[Lucy]
Revisé a Sherlock y dejé su jaula sobre mi escritorio. Le di unas semillas y busqué mis cosas. Me coloqué mi suéter y salí de mi habitación. Creo que nunca en mi vida me había sentido más determinada que ahora.
Amarré mi cabello en una cola de caballo mientras caminaba por la calle. Esperé un taxi y me subí al primero que se detuvo.
Siempre he visto a la gente mala en la televisión pero nunca había estado tan cerca de una. Recuerdo exactamente que Harry fue golpeado por gente que trabajo con él y fue porque Taylor se los ordenó. Taylor robó algo valioso de Madison lo que significa que entró en la casa de alguna manera o quizás ella se lo permitió. No quiero pensar en los posibles errores que haya cometido mi hermanastra lo único que quiero hacer ahora es posiblemente gritarle, decir lo que quiera que tenga que decir aunque no sé exactamente qué es lo que va a salir de mi boca.
Mi corazón está latiendo fuerte pero creo que es por toda la adrenalina y la mezcla de sensaciones que están creciendo en mi interior. Abrí mi bolso y apliqué mi inhalador, lo devolví a mi bolso y mi visión permaneció sobre más allá de la ventana. Pagué al conductor y me bajé. Bien, este es el momento. Detesto estos lugares y puedo recordar que la última vez que estuve fue con Harry, pero qué sorpresa.
Caminé a través de la calle y me detuve frente a su bar. Oh no, las puertas están cerradas y no hay nadie afuera. Sé que es temprano y probablemente abrirán en un par de horas pero pensé que quizás sus trabajadores llegarían más temprano. No importa, eso no va a detenerme.
La entrada es una gran puerta negra, mis nudillos tocaron la puerta repetidas veces pero quizás no hay nadie aquí. Genial, la primera vez que voy a defender alguien y no puedo hacerlo. Bien, no importa, esperaré.
Me crucé de brazos y pateé la puerta. Dolió pero otra vez nadie salió. Estoy tan furiosa, necesito hacerlo ahora y no puedo esperar. Sorpresivamente le doy un puñetazo a la puerta, dolió y prefiero mil veces un saco para boxear.
“Bien, esto es súper raro, ¿qué estás haciendo aquí?” Me giré y me encontré con sus ojos azules y su cara con una sonrisa.
De todas las personas tenía ser Louis Tomlinson.
“Necesito hablar con Taylor.”
“No creo que sea una gran idea, Harry no le gustaría—“
“¿Por qué Harry está involucrado en todo?” Pregunté angustiada. No toda mi vida gira a su alrededor, esto es algo personal.
“No puedes entrar, necesitas irte,” respondió, ignorando mi pregunta.
“¡No, no lo haré!” Apoyé mi espalda contra la puerta, si Louis va a entrar yo también lo haré. “¿Y tú qué estás haciendo aquí?”
“Déjame ver, ¿trabajo aquí? Ahora vete, pequeña.”
“¿Pequeña? Tenemos la misma edad,” respondí mientras Tomlinson se acercaba a mí.
“Vamos, te llevaré a casa,” agarró mi brazo y empezó a jalarme.
“¡No, suéltame!” Me quejé y traté de luchar contra su fuerza. Louis soltó mi brazo y me agarró la cintura y empezó a caminar. “¡Mis lentes, idiota, mis-mis lentes!” Dije una vez que el objeto cayó al suelo.
Louis me soltó y recogí mis lentes. “No me voy, ¡no me toques!” Retrocedí cuando él trató de agarrarme otra vez.
“Esto no va a terminar bien,” sacudió la cabeza y empezó a caminar hacia la puerta. “Harry, va a matarme si se entera, lo sé,” dijo mientras sacaba la llave.
“No me importa,” murmuré.
“Oh, ahora no te importa pero quiero verte Lucy cuando Harry se ponga todo psicópata para saber qué sucedió. Puede ser muy insistente, es insoportable.”
“No sé de qué estás hablando.”
“Claro que no lo sabes,” abrió la puerta pero no me dejó entrar. “Mira, ten cuidado, si algo sucede grita.”
“¿No estarás conmigo?”
“No creo que a él le guste pero estaré cerca, ¿sí?” Tragué saliva. “Trataré de quedarme contigo pero no puedo prometerlo.”
Me dejó entrar y cerró la puerta. Todo estaba organizado y vacío.
“Ven, vamos,” Louis dijo y yo lo seguí.
Hay una puerta que tiene un cartel que dice “acceso restringido”, antes de que Louis pueda abrirla alguien lo hace.
“Hola Tomlinson,” el moreno y dueño de este local dice, “¿te conozco?” Preguntó posando la vista sobre mí.
Mi mandíbula se tensó y desearía encontrar una respuesta potente pero mi mente está vacía.
“¿Qué le hiciste a-a Madison?” Solté y él sonrió.
“Louis, deja el dinero y rellena los papeles en mi oficina,” Tomlinson no se movió. “Ahora.”
Louis me entregó una última mirada y luego entró por la puerta. Retrocedí un poco y me crucé de brazos.
“¿Qué le hiciste a Madison y por qué? No te conozco pero deberías mantenerte alejado de nosotras. Lo único que has hecho es causar dolor y ni siquiera entiendo por qué y tampoco quiero saberlo, eres una persona malvada y espero que te-te quemes en el infierno,” tuve que retroceder más porque comenzó a caminar hacia mí.
“Tu hermana se lo merecía, pero qué perra.”
“¡No, claro que no!” Subí un poco la voz. “Y lastimaste a Gemma, sé lo que hiciste y también deberías mantenerte alejado de ella. ¡Eres un-un cobarde, un cobarde por golpear a una mujer!” Me abofeteó y está definitivamente fue la bofetada más fuerte que me han dado.
No dejé que el escozor ardiente en mi mejilla o que mis lentes en el suelo me detuvieran. Traté de abofetearlo pero su fuerza es definitivamente más grande que la mía. Me empujó y choqué con una mesa, iba a agacharme pero su mano encuentra mi cuello. Sus dedos se entierran en mi piel y al primer apretón ya siento que no hay aire en mis pulmones.
“Detesto tu hermana, desearía destruirla, probablemente matarla,” sonrió y mi visión comenzó a nublarse y mi cuerpo estaba temblando porque me estaba estrangulando sin piedad.
Mis brazos se movieron débilmente pero no pude alcanzarlo, no pude patearlo porque ya no me quedaban fuerzas. Apretó más fuerte y creo que va a romper cada hueso existente en mi garganta.
De pronto su mano abandonó mi cuello y me derrumbé en el suelo. No vi a Tomlinson ni siquiera pensé en él pero sé que fue él. Mi visión está completamente borrosa y no puedo moverme aunque trato. Jadeé por aire y algo se rompió, algo de madera.
Escuché otra cosa de madera romperse, voces gruesas, pies moviéndose. Quería gritar porque me estaba volviendo más loca con la pobre cantidad de aire que ingresaba a mi cuerpo. Mi mano se apoyó sobre mi cuello adolorido mientras tosí violentamente.
Arqueé la espalda y mordí tan fuerte mi lengua que sentí el suave sabor a mi propia sangre. Necesito respirar pero siento que de pronto mi garganta es muy pequeña.
“Joder, joder,” escuché la voz de Tomlinson y él giró mi cabeza suavemente y ahora estoy mirando al techo. Una gota caliente cayó sobre mi mejilla. “No te asustes,” Louis abrió mi boca un poco y apoyó la suya sobre la mía, sentí una gran cantidad de aire circulando desde él hacia mí.
Me dio un poco de espacio y tosí, Louis volvió a posicionar su boca sobre la mía y mis pulmones se inflaron. Jadeé desesperada y volví a sentir su boca sobre mis labios fríos, tiró más aire por mi garganta y pulmones. Tosí y esta vez más aire entró dentro de mí. Él iba a hacerlo otra vez pero logré sacudir mi cabeza.
“Tenemos que irnos de aquí,” susurró y cargó mi cuerpo.
Cerré los ojos y di grandes bocanadas de aire. La sensación de respirar es un increíble alivio para mí. Él caminó rápidamente y pude sentir el cambio de clima una vez que estamos fuera del bar. ¿Dónde está Taylor? ¿Qué sucedió? Desearía más fuerte así yo podría defenderme a mí misma.
Escuché el sonido de una alarma y él logró abrir la puerta del auto. Metió delicadamente mi cuerpo en el asiento trasero y yo pestañeé rápidamente. Este es el auto de Harry. Cerró la puerta y se dirigió a la puerta en la cual mi cabeza estaba apoyada.
“¿Cómo te sientes? ¿Estás mejor? ¿Debería llevarte al hospital? Mierda, esto es un desastre,” habló rápidamente y sonaba preocupado.
“Estoy…bien,” hablé y mi voz es apenas un murmuro.Mi garganta, mi piel duele demasiado y aún siento como si me estuviese estrangulando.
"Me alegro que estés bien. Maldición, esto pudo haber terminado mucho peor pero no te ves tan mal, Lucy. Lo único que pude hacer fue darte respiración, al menos eso salió bien," él suspiró con su mano apoyada sobre su corazón.
No tragué saliva porque mi garganta estaba seca. Mis ojos parpadearon mirando al techo del coche e inhalé el aliviador oxigeno.
“Santa mierda, tu cuello, mierda, esto es mi culpa pero no sabía que iba a golpearte, no tenía ni idea,,” él dijo. “Si Harry se entera de eso va a matarlo, estoy seguro que lo va a matar. Siempre supe que uno de nosotros iba a terminar en la cárcel.”
“No,…por favor,” murmuré. “Louis, él-él no puedo hacerlo.”
“Sé que puedo ser un hijo de puta a veces pero jamás lastimaría una mujer, Taylor se volvió loco. Quizás podríamos matarlo, tengo algunas ideas,” Louis sonrió y creo que está bromeando. “Estoy bromeando, no podría matar una persona pero podemos lastimarlo, lo haré Lucy, no ahora porque estamos un poco encadenados a él pero lo haré, lo prometo.”
No respondí pero lo aprecié. No puedo imaginarme si Harry se entera y lo mata, no podría vivir conmigo misma si Harry estuviera en la cárcel y posiblemente para siempre. Taylor es una persona despreciable y merece morir pero no de una manera que pueda lastimarme aún más.
Louis buscó algo en el asiento delantero y luego volvió a mí.
“Aquí están tus lentes y necesitarás usar una bufanda un par de días,” él me entregó ambas cosas y yo asentí, aún sintiéndome un poco débil. “¿Estás segura qué te sientes mejor? Podría llevarte al hospital,” negué con la cabeza.
No puedo ir al hospital, quedará registrado y mi madre enloquecerá. Voy a estar bien, lo sé.
"Lucy, eres muy valiente, no debiste venir y menos sola," Tomlinson sacudió la cabeza. "¿No estás asustada? Si yo fuese una chica estaría enloqueciendo ahora mismo."
No estoy asustada porque no estoy sola, tampoco estoy en pánico porque aún estoy viva. Sólo siento el dolor palpitante en toda la anatomía de mi cuello.
Miré a Louis y no puedo reconocerlo, fue cruel conmigo pero ahora me ayudó y salvó mi vida. No puedo odiarlo por completo.
“Tu frente,” señalé su frente, cerca de donde nace su cabello tiene una línea de sangre.
“Estoy bien,” se limpió con sus dedos. "¿No vas a llorar o gritar?"
"No puedo, duele bastante."
"Puedo llevarte a un hospital,"sacudí la cabeza rechazando su oferta. “Mierda, aún no puedo creer lo que sucedió. Lucy, esto fue súper arriesgado," él habló serio.
"No sabía que esto sucedería," dije bajo y mis ojos ardían, creo que voy a llorar.
"No puedes meterte con los nerds," él bromeó y no sé por qué pero logré sonreír. "Taylor está inconsciente si eso es lo que te preguntas, lo golpeé con una silla dos veces.”
“Gracias, Louis,” susurré.
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[Harry]
Apoyé mis codos contra el marco de la ventana y asomé mi rostro. Solté el humo y miré a la calle. Desearía que Sherlock estuviese aquí pero lo dejé con Lucy y no quiero enfrentarla.
Sé que tengo mis defectos pero nunca los había detestado tanto como lo hago ahora. Tengo que ser más paciente porque no siempre puedes obtener lo que quieres. Soy tan idiota por pensar que ella respondería algo, probablemente estaba pensando en muchas cosas pero como siempre no es capaz de responder, así es Lucy.
Inhalé el humo hasta quemó mi garganta y luego me senté en la cama. No creo que haber hablado con Barbara ayudó mucho y además lo que dijo es ridículo, no porque sería ridículo enamorarme de Lucy sino porque no entiendo de dónde sacó esa conclusión. ¿Y si está en lo cierto, y si estoy enamorado de Lucy?
Exhalé el humo y alguien tocó mi puerta.
“Adelante,” murmuré mirando la ventana.
“Tus llaves,” escuché la voz de Louis y el sonido de las llaves aterrizando sobre mi cama. “Tengo algo más,” me giré hacia él y Louis estaba sosteniendo la jaula de Sherlock. ¿Qué?
“¿Viste a Lucy?” Pregunté confundido. Lancé el cigarro por la ventana y agarré la jaula.
“Sí, y ella me dio Sherlock porque se te olvidó llevarlo hoy,” yo asentí y mis ojos se enfocaron en los curitas que estaban en su frente.
“¿Qué te pasó?” Pregunté confundido, ¿acaso se metió en una pelea?
“Una pequeña pelea, lo de siempre,” se encogió de hombros.
"¿Por qué te demoraste tanto?"
"Estaba salvando a Lucy," escuché su voz sarcástica y asentí.
"Sí, seguro, ¿cómo estaba, Lucy?” Pregunté mientras abría la jaula.
“Bien, supongo.”
“¿Crees que me odia?” Pregunté de pronto. Necesito opiniones.
“¿Lucy? Lo dudo.”
“Me siento mal por Madison, trataré de recuperar lo que le robaron,” dije mirando a Sherlock.
Louis suspiró. “Zayn se lo entregó a Taylor y no sabemos dónde está.”
“Yo sí. Una vez que dejemos de trabajar para Taylor lo quemaré, posiblemente todo el bar ¿no sería una buena idea?” Sonreí.
“Sería excelente,” Louis asintió y se dirigió a la puerta.
“Espera, ¿qué es esto?” Señalé al tubo dentro de la jaula de Sherlock.
“No sé, ¿un juguete para tu gordo hámster?” Respondió como si fuera obvio. “No quiero hablar del gordo de Sherlock. Mira, sólo tengo que decir una cosa: Harry, yo creo que deberías cuidar más de Lucy.”
“¿Qué?” Exclamé muy sorprendido por sus inesperadas palabras.
“Sí, me escuchaste. ¿Qué pasa si se entera y quiere hablar con Taylor?”
“No la dejaría,” negué con la cabeza.
“Por eso deberías poner un ojo sobre ella. Como tú dijiste ella es muy valiente y a veces la valentía nos puede volver inconscientes.”
“No me digas que de pronto te agrada Lucy,” fruncí el ceño.
“No he dicho eso, dije que deberías cuidar más de ella, idiota. Es tan obvio que te preocupas de ella pero no lo suficiente. Abre tus ojos y ponte los pantalones. Honestamente eres la persona más estúpida que he conocido.”
“Bien, gracias,” contesté sarcástico. “Además tú no sabes—“
“Harry, yo sé que Billy te cuenta todo sobre Lucy, estás siendo bien psicópata.”
“No,” negué con la cabeza aunque él tenga razón. “¿Y cómo sabes sobre Billy?”
“¡Oh, vamos, él está en nuestra escuela!” Louis rodó los ojos. “Deja a Billy en paz y empieza a actuar,” Tomlinson gruñó y luego cerró la puerta.
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Mastiqué mi goma de mascar y miré alrededor. Lucy desapareció con Cassie todo el almuerzo, ¿qué estarán haciendo?
Estaba solo en una mesa, mis amigos decidieron jugar en un partido de futbol en la hora del almuerzo pero yo quise quedarme aquí. Mi mirada se encontró una vez con Emily, estaba sentado con un par de chicas. Me miraba enfadada pero yo lo único que hice fue hacerle una cara fea y mirar a otro lado. Rasqué mi frente y me emocioné una vez que divise a Billy.
“Hola Harry,” él se sentó y yo apoyé mis codos sobre la mesa.
“Cuéntame todo.”
“Hoy en la mañana llegó con un chico, no quiso asistir a la clase de física que está dando Emily y ahora su amiga Cassie la llevó con la consejera escolar.”
“¿Qué? ¿Por qué?”
“No pude escucharlas pero no entraron a la oficina de la consejera,” asentí en silencio. “Hay un trabajo de presentación en biología y el profesor ha elegido las parejas al azar.”
“Entiendo. Gracias Billy, te enviaré la prueba hoy ¿sí?” Billy asintió y se marchó.
Billy era un chico normal y para mí coincidencia él comparte todas sus clases con Lucy, así que pensé que sería un buen plan que él me contara todo lo que ella hace.
Me levanté y agarré mi mochila. Tengo que hacer algo, la información que Billy me entregó es importante. Traté de ignorar el hecho de que hoy alguien trajo a Lucy a la escuela y no fue alguien de su familia. Púdrete, Adam.
Barbara me dijo que debía hablar con quien fuese necesario hablar, que las respuestas podrían estar dentro de mí y esa mierda. Bien, la única solución es tener a Lucy como mi compañera en biología. Esa es la única manera que estemos en completo contacto y finalmente podré hablar con Lucinda. Debo decir que estos días hablar con Sherlock o mis amigos no es suficiente. La idea de pasar más tiempo con ella me resulta emocionante, más de lo que pudiera describir.
Eché las manos al bolsillo y mis pasos me guiaron a la sala donde todos los profesores se reúnen. Toqué la puerta y esperé a que alguien apareciera. Una mujer de cabellos blanco abrió la puerta y le dije el nombre del profesor que estaba buscando.
Nuestro profesor de biología apareció y frunció el ceño al verme, sé que me detesta.
“¿Sr. Styles, en qué puedo ayudarlo?”
“Oh, es algo muy simple y espero que acceda porque no puedo aceptar un no como respuesta,” me encogí de hombros y hablé tranquilo. “No me importa a quien haya elegido para mí pero necesito que para su trabajo Lucinda Fray sea mi compañera.”
No fue difícil convencer al profesor y eso me sorprendió bastante. Lo vi junto a otros profesores hace mucho tiempo en un club de striptease, eso fue lo único que tuve que decir para que él aceptara.
Luego de tener la charla con el profesor me dirigí al salón de clases, sólo quedaban 5 minutos para nuestra clase de biología. Me senté al lado de una chica que no conozco y apoyé mis pies sobre la mesa. Lucinda entró minutos después con sus dedos apoyados sobre una bufanda rosada. Tomó asiento en la primera mesa y miró hacia la ventana.
El resto de los estudiantes llegó con el profesor. El Sr. Stone escribió en la pizarra sobre el trabajo, él nos entregaría un capitulo de un libro y tendríamos que investigar y presentarlo y toda una enorme mierda. Lo bueno es que las presentaciones empiezan en 1 mes más lo que significa que voy a pasar bastante tiempo con Lucinda.
“Decidí elegir las parejas al azar,” todos abuchearon. “Porque este es su último año y porque deben aprender a trabajar en equipo con personas que no conozcan.”
Me crucé de brazos mientras el profesor se sentaba.
“Leeré las parejas para el trabajo y no repetiré, así que silencio.”
Agarró un papel y empezó a leer la lista. Cuando mencionó nuestros nombres juntos Lucy disparó una hacia mí, lucía casi indignada. Yo la saludé con mi mano y ella volvió su mirada al profesor.
“Les leeré enseguida los capítulos que asigné para cada grupo,” él avisó mientras sacaba una carpeta.
Todos empezaron a conversar, Lucinda se levantó y yo hice lo mismo.
“Por favor, no puedo hacerlo,” escuché su voz una vez que estoy detrás de ella. “El Sr. Styles no es de mi agrado, déjeme cambiar de pareja.”
“Linda bufanda,” dio un respingo al escuchar mi voz y se giró hacia mí.
“Si quieres Lucinda, puedes preguntar,” el Sr. Stone respondió y yo le envié una mirada asesina. De ninguna manera, ella es mi compañera.
Lucinda se giró hacia toda la clase y tragó saliva. “¡Hola!” Ella dijo pero nadie escuchó, su voz suena extraña. “Por favor, será muy corto,” habló pero no subió la voz y llamó la atención de pocas personas.
Nadie prestará atención si ella no pone más actitud para esto.
“¿¡Podrían callarse!?” Dije fuerte y varios compañeros nos miraron. “Ella tiene algo que decir,” hablé a regañadientes. Sólo hice esto para agradarle pero espero que nadie quiera ser su compañero de trabajo.
Ella me miró por unos segundos con su rostro lleno de pecas y asintió como en agradecimiento por mi gesto.
"No tengo compañero para el trabajo, ¿así que-que me preguntaba si alguien quiere hacerlo conmigo?" No hubo respuestas, sólo rostros serios. "¿Por favor? Soy muy responsable," habló suavemente.
Sonreí porque nadie respondió. Ella suspiró y miró hacia nuestros compañeros y algo le llamó la atención. Comenzó a caminar y yo la seguí. Había alguien que estaba ocultando su rostro con una chaqueta negra y ya sé quién es.
“Eric, Eric,” Lucinda dijo mientras se acercaba a su mesa.
Él asomó sus ojos por la chaqueta. “Oh, hola Lucy, no te había visto,” dijo sarcásticamente.
“Se mi compañero de trabajo.”
“De ninguna manera,” gruñí detrás de ella, Lucy me miró por unos segundos y luego a Eric.
"Tu Romeo habló por ti," Eric sonrió.
"Por favor, Eric," Lucy rogó y yo quería llevármela de ahí porque obviamente esto le parece divertido al imbécil de Eric.
"No, Eric, ella está conmigo," fruncí el ceño. "Si aceptas le diré la verdad sobre ti," fue la única amenaza que saltó en mi mente.
"Y yo haré lo mismo, adelante, Styles," la mandíbula de Eric se tensó.
"¡Por favor, necesito un compañero!" Lucinda pidió en voz alta pero fue ignorada otra vez.
Pobre Lucy, ella necesita saber que yo quiero ser su compañero más que todo.
"Lucy, lo siento, yo ya tengo una compañera," Eric se encogió de hombros. Él podría cambiar pero me alegro que no lo haga, ella es mi compañera y rehúso hacer este trabajo si no es con Lucy.
Suspiró y bajó la vista derrotada. Agarré su mano y jalé suavemente de ella para que nos sentáramos en su mesa. Se deshizo de mi agarre y cruzó de brazos.
Ahora que estamos sentados y ella no se está moviendo me percaté que la expresión de su rostro es de completo cansancio.
"¿Estás bien? Te ves muy cansada, Lucy," ella apretó sus labios en una fina línea y asintió. "Tu voz suena extraña."
"Estoy enferma, sólo eso," sus dedos se aferraron a su bufanda rosa.
Limpió sus lentes y yo tragué saliva, hay algo que quiero decir.
“Entiendo por qué quieres cambiarme pero yo no te cambiaría,” susurré.
Se quedó mirándome a través de sus gafas por un par de segundos.
“Enserio,” afirmé. “Esto contigo o con nadie más, a excepción de ti no conozco a nadie más y tampoco quiero hacerlo.”
Una de las comisuras de su labios se curvó pero no apareció ningún rubor en sus mejillas. Suspiró superficialmente y lanzó unos mechones tras la oreja.
“Bien, me rindo,” Lucinda habló bajito y para mi sorpresa descansó su cabeza en mi hombro. No sé si puedo hacerlo pero logro rodear sus hombros con uno de mis brazos y ella no protestó. “Siempre vuelves, Harry.”
“Lo sé, raro, ¿cierto?” Pretendí estar sorprendido ya que yo prácticamente forcé al profesor.“Tú y yo, compañeros para este tonto trabajo,” murmuré y naturalmente mis labios se apoyaron sobre su frente. “Creo que será muy divertido, Lucy.”
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¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿Qué acabo de escribir?????????????
Está lloviendo aquí, espectacular, saludos xx