[.Give Me Love - Ed Sheeran]
Golpeaba la bolsa de boxeó con fuerza, liberando el estrés que se le ha formado solo en 2 días. ¡Dios! No sabía qué hacer.
Ser un buen padre.
Claro, como si fuera fácil, pero tendré que hacerlo. Me pregunto cómo habrá sobre llevado Mia esto a los 16. Por una parte le agradezco que no me lo allá dicho, porque cumplí mi sueño, pero todo se devuelve en esta vida y mi precio fue perderla y saber que ahora tengo un pedazo de mi existente, pero al que no puedo revelar por el mismo motivo por el que lo aleje, ¡que irónico! Solo podía golpear el saco delante de mí recordándome lo tonto que eh sido. Todo este tiempo perdido, solo lo eh hecho por mí mismo. Solo pensé en mí.
Ahora me daba cuenta, después de pensar todos estos años que no era suficiente para nadie. ¡Qué importa que te hayan dejado! Me decía, pero tiene una importancia... mi felicidad y las de Lily y Mia tal vez si lo hubiera pensado bien debería haber sabido que la vida de pueblo no era tan mala.
¡Venga ya! Era horrible de solo pensar eso se me revuelve el estómago. Elegí bien, solo que tengo una gran consecuencia ahora.
-¿me voy por una semana y ahora tienes una hija de 7 años? ¿El mundo se adelantó o el perdido soy yo? - la voz de uno de mis mejores amigos resonó en el gimnasio. Marco Reus. Rodee los ojos, lo que me faltaba. Reus siempre me hacía ver el lado positivo de la vida y los errores que siempre cometo. Lo echa en cara.
-no estoy de humor - dije. Seguí golpeando la bolsa sin mirarlo. Ignorándolo.
-la única duda que tengo es ¿Por qué estás aquí? - me pregunto. Otra vez deje de golpear el saco y lo mire confundido, ¿aquí se refería?
-¿y donde tendría que estar?
-con tu hija - dijo serio. Baje la mirada y volví al saco pero sin golpearlo - es que tú no te das cuenta de lo maravilloso del caso.
-¿Qué tiene de maravillo? - no quería mirar nada. Solo el saco negro con rojo delante de mí.
-¿bien tu estas mal? ¿Cómo que tiene de maravilloso? ¡Todo! Tú lo ves, pero cualquiera en este estadio quisiera tener lo que tú tienes ahora. Miles de personas no pueden y tú lo rechazas. A Lily no se lo notas hasta que ella te dice que paso 4 horas en un avión solo para conocerte. Que paso 3 semanas planificando toda la inscripción a una academia falsa, creando mentiras a la persona que le dio la vida, solo para conocerte y que cuando llega el momento una de las personas más importantes para ti te recibe con una risa y diciendo que es una broma. ¿Qué pasa contigo?
Guarde silencio por que las lágrimas en mis ojos no me dejaban ver. Como dije me echa todo en cara. Él tenía razón, pero tenía miedo, no sabía cómo actuar.
-no sé hacerlo - hablé con la voz cortada.- solo necesito tiempo. Solo eso, acostumbrarme a esto.
-tienes razón. Muchas cosas te están presionando, pero tienes 2 meses. Aprovéchalos.
<< Aprovéchalos>>
Después de un silencio de pocos segundos Marco .se fue y yo tome mi camisa - aunque estoy sudando - y me la puse. Guarde los guantes de boxeo y salí a la sala de entrenamiento para la liga. Al entrar los tecnicos me quedaron viendo raro. Al principio pensé que era porque estaba sudado y venía así pero entonces entendía que ya todos los presentes sabían la verdad. Que yo Toni Kroos que en todas las entrevistan he negado salir o tener una aventura con alguna mujer y negar rotundamente tener algo de responsabilidad y una relación seria: ahora tiene una hija. Vaya show.
Entrenamos con los chicos como siempre, verdaderamente sin entrenar , como los viejos tiempos. Bien hace 2 días solamente, pero pareciera una eternidad. Teníamos que reforzar las jugadas, elegir uniforme, tacos, formaciones, etc. Y salimos de la sala. Lily me esperaba afuera obedientemente sentada en los sillones de visitas. Pobre ni siquiera un libro tenía para divertirse.
-¿ya nos vamos? - en sus ojos se notó un pequeño brillo de esperanza para el fin de su aburrimiento.
-sí, nos vamos.- dije. Caminos a la salida. No me despedí de nadie, total los vería de nuevo en dos días y después de eso 2 meses, todos los días. Agarré las llaves de mi bolso para abrir mi auto y le pregunte a Lily .- ¿quieres ir comer algo?
Ella no respondió enseguida, más bien lo pensó. No es una niña normal.
-pero ese señor dijo que no podíamos salir. - dijo negando.
Ok, ¿desde cuándo el adulto responsable era ella? Supe y abrí mi puerta para entrar. Otra vez lily se quedó en la calle. Rodé los ojos.
-¡que no eres una dama, eres una niña! Sube. Iremos a un McDonald.