Abre los ojos y descúbreme

By PauliiiiPS

13.4K 545 47

Florencia y Tomás han sido amigos desde siempre, son totalmente inseparables, pero ¿Existe la amistad entre h... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Comentario
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Comentario
Capítulo 32
Epílogo
Aviso

Capítulo 9

458 17 1
By PauliiiiPS

He conocido la felicidad. Que al terminar el día martes de clases, nos avisen, que por el resto de la semana se suspenden todas las actividades académicas, no tiene otro nombre que felicidad pura. Con Fran, decidimos tener nuestra noche de chicas-. Cuando se lo propuse, ella saltó de la emoción, hace mucho que no nos dedicábamos un tiempo.- Así que, después de tomar sus cosas, Fran se fue a quedar a mi departamento. De camino a casa, pasamos por una tienda donde compramos cervezas y sushi. Al llegar, nos quitamos los zapatos, cambiamos nuestra ropa a pantalones holgados y camisetas viejas, pusimos unos cojines en la alfombra y nos quedamos ahí comiendo y riendo por horas.

-Este california roll, está buenísimo- comentó Fran, mientras ponía la pieza en su boca.

Al ver como manipulaba los palitos para comer, solté una risita y le comenté-Debes aprender a usar los palitos, ellos no se entierran, se abren como pinzas- la molesté.

-¡Es que no puedo!- me contestó riendo- mi motricidad fina no me acompaña para nada.

-¿Cómo fue que te graduaste del kínder de pequeña?- La volví a fastidiar.

-Mi madre sobornó a la profesora, es la única respuesta- remató, para que termináramos riendo como unas dementes.

-Bueno Fran, cuéntame cómo van las cosas con el chico del bar, ¿Se han visto de nuevo?- Le pregunté emocionada-

-¡Sí! ¡Y me ha pedido salir otra vez!- respondió jugueteando con sus manos.

-¡¿Y ya se besaron?! – Continué tratando de sacarle información.  

Sonrojándose se puso claramente muy nerviosa- No te voy a contar eso Flo-

-¡Soy tú mejor amiga! ¡Tienes, por obligación que contarme!- le exigí riendo.

-¡Buena ya!, solo para que pares de insistir… si, nos besamos.

-¡Ahhhh! ¡Qué emoción!- grité saltando hacia ella para abrazarla.

Soltó una risotada- ¡Eres una loca!- me grito de vuelta, mientras continuábamos riendo acostadas sobre el tapiz. 

De pronto, un par de golpes en la puerta, nos distrajo.

-¿Estas esperando a alguien?- me preguntó Fran intrigada.

-No, qué extraño, quizás es Javi, pero no te preocupes, le diré que es nuestra noche de solo chicas, él lo entenderá- le comenté relajada, mientras caminaba hacia la puerta.

Al abrir, me quedé pasmada al verlo frente a mí.

-¿Qué… qué estás haciendo aquí?

-¿No me vas a invitar a pasar?

-No, estoy ocupada-

-Necesitamos hablar-

-Lo sé, pero no ahora-

-Flo, te guste o no, tendremos esta conversación, ahora- y sin esperar más, se abrió paso, dejándome con la puerta abierta.

-Tomás, ¿Cómo estás?- lo saludó Fran, claramente sorprendida.

-Hola Fran, disculpa que las interrumpa, pero necesito hablar con Florencia, ¿te molestaría si te pido que nos dejes solos?

Muy incómoda con toda la situación Fran le respondió- No, no hay problema, yo… me voy- dijo, arreglando sus cosas y tomando su bolso-

-No Fran, tu no vas a ningún lugar, si quieres ve a mi habitación y me esperas ahí, no creo que esto – dije indicando a Tomás y luego a mí- se extienda por mucho tiempo.

-Flo… no quiero incomodar, no tengo problema con irme, llamo a un taxi y…- Lanzándole una mirada de auxilio y rogándole indirectamente que no me dejara sola, la interrumpí-

-Insisto…-

-Vale, estaré en tu pieza- volando por las escaleras hacia arriba, desapareció.

-Está bien… te escucho- Lo incité a hablar, lo  más indiferente posible.

-Bueno, Flo, Yo… no sé por dónde empezar- Comenzó.

-¿Te parece en por qué me besaste?, para que luego continúes explicándome ¿Por qué desapareciste?  ¿Por qué me estuviste evitando todo este tiempo?- Por más que intenté  conservar la paciencia, no lo conseguí.

-No sé qué me está pasando Florencia, mi cabeza es un torbellino de ideas, recuerdos, pensamientos… estoy confundido, tengo miedo… y al contrario de lo que tú piensas, yo no desaparecí… después de lo del… beso… dejé pasar el fin de semana, pero sin aguantar un día más, me vine a tu departamento… el mismo lunes. Sin embargo, al llegar aquí, encuentro todo esto hecho un desastre, te busqué, pregunté por ti… hasta que supuse que estarías con ese imbécil, lo comprobé con Will. ¿Qué te hizo ese idiota para que te comportes así? ¿Para qué corras a sus asquerosos brazos ante cualquier cosa? En otra situación, hubiese sido yo quién te socorriera, quien te diera alojamiento, ¡pero no!, ¡tú preferiste irte con un total desconocido!- En todo su discurso, pasó del arrepentimiento a la angustia, para luego transitar hacia el enojo y los celos.

-¡Tú lo has dicho perfectamente!... “En otra situación”- dije enfatizando con las manos- Si no me hubieses besado, para luego dejarme tirada como una vil cualquiera, como otra más de tus conquistas, en medio de la pista, sin previo aviso, sin una explicación, yo hubiese recurrido a ti, a mi amigo, a la persona que, se supone mejor me conoce, con quién he vivido un millón de cosas- Le grité con toda la rabia que estuve conteniendo- Y en cuanto a Javier- continué, sin dejarlo interrumpirme- estamos saliendo y la verdad es que me gusta muchísimo, no lo sé, con él es diferente, además está buenísimo ¿no lo crees?- le escupí, sarcásticamente, restregándole las mismas palabras que una vez él utilizó contra mí.

-No… no hagas eso…- ¿es una lágrima la que vi asomarse por su mejilla?

-¡Ah! Ahora porque soy yo quién dice eso, ¿no te agrada? Bueno así mismo me sentí yo cuando me ocultaste lo de Mariela.

Se acercó a mí tan rápido que no logré reaccionar a esquivarlo. Tomó mi cabeza entre sus manos.

-Florencia, como no entiendes que estoy sintiendo por ti cosas que jamás imaginé. Quiero descubrir que es lo que me pasa. Además lo he notado… en ti, yo sé que tú también estas sintiéndote extraña, ese beso que nos dimos, fue… especial, nunca una mujer había hecho que mi cuerpo reaccionara así, sentía como si mi corazón fuera a salir por mi boca, mi piel se erizó con tu contacto… ¡¿Qué significa esto, por Dios?!

Haciendo caso omiso a todo lo que estaba escuchando, le rebatí- ¿Y la jirafa, aún estás con ella, sabe de todo esto que me estas confesando? ¡¿Lo sabe?!- exigí.

-¡¿Has escuchado lo que te he dicho Florencia?!- me gritó exasperado.

Y sin más me besó, nuevamente atrapó mis labios con los suyos, no podía pensar claramente, al principio lo seguí, honestamente anhelaba la sensación que en mi produjo, sin embargo, no podía, yo estaba con Javier y era espectacular. Empujándolo con toda la fuerza que pude, me separé de él.

-¡No vuelvas a hacer eso jamás! ¿Me estas escuchando?... yo estoy con Javier ahora. Si quizás, hubieses puesto algo más de atención, hace solo una semana atrás, nada de esto estaría pasando. Yo siempre he estado enamorada de ti, mientras tú, restregabas en mi cara a cada una de las mujeres que llevabas a tu cama. Jamás me viste,  nunca pensaste en mí como algo más, ¿por qué ahora, vienes por mí? que por fin he encontrado a alguien que me hace feliz, yo… lo digo enserio, porque ese hombre al que tu llamas idiota, en una semana me ha hecho su prioridad, ve en mí la mujer que soy, ¡no como tú, que me has ignorado por siempre!… y sabes qué, yo me conformé, eternamente, porque pensaba que antes de todo, era tu amiga, tu confidente, siempre quise verte feliz y por más que eso me doliera,  tu felicidad era lo que más me importaba. – En este punto ambos llorábamos desconsoladamente, Tomás al escuchar mi desahogo, sufría, sus expresiones revelaban dolor, como si un puñal lo atravesara con cada palabra - Al contrario de ti, que una vez que te sentiste amenazado, que te viste fuera de tu zona de confort,  atacaste.  Ni por un minuto pensaste en qué era lo mejor para mí- me detuve un momento para secar mi rostro empapado con la manga de mi chaleco - porque eres un egoísta, solo piensas en tu bienestar. Pero ya basta, me aburrí, ahora me dedicaré a pensar en lo que quiero, no me pospondré más por ti, no más- termine agotada, casi sin lograr pronunciar las últimas palabras por el ahogo que causaba el llanto.

Luego de un silencio sepulcral, habló nuevamente-Flo, yo nunca imaginé que te sintieras así, si bien, más de alguna vez creí que me mirabas de una forma diferente, siempre me negué si quiera a suponerlo, éramos los mejores amigos... yo no podía pensar en ti, así… en realidad, si podía, de hecho, y al contrario de lo que piensas, muchas veces me descubrí haciéndolo, pero siempre consideré que no debía, que no correspondía. ¿Recuerdas aquella vez que te emborrachaste en la fiesta de fin de curso cuando estábamos en el colegio?, bueno, como ya sabes, fui yo quién te cuidó, quién te tomó en brazos hasta llegar a mi cama,- claramente no dejaría que tus padres te vieran así- comentó, recordando la situación- cuando te deposité ahí, en el lugar que me vio pensar en ti muchas veces, sentí un deseo incontrolable de besarte, de rozar tu piel contra la mía, pero pensándome como un verdadero estúpido desechaba esas ideas de mi cabeza lo más rápido que podía, arrepintiéndome de imaginar siquiera tocarte. Así mantuve las cosas en calma en mi cabeza, no te voy a mentir, el tiempo me fue ayudando a acostumbrarme a ti solo como amiga, es por eso que hablaba contigo de mujeres y de mis relaciones. Jamás lo hice con la intensión de lastimarte, sin embargo el beso de la otra noche revivió en mí todas las sensaciones que alguna vez sentí, mis fantasías se hacían realidad en ese momento. Sé que fui un idiota al dejarte así, pero no supe que más hacer, creí que rompí un código, que al parecer solo yo manejaba. Además te veías hermosísima, y verte con él me enfureció, sentí celos, me hirvió la sangre de ver sus manos sobre tu cuerpo, verte bailar contra él… ya… ya no sé qué hacer- dijo finalmente.

Yo no podía creer todo lo que estaba escuchando, todo con lo que siempre aluciné, se estaba convirtiendo en realidad, él estaba siendo totalmente sincero conmigo. Mil emociones recorrieron mi cuerpo, hace no más de dos semanas esta declaración hubiese sido todo para mí, me hubiese llevado a la gloria…  pero ahora en mi vida estaba Javier, él a pesar del poco tiempo que llevamos juntos me ha hecho feliz, se me erizan los vellos de mis brazos de solo pensar en lo que hemos vivido, me he abierto a él como si lo conociera de toda la vida. Mi cabeza sentía que iba a estallar.

Otra vez el silencio reinó, el ambiente se sentía denso, no pareciera que éramos nosotros quienes se encontraban así, como dos extraños, confesándose sus más privados sentimientos.

-¿Te das cuenta, que con todo esto, nuestra amistad se ha destruido?- le pregunté, sintiéndome extraña, devastada.

-Voy a luchar por esto que estamos sintiendo, porque ambos descubramos si tenemos un futuro juntos, lo voy a hacer, cueste lo que cueste.- Volvió a hablar, ignorando mi comentario anterior.

-No empeores más las cosas Tomás, necesitamos alejarnos, enfriar nuestras cabezas y ver si en un tiempo más, será posible construir, no sé si una amistad, pero una buena relación por respeto a todos estos años que hemos pasado juntos.

-No hagas como que no me escuchas Flo, lo voy a hacer, te lo juro- poniéndose de pie, para luego limpiar mis lágrimas y besar mi mejilla con ternura, se dirigió a la puerta.-Voy a empezar a hacer las cosas bien Flo, créeme lo que te digo- fue su último comentario.

Sin alcanzar a procesar todo lo que ahí había ocurrido, lloré. Escuché los pasos de mi amiga correr por la escalera, para luego sentir sus brazos acurrucándome. Apoyada en su hombro, me descargué, expulsé todo, ya no tenía fuerzas.

Después de lo que se sintió una eternidad de llanto y angustia, Fran me guio  hasta mi recámara, donde ambas nos metimos entre las cobijas.

-Quieres que te traiga un té, una hierba… ¿algo?

-Has escuchado todo lo que…

-Sí, tranquila, no hables más, lo he escuchado todo.

-Es un imbécil, lo odio, no soporto tener en mi cabeza todo eso que él me dijo...-Volví a sollozar

-Es la situación más difícil que me ha tocado presenciar

-Perdóname, yo no quise involucrarte en esto, debí dejar que te fueras.

-¡No! jamás me hubiese ido, yo estoy aquí para ti, siempre  y ¡ya! no pienses en nada, solo llora si es lo que quieres.- Me dijo, mientras acariciaba mi cabeza.

Ella es la mejor pensé, haciéndole caso, lloré un poco más hasta quedarme dormida.

Continue Reading

You'll Also Like

91.4M 8.5M 65
El pueblo de Wilson es tranquilo, regido por sus costumbres y creencias religiosas muy estrictas, donde Leigh ha crecido, siguiendo cada regla y paut...
1.5M 109K 82
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...
Los 8 elementos By Julit

Science Fiction

282K 19K 29
Weslyn es un país desconocido por la humanidad. Todos los habitantes, a los 12 años tienen que elegir un poder: Agua, Aire, Tierra, Fuego, Plantas...
1M 164K 151
4 volúmenes + 1 extra (+19) Autor: 상승대대 Fui poseído por el villano que muere mientras atormenta al protagonista en la novela Omegaverse. ¡Y eso justo...