24. Declaración de amor.

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Mi mano unida con la suya, creaban un lazo totalmente indestructible. Mire a Kevin el cual caminaba en un cómodo silencio junto a mí. Los pasillos del instituto en este momento se encontraban vacios. Ya que de seguro todos se encontraban en la cafetería por algo de desayunar.

- ¿Quieres salir de aquí? -pregunto Kevin, asentí sorprendiéndome a mí misma por mi respuesta. Jamás me había saltado una clase y menos si era la del profesor Brown.

- Seguro.

Sonreí de medio lado y luego de un momento sentí sus cálidos labios sobre los míos. Kevin me sonrió al separarnos y acaricio mi mejilla con el dorso de su mano.

- Te adoro Jessica Tomlinson. -susurro repentinamente mientras unía nuestras frentes. Sonreí de medio lado, no intentaba controlar los latidos desenfrenados de mi corazón, porque esta vez lo tenía a él para controlarlos-. Después de ti.

Y tirando de mi mano pude sentir como la suave briza me acariciaba las mejillas. Al llegar al auto de Kevin ya más de medio instituto miraba en nuestra dirección. Una de las personas era Zayn Malik. El cual calaba un cigarrillo en la escalera principal del instituto.

Cuando mis ojos dieron con los suyos me vi obligada a apartar la mirada por incomodidad.

- ¿Subes? -pregunto un muy sonriente Kevin. En este momento su ánimo debería estar por el cielo. Asentí mientras él me abría la puerta del vehículo como todo un caballero, cuando mire en dirección a las escaleras principales del instituto. Ya Zayn no se encontraba allí.

Por alguna razón había desaparecido. Suspire aliviada y mire a Kevin el cual ya se había subido a la camioneta e intentaba mirar lo mismo que yo.

- ¿A dónde iremos? -pregunte curiosa mientras miraba hacia Kevin, el cual había comenzado a prestarme atención. Lo cual agradecía.

- Estaba pensando en ir a la playa.

Un momento. ¿La playa? Pero no llevo traje de baño...

- Ayer tu madre te preparo un pequeño moral en el cual hay lo que puedas necesitar. -dijo.

Okey. Mama se atrevía a entrar en mi habitación y buscar entre mis cosas. Era bueno saber eso.

- Perfecto. -sonreí de medio lado, Kevin tomo mi mano y dejo un beso sobre mis nudillos.

- Me encanta que estés de acuerdo.

Suspire cuando coloco algo de música y luego comenzó a conducir. Aquella melodía era mejor que estar escuchando el silencio que había entre ambos. Pronto sentí como posaba su mano derecha en mi pierna de una forma posesiva. Pero su rostro se notaba tranquilo.

Baje mi mirada hacia ella y acaricie sus alargados dedos. Luego de un momento note que Kevin sonreía mientras mantenía la vista perdida en el camino.

- No quiero parecer un idiota meloso. -aclaro antes de darle paso a todas las palabras que vendrían-. Pero esto es demasiado bueno para ser real, Jess.

- No me pareces un meloso, quizás un idiota en ocasiones. Pero no un meloso dramático.

Su ronca risa invadió el auto, escuchándose como melodía para mis oídos.

- No dije que fuera un dramático. Solo dije meloso. -aclaro él de buena forma.

- Pero los chicos melosos a veces suelen ser dramáticos. -arque una ceja a la espera de su respuesta. Pero mi celular comenzó a sonar.

- Apágalo.

Aquello no había sido una subgerencia. Sino más bien una orden. Entrecerré los ojos y mire la pantalla de Iphone.

Kevin (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora