Jade's POV
- Ven - Tori interrumpió nuestro beso y tiró de mí para ponernos de pie.
- ¿No íbamos a divertirnos? - Dije con pesadez.
- Por ahora vamos a divertirnos todos juntos -
- Que aburrida - Me quejé.
André y mi suegro se habían retirado ya del despacho, así que por mucho que lo lamentara, Tori tenía razón, había que volver antes de que notaran extraña nuestra ausencia.
Soltó mi mano cuando nos aproximábamos a la playa, donde todos jugaban en el agua.
André se acercaba unos metros más atrás.
- Me debes una - Dijo el chico a mi novia cuando nos alcanzó. - No es bonito pasar por una charla con tu suegro... Menos aun cuando ni siquiera es tu suegro realmente -
- Que vergüenza - Dijo ella cubriéndose la cara con una sonrisa.
- Y eso que tú no estabas ahí - Respondió él.
Conforme nos acercábamos al agua, escuchábamos las risas de los demás que se divertían entre las olas, jugando una especie de juego de luchas entre ellos.
Robbie cargaba a Cat en sus hombros y Valery estaba sobre los de Beck, ambas chicas peleaban por derribarse hasta que finalmente Valery ganó.
- Eso fue muy grosero - Gritó Cat cuando salió del agua. - Hiciste que cayéramos al agua -
- De eso se trata el juego tontita - Le explicó la rubia riendo.
- ¿Que es lo que pretendes decirme? - Dijo cat ofendida.
Rodé los ojos negando mientras Tori, André y yo dejábamos nuestras cosas junto a las de los demás y nos preparábamos para entrar al agua.
- ¿Por qué no quieres decirle a tu papá lo de Beck? - Preguntó André y yo no pude evitar mirarlo al instante.
- Tengo que aclarar ese asunto por mi cuenta... - Dijo ella mirando a los demás en la distancia.
Beck tonteaba con Valery... O al revés, no lo sé, pero se veían muy entretenidos.
- De acuerdo... ¿Alguna trajo protector solar? - Preguntó André tratando de cambiar el tema.
Tori tenía, pero estaba muy concentrada aun mirando a nuestros amigos con una expresión extraña.
- Vega... - Llamé su atención lanzándole lo único que tenía a la mano.
Me miró con intriga y supuse que algo extraño estaba pasando por su mente. ¿Tan pronto íbamos a comenzar los problemas de nuevo?
- ¿Por qué me lanzas tu ropa? - Tomó la prenda que antes cubría mi traje de baño y lo acomodó junto a las demás cosas.
- Aparentemente es la única forma en la que reaccionan tus neuronas - Me miró al instante.
- ¿Perdón? - Dijo ofendida.
¡Dios! Esta niña es más lenta...
Hice una señal discreta hacia André para que Tori entendiera mi comportamiento.
- Oigan... Yo sólo quiero protección solar - Interrumpió el pobre chico sintiendo la tensión.
- Eres moreno, no tienes mucho que perder - Dije para no dejar la costumbre de molestar a los demás.
- Oye... Eso fue racista - Se quejó el chico - Los morenos también tenemos derecho a proteger nuestra piel de los rayos ultravioleta -
Tori rodó los ojos con una sonrisa y le entregó por fin el aclamado protector solar.
- Los veo en el agua - Dije encaminándome a las olas.
- Yo voy igual - Me siguió Tori de cerca hasta que sus pasos igualaron los míos. La miré de reojo y ella me sonrió en respuesta.
Odio aceptar que me hacía feliz.
- No vayan sin mí - Dijo André cuando llegábamos a la orilla.
Los chicos seguían entretenidos en su juego, nos prestaron atención durante algunos segundos sólo para invitarnos a entrar al agua y luego continuaron en lo suyo. André se apresuró a entrar, mientras Tori y yo nos quedamos algún tiempo disfrutando el agua que llegaba a nuestros pies.
- Siempre he amado esta playa - Dijo ella mirándome con una sonrisa.
Era tan adorable.
- Siempre he amado las playas en general - Respondí yo mientras avanzaba y el agua nos cubría cada vez más.
- Está un poco fría - Dijo ella cuando el agua cubría la mitad de su abdomen.
- Nada que no pueda arreglarse... - De pronto una idea llegó a mi mente.
- ¿Cómo? - Preguntó ella, pero antes de que pudiera hacer algo la levanté en brazos y nos hice zambullirnos cuando una ola suficientemente grande nos envolvió.
Dimos un par de vueltas dentro del agua a causa de las corrientes, pero logramos salir de nuevo a la superficie, no tuve el corazón para ser tan cruel y descuidar por completo a Tori. Me aseguré de que saliera junto conmigo.
- ¿¡Estás loca!? - Me gritó en cuanto recuperó el equilibrio.
Yo no podía parar de reír mientras ella se quitaba el cabello empapado del rostro.
- ¡Eres una idiota! - Me salpicó agua con las manos.
- La peor, guapa - Le sonreí con un guiño.
- ¡Holis! - Surgió Cat de la nada con unos googlees.
Grité un poco.
- ¿Qué cuentan? - Preguntó ella como si nada.
- ¡Nos diste un paro cardíaco! ¿De dónde diablos saliste? - Dije tocando mi corazón para asegurarme que seguía latiendo.
- Estaba visitando a los peces - Respondió ella con felicidad.
- Claro... - Nada me sorprendía respecto a esta chica.
- Tori vengan a jugar con nosotros - Cat tomó la mano de mi novia y la arrastró hasta donde estaban los demás. - Es muy divertido, el juego consiste en subirte a los hombros de alguien y que Valery te lance al agua -
- ¿No consistía en luchar hasta que una de las dos cayera? - Preguntó ella.
- ¡Ohh Claro! - Dijo Cat comprendiendo por fin de qué trataba el juego.
- Entonces manos a la obra - Dijo André - Tori contra Jade -
- ¿A caso quieres que se maten? - Dijo Robbie con preocupación.
- A besos... - Dijo Valery "Tosiendo" para distorsionar la frase y que nadie se diera cuenta.
- Me encargaré de que esa tos se vuelva crónica - La amenacé discretamente, pero le dio igual y sólo se burló.
- Yo estoy de acuerdo... Digo, si es que Jade no tiene problema con perder - Dijo Tori alzando una ceja desafiante.
- Dijiste... ¿Perder? - Me acerqué intimidante, ella asintió cruzando los brazos - ¿Contra ti? - Me burlé.
- Muy bien - Aplaudió André - Entonces... Jade vas conmigo yo te cargo y... Tori con Beck -
- No - Respondimos los tres al mismo tiempo.
Un segundo... ¿Beck se negó?
- Mejor tú y Jade, Robbie y yo - Propuso Tori.
- ¿Tú y Robbie? - Me burlé un poco más - Por favor, el flacucho apenas puede con el peso de su propia cabeza -
- Menos charla y más acción - Dijo Tori saltando a la espalda de Robbie hasta subir a sus hombros.
Hice lo mismo y en cuestión de segundos estábamos listas.
- Hagan sus apuestas chicas - Dijo Beck.
- Yo creo que gana Jade - Dijo Cat con emoción, Valery se burló y le susurró algo a la pelirroja.
- Yo apuesto por Tori - Dijo mi amiga y dolor de cabeza.
- ¡Tú puedes Tori! - La animó Trina.
- Perdón si te lastimo - Le dije a mi novia - Y con eso me refiero a que no me importa - Sonreí.
Espero que entendiera que la segunda línea era para distraer al enemigo... O bien, a nuestros amigos.
- Que linda - Dijo ella con sarcasmo.
- ¡Ya comiencen! - Gritó Valery - Quiero ver sangre -
Los chicos contaron hasta tres y la "pelea" comenzó. Al principio estaba insegura sobre utilizar toda mi capacidad pues pensaba que sería un tanto injusto y terminaría por ganar demasiado pronto, pero a medida que avanzábamos me di cuenta que Tori no estaba teniendo piedad alguna.
¡Eran 55 kilos de pura maldad!
Se aferraba con fuerza a mis brazos cada que yo bajaba un poco la guardia, por supuesto que no me quedaba atrás, pero me estaba sorprendiendo tanta rudeza.
Los demás gritaban y aplaudían, cada uno apoyaba a su favorita, pero la que más se escuchaba era Trina gritando como loca a Tori que demostrara quien manda.
Después de unos cuantos manotazos y jadeos, no sé muy bien cómo, Tori logró hacerme perder el equilibrio, provocando que André y yo cayéramos de espalda al agua.
Cuando salí a la superficie de vuelta Tori no sólo estaba feliz de haber ganado, ella iba a disfrutar tanto como le fuera posible humillarme por la derrota.
- ¡En tu cara perdedora! - Me gritó desde los hombros de Robbie cuando aún ni terminaba de abrir los ojos - ¿Quién ganó? -
- Infantil... - Rodé los ojos negando.
- Tal vez... Pero yo gané - Siguió burlándose - Gracias, gracias, no se molesten - Dijo calmando al "público".
Sólo era un estúpido juego, pero debo admitir que tal vez... Sólo tal vez... La dejaría ganar de nuevo para verla tan feliz.
- ¿Qué están haciendo? - El papá de Tori surgió del agua frente a Robbie, justo como Cat unos momentos atrás.
Robbie gritó como niñita y lanzó a Tori antes de desaparecer entre el agua. Yo me encargué de buscarla y ayudarla a salir para que las olas no la arrastraran a la orilla.
- ¡Papá! - Reclamó Trina - ¿Qué haces aquí y por qué apareces de esa manera? -
- Oh bueno yo... Ya saben, quería... - Nos miró a todos buscando una excusa - Quería nadar un poco... El día es perfecto -
- ¿Estás bien? - Pregunté a mi aturdida novia. Sólo era divertido cuando yo la hacía caer.
- Si... - Dijo ella una vez más apartando su cabello del rostro - ¡Papá! ¿! ¿¡Qué haces aquí y por qué apareces de esa manera!? - Cuestionó sin saber que su hermana ya había hecho la misma pregunta.
Esos genes Vega...
- ¡Vine a nadar! - Se defendió de nuevo.
- Oigan... - Interrumpió Beck - ¿Y Robbie? -
Todos miramos a nuestro alrededor en busca del raro, pero sólo veíamos agua salada. Comenzamos a llamarlo, cosa que era muy inútil, ya que, si estaba bajo el agua aún, no iba a escuchar.
- Allá está - Señaló Cat hacia la orilla mientras una ola lo depositaba en la arena.
- Vaya... Parece un pescado fuera del agua - Dijo Valery mientras todos nos encaminábamos para asegurarnos de que seguía vivo.
- ¡Robbie! - Cat fue la primera en llegar e intentar voltearlo mientras Robbie sólo se quejaba boca abajo - Para estar tan flacucho pesas un montón - Se quejó la pelirroja.
Beck le ayudó a recostarlo sobre su espalda.
- Veo la luz - Dijo Robbie entre abriendo los ojos.
- Solo es el sol - Tori se arrodilló cerca de él para proporcionarle algo de sombra.
- Lamento haberte asustado así - Se disculpó mi suegro con ambos brazos en la cintura. - Yo debería... Ir a ver a tu abuela -
- No hace falta - Dijo Trina señalando a la mujer mayor que venía hacia nosotros con un traje de baño muy parecido al de Trina, pero en color azul.
- Mamá... ¿Qué haces? - El papá de Tori corrió a ayudarla a caminar en la arena. La mamá de Tori cargaba cosas de playa un poco más atrás.
- ¿También te vas a burlar de mi abuela y su traje de baño? - Me preguntó Trina.
- Oh no... A ella le queda genial - Dije con una pequeña sonrisa para fastidiar a Trina.
- ¿Que pasó aquí? - Preguntó Ángeles cuando vio a Robbie aún tirado en la arena.
- Creo que las olas le dieron la bienvenida - Dijo Beck ayudando al chico a ponerse de pie.
- Eso y que lo estafaron cuando le vendieron ese pato inflable - Respondió André y yo me burlé de su comentario.
- Lo que pasó es que tu hijo emergió de las profundidades de la nada... - Explicó Tori quitándole la arena de la espalda y el cabello.
- Lamento haberte lanzado al agua de esa manera - Se disculpó Robbie.
- No pasa nada porque... ¡Ganamos! - Volvió a celebrar dando pequeños saltitos junto con Robbie.
- Sigue con eso y esta vez los aventaré al mar profundo para que las olas no puedan regresarlos - Amenacé.
- Que miedo - Dijo Tori con sarcasmo.
Los papás de Tori terminaron de instalar las cosas de playa entre lo que se incluía un asador para preparar comida.
Mientras tanto, los chicos planearon un juego improvisado de voleibol para distraernos en lo que llegaba la hora de comer.
A pesar de sólo tener 3 personas por equipo nos las arreglamos para que fuera suficientemente divertido. Por suerte, esta vez no tenía que competir con Tori ya que estábamos junto con André.
Cat prefirió hacer castillos de arena y Trina se negó a Jugar y se tiró al sol para "broncear" se piel perfecta y que se viera "aún más perfecta".
Yo le dije que era una ridícula y que iba a hacer que el sol se escondiera si seguía tirada mostrándole su cara.
A mitad del juego, en un saque mal calculado, el idiota de Beck golpeó a Tori con el balón directamente en el rostro.
- ¡Ouch! - Dijeron todos al escuchar el balón impactar en Tori quien de inmediato se cubrió la cara con las manos y cayó de rodillas al suelo.
- ¡Oh no! ¡Perdón Tori! - Dijo Beck corriendo hacia ella.
Para ese momento yo ya me había arrodillado a su lado y me había percatado de que su nariz sangraba. El pánico me invadió al igual que la furia, así que no soporté que Beck se acercara.
- ¿Qué te pasa idiota? - Lo alejé en cuando intentó acercar su mano. - ¡Mira lo que hiciste! ¿Eres imbécil o qué? - Lo empujé sin pensar.
- ¡Fue un accidente! - Se acomodó el cabello con frustración.
- ¡Está sangrando estúpido! - Lo volví a empujar.
- ¡Cálmate! - Me gritó intentando sujetar mis manos, lo cual me molestó aún más. - Ahora si te importa ¿No? -
- ¡No me toques! - Comenzamos a forcejear.
- Jade, jade, jade - Valery intervino sujetando mis hombros - Cálmate por favor, estás haciendo una escena - Dijo entre dientes.
- ¡Estás loca! - Dijo Beck retrocediendo. - Tori... Fue un accidente, lo sabes, yo no te haría daño... - Se volvió a acercar a mi novia, quien ya se había incorporado de nuevo y su papá revisaba si el golpe había pasado a mayores.
Intenté soltarme del agarre de Valery, pero me sujetó más fuerte.
- Si quieres seguir manteniendo lo suyo en bajo perfil será mejor que aprendas a controlar esos impulsos - Me susurró al oído - En lugar de preocuparte tanto por insultar a Beck, preocúpate por tu novia que está sangrando -
- Como si Beck fuera a dejar de estar interesado en Tori para interesarse en ti de un día para otro... - Dije sin pensar.
Supe que había sido un error cuando Valery me miró incrédula y me soltó casi con un empujón.
¡Bravo Jade West!
- Espera, no quise... - Intenté disculparme.
- Eres una idiota... Mejor ve con tu novia perfecta de la que todos están enamorados -
Suspiré profundamente y seguí a Robbie quien acompañaba a Tori y le indicaba el camino pues tenía que mantener la cabeza en ángulo elevado para detener la hemorragia.
Una vez en la casa, Tori se recostó en el sofá y mandó a Robbie a buscar el botiquín de primeros auxilios al segundo piso.
- ¿Te dolió mucho? ¿Te sientes mareada? ¿Tienes sueño? ¿Estas... -
- Estoy bien Jade... - Me detuvo tomando mi mano con una pequeña sonrisa. - Nunca imaginé verte tan preocupada por mí -
- Nunca imaginé verte sangrar - Dije con un poco de terror.
- Ya se detuvo - Dijo ella cerrando los ojos mientras sujetaba el puente en su nariz con su mano libre.
- ¿Cuantos dedos ves? - Puse mi mano frete a ella.
- Jade... -
- ¿¡Cuantos son!? - Insistí.
- Son 4 -
- Si que estás mal... ¡Son 6! - Bromeé y ella rio un poco.
- Idiota... - Dijo con cariño, lo cual me trajo de vuelta la escena recién vivida con Valery y la culpa volvió a mí.
- Creo que lo soy de verdad - Dije con seriedad.
- ¿Que ocurrió? - Preguntó con preocupación.
- Dije algo que no debía... Creo que arruiné la única amistad sincera que tenía en mucho tiempo -
- Aquí está el botiquín - La voz de Robbie bajando por las escaleras nos interrumpió e hizo que soltáramos nuestras manos en el momento.
- Gracias Robbie, puedes dejarlo ahí y regresar con los chicos - Dijo Tori - Yo estaré bien, Jade me ayudará -
- Jade... ¿Ayudarte? - Dijo sorprendido - ¿A qué? ¿A morir más pronto? -
- Tomé un curso de primeros auxilios... - Inventé - Sé cómo manejar esta situación -
- Oh... Siendo así... ¿Crees que podrías revisar mi oído? Creo que algo se metió ahí cuando la ola me... -
- No - Respondí - Adiós -
- De acuerdo... Que gruñona - Susurró caminando hacia la puerta.
- ¿Qué dijiste ahora Jade? - Preguntó Tori apenas desapareció Robbie.
- Una estupidez - Tomé del botiquín lo necesario - Como siempre... - Sujeté su barbilla para limpiar el hilo de sangre que había quedado.
- ¿De verdad sabes de esto? -
- Cualquiera puede limpiar un poco de sangre - Comencé a pasar el algodón con alcohol - No te muevas -
- ¿Y así te atreves a pensar que eres una estúpida? - Me miró con ternura.
- Yo nunca dije eso... Es obvio que soy increíble, sólo que a veces no mido lo estúpidamente hirientes que pueden ser mis comentarios - Casi estaba listo - En especial cuando estoy molesta, siempre termina pagando la primera persona que se acerca... En este caso Valery -
- No te voy a felicitar por la escena que armaste frente a mi familia... No es la mejor manera de ser "discreta" y era innecesaria tanta violencia, pero... -
- ¿Pero? - Dejé de lado el algodón usado.
- Fue muy lindo verte así por mí - Alzó los hombros.
- Te vi desplomarte al suelo y sangrar... ¿Cómo querías que estuviera? - Ella sonrió y volvió a tomar mi mano.
- Bueno y... ¿Vas a contarme lo que pasó con Valery? - Suspiré.
Si algo me costaba en la vida era aceptar mis errores.
Pero tenía que empezar a confiar en la chica frente a mí. ¿En quién más si no?
Con algo de trabajo repetí de nuevo las palabras dichas a la rubia. Tori me dijo que, en efecto, había estado mal, pero que tampoco debía ahogarme en un vaso de agua. Y mencionó un par de cosas más al estilo "niña buena que todos aman".
- ¿Disgustarme sinceramente? - Pregunté confundida.
- Jade... DIS-CUL-PAR-TE sinceramente - Corrigió ella y yo la miré pretendiendo no entender, realmente me gustaba molestarla a propósito.
Me gustaba cuando soltaba aire con frustración y luego intentaba continuar con tranquilidad, aunque por dentro la consumiera la desesperación. Era lindo ver su capacidad de controlar sus impulsos.
- Repite después de mí... - Dijo y yo asentí. - DISCUL... -
- Discul... -
- PARSE... -
- Parse... -
- Muy bien... Ahora todo junto -
- Disgustarse - Asentí.
Me golpeó con un cojín.
- En la vida te vuelvo a ayudar - Se levantó para irse.
- No, no, no... Ya perdón - Tomé su brazo - Me DISCULPO Vega... Tú tienes razón, es exactamente lo que haré - Dije hablando totalmente en serio.
- ¿Quién eres y qué hiciste con Jade? - Preguntó ella sorprendida de mi reacción.
- ¿Qué hiciste tú con Jade? - Respondí yo.
- Vamos afuera antes de que piensen que morí o.... que me mataste - Tiró de mi mano hacia la puerta.
La seguí en silencio.
Cuando avistamos a los demás, cada uno se concentraba en diferentes actividades; André y Robbie ayudaban con la comida y Beck hablaba con Valery.
- ¿Todo bien? - Preguntó el papá de Tori apenas nos vio llegar.
- Si papá... Estoy bien, Jade me ayudó - Dijo dándome una media sonrisa que no pude negarme a corresponder.
Los demás chicos también se acercaron a rodearnos para saber el estado de mi novia. Beck se mantenía con los brazos cruzados y la vista baja.
Valery me miró de reojo, pero antes de que pudiera si quiera hacerle un gesto apartó la mirada.
- Nos preocupaste - Dijo Robbie abrazando a la chica a mi lado.
- No fue nada - Respondió Tori devolviendo el abrazo.
Beck se aclaró ligeramente la garganta antes de hablar. Por su postura y expresiones se perfectamente que estaba incómodo.
- Tori... Lo siento - Se dirigió a ella aún con los brazos cruzados, esquivando la propia mirada de mi novia - Sabes que no era mi intención -
- Los accidentes pasan... No te preocupes - Respondió ella de igual manera, tratando de apresurar el momento y que acabara cuanto antes - Papá... ¿Ya está la comida? - Se encaminó hacia él, dejándonos de lado.
Era obvio que algo raro estaba sucediendo con esos dos, algo de lo cual yo no estaba enterada.
El resto del día transcurrió sin mayor problema.
Excepto por el que tenía con Valery, claro.
Un tiempo después de comer, los chicos volvieron a jugar en el agua. Yo decidí quedarme en la arena a observarlos simplemente.
Pero más que nada observaba a Tori buscar caracoles y cosas raras en la orilla junto con Cat. A propósito; Cat usaba una cubeta en la cabeza como sombrero.
Era increíble como en menos de dos semanas había pasado de evitar toparme a Tori en los pasillos a estar observándola sin parar durante al menos una hora.
- Mira Jade, encontré esta piedra en forma de pan tostado - Dijo Cat con una enorme felicidad cuando llegó a mi lado.
Lo increíble era que la piedra realmente tenía esa forma.
- Deberías buscar una con forma de objeto punzo cortante, eso sí que sería estupendo - Le dije con una sonrisa de satisfacción al imaginarlo.
- Trataré - Dijo ella con determinación levantándose de su lugar.
- ¿Objeto punzo cortante? - Dijo Tori llegando a mi lado, mirando a la pelirroja volver a la búsqueda.
- Sería un sueño - Alcé los hombros. - No deberían vernos tanto tiempo juntas, no vayan a pensar que me agradas - Bromeé y ella rio.
- O que somos amigas... - Siguió.
- ¡Jamás! - Respondí ofendida.
- Te traje esto - Estiró su puño cerrado hacia mí y yo dudé con desconfianza. - Pon tu mano - Insistió.
- Te juro que si es un molusco o algo baboso y asqueroso no te vuelvo a hablar en la vida Victoria - La amenacé y ella se rio.
- ¡Confía! -
Terminé por aceptar, estiré la mano y ella depositó un objeto sólido encima. Era un pequeño caparazón de caracol muy bonito, a decir verdad.
- Es... Muy lindo - Sonreí admirándolo de cerca. - Y también es un obsequio muy raro -
- Estamos en la playa y es nuestro primer viaje... ¿Qué puede ser más representativo? -
- Buen punto... - La miré con fascinación y ella me devolvió la mirada, era uno de esos momentos de felicidad en los que en realidad no sabes por qué eres feliz, pero lo eres.
- Comienza a hacer un poco de frío... - Dijo saliendo del pequeño trance en el que estábamos - Le diré a los chicos que entremos -
- Si... Seguro te harán caso - Dije con sarcasmo mirando a nuestros amigos muy divertidos.
- Seguro que encuentran algo con que entretenerse adentro - Se levantó de la arena.
- ¿Ah sí? - Alcé una ceja - ¿Cómo qué? -
- Un par de cosas se nos ocurrirán... - Alzó los hombros y me dio la espalda caminando hacia la orilla.
- ¡No prometas algo que no vas a cumplir! - Le dije con tono elevado y ella sólo rio mientras los demás se aproximaban a su encuentro.
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Unas horas después, nos encontrábamos en la estancia del segundo piso viendo una película. Todo habría estado perfecto de no ser por qué;
En primera, no me podía sentar al lado de Tori ya que eso habría levantado sospechas, Así que me pasé la película odiando a Robbie quien se asustaba cada dos minutos y se abrazaba a mi novia.
Y en segunda, Valery no me hablaba.
Ni un gesto.
Durante la película intercambiaba algunas miradas con Tori, ella intentaba decirme que tratara de arreglar las cosas con Valery cada que la rubia se levantaba al baño o por palomitas, pero a juzgar por su actitud, ella no tenía intención alguna de hablar conmigo.
Yo no iba a rogarle.
Los créditos aparecieron en la pantalla y Trina encendió las luces mientras todos comenzaban a estirarse con pesadez.
- Que buen final - Dijo André
- No lo entendí - Contestó Cat con gesto confundido abrazando un peluche de jirafa.
- El asesino era un fantasma... - Le explicó Valery - Por eso no podían derrotarlo -
- Ohh - Expresó Cat - Que macabro - Se abrazó más a su peluche.
De nuevo intenté hacer contacto visual con Valery.
De nuevo no tuve éxito en ello.
Beck se mantenía en silencio y además estaba sentado al lado de la rubia que se negaba a perdonarme. Podría apostar mi tobillo izquierdo a que algo raro había pasado entre él y Tori. Y ella no me había contado nada.
- Robbie... - Habló la chica en cuestión - No respiro - se quejó pues el chico seguía abrazado a ella como una niñita asustada.
- Lo siento... - Se separó un poco de Tori - ¿Alguien puede dormir conmigo hoy? - Pidió.
- Eres una gallina - Me burlé - Ni siquiera era una verdadera película de terror -
- Además... - Habló Trina - Ya convives con Jade a diario... Eso si es terror -
- Alguien está obsesionada conmigo - Miré mis uñas con orgullo.
- Por favor... La única obsesionada aquí eres tú - Respondió con burla - ¿Quieres que diga con quién? - Dijo con los brazos cruzados sobre el pecho.
No solo yo la miré con intención de hacerla desaparecer, Tori hizo más o menos lo mismo y; por más que me hubiera gustado responderle, nada inteligente vino a mi cabeza.
- Trina... ¿No tienes una mascarilla que aplicarte? - Preguntó Tori.
- De hecho... - Miró su reloj - No, es en media hora - Sonrió con burla a su hermana.
- Ojalá sea de ácido... Tal vez eso te arreglé la cara - Contesté.
- Chicos... - Interrumpió el papá de Tori - Ya está la cena -
Y esas tres palabras bastaron para que de pronto ya no quedara nadie en la estancia.
Bueno... Nadie excepto Robbie que aún tenía miedo, Tori que espero se hubiera quedado para hablar conmigo y yo que obviamente me había quedado por esa razón.
Odiaba un poco lo cursi que podía estarme volviendo.
- Robbie, ¿Cierto? - Preguntó mi suegro al chico del afro - ¿Te gustan los autos? -
- Seguro... - Respondió él con duda.
- Excelente, te mostraré algo - Le puso una mano sobre el hombro y lo condujo en dirección opuesta al comedor. - Iremos en un segundo chicas -
Tori y yo nos miramos por segundos, intuyendo el propósito verdadero de su padre al llevarse a Robbie.
- Un poco más y adivinará - Dije yo con burla.
- Espero que no sea muy rudo con él - Respondió ella.
- Aún tenemos a Beck como conejillo de indias... Podemos estar tranquilas un poco más - Su expresión al mencionar al chico fue un tanto incómoda - Aunque... Con eso de que ni siquiera se dirigen la palabra, no creo que sea muy convincente... - quise indagar en a situación, pero ella evitó mi mirada.
- Estoy segura que mi padre encontrará la forma de relacionarnos cuando descarte a Robbie... - Dijo ella alzando los hombros, sin darle demasiada importancia - ¿Vamos a cenar? De verdad tengo hambre... - Se adelantó hacia el comedor.
Tori Vega no sabía disimular.
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No... No desparecí.
Y no... Tampoco abandoné la historia, aunque estoy consciente de que ha pasado mucho tiempo. Hecho que odio pues sé lo que sucede cuando pasa tanto tiempo, se pierde el hilo de la historia.
Pero bueno... En fin, espero que sigan disfrutando de la historia y del capítulo.
La buena noticia es que ya estoy de vacaciones, deseo poder concentrarme en esto y traerles cosas nuevas.
Espero que se encuentren de lo mejor, nos leemos pronto.
- Luna Rey