—¿vas a salir?—me pregunta mi madre entrando en el baño.
Le miro de reojo, terminando de hacerme el delineado eel ojo y asiento levemente, sin distraerme mucho. Me gusta mucho maquillarme, pero tardo bastante porque me gusta que este perfecto.
—¿con quien?—pregunta apoyándose en la puerta.
Bueno, mi madre lleva un mes con su nuevo novio, y aunque me jods admitirlo, le hace bien. No bebe todas las noches como antes ni se mete un bote entero de pastillas, pero se que cuando lo dejen, estará bastante peor.
—Con un amigo—digo con voz desinteresada pata que no se interese demasiado.
Pero se que lo hará, más que nada cuando alza sus cejas con picafdia y se ríe juguetona.
—Nunca me has dicho que tenias amigos hombres Malena—me dice ella burlona.
—Si, lo sé, pero el es mi compañero de mates y me va a pasar unos apuntes extra—miento.
Mi madre asiente con la cabeza—Bueno, pues pasalo bien.
—Claro mama—digo yo sin más poniéndome las sombras.
—Si vienes para cenar vendrá Russell y seguramente se quede a dormir—dice con un tono de emoción en su voz.
—Vale, creo que iré a dormir a casa de Charli—digo yo como si nada
Sinceramente, no me apetece tener que soportar al puto Russell y todos sus comentarios asquerosos,solo no estoy de humor.
Mi madre suspira—Podrías intentar llevarte bien con el.
Niego rápidamente—No, gracias, no me hace falta.
Ella bufa—Como sea, podrías venir a casa a dormir aunque sea Malena.
—Ya he quedado con Charli—miento rápidamente.
Ella rueda sus ojos—Bueno, algún día cenaras con nosotros ¿si?
—Ya se vera—digo yo sin querer asentir.
Mi madre sonríe levemente—Estas muy guapa Malena.
Sonrió un poco y le miro de reojo, hace tiempo que no me decir este tipo de cosas, hace tiempo que realmente no me miraba a la cara sobria.
—Gracias mamá, tu tambien—le digo yo con una sonrisa sincera.
Y es verdad, mi madre no es fea. A pesar de todo, se conserva muy bien, no tiene mucha edad porque me tuvo a los 19 años, pero de todas formas se conserva bien.
—Pasalo bien—me dice con sinceridad. Me da una sonrisa y sale del baño.
Vuelvo a mirarme en el espejo y me observo. Me gusta mucho el maquillaje, soy de llevar ropa sencilla pero maquillarme más, sobre todo los ojos. Llevo un delineado, sombra azul y morada y los labios levemente pintados. Observo mi pelo negro lacio caer por mi espalda.
Estoy muy aburrida de mi pelo, creo que me lo cortaré o teñire, quiero un cambio.
Me miro por última vez en el espejo y repaso mi ropa, mis vaqueros anchos están perfectamente, al igual que me top blanco de tirantes y mi camisa de cuadros ancha. Finalmente, salgo de casa, llevándome un poco de dinero, mi móvil, cascos y llaves.
Abajo, me espera Jaden subido en su moto, me apresuró hacia el con una pequeña sonrisa.
—Que guapa—me halaga el.
—Lo se—digo con una sonrisa burlona.
Jaden se ríe y se echa para atlante en la moto, dejándome el sitio necesario, abro el pequeño maletero y saco un casco para colocarme. Me aferro a Jaden cuando esté arranca la moto.
Tras diez minutos, Jaden y yo paramos en un supermercado.
—Pillaremos comida¿te parece?—me pregunta el sacándose el casco—Crei que esto era más nuestro estilo que ir a un restaurante.
—Claro que si, está bien Jaden—asiento—De todas formas, ni nos imagino cenando formalmente.
—¿me estás retando?—pregunta el alzando una ceja.
—Oh si, lo hago—Asiento divertida.
Jaden tira de mi brazo cuando trato de volver a la moto, alzó una ceja soprendida pero el solo tira más de mi para que no me mueva. Me mira de reojo y sonríe levemente.
—Me has retado—dice el.
—¿es enserio?—pregunto incrédula.
—Si—dice el directamente, me vuelve a mirar pero esta vez hay una sonrisa juguetona en su rostro—Ponte el casco, guapa.
Me pongo el casco sin decir nada mientras Jaden arranca la moto con fuerza. Me tambaleo levemente peor me agarró a su torso. Me río como una tonta imaginandonos en un restaurante elegante, estoy segura de que no iremos a uno.
Díez minutos después, aparcamos en frente de lo que parece un restaurante francés.... Oh espera.
—¿de verdad cenaremos aquí?—pregunto soprendida nada más para su moto.
—Te dije que si—me dice el de nuevo quitándose el casco
—No tengo dinero como para pagar esto Jaden—digo con una sonrisa incomoda, entonces recapacito—Es decir, pensé que sería menos caro y me trai menos dinero.
Jaden se baja de lq moto, dejándome aún subida, se baja y me mira, deja una mano en mi muslo y lo aprieta levemente, me mira con una sonrisa y me quita el casco con cuidado con su mano libre, entonces peina levemente mi pelo.
—Tengo enchufe—me dice el con confianza.
—Oh—digo yo abriendo levemente mi boca, entonces pienso algo así que alzó ambas cejas—¿también vendes a los ricachones?
Jaden se rie—No Malena, es que este lugar es de la madre de Payton.
—Ah—musito yo.
Bueno, no me extraña, porque realmente Payton esta forrado. Mucho. Es decir, para que este lugar sea solo de su madre y no de toda la familia... Según se esté restaurante no es el único del estado, así que esto es una especie de cadena de restaurantes.
Lo observo un poco más, dentro hay parejas cenando, familias y alguna reunión de trabajo, solo se que este no es nuestro sitio.
—Vamos—me dice Jaden dando un apretón en mi muslo.
Dirijo mi mirada a su mano nerviosa y entonces asciendo mi mirada a su cara, que me espera con una sonrisa paciente.
—No se si es buena idea Jaden—digo yo con inseguridad mientras muerdo mi labio.
—¿que pasa Malena?—me pregunta y noto un tono de preocupación en su voz.
Vuelvo a mirar el lugar y entonces bajo la mirada. Aquí venía con mi padre y mi madre antes de que todo pasase.
—¿que pedirás Malena?—me pregunta mi madre.
Yo solo observo la carta y frunzo el ceño con la cantidad de nombres que hay, las letras extrañas en las que todo está escrito y que en nada hamburguesa con patatas
—¿hay Pizza?—pregunto yo con un tono de esperanza en mi voz.
Mi madre se rie—No cariño, aquí no hay pizza.
Bufo y apoyo mi cabeza en la mesa—¿que hay entonces?
—¿pescado?—pregunta mi madre con esperanza.
Le miro horrorizada y oigo la risa grave de mi padre a mi lado, que revuelve mi cabello como tanto sabe que odio, me apartó de su mano y le doy una mirada, el solo sonríe.
—Malena, haremos una cosa ¿si?—me pregunta el—tu madre y yo pediremos para llevar, y de camino a casa pasaremos por mcdonald's ¿te parece?
—¡si!—exclamo con ilusión.
Mi madre niega con la cabeza y le da una mirada a mi padre—Como la consientes, David.
Yo le saco la lengua con actitud chula y mi padre solo ríe.
Miro al suelo y siento mi vista nublarse. Todo para mí era tan bueno entonces.
—Ey—susurra Jaden y entonces noto como alza mi barbilla—¿todo bien?
—Si, tranquilo—digo yo sin más apartando la cabeza con un poco de brusquedad. Miró a un lado fijamente, tratando de que no se me agüen los ojos.
Jaden vuelve a agarrar mi mejilla para girar mi cabeza, se acerca un poco a mi y me sostiene con contundencia, encargándose de que le mire a los ojos. Aprieto mis labios entonces para que no tiemblen.
—Malena, no te preguntaré enserio—me susurra el y deja una caricia en mi mejilla—Si tu quieres, vámonos, ha sido mala idea venir aqui—susurra como si estuviese juzgandose.
Me bajo de la moto de un salto quedando bastante pegada a él así que le miró dándole una sonrisa nerviosa y hablo rápidamente para aligerar el ambiente.
—Solo no vengo vestida para un sitio asi—me excuso torpemente.
Bueno, es que en verdad, no stoy mintiendo en esto. Jaden frunce su ceño y entonces, lentamente, poco a poco, tanto que me hace transpirar, baja su vista por cada centímetro de mi cuerpo, estudiándolo por cuidado. Solo observo su rostro, y cuando vuelve al mío, sonrrie.
—Estas perfecta—me dice el convencido.
—¿seguro? Aún puedo ir a mi casa para un vestido de gala Jaden—bromeo yo.
Pero el no se lo toma a broma, porque sonríe con sinceridad—No, te prefiero así, más tu.
Y entonces, pasa algo que hace mucho que no sentía o no ocurría cuando hablaba con un chico. Me sonrojo.
—Gracias—balbuceo como puedo.
Bueno, aparte de estar más roja que una compresa, no se hablar. Si, creo que hoy me llevo el premio a la chica con menos dignidad, si no me lo había llevado antes.
Jaden se ríe entre dientes—te has sonrojado.
—No—niego yo sin saber qué decir. Bueno, se que decir, solo no se si sería capaz de hacerlo.
El sonríe aún mas—Si, estas muy sonrojada.
—Eh... Si es que me estas dando calor—mascullo entre dientes, apartó mi mirada de la suya y llevo ambas manos a su pecho para apartarlo, pero Jaden solo me presiona más contra la moto.
—Nunca creí que eras de esas chicas dulces que se sonrojan, pero he de admitir que es muy tierno Malena—me dice el con diversión
Bueno, esto no ayuda, solo sigo más sonrojada, sin see capaz de mirarle a los ojos.
—No estoy sonrojada, no te atribuyas ese merito—le digo yo con la voz más borde posible.
Jaden se ríe y niega alejándose de mi, entonces me separó de la moto para que no pueda volver a arrinconarme y empiezo a caminar hacia el restaurante.
Oigo como Jaden corre apresurado hacia mi y yo solo aumento mi paso, peor el es más ágil así que me alcanza y pasa un brazo por mis hombros.
—Venga, vamos a aparentar ser unos pijos juntos, Malena.—susurra antes de que entremos al restaurante