"—Em, h-hola bebé, yo soy tu papá —pronunció con angustia, hablándole a la cámara—. Estoy muy feliz de haberte conocido, aunque sea por video. Sé que eres muy pequeña y no podrás entenderlo, pero espero tu abuela o tu mamá puedan mostrarte esto. Quiero decirte que te amo mucho, que estoy muy feliz de que seas mi hija, y que espero con mi alma poder conocerte en persona algún día. Te amo mucho, Giselle."
Él había estado llorando, lo sabía por sus ojos rojos y cristalizados, por su voz temblorosa, por la tristeza que había en su mirada.
Había cambiado mucho en esos dos años, él se veía más maduro, había subido de peso, ya no era tan delgado como antes, y se veía sano.
Charlize miró el vídeo, y luego a su hija que estaba tomando de su pecho, mirando también el celular de su mamá.
—Ese de ahí... Es tu padre —pronunció bajo—. Parece que ha logrado no drogarse para hacer el vídeo, lo cual es un avance.
La niña la observó atenta, abrazando su pecho.
—Yo no quiero que tú lo conozcas, hija, pero estoy obligada a qué lo hagas. Y no puedo dejar que tu abuela te lleve allí, no podría separarme de ti jamás. Tendremos que viajar ambas a esa isla —le dijo acariciando una de sus orejitas, escuchándola ronronear y cerrar sus ojos—. Pero también es una oportunidad de demostrar que él no es apto para estar cerca tuyo.
***
Miró las fotos en su celular, enamorándose cada vez más de su bebé. Su hija era preciosa, y se parecía tanto a Charlize. Era una mini copia de ella, sólo que con ojos azules y cabello negro como él.
"Se hundió profundamente en ella, y la jovencita gimió extasiada, abrazándolo a ella, antes de que Sebastien buscara su boca, para besarla, y que ella le correspondiera completamente entregada al placer.
Charlize acarició suavemente su espalda, su cabello, besándolo, sintiendo como él se mecía contra ella, despacio, pero profundo, escuchándolo gruñir.
Era muy diferente hacer el amor, como ahora, a cuando sólo tenían sexo. Sebastien se comportaba más atento con ella. Era cuando más disfrutaba de estar con él."
Miró las fotos de Charlize, aquellas que tenía de ella cuando aún eran novios, y acarició suavemente una de su rostro.
—Yo te amo mucho, y sé que seguramente me odies, por haberte arruinado la vida. Yo también lo haría en tu lugar, pero fuiste lo más bonito y real que me pasó en la vida.
"La miró, ella estaba comiendo una rebanada de pizza, mirando hacia el balcón. La noche estaba tranquila, Charlize estaba de tres meses y medio de embarazo, y él luego de la pelea, había pasado por la pizzería.
La tomó de su mano libre, y entrelazó sus dedos con los de ella. La castaña ni se inmutó, continuando mirando hacia el balcón, que estaba en frente de la mesa.
—Te amo.
Ella miró un momento hacia abajo, y luego volvió a morder la rebanada, sin decirle nada.
Sebastien la miró afligido, y luego le acarició la mano.
—¿Estuvo bien tu día, amor?
—Sí.
—Tal vez mañana podríamos salir un rato, ir por un helado, al cine, no sé, dónde tu quieras.
—Está bien.
—Charie.
Ella giró su rostro, y lo miró, inexpresiva.
—Te ves muy hermosa, amor."
Se acostó de lado, y cambió de foto. Ella nunca le había dicho un te amo, o un te quiero. Ni siquiera lo llamaba de un modo cariñoso, siempre lo llamaba por su nombre, o Seba... Muy rara vez le había dicho cariño.
Tal vez ella jamás lo había amado, y Sebastien sabía que sólo se había ido a vivir con él porque estaba embarazada. Y no se victimizaría, sabía muy bien que había sido un asco de hombre.
Le había robado tantas veces, le había hecho pasar tantas necesidades ¿Cómo podía esperar que ella lo amara?
...