Capítulo 10. Incapaz de calmarse

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Cen Li sentía un dolor en la garganta, sus dedos se aprestaban con fuerza bajo las sábanas y la herida en su mano, provocada por los fragmentos de cristal que se ha cubierto de costras, ya se ha abierto de nuevo.

El rostro de Cen Li estaba pálido y simplemente miró los rayos de luz que entraban por la ventana. Era un día soleado, y la luz del sol debería haber sido cálida en su cuerpo, pero para él era tan fría como la nieve de un día de invierno.

Oyó el sonido del portazo en sus oídos, y el aire tembló con mucha fuerza.

Ning Xiuyuan se había ido.

Cen Li se levantó ligeramente y bajó un poco la cabeza, su vientre plano no podía verse tan anormal ahora, pero... ¿quién sabía que habría una vida allí dentro?

Su mente todavía era incapaz de calmarse, y su vida que era originalmente un papel blanco y limpio, ahora se había manchado con un color sucio que no podía ser lavado por el resto de su vida.

La puerta de la sala médica se abrió de un empujón y los movimientos de Cen Li se detuvieron un momento para ver que era el médico quién había entrado.

—Es demasiado pronto para que puedas verlo... En general, el embarazo no se notará sino hasta los cuatro meses. —El médico llevaba un envase de comida en la mano y lo colocó en el armario junto a la cama del hospital.

—... Hmm.

La expresión del doctor era algo grave: —Buscare información sobre tu opinión con respecto a este asunto, y en cuanto a Xiu Yuan...

—No necesita saberlo. —La voz de Cen Li era suave: —No tengo nada que ver con él.

—... —Bai Chengyu dejó escapar un leve suspiro. También había visto el desenlace de la situación actual, y sabía que hubo varias veces que Cen Li estuvo en el hospital por culpa de Ning Xiuyuan.

Cen Li era todavía un joven estudiante de primer año en la universidad, y si Ning Xiuyuan se enteraba de esto, temía que incluso sus estudios se acabarían.

La cara de Cen Li era un poco enfermiza y sus dedos se aflojaron débilmente mientras miraba al doctor y preguntaba: —¿Podemos hacer la cirugía el próximo sábado?

—Tu cuerpo necesita unos días más para recuperarse.

Mientras Ning Xiuyuan estuviera cerca, era imposible que se pusiera bien.

Los finos labios de Cen Li se abrieron y dijo: —No puedo esperar más tiempo.

Un día de retraso era un día más de ansiedad para su mente. Él era un hombre, entonces... ¿por qué podía dar a luz a un niño como una mujer? Por no mencionar el hecho de que el niño en su vientre, estaba relacionado con Ning Xiuyuan.

—... Entonces haré los arreglos para tí lo antes posible.

Cen Li asintió, aparentemente un poco cansado.

Al ver su mal estado, Bai Chengyu destapó la tapa del envase de comida y la empujó frente a él, diciendo: —Come algo antes de descansar.

Ya era la hora de la cena, y Cen Li no había comido nada el día de hoy, ya que había tomado un taxi directamente desde el hotel hasta la escuela para hacer los exámenes, y después había soportado algunas torturas de Ning Xiuyuan. Así que no importaba lo bien que estuviera su salud, después de todo seguía siendo un mortal, y además, ya estaba físicamente más débil.

Aunque no sentía hambre, no podía dejar que su cuerpo se derrumbara todavía. Además, todos los fines de semana visitaba a su madre, y no podía permitirse que ella notara nada raro en él.

Así que, habló amablemente: —Gracias, lamento molestarlo.

El envase de comida tenía una papilla de carne ligera y Cen Li apenas comió un poco antes de no poder comer más.

El médico recogió el envase y se fue, así que Cen Li se acostó tranquilamente en la cama del hospital y cerró los ojos durante un rato, pero tenía un nudo en la garganta e incapaz de dormirse.

La poca paciencia y tranquilidad que acababa de mostrar, ya se habían roto. No quería mostrar lo vulnerable que era frente a personas ajenas, y ni siquiera quería ver los ojos compasivos de los demás.

La punta de su nariz era muy astringente, por lo que abrió los ojos y los bordes rápidamente se cubrieron con una capa de rojo, causando que un líquido claro se deslizara por las esquinas. Cen Li se reprimió como si se asfixiara, jadeó dos veces y la fina niebla de agua se volvió transparente en el aire, como si incluso su vida se hubiera vuelto transparente en conjunto.

El teléfono móvil que estaba junto al armario vibró, y sólo después de un largo rato Cen Li lo agarró con indiferencia.

Era un mensaje de Han Chen, preguntándole por qué se había negado a ser un estudiante de intercambio.

Han Chen era un profesor de la universidad. A diferencia de la imagen habitual de un profesor anticuado, Han Chen sólo tenía veintiocho años actualmente y era conocido como el "Dios de los Hombres" por muchas chicas de la universidad. Por esta razón, las aulas de las clases electivas siempre se llenaban de mucha gente, nunca nadie llegaba tarde o salía temprano, y no se podía encontrar un buen asiento de otra manera que no fuera asistir con antelación.

Cen Li echó un vistazo al mensaje y volvió a colocar su teléfono en el lugar dónde estaba antes.

Había cosas que no podía conseguir sólo por quererlas, y sabía que la vida era como unos grilletes que le aprisionaban y le atrapaban en una red.

FO - Parte 1Where stories live. Discover now