[Al día siguiente]
Zach Dempsey's POV
Desperté a la mañana siguiente con un aroma nuevo. No era el mismo olor a sudor con el que siempre creía tener cada día, sino un toque de frutas con perfume. El perfume de Vanessa. Reaccioné y la vi, delicada y sublime, durmiendo al lado mío. Recordé lo que había pasado entre nosotros y de mi cara salió una sonrisa boba. Fue la mejor noche que pude haber tenido. Pasé mi mano por su cintura y me acerqué más hacia ella. Ella agarró mi mano y la entrelazó con la suya. Se sentía bien, aunque me hiciera recordar a Hannah. Ambas tenían un gran parecido y era impresionante. Pero no quería abrumarla por eso. No ahora.
-¿Qué hora es?- gruñó la pelinegra- O mejor dicho, ¿qué día es hoy?
-Es viernes...- miré el reloj- Y son las seis de la mañana, Ness.
-Oh, entonces nos falta dos horas para parecer que no tuvimos sexo ayer- se giró y me miró con una sonrisa- Aunque fue de lo mejor.
-¿Lo quieres repetir?- le pregunté coqueto.
-No, gracias- me plantó un casto beso en los labios- Creo que en estos momentos necesito llegar a la escuela por mi ropa de educación física. Gracias a Dios que puedo tener esa ropa guardada en el casillero.
-Pero quedémonos aquí otros cinco minutos- solté como un niño pequeño.
-¿Quieres que May nos vea así? No, ¿cierto? Entonces muévete. Vamos a la escuela, recojo mi ropa, me cambio y desayunamos en cualquier parte.
-¿Planeaste eso en cinco segundos?- bromeé y ella me golpeó en el brazo- ¡Auch!
-Nunca subestimes mis planes, Dempsey- se levantó y recogió lo que habíamos despojado hace varias horas atrás- No te estoy preguntando, pero voy a agarrar una camisa tuya.
-Lo que quieras- dije y me levanté.
[...]
-¿Ves que mis planes son geniales?- se glorificaba Vanessa mientras ella llevaba su ropa deportiva puesta- Soy la mejor. Y nadie se dió cuenta.
-Si tú lo dices- me burlé antes de abrir las puertas del comedor- ¡Qué onda, chicos!
-¡Dempsey!- gritó Monty- ¡Ustedes dos se perdieron la reunión de ayer!
-¡Exacto! ¿Qué estaban haciendo?- insinuó Bryce.
-Yo estaba con Zach en Rosie's y de ahí me dejó en el trabajo, no pude saltarlo- se excusó Ness- ¿Aunque tendrán otra hoy? Estoy libre así que debo aprovechar- y me miró cómplice. Sabía exactamente lo que significaba.
-¡Claro que sí!- soltaron todos.
-Los quiero en mi casa a las siete. No falten- dijo Walker- Ah, y encontramos a Tyler, como siempre, tomando fotos. Pero de ustedes dos.
-¿Ah, sí?- me enfadé, pero Vanessa puso su mano en mi muslo intentando tranquilizarme.
-Claro que sí, es un idiota- carraspeó Montgomery- ¿Cuánto apostamos a que está enamorado de Vanessa?
-Bueno, primeramente no lo llames idiota- se levantó la europea irritada- Y ahora, vamos a averiguarlo...
-Oh, si...- rió Bryce- Oye, Zach. Será mejor que aproveches mientras puedas porque Nessa puede ser de cualquiera aquí.
-Cállate, Bryce- bufé.
-Es cierto- habló Marcus- Lo que daría por darle... ¡Oh, por Dios! ¡Miren eso!
Y lo vi todo. Vanessa tenía sus piernas encima de Tyler mientras lo besaba. Quería vomitar, pero creo que el enojo (o los celos) me privaron de ello. Luego, le arrancó la cámara de imprevisto y se levantó. Tyler parecía miedoso en ese momento. Entre los gritos de los chicos, Vanessa se estaba mordiendo el labio y drásticamente quedó seria. En cuestión de minutos quedó presionando algunos botones y dándole la cámara de vuelta a su dueño. Algo le susurró en el oído, pero ya no podía más. Salí furioso del lugar, sin importarme lo que los demás dijeran.
Vanessa Baker's POV
-¿Qué haces?- dijo Tyler desesperado. Estaba borrando toda evidencia que había de lo que pasó esta mañana conmigo y Zach.
-Salvándote la vida, Ty- le entregué su cámara y me acerqué a su oído- Si Zach se entera que nos tomaste fotos, no estarías parado en frente mío. Te salvé la paliza, tu rostro y parte de tú reputación. Luego me lo agradecerás...
Vi cómo Zach salía hecho furia del lugar. No dudé dos veces en perseguirlo disimuladamente por la puerta de atrás. Cuando no vi más gente, empecé a correr hacia su dirección. Se dirigía hacia las graderías del campo de fútbol americano.
-¡Zach!- grité, pero me ignoró por completo- ¡Zach, espera!
Corrí más de lo que podía y mi pecho me ardía. Mis piernas flaqueaban pero no me dió mucha importancia. Cuando lo alcancé lo llamé nuevamente y me enfrentó con lágrimas en los ojos.
-¿¡Qué quieres!?- gruñó- Puedes ir y besar de nuevo a Tyler, ya no importa.
-Déjame explicarte- dije con lo poquito de aire que entraba a mis pulmones.
-No me tienes que explicar nada, Vanessa, ¡solamente déjame saber cuando vayas de perra besando a todos los que están a tu alcance!- y golpeó su mano contra la estructura de metal- ¡Mierda!
-¡Zach, por Dios!- tenía ganas de llorar y no podía evitarlo- ¡Tenía fotos de nosotros!
Me miró perplejo, como si ahora tuviera ganas de escucharme.
-¿Cómo que tenía fotos de nosotros?- preguntó avecinándose hacia mi con toda la furia en sus ojos- Contéstame, por favor...
-Zach, respira...
-¿¡Cómo que tenía fotos de nosotros, Vanessa!?- me sobresalté del miedo, tanto que me caí de espalda hasta golpear el suelo con toda la fuerza de gravedad- Oh, mierda. ¿Estás bien?
-Me das miedo...- murmuré temblando- Me das mucho miedo, Zachary. Jamás te había visto así.
-Espera un momento- me levantó y me cargó hasta un asiento- Lo lamento tanto, Ness.
-No importa- me sorbí la nariz- Tyler tenía fotos de nosotros en el auto antes de la escuela. Cuando nos estábamos besando, en el gimnasio, ¡hasta en Rosie's! ¿Sabes lo que haría mi madrina conmigo si se entera que le mentí y no estaba con Jessica ayer? ¿Si se entera lo de nosotros?
-Ese desgraciado...- gruñó pero me levanté rápidamente.
-No le hagas daño, Zach- levanté mis manos y las puse en su pecho- Ya me hice cargo de eso, no te preocupes.
-¿Para eso era el beso?
-Eso era una distracción. Él no me dejaría su cámara con esas fotos ahí, y tenía que obtenerlas de alguna forma. ¿P-Por qué te pones así?- tartamudeé.
-Nessa, si supieras...
-¿Si supiera qué?- le interrumpí, pero el solo bajó la cabeza- ¿¡Si supiera qué, Zachary!?
-¡Estoy enamorado de ti, Nessa!- gritó agitando sus manos frenéticamente- Estoy muy enamorado de ti, y cuando te vi besando a ese bastardo...
-Hey- agarré su mano y nos sentamos- Primero, jamás lo llames de nuevo así. Sabemos que él puede ser un acosador y todo, pero sigue siendo una persona.
-Está bien...
-Y dos...- lo besé en la mejilla- También estoy enamorada de ti, Zachy.
-¿En serio?- se le iluminó el rostro- Nessa, no me digas eso si no es cierto.
-Hay dos cosas que hago cuando estoy enamorada de alguien, Zach. Esto...- me giré y puse mi cabeza en sus piernas- Y jamás traicionarle su confianza. Por eso te debo decir que , por más que hayamos tenido sexo o estemos enamorados del uno al otro...
-¿Qué? ¿Por qué, Ness?- me levanté y arreglé mi cabello- Sé que soy un poco necio a veces y que me dejo llevar por la rabia, pero cuando estoy contigo soy una versión nueva de mi.
-Soy peligrosa para ti, Zach- mis ojos se llenaron de lágrimas nuevamente- Y si te dijera la verdad, aún así no cambiaría las cosas...
-¿Qué verdad? Dímela, Vanessa.
-Soy una testigo protegido de un caso de asesinato, Zachary. Vivo con los Baker, a mi hermana la mataron hace meses por la mafia rumana- mentí- Y creo que después de esto vendrán por mi y no quiero hacerte daño. Le hicieron un daño gigantesco con mis padres, luego mi hermana muere, ahora falto yo.
-Vanessa...- me dió un abrazo, que no dudé en aceptar- Lo lamento tanto, yo no...
-Creo que después de esto solamente podemos charlar. No sé cuándo vendrán por mi...
-No digas eso y solo abrázame como si no hubiera otro día, ¿vale?- dijo y le seguí.
Empecé a llorar como loca. No por haberle mentido y él se lo creyera, sino por todo. Tenía toda una carga encima que por la rabia creí que podía soportar. Pero no puedo. Debo cumplir con este deber que tengo gracias a Hannah y mi necedad. Quiero huir de aquí y no volver, pero ya no tengo vuelta atrás. Rechacé la beca en Moldavia y tenía la demanda de mis padres a la escuela. ¿Podría descansar un momento y disfrutar la vida sin mentir? No.
-¿Serías mi novia?- susurró en mi oído- No me des...
-No puedo...- respondí y sentí que todo mi corazón se rompía en pedazos.
-Ness, no tienes que darme una respuesta ahora.
-Creo que debemos regresar- me sorbí la nariz y sacudí lo poco de sucio que tenía encima- Pero, lo pensaré, ¿está bien?
-Bien, pero... ¿me das otro abrazo?- puso una carita de perrito y solté una risita.
-Claro que sí, grandulón- y me acerqué.
Sus abrazos me hacían sentir segura y, hasta el momento, querida. Podía oler el perfume tan varonil y penetrante que tenía puesto y sus brazos alrededor mío no hacía nada más que apretar todo espacio restante entre nuestros cuerpos. Me separé y lo miré, toda reída y sonrojada, y me fui sin antes dejarle un beso en la mejilla. Caminé por los pasillos y noté que nadie estaba. Miré el reloj en mi celular y me había dado cuenta que ya no daba el caso si seguía en clase. No tenía nada que perder.
-Vanessa- me llamó alguien.
-¿Clay?- me giré y lo vi. Tenía un Walkman en mano, sin reproducir- Lindo Walkman, vintage...
-Creo que ya sabes porque vine...
-No tengo idea de lo que estás hablando, Jensen, pero si necesitas hablar con alguien...
-¿Tú sabes de la muerte de Hannah Baker?- oh, caracoles.
-Clay, ¿si sabes que llegué aquí después de todo ese drama?- me aclaré intentando ver si reaccionaba y soltaba el tema.
-Tony me dijo que tenías información acerca de ello.
-No puedo... Es peligroso.
-¡Pero dime!
-¿Qué parte de que es peligroso no te entra a la cabeza?- salí por la puerta principal, pero Clay era persistente... O idiota.
-Vanessa, no he sido del todo claro de estas cintas- dijo enseñándome la cajeta que recién le había elogiado. Yo me estaba apretando las agujetas de mis patines.
-¡Baja eso!- ordené nerviosa.
-Entonces dime porqué sabes cosas que la mayoría de los que están en esto no...
-¡Soy la hermana de Hannah, Jensen!- exclamé- ¿Estás feliz?
-¿Q-Que?- tartamudeó.
-Ya escuchaste. Si quieres dile a todo el mundo, a Jessica, Alex, Bryce... O simplemente aléjate de mi- y salí patinando del lugar.
Necesitaba llegar a casa, dormir y luego ir donde Bryce. Por lo menos debo sacarle más información. Y al fin lo logré. Abrí la puerta, la cerré, ni me digné en quitarme los patines y subí como loca las escaleras. Me quité los lentes de contacto, me tiré a la cama y dormí un par de horas.
Al despertar, eran las seis de la tarde y debía llegar donde Bryce. Mis padres no estaban en casa y se me iba a hacer más fácil salir. Algo había pasado en el acuerdo con ellos que aún no habían llegado. Eso fue ayer. Todo hubiera sido lo mismo con o sin Hannah, con o sin la demanda, con o sin mi ayuda. Así era de invisible para mis padres luego de la muerte de mi hermana. Seguía siendo la que más salía y a ninguno le importaba, el cero a la izquierda, la exiliada, etcétera.
Rodé nuevamente por las calles hasta que tuve que parar y quitarme los patines. Había llegado a la loma donde vivía la gente más adinerada de Evergreen. La casa de Bryce era, en efecto, una de las más finas de la ciudad. Era obvio, ¿no? El violador de mi hermana tenía que ser un niño de papá y mamá. Mis ganas de volver a casa eran nulas. Subí la loma y llegué a su casa. La entrada estaba abierta y volví a caminar y vi a Bryce en la tina caliente con Monty y... ¿Jessica?
-¡Balan!- exclamó el rubio- ¡Pudiste venir!
-Así parece- alcé los hombros reída- ¿Cómo es que quedaron en la tina con Monty? Ese idiota casi nunca deja el control de los videojuegos.
-¡Oye!- se quejó el castaño- Tú nunca sueltas el teléfono, ¿por qué no te metes con nosotros?
-No traje ningún bikini o algo...- me excusé.
-¿Y quién dijo que estamos aquí en traje de baño?- rió Jessica claramente ebria.
-Hey, Ness- me llamó Zach- ¿Puedes venir?
-Está... ¿bien?- dije y me adentré a la casa con él- ¿Qué pasa?
-No te vi en Liberty y creí que te habías ido, pero eso no llega al caso- me sentó en el sofá- ¿Pensaste lo que te dije?
-Honestamente... no aún- solté- Cuando hablamos me fui directo a mi casa porque no tenía que dar más clases en el día, llegué y dormí. Aquí me ves recién levantada.
-Claramente, porque dejaste toda tu ropa. Aunque...- agarró su maleta- Dejaste esta en mi casa-sacó mi ropa interior y rápidamente la oculté.
-¿No podías dármelo cuando estuviéramos más solos?- dije en un gruñido.
-Tranquila, mujer- empezó a reír- Te la traje porque aún así la lavé. Eres mi mejor amiga, después de todo.
-Oh... Vale. Mejor vamos con los chicos o sino sospecharán- y me fui.
-Por lo menos acompáñanos, Zachy- soltó Bryce.
-No gracias- respondió el asiático- No tengo más ropa...
-Igual yo- alcé la mano.
-Yo le presto ropa a Vanessa y Bryce a Zach, ¡listo!- aplaudió Jess.
-Ugh, si tú lo dices...- me quité lentamente la ropa que traía puesta y me adentré a la tina- Ay Dios, está caliente.
-Tienes buen cuerpo, mujer- me elogió la morena.
-El mejor que he podido ver- me coqueteó Bryce, acercándose a mi- Por algo eres la Sensación Europea...
-Bueno, permiso...- se puso Zach en el medio- ¿Ahora qué hacemos?
-No lo sé- contestó Monty.
-¡Uh! ¡Verdad o reto!- sugirió Bryce, a lo que los demás asintieron.
-¿Quién comienza?- pregunté juguetona.