Siempre detrás de ti. Naruto...

By Inari_nun

49.1K 3.5K 1.9K

Lo que comienza como una linda historia de amor, termina siendo una auténtica pesadilla. -Su sonrisa solo av... More

Prólogo
Capítulo I: Ino Yamanaka.
Capítulo III: Itachi Uchiha.
Capítulo IV: Peligro.
Capítulo V: La noche más oscura.
Capítulo VI: La fiesta de Shisui.
Capítulo VII: Investigación.
Capítulo VIII: Investigación.
Capítulo IX: Kakashi Hatake.
Capítulo X: El secuestrador de Sakura.
Capítulo XI: Lo que esconden.
Epílogo.
Final alternativo.

Capítulo II: Un mensaje nuevo.

4K 282 152
By Inari_nun

Declaimer: Los personajes de Naruto NO son míos, pertenecen a Kshimoto, yo solo los uso para crear esta historia, sin fines de lucro, con el único objetivo de hacer pasar un buen momento
al lector

Estaba desayunando una tostada con mermelada de fresa y chocolate caliente. Mi madrina Tsunade salió temprano para comenzar con su ronda en el hospital. La televisión estaba encendida pero no le prestaba demasiada atención. Mi celular no dejaba de sonar, ese era el tono para los mensajes de Hinata. Decidí por fin leerlos, me informaba que su novio pasaría por mí en quince minutos, que había planeado una sorpresa para mi. No quise pensar en cual sería la sorpresa, termine mi tostada y bebí el chocolate de un solo trago. ¿En quince minutos?, ¿Por qué no me avisó antes?

Corrí por el pasillo para ir de inmediato a mi habitación. Busque en el armario el vestido que Hinata me regalo por nuestro aniversario de amistad. Un vestido sin mangas, de color rosa claro que me llegaba a tres dedos arriba de la rodilla. Se apegaba lo suficiente para resaltar mi cintura, todo lo demás estaba un poco suelto. Cepille mi cabello, me puse perfume y un poco de maquillaje. Por último limpie mis dientes y metí en mi bolso de mano lo más indispensable. 

Un mensaje de Hinata me avisó que ya debía bajar a la planta de abajo para poder partir. El timbre de la puerta sonó, baje de forma rápida y cuidadosa las escaleras. Tomé las llaves y cerré la puerta detrás de mi. 

Ahí estaba él, mirándome impresionado, seguramente por mi nuevo y repentino corte de cabello. Miré un poco más allá, a su Mini Cooper negro y blanco, las ventanas estaban abajo, Hinata no venía con él. 

—¿Nuevo corte?

Obito Uchiha era dos años mayor, tenía cabello negro y ojos profundos del mismo color. Era muy alto a comparación de mi, un metro con ochenta y dos centímetros. Estudiaba en la universidad, acababa de entrar este semestre, junto al primo de Hinata. De esa forma lo conocimos, Obito solía estar en casa de Hinata para realizar trabajos con Neji. Les juro que fuí yo quien lo vió primero, pero como solía pasar siempre, él no me vió a mi. Estaba más ocupado viendo las caderas perfectas de mi mejor amiga y su gran pecho, además de sus ojos de un peculiar pero lindo color. No culpaba a Hinata, ella era muy inocente, no se dió cuenta de lo que yo sentía, y yo tampoco se lo dije. Podía apostar mi vida a que si se lo hubiera dicho, ella jamás saldría con Obito. Pero no podía ser egoísta, no debía negarles la oportunidad de ser felices. No a mí mejor amiga.

—Si, ¿Te gusta?— me sonroje, enrede un mechón de mi cabello en mi dedo índice. Él se dió cuenta de que le estaba coqueteando.

Desvió la mirada con un ligero rubor, se aclaró la garganta y luego me regaló una hermosa sonrisa— Te miras genial— dijo alzando ambos pulgares.

Sonreí, me sentí mal de mi anterior comportamiento. Hinata no merecía que estuviera hablándole así a su novio, ella nunca haría algo para lastimarme.

—¿Nos vamos?— pregunté con el mismo entusiasmo de siempre. Obito pareció olvidar el incómodo momento porque me devolvió la sonrisa y comenzó a caminar hacía su auto.

Él iba a abrir la puerta del copiloto, pero yo negué y le indique con un gesto de la mano que me iría en el asiento trasero.

—Hinata se irá en ese lugar.

Obito asintió, le dió la vuelta al auto y se subió en el. Ambos nos pusimos los cinturones de seguridad. Obito encendió el auto y avanzó después de ver por el espejo retrovisor. La casa de Hinata quedaba relativamente cerca. El camino fue tranquilo, él me preguntaba algunas cosas y yo respondía como una buena amiga haría. 

Pronto llegamos. Hinata salió agitando su mano, tenía puesta una falda amarilla y una blusa blanca de botones. Su falda estaba por arriba de sus rodillas, casi a mitad de sus muslos. Recordé que fuí yo quien prácticamente la obligó a comprar esa falda, pero era una oferta que mi amiga no podía desperdiciar. Obito bajo del auto para abrirle la puerta, desvíe la mirada a tiempo para evitar ver su afectuoso encuentro. Ambos subieron luego de unos minutos.

Hinata volteó para saludarme y ahogó un grito de impresión— T-tu cabello. 

—Decidí que era tiempo de un cambio.

Mi amiga sonreía de oreja a oreja, como una niña pequeña— Te miras hermosa, ¿Verdad que sí Obito-kun?— ella volteó a verlo, Obito encendió el auto y arrancó.

—Claro, ambas lo son señoritas.

Hinata se rió un poco— Iremos a la plaza comercial del centro— me informo— Necesito una computadora nueva, además, quiero que vayamos juntas a la tienda de música.

No pude evitar gritar junto con ella— ¿Compraremos el disco?— hace unas semanas nuestra banda favorita sacó su nuevo disco, habíamos esperado este momento con ansias.

—Corrección, yo les compraré el disco— dijo Obito— Es una forma de celebrar que en una semana viviré solo. He comprado un nuevo departamento, saluda al nuevo hombre independiente.

—¿Un disco gratis?, Creo que me agrada más este nuevo hombre independiente— Hinata y yo reímos de mi broma, Obito entrecerró los ojos. 

Ellos dos se la pasaban diciéndose cosas lindas. Para no tener que escucharlos me puse los audífonos y busqué cualquier canción en mi celular. Todo se puso sumamente incómodo cuando Obito se detuvo en uno de los semáforos.

—Hinata— ella giró su cabeza para verlo— Abre las piernas para mi cariño.

Me sonroje, ¿Acaso olvidaban que estaba aquí?

—N-no puedo, Sakura está atrás— respondió apenada— No es el lugar.

Por lo menos Hinata seguía conciente de mi presencia.

—Sakura está escuchando música, no nos presta atención. 

Hinata dudo un momento, pero al final accedió. Abrió un poco sus piernas, lo suficiente para que la mano de Obito se deslizara entre ellas. El semáforo se prendió en verde y Obito continuo conduciendo, aún sin sacar su mano del interior de Hinata, ella comenzaba a gemir, usaba su mano izquierda para reprimir sus gemidos y la derecha para frotar uno de sus senos por arriba de la ropa. 

Hinata y yo pensamos que la primera de nosotras en perder la virginidad sería yo, por obvios motivos. Mi mejor amiga era demasiado vergonzosa, no sería capaz de estar con un hombre sin desmayarse, claramente nos equivocamos. Hinata se entregó a su novio después de que salieron por un mes. Lo más triste de todo fue que ella me contó su experiencia por ser su mejor amiga, y yo, tuve que tragarme las lágrimas y fabricar una sonrisa de complicidad. Su secreto estaba a salvo conmigo, porque si Neji se llegaba a enterar, Obito ya no tendría con que satisfacer a Hinata, aunque tal vez podía seguir utilizando sus dedos como en ese momento. Si es que Neji lo dejaba acercarse de nuevo, lo cual dudo. 

Obito saco su mano de la falda de mi amiga y se llevo dos dedos de su mano a la boca, probó solo un poco.

—Eres deliciosa— él acercó sus dedos al rostro sonrojado de Hinata. Ella limpio con su boca sus dedos sin necesidad de que se lo pidiera.

Me hundí más en el asiento trasero. Ahora por culpa de esos dos mis bragas estaban mojadas.

—Obito-kun— Hinata seguía jadeando, tenía la vista clavada en su novio, miró solo unos segundos para abajo y luego desvió la vista sonrojada.

—Después nos ocuparemos de mi problemita, si intentas algo en este momento no podré conducir.

Hinata sonrió y metió su mano en su pequeño bolso para buscar su espejo. Se miró en él solo para comprobar que ya no se veía exitada. Era una teoría muy probable. 

Obito compro el nuevo álbum para nosotras, como prometió. Pero antes de pagar nos hizo prometer que le íbamos ayudar a subir algunas de las últimas cajas de su mudanza a su auto, para llevarlas a su nuevo departamento. Accedimos con tal de que pagara pronto. 

A la case de los padres de Sasuke llegamos en veinte minutos. No había señales de mi antiguo amor así que suspiré aliviada. Obito nos dejo en la sala con su tía Mikoto, quien prácticamente parecía su madre, subió a su habitación para bajar las cajas. La señora de la casa se acercó a nosotras con una sonrisa amigable. 

—Hinata, cariño. Has traído una amiga, es tan linda como tú. 

No pude evitar sonrojarme, que una mujer tan hermosa como ella me hiciera un cumplido me tenía en las nubes. Hizo que sacará a la Sakura segura, la que existía desde la muerte de Ino. 

—Buenas tardes Mikoto-san, ella es mi amiga Sakura Haruno— me presento Hinata. Mikoto extendió su mano, la tomé sin dudar. 

—Mucho gusto.

—El gusto es mío, soy Mikoto Uchiha— la señora Mikoto dejo el plumero con que le estaba quitando el polvo a los muebles antes de que llegáramos en una mesita de la sala— ¿Vienen a ayudar a Obito?

—Si— contesto mi amiga azabache— En eso hemos quedado. 

Mikoto asintió— Tiene unas cajas en el sótano, tal vez puedan ir por ellas— dijo mientras sacaba una llave de su bolsillo y nos la mostraba— Oh lo olvidaba, necesito que alguien me ayude a cocinar. ¿Alguna de ustedes podría? 

Hinata volteó a verme, preguntándome en silencio lo que quería hacer— Yo puedo ir por las cajas— me ofrecí. 

Ambas mujeres asintieron y caminaron hacia la cocina después de entregarme las llaves. Mikoto se volteó antes de cruzar la puerta y desaparecer por completo de mi vista— El sótano está al terminar el pasillo linda.

Caminé por dónde me indico la señora Mikoto. Metí la llave y empuje la puerta con mis brazos, hizo un chillido horrible pero al final se abrió por completo. Encendí la luz, en uno de los rincones había unas cajas de cartón, no tenían nombre así que decidí hurgar un poco para ver si encontraba algo que perteneciera a Obito, así descubriría si eran sus cosas o no. 

En una de las cajas habían raquetas de tenis y letras de canciones incompletas. La ropa de invierno me permitió asegurar que eran las cosas de Obito. Vagamente recordaba haber visto que usaba esa ropa. Mi lado curioso se prendió como una bombilla al tocar el interruptor, busque más entre sus cosas, quería algo que pudiera guardar de recuerdo, solo para poder olvidarlo por completo. Era una extraña manía, cuando intenté olvidar a Sasuke no lo logré hasta que Hinata me dió una de sus playeras. Podía olvidarlo porque sabía que tenía una parte de él en el cajón de mi peinador. Que de una u otra forma estaba cerca. Al final ya no necesite de esa playera, quería intentar lo mismo con Obito.

Al fondo de la caja encontré un objeto duro, hice el intento de sacarlo para ver que era. Me quedé congelada, era un arma, una pistola cargada. Lo sabía por las clases de tiro que tomé con mi madrina Tsunade las vacaciones pasadas. ¿Qué hacía una pistola en las cosas de Obito? 

—¿Qué estás haciendo aquí?

Di un respingo al escuchar la voz de Obito a mis espaldas, ¿Cuando llegó?, Porque ni siquiera lo sentí.

—Obito-kun.

—Te pregunté algo.

Me gire a verlo, aún con la pistola en la mano. Me arrepentí tarde, Obito se dió cuenta del arma— Mikoto-san me pidió que viniera por tus cosas del sótano.

—Deja eso en su lugar— me ordeno. Su voz era fría, muy distinta a la cálida que siempre usaba. 

Unas ganas de salir corriendo me invadieron, pero eso es algo que no haría la nueva y segura Sakura Haruno. Borre cualquier rastro de miedo de mi cara y use una voz igual de fría que la que estaba usando conmigo.

—¿Por qué tienes un arma en casa?, Está cargada, no creo que eso sea un objeto que a Mikoto-san le agrade tener en casa. 

Entrecerró los ojos— La uso para cazar con mis primos en vacaciones.

Mentía, nadie cazaba con una pistola cómo esa. Preferí dejar ese asunto, podía usar su afán por las armas como defecto para olvidarlo. Deje la pistola en la caja de nuevo.

—Bien— respondí con indiferencia— Creo que no necesitas mi ayuda— me puse de pie para salir de ahí, pero las palabras de Obito me detuvieron en seco.

—Nunca necesite tu ayuda.

—¿Entonces por qué me trajiste aquí?

Obito me miró fijamente por lo que bien pudo ser un minuto entero— No me agrada que quieras meterte en mis asuntos.

—Pues no me importa lo que quieras. Te estás comportando como un cretino. 

—No intentes saber más de lo que no puedes comprender— sonrió burlón, algo que jamás mire en él— Podrías salir corriendo, completamente asustada. 

—Nada puede asustarme— era otra mentira, el mirón de ojos carmesí había provocado que me diera miedo dormir en mi propia habitación.

Caminé a la salida, sin darle tiempo para responder. Alcance a Hinata y a la señora Mikoto en la cocina. Obito llegó después, fingiendo ser el novio perfecto de Hinata. Aunque ahora no podía engañarme, él ocultaba algo.

Por la tarde no espere a que se ofrecieran a llevarme, mentí diciendo que mi madrina me llamaba por una urgencia y tome un taxi para ir a casa. 

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Mi casa estaba vacía, como casi todos los días. Cerré con llave la puerta y luego la colgué de su llavero de galleta en un gancho pegado a la pared. Caminé lentamente a mi habitación, algo llamo de inmediato mi atención.

Alguien había estado en mi habitación, ni siquiera se molestó en disimular. Corrí a mi armario, pero no me faltaba nada. Seguí rebuscando, tenía todas mis cosas. Excepto el marco de la foto en que Hinata y yo aparecemos. Me pregunte si acaso sería Obito intentando vengarse, pero descarte la idea, él se quedó en casa con Hinata, y aunque hubiera salido después de mi, no pudo haber llegado antes que yo, desordenado mi habitación y robado mi cuadro, ¿Verdad?

Una idea hizo que mi piel se pusiera de gallina. ¿Y si el ladrón seguía en casa? Tomé una lámpara de mi buró, revise primero mi baño, nada. Me fijé en cada habitación de la casa, obtuve el mismo resultado.  

Me senté en mi cama frustrada, ¿Debía decirle a mi madrina Tsunade?, La iba a preocupar, si es que tenía tiempo de escucharme. Creí que era mejor avisarle a Hinata, y cuando estuve a punto de tomar mi celular de la bolsa de mano, este sonó avisando de un nuevo mensaje.

Hola.

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Dejen sus votos y comentarios ❤️

Hasta la próxima actualización 💕

Continue Reading

You'll Also Like

4.7K 436 29
Fanfic de Nanatsu no taizai protagonizada por Derieri y Monspeet. - Descripción general: Han pasado casi 19 años después de la derrota del rey demon...
1.5K 105 13
Pensamientos dedicados a un destinatario inocente y carente del conocimiento de estas palabras susurradas tan suave e incomprensiblemente. Versos cuy...
592 218 16
˗ˏˋ ACC RATES ˎˊ˗ ¿Buscas que más personas descubran tu cuenta? Esta es una dinámica donde yo calificaré tu hermosa acc por diversión! No olvides seg...
595K 94K 37
Park Jimin, un padre soltero. Por culpa de una estafa termina viviendo con un completo extraño. Min Yoongi, un hombre solitario que guarda un triste...