza hacia la izquierda y negué con confusión.
Abrí los labios con la intención de responderle, tosiendo cuando sentí mi garganta demasiado seca.
¿Porqué de repente tengo tanta sed?
— ¿Porqué? — logré murmurar. Una punzada en mi oído izquierdo me hizo tensar, mi mano instintivamente subió a mi oreja y la presionó. Jang-Soo se levantó con rapidez y quitó mi mano de mi oreja y revisó, ladeando la cabeza al no encontrar algo sospechoso.
¿Acaso Young-Soo se encuentra a mi izquierda? Siento una incomodidad creer en el lado izquierdo de mi cuerpo.
— Cuando se te entregó el arma, tus manos estaban temblando y tú respiración estaba agitada, sumado a eso estabas sudando y mirabas alrededor como si de manera inconsciente estuvieras alerta a algo. — me sorprendió la exactitud con la que describió como me sentía. — Cuando perdiste el conocimiento también mirabas alrededor, sin embargo ésta vez tenías tu mano en tu pecho y estabas hiperventilando. Esos son los síntomas de un ataque de ansiedad. —ataque de ansiedad. No recordaba haber tenido una mano sobre mi pecho o algo por el estilo, por lo que no creí cuando mencionó eso.
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𝗤𝗨𝗜𝗘𝗧 • 𝗗𝗨𝗧𝗬 𝗔𝗙𝗧𝗘𝗥 𝗦𝗖𝗛𝗢𝗢𝗟.
FanfictionEn dónde Su-Zu, una adolescente de 17 años que sufre día tras día con sus inseguridades y traumas, deberá enfrentarse a aquellos que le habían estado causando pesadillas en días pasados. "No importan si las esferas caen o si se está acabando el mun...