Sylvie
Estaba otra vez ahí, en la casa de mi antiguo amo, volvía a estar atada de manos y pies mientras me torturaban, pensé que había escapado de todo eso, pero no, ahí estaba el, golpeandome otra vez.
-¡PARA, POR FAVOR!- le grité llorando, pero el no me hacía caso, yo solo seguía llorando y gritando, era lo único que podía hacer y cuando sentía que no podía mas, alguien me despertó.
No entendí bien que pasó, alguien me estaba abrazando.
-tranquila Sylvie, fue solo una pesadilla, todo esta bien- era amo, su voz se oía muy agradable, jamás me había sentido así cuando la escuchaba, pero yo estaba llorando, llorando mucho.
-amo- lo abrace de vuelta y me sentí incluso más tranquila- nunca me deje- fue lo único que pude decir
-no lo haré Sylvie-
Nuestro abrazo duró unos minutos mas hasta que comencé a dejar de llorar
-¿estás mejor?- me preguntó
-si amo, muchas gracias-
El sonrió y acarició mi cabeza, me gusta cuando hace eso, al principo me parecía muy raro recibir esa clase de contacto físico pero ahora lo disfruto bastante
-hoy vamos a salir, quiero comprar algunas cosas, ¿me acompañas?-
Yo asenti con entusiasmo.
-de acuerdo, preparare algo de desayunar, aunque ya es algo tarde, tu alistate y baja cuando estés lista- dijo con una sonrisa
-l-lo siento amo, no era mi intención despertar tan tarde- dije apenada, no quisiera que el amo se moleste si llego a dormir mucho y no hago mis labores en la casa.
-tranquila Sylvie, incluso yo llegó a dormir mucho- dijo riendo
Después de decir eso salió de mi cuarto y escuché como bajaba las escaleras, estoy tan agradecída por haberme llegado con él.
Me levanté de la cama y frote un poco mis ojos, tal vez no fue la mejor manera de despertar, pero gracias al amo parece que será un buen día.
Ya que siempre duermo con mi ropa puesta solamente fui rápido al baño a lavarme la cara, hasta ahors solo me había bañado pocas veces, así que intento no ensuciarme mucho para que amo no se tenga que preocupar en lavar mi ropa mucho.
Después de eso bajé las escaleras para ir con amo, el olor del desayuno se sentía mucho incluso en las escaleras y era delicioso, cuando llegué a la mesa este ya estaba servido, era un poco de huevo revuelto con dos tiras de tocino, la verdad nunca antes lo habia probado antes de llegar aquí, pero parece que al amo le gusta mucho, siempre que puede lo hace, me gustaría que me enseñara a prepararlo.
-hola Sylvie, toma asiento- amo ya estaba sentado
-claro- dije sentandome frente a el y tomando los cubiertos para comenzar
Después de desayunar subí rápidamente a cepillarme los dientes, nunca me ha gustado el sabor de la pasta dental, pero se que es algo necesario ya que amo siempre lo hace, bajé de nuevo y amo ya estaba esperando en la puerta, cuando me vio sonrió y entonces salimos de la casa.
Nuestro recorrido fue el mismo camino que la última vez que salimos, me sentía menos nerviosa que antes, pero aun me da algo de miedo salir de casa.
Seguimos caminando unos minutos más y poco después de entrar a aquella calle en la cuál pasaban pocas personas, amo se quedó viendo una tienda.
-¿está todo bien amo?-
-esta tienda, no estaba aquí la última vez que venimos, ¿o si?-
La verdad no puse mucha atención a las tiendas la última vez que salimos, pero si el amo lo decía tenía que tener un motivo.
-no, creo que no-
-¿entramos?- me preguntó con curiosidad
-ehhh, pues, si usted quiere esta bien amo-
-bueno, vamos- dijo abriendo la puerta y entrando, a lo cuál yo lo seguí
Era algo pequeña y parecía una tienda de ropa, al igual que cuando entramos a la cafetería parecía abandonada y no había nadie a la vista, hasta que se oyeron unos pasos detrás de una pared y una mujer salió de una puerta que no había visto antes, vestía muy raro, un vestido largo y un sombrero muy grande
-buenos días, bienvenidos- su voz era bastante calmada y se escuchaba adulta
-¿Aurelia?- le preguntó amo
-Doctor, vaya casualidad- respondió la mujer -oh, vaya vaya, ¿que tenemos aquí?- dijo acercándose a mí
-un gusto, s-soy Sylvie- le dije de forma educada y algo nerviosa
-¿porque una niña como tú tiene ese tipo de vestimenta?- dijo viendo de cerca mi ropa
la verdad mi ropa era algo muy simple, se podría confundir con una sábana vieja con tirantes, pero nunca lo había visto cómo algo malo.
-esperé aquí doctor, vestiré a esta chica como lo merece, el aspecto de una persona puede afectar su dignidad- y antes de que cualquiera hablara ella me tomó del brazo y me llevó al fondo de la tienda
Pasó bastante tiempo desde que la señorita me llevó a un vestidor, me ha estado probando ropa pero parece que ninguna le gusta, aparte que ella es algo impaciente y mientras me cambió ella entra en el vestidor, es algo vergonzoso.
Después de algo más de tiempo la señorita dijo que había encontrado el vestido perfecto, y me entregó uno que para mi era muy elegante, de mangas largas y de color azul, cuando ella me vio ya vestida inmediatamente tomó mi mano y me sacó rápidamente del vestidor.
-listo, ¿no es esta una mejor vestimenta para una chica como ella?-
Me sentía algo avergonzada ya que los dos me estaban viendo muy directamente y pasaron unos minutos hasta que amo habló.
-sabes Aurelia, siempre tuviste un excelente gusto, y esta vez no es la excepción, lo compro-
-oh, no sera necesario Luis, aun te debo un favor-
Al parecer ellos se conocen, me pregunto si también son ex compañeros.
-Sylvie, ¿podrías esperar un momento aquí?, debo hablar con la señorita Aurelia- el amo puso una de sus manos en mi hombro
-s-si amo, me quedaré aquí-
El asintió y luego ambos caminaron hacia el fondo de la tienda.
Después de unos minutos el amo y la señorita Aurelia volvieron.
-es un gusto conocerte Sylvie, mi nombre es Aurelia, no me había presentado bien- dijo ella agachado un poco la cabeza
-mucho g-gusto señorita Aurelia, mi n-nombre es Sylvie- dije imitandola
-vaya vaya, si es una señorita de lo mas educada- dijo con una risita
Yo solamente asentí un poco avergonzada
-me encantaría que se quedaran mas tiempo, pero ya casi es momento de que cierre-
-claro Aurelia, no te preocupes, podemos venir otro día, ¿no Sylvie?- dijo el amo felíz
-s-sí-
-entonces, nos vemos luego- dijo la señorita Aurelia caminando hacía la salida y abriendo la puerta
Los dos caminamos hacía fuera de la tienda, y a pesar de estar un largo rato ahí dentro, seguía sin acostumbrarme del todo a mi nuevo vestido.
-amo, estas ropas se desperdician en alguien cómo yo, ¿no sería mejor devolverlas?- dije apenada después de alejarnos de la tienda
-claro que no, yo creo que te vez hermosa-
Las palabras de amo me tomaron por sorpresa, sentía cómo mi corazón comenzó a latir rapidamente
-e-está bien- dije en voz baja
Comenzamos a caminar buscando la tienda a la que amo debía de ir, y debido a que no estabamos hablando mucho decidí hablar.
-amo¿usted conoce a la señorita Aurelia?-
-sip Sylvie, ella era una antigua paciente mía, pero un día dejó de llegar a sus citas. Pensé que le había pasado algo, pero parece que no- dijo con una sonrisa
-eso es muy bueno amo-
-oye Sylvie, no tienes que decirme amo siempre, puedes llamarme Luis si quieres-
-d-de acuerdo amo- la sola idea de llamar al amo por su nombre me parecía algo muy raro
-lo hiciste de nuevo- dijo sonriendo -por cierto, ¿que piensas de Aurelia?-
-ella parece agradable-
-la verdad lo es, a veces es algo extraña, pero es una persona de buen corazón-
-ya veo, gracias por contarme am- me quedé en silencio pensando si debería llamarlo como el me pidió, siento cómo mi corazón late muy rápido, no podría hacerlo de nuevo
-no es nada Sylvie- dijo poniendo una mano en mi cabeza
Seguimos caminando por la ciudad y el amo logró comprar las cosas que necesitaba, parecía que eran unos cuantos paquetes de hojas blancas, le ofrecí al amo mi ayuda para cargar algunas cosas pero el la rechazó, parece que eran demasiado pesadas para mí y aunque podía sentir cómo algunas personas me veían mucho, no me sentí muy incómoda en ningún momento, después de pasar a varias tiendas, comenzamos a caminar hacía la casa, tenía la esperanza de ir a ver a la señorita Nephy, pero no pasamos por el restaurante.
Seguimos caminando, yo iba mirando los alrededores mientras caminaba al lado del amo en silencio, pero justo entrando a la calle donde se encontraba la casa, el amo puso un brazo frente a mí
-Sylvie, ponte detrás de mi- dijo empujandome un poco para ponerme detrás de el
-amo, ¿que sucede?-
El no me contestó y avanzó lentamente hacia la casa, se oían golpes, me asomé a ver que sucedía y pude ver que había una persona que estaba frente a la puerta, utilizaba una sudadera azul con gorro que cubría su cabeza y golpeaba con algo de fuerza la puerta.
-¿puedo ayudarte?- dijo amo con una voz más fuerte que de costumbre
-si, de hecho, tu y yo tenemos un problema amigo- dijo la persona con voz grave, aunque se escuchaba que era de una mujer
-bueno, ¿cuál es el problema?-
Pude ver cómo el amo tenso su cuerpo, su voz era algo desafiante, dejó una de las bolsas en el suelo y cerró sus puños con fuerza, espero que no tenga que pelear.
La persona alzó sus manos en el aire y dio unos pasos atrás, pude escuchar que comenzó a reír, para luego darse la vuelta rápidamente.
Era Nephy.
-¿donde has estado Luis? No puedes invitarme a tú casa y no estar cuando decido venir- dijo con una gran sonrisa para luego bajar corriendo las escaleras y darle un abrazo a amo
-Nephy, Dios, no hagas eso, me va a dar un infarto- la voz del amo se relajó y dio un suspiro mientras abrazaba a Nephy con su mano libre
-jeje~, lo siento, quería venir a ver a Sylvie- dijo con una gran sonrisa
-bueno, ella esta aquí- dijo el amo y me puso su mano en mi cabeza -pueden hablar pero dentro de casa-
La verdad me asusté un poco, pensé que era alguien que quería hacerle daño al amo, aunque al ver a Nephy me sentí algo mas relajada.
Entramos todos, amo dejó las bolsas al lado de la puerta, después fuimos a la sala donde ambos se sentaron, le ofrecí a Nephy un poco de té, pero amo dijo que el lo haría, no debería permitir que el lo haga pero no tuve tiempo de oponerme ya que se fue a la cocina.
-ven Sylvie, siéntate- dijo Nephy mientras daba palmaditas al asiento que amo dejó libre
La verdad nunca me había gustado usar los sillones, siento que alguien cómo yo no merece usarlos, pero no quería verme grosera, así que me senté.
-¿como estás?- dijo ella viéndome
-bien, hoy fue un día agradable con amo, me compró esté vestido nuevo- era algo incómodo pero se sentía mejor que mi antigua ropa
-mmmm, Sylvie, ¿por qué le dices así a Luis?-
Ahora que recuerdo, no estoy segura si amo le contó que tipo de relación tenemos.
-oh, bueno, verá señorita Nephy, yo antes era una esclava, de ahí salieron estás cicatrices, pero cuándo mi anterior amo murió todos sus esclavos nos fuimos de ahí, a mí me recogió un comerciante extraño y a los pocos días de ser recogida llegué aquí, el amo me acogió sin problema... Cuándo llegué tenía mucho miedo de lo que me pasaría, pero el amo hizo todo lo contrario, me trató muy bien y me dio mucho afecto, bueno, más bien me sigue tratando muy bien- noté cómo una sonrisa se comenzaba a formar en mi rostro
Nephy estaba sonriendo.
-ya veo, me alegra que hayas encontrado la felicidad con alguien Sylvie-
Yo asentí con felicidad.
Después de eso comencé a hablar con Nephy sobre la salida que tuvimos y me contó que no había venido antes debido a las lluvias de estos días.
Después de unos minutos amo llegó con una bandeja que tenía una tetera y dos tazas pequeñas.
-de acuerdo señoritas, el té esta listo, me van a perdonar pero me tengo que ir, hay trabajo que hacer, con su permiso- amo tomó las bolsas llenas de cosas que compramos y se fue a su cuarto
-pfff, y yo que quería hablar más con el- dijo Nephy un poco molesta
Nos servirí un poco de té a ambas, olía muy bien y cuando lo probé me sorprendí por el sabor, aunque yo había preparado té antes, nunca había sentido un sabor similar y cuando Nephy lo probó soltó un largo suspiro.
-¿está bien?-
-si, no es nada, es solo que, después de que Luis salvó mi vida preparó un té parecido a este-
-¿el amo salvó su vida señorita Nephy?-
-oh, ¿no te ha contado?, cuando eramos compañeros de escuela tuve un accidente, traté de hacer una broma en la cuál caía de unas escaleras, je, digamos qué no salió muy bien y de verdad caí, recuerdo que para ese momento Luis y yo no eramos taaan amigos, tal vez fue el destino, pero la verdad no recuerdo bien todo, solo el miedo de saber lo que estaba pasando, el dolor y lo último que recuerdo con claridad fue que Luis estaba corriendo hacía mí, me dijo que después de eso comencé convulsionar-
-¿Convulsionar?- pregunté intrigada
-sip, según lo que me dijo el doctor, fue por el daño que recibió mi cerebro al sufrir tantos golpes, también tenía algunas costillas rotas y cuándo llegué al hospital, por un mal movimiento a la hora de bajarme de la ambulancia, una de mis costillas perforó uno de mis pulmones así que dejé de respirar bien, por suerte Luis estaba ahí para mí y un gran equipo médico también pero, no lo sé, tal vez si Luis no hubiera estado ahí, lo mas probable es que no estuviera aquí ahora mismo, en el hospital el fue a verme varias veces y cuando fui dada de alta comenzó nuestra amistad, a veces salíamos a comer o solamente a dar una vuelta, una vez fui a su casa, y fue donde probé el té por primera vez- dijo con una sonrisa mientras veía su taza de té
Estaba sorprendida, amo es una persona increible.
-señorita Nephy-
-dime solo Nephy cariño- me dijo poniendo su tasa de té en la mesa
-ehh, Nephy... gracias por contarme eso, de verdad, amo también salvó mi vida al aceptarme aquí, incluso me trató muy bien para que me sintiera segura, aunque yo trataba de no acostumbrarme, el nunca perdió su paciencia conmigo-
Nephy me estaba viendo con una gran sonrisa.
-Sylvie, ¿acaso estás enamorada de Luis?- parecía que sus ojos brillaban
La pregunta me tomó por sorpresa y pude sentir cómo mi cara se volvía cada vez mas roja
-e-e-enamorad-da- dije con dificultad -c-claro qué no, no podría existir esa relación entré un amo y su esclava- al mencionar esas palabras me sentí un poco triste -el... el merece algo mejor que yo- dije viendo al suelo
-mmmm, entiendo, entonces, ¿supongo qué no te importa sí voy al cuarto de Luis a pasar un poco de tiempo a solas con él?-
-¡NO!- tapé mi boca con mis manos después de darme cuenta de cómo habia alzado mi voz -l-lo siento señorita Nephy, no quería gritar-
Esperaba ser regañada o ser golpeada, pero, ella comenzó a reír.
-tranquila Sylvie, no lo veo con esos ojos, sabes, desde que nos vimos la primera vez pude ver cómo hablas de el, cómo lo miras, cómo brillan tus ojos cada que lo vez, tal vez nunca te hayas sentido así, pero esas acciones son de una persona enamorada- dijo con una gran sonrisa
-p-pero-
-nop, sin peros Sylvie- dijo poniendo un dedo en mis labios -creo que puedo entender cómo te sientes, ya que antes eras una esclava no vez cómo algo posible una relación así, pero, déjame decirte que, así cómo veo esas cosas en ti, las vi en el cuándo me habló de ti-
-¿eso significa qué-
-qué puede ser qué Luis sienta algo por ti también Sylvie, tal vez no se ha dado cuenta, pero se que siente algo más por ti, y no precisamente es amistdad- dijo levantando sus cejas
La sola idea de qué existiera una relación más profunda con amo hacía que mi corazón se acelerará mucho.
-solo qué, ¿sabes cuantos años tienes Sylvie?-
-algo así, nuestro antiguo amo solía celebrarnos, siempre el día de nuestro cumpleaños nos daba un pastel y no nos hacía nada malo ese día, recuerdo que mi último cumpleaños fue el número diecinueve, además que a veces decía cosas como "llevan dieciocho años aquí, nadie vendrá por ustedes"- dije teniendo un escalofrío por recordar eso
-entonces, tienes luz verde para seguir- dijo sonriendo y estirando mis mejillas -y no te preocupes Sylvie, haré que el me de información para asegurarnos de qué el siente lo mismo por ti, uy esto es geniaaal- apretó con mas fuerza mis mejillas mientras parecía que ella se ponía cada vez más y más felíz
Me dolían un poco las mejillas, pero la verdad es qué, acabo de darme cuenta del tipo de conversación que tuve con Nephy, fue muy personal y hablé con naturalidad cómo lo hago con amo, eso me puso bastante feliz.
-por cierto, ¿que hora es?- ella se detuvo de forma brusca
-eeeh, no lo sé- dije viendo un reloj en la pared, aún no se leerlo bien
-ay no, se me hizo tarde se me hizo tarde- comenzó a hablar muy rápido -lo siento Sylvie, me tengo que ir, dile a Luis que fue un gusto hablar con el y que trataré de venir mas seguido, nos vemos luego- ella me dio un abrazo y se fue corriendo, no me dio tiempo de despedirme.
-¿enamorada? - me dije en voz baja recordando lo que dijo Nephy, me levanté del sofá y recogi la bandeja que el amo trajo para llevarla a la cocina
Justo cuando estaba entrando a la cocina me dio un dolor de cabeza tan fuerte que tuve que soltar los platos y se rompieron cuando cayeron al suelo.
-¿Sylvie?- escuché al amo desde el segundo piso pero no respondí
-¡agh!- solté un grito de dolor mientras sostenía mi cabeza
-¡¿Sylvie?!- el amo gritó mi nombre y escuché como bajó corriendo las escaleras
Sentía cómo sí el tiempo se ralentizara, deje de sentir fuerza en mi cuerpo y de oír los pasos de amo, mi visión se puso muy borrosa mientras sentía cómo caía al suelo, y de un momento a otro todo, se volvió negro
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Hola chavos, ¿que tal?, aquí estamos de nuevo con una nueva reedición, la verdad les debo una disculpa ya qué esta vez volví a aumentar mucho las palabras a diferencia de la primera versión:((
También es hasta ahora el capítulo con más cambios, ya qué no me gustaba mucho cómo en la primera versión Sylvie se da cuenta de lo que siente por Luis jeje, espero que no sea algo molesto que haya cambiado eso:c
Bueno chavos, espero que lo hayan disfrutado, cuidence mucho y nos veremos pronto con un nuevo capítulo
Nos leemos pronto shabos!!!!