| COMPLETA ✔ | Aunque tú no...

By Carlotarogu

1.5M 101K 22.1K

| COMPLETA ✔ | A Jade no le hacen falta más que unos minutos para corroborar que no soporta a Kai Wal... More

Disclaimer
♪ Lista de reproducción ♬
Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
⚠️⚠️⚠️ANUNCIO IMPORTANTE ⚠️⚠️⚠️
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23 (contenido +18)
Capítulo 24 (contenido +18)
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28 (contenido +18)
Capítulo 29
Capítulo 30 (contenido +18)
Capítulo 31 (contenido +18)
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34 (contenido +18)
Capítulo 35
Parte 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Grupo en Facebook
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
CAPÍTULO 45 - FINAL
Agradecimientos
¡SORPRESA! - AUNQUE TÚ NO LO ENTIENDAS
HOLA HOLA HOLAAAAAA

Capítulo 16

28.3K 2K 451
By Carlotarogu


Buuuu 👻

Recuerda: tienes la opción de tener tu propio capítulo dedicado. 

¿Qué hay que hacer? ¡Es bien sencillo! 

¡Comenta, comenta, comenta! Escogeré el comentario que más me guste y esa será la persona a la que le dedique el siguiente cap. 🔥

Si no comentas, no te deseo nada malo.... pero ojalá Netflix estrene serie nueva justo cuando tienes exámenes 💘😊


_________________________


KAI



Aunque todavía es pronto sé que hay tienda abiertas, así que cojo el coche y voy a la ferretería a por un par de cosas que me hacen falta. Cuando ya lo tengo todo, es más de lo que creía, así que tengo que colocarlo todo muy bien en el coche para que me quepa todo lo que voy a comprar en la tienda de Ross.

—Hey —saludo al entrar.

—Hola, hijo, ¿qué tal todo? —me saluda Ross desde detrás de su tupida y blanca barba.

—Como siempre.

—Algún día llegará lo bueno, muchacho... —tuerce su cara en un gesto de resignación.

—Supongo —me encojo de hombros —. Oye, necesito un par de cosas urgentemente.

—Tú siempre lo necesitas todo urgentemente —responde carcajeando y mientras se deja caer en el taburete de detrás del mostrador.

—Necesito un colchón grande, como de cama de matrimonio —digo gesticulando. Pronunciar esa palabra hace que me suden las manos.

—¿Estás renovando el cuarto? —inquiere extrañado.

—Algo así... —le doy largas. No quiero dar explicaciones de esto a nadie —También necesito una colcha, sábanas, almohadas y en fin, un montón de cosas más que tienes apuntadas aquí. Los colores tienen que ser exactamente estos, ¿vale? —le paso una lista donde he apuntado todo lo que necesito para dejar la cabaña como nueva.

—¿Para cuando lo necesitas? —pregunta poniéndose unas gafas de culo de botella para mirar el papel.

—Para ahora —contesto como si fuera evidente.

—Pero chico... eso no va a ser posible. Son muchas cosas y no sé cómo conseguir muchas de ellas. Todo esto vale mucho dinero, no sé si... —saco la mochila y vacío encima de la mesa todo el dinero que he traído. Venía preparado.

—Kai —susurra abriendo los ojos y la boca —, esto es muchísimo dinero...

—Con eso llega de sobra para lo que te he pedido. El resto te lo puedes quedar.

—No puedo quedármelo... —asegura negando con la cabeza y devolviendo el dinero a la mochila. Sin embargo, yo pongo la mano delante y lo paro.

—Ross..., ¿te apetece discutir conmigo? —levanto una ceja, burlón.

—Te conozco lo suficiente como para saber que no me conviene discutir contigo —me dice negando efusivamente con la cabeza —, así que si eso es lo que quieres, lo tendrás. Dame unas horas al menos —pide casi suplicando.

—Claro, ¿que hora es? —pregunto a la vez que miro mi reloj —Vale, son las siete, ¿a las once lo tendrás todo? —suena más como una afirmación que como una pregunta.

—Creo que si me doy mucha prisa... sí —habla no muy convencido.

—Perfecto, pues a esa hora vengo y me lo llevo todo con tu camioneta, descargo y te la vuelvo a traer.

—Sea lo que sea lo que vayas a hacer con todo esto —mira el papel que tiene entre las manos y alza ambas cejas —debe de ser muy importante, así que pondré de mi parte para que lo tengas todo listo a las once.

—Guay —me acerco al mostrador y me agacho hasta él para revolverle el pelo. No es un gesto normal en mí, así que se sorprende y sonríe.

—Hasta luego, hijo —me dice saludándome con la cabeza. Yo le digo adiós con la mano y salgo de la tienda.

Para ahorrar tiempo, voy a la cabaña y empiezo a arreglar la madera que está rota, poniendo listones nuevos. Si un humano tuviera que hacer algo así, tardaría días. En cambio, nuestra fuerza y resistencia hace que hagamos tareas como esta en muy poco tiempo, así que sé que hoy terminaré de arreglarla y quedará como nueva.

Es la primera vez que tengo ilusión por algo y, aunque la sensación es rara, siento que algo se despierta dentro de mí.

Cuando los tablones de madera ya están cambiados y no hay ni un solo agujero en el techo ni en las paredes, cambio las bombillas, me aseguro de que funciona el agua corriente, limpio muy bien los armarios y los muebles y saco el sofá por la puerta de entrada para llevarlo al vertedero cuando tenga la camioneta de Ross.


JADE

No me puedo creer que se haya vuelto a ir. Sé que estuvo aquí anoche porque sentí que se metía en la cama, pero no lo he visto salir esta mañana así que debe tener algún tipo de superpoder para escabullirse sin que nadie lo vea. Me gustaría haber podido cantarle las cuarenta, y decirle que las cosas no se hacen así, que no puede obligarme a estar aquí permanentemente hasta que a él le de la gana, y encima sola.

Al entrar al baño veo que hay ropa sucia en el cesto. Está manchada y es de Kai. Cojo una camiseta y la huelo. Huele mucho a él y por un momento imagino cómo sería poder abrazarlo siempre que quisiera y que siempre estuviera de buen humor, pero rápidamente me quito esa idea de la cabeza, porque es evidente que Kai y el buen humor nunca han ido de la mano.

Abro el grifo y espero a que el agua salga un poco caliente mientras me pongo los tejanos y un jersey. Después me lavo la cara y los dientes y me intento arreglar un poco el pelo con los dedos. Rebusco un poco en los cajones hasta comprobar que hay una llave de repuesto, la cojo y me la meto en el bolsillo después de asegurarme de que entra en la cerradura y gira.

Pasa un rato hasta que me decido a salir al pasillo e ir a por Main para pedirle que me acompañe a desayunar. Sé donde está la cocina, pero aún no conozco a casi nadie por aquí y me parece un poco arriesgado vagar sola por los pasillos.

Recuerdo que me dijo que su habitación era la de al lado de la mía, así que voy hacia allí.

Me detengo delante de la puerta y me lo pienso dos veces antes de llamar.

Mis nudillos golpean la puerta durante un rato, hasta que Main dice:

—¿Quéeeee? —su voz suena adormilada, así que probablemente lo estuviera hasta que la he despertado —A ver quién coño es ahora... —escucho que dice bajito.

—Hola —la saludo poniendo cara de circunstancia.

—Tía, ¿cómo se ocurre despertarme a esta hora? —ruge mirando el reloj de su mesita —Son sólo las nueve de la mañana, acabo de llegar hace un rato —bosteza mientras lo dice y yo me contengo la risa —. Y sí, al final salí.

—Venía a ver si te apetecía ir a desayunar conmigo.

—Pues ahora que estoy despierta, ¿qué otra cosa voy a hacer si no es comer? —me dice riendo. Se desnuda de espaldas a mí y se cambia de ropa. Se pone unas mallas de color azul eléctrico y una sudadera amarilla.

—¿No decías que no ibas a salir? —la interrogo levantando una ceja.

—¡Es que me lían! Si lo sé no salgo, fuimos al bar más aburrido de la ciudad a jugar a las cartas y beber cerveza. No fue gran cosa.

—¿Estaba Kai? —la pregunta escapa casi automática de mi boca.

—Qué va, nadie lo vio ayer —dice encogiéndose de hombros —¿Os acostasteis cuando llegó?

—Por Dios, Main ¿puedes dejar de hablar sobre Kai y yo como si quisieras que nos fusionáramos?

—¡Es que es lo que quiero! —dice ella haciendo un gesto de efusividad con la cabeza —Por eso lo pregunto, ¿a que hora llegó?

—No lo sé, yo estaba dormida. De todas formas, esta mañana debe haberse ido muy pronto, porque yo no lo he visto marcharse.

Me dejo caer sobre la cama y pongo las manos sobre mi cara antes de soltar un gruñido.

—¿Es que habéis dormido en la misma cama?

Asiento y me incorporo.

—¿Qué pasa? —no entiendo por qué tanto revuelo.

—Nada, nada. Es guay —dice en un tono diferente —, es sólo que me parece raro que Kai haga esas cosas. No lo ha hecho nunca —se ha puesto un poco seria, así que cambio de tema.

—¿Te apetece enseñarme tu taller hoy? —pregunto animada —Tengo ganas de verlo.

—¡Claro! Podemos ir después de desayunar —me dice mientras se recoge el pelo en una coleta.

Cuando vamos por el pasillo un grupo de chicos que está parado delante de la habitación de Kai nos mira y cuchichea.

—Digan lo que digan, tú a estos ni caso —me dice susurrando —¡Hola, chicos! — los saluda con una sonrisa. Si le caen mal, lo sabe disimular muy bien.

Mi amiga intercambia miradas con un chico de pelo castaño que está apoyado en la pared. Se miran como si quisieran comerse, pero no dicen ni una palabra.

—¿Qué hay, Main? —habla el chico más alto sin mirarla a ella. Tiene la vista clavada en mí... tanto que tengo que bajar la cabeza y mirar a mis pies para no mandarlo a pastar.

—Son amigos de Kai —me explica cuando ya los hemos dejado atrás —y son iguales que él —dice rodando los ojos.

Desde luego no tienen nada que ver con Kai. No tienen su cuerpo, ni sus ojos, ni su voz, ni huelen a fruta...

—El de rojo...¿es él? —le pregunto haciendo referencia al chico del que me habló anoche.

Ella sonríe y mira hacia otro lado y eso me sirve como afirmación.

—Ha pasado de mí, como siempre —habla desanimada —. Le gusta que vaya detrás de él, pero eso no va conmigo.

—Tú también has pasado de él —la miro con desaprobación.

—Sí, porque a mí también me gusta que vayan detrás de mí —se excusa achinando los ojos y formando una fina línea con sus labios—. Me han dicho que el otro día lo vieron besarse con otra.

—Bueno... en teoría no tenéis nada, ¿no?

—No, no tenemos nada, pero pensé que había una remota posibilidad de que... no sé... tal vez quisiera tener algo serio o algo así —suspira —. En fin, supongo que es lo que hay. ¡Esta noche salimos!

—¿Hay algún día que no? —pregunto riendo.

Al entrar a la cocina miro hacia el otro lado del pasillo y, sin querer, mi cuerpo colisiona contra algo duro.

Miro hacia arriba y casi se me cae el alma a los pies.

Es Adán y tiene cara de cordero degollado.

—Dios, ¡lo siento! —me disculpo —Iba distraída, lo siento... —sin evitarlo, inspecciono su cara para encontrarme con que, en efecto, aún tiene moratones.

—No pasa nada, tranquila —responde serio.

—Bueno —intento sonreír, pero me cuesta. No puedo dejar de mirar sus cardenales. Desde luego está mucho peor que Kai.

—Oye —tira de mi brazo y me impide entrar a la cocina. Main suspira profundamente, como si no estuviera cómoda, y pasa por mi lado para entrar —, tengo que hablar contigo.

—Adán, yo... siento muchísimo lo que pasó ayer, pero no quiero que Kai se enfade. Él no me ha hecho nada malo y tampoco me lo has hecho tú, pero...

—Lo eliges a él, lo entiendo —su cara de corderito sigue ahí.

Si tuviera que elegir a alguien elegiría a Kai sin dudarlo... pero eso no lo pienso admitir.

—No elijo a nadie porque no tenéis derecho a hacerme elegir. El problema lo tenéis vosotros dos. Tú eres de una manera y Kai de otra y yo no entiendo por qué no puedo ser amiga de los dos.

—Kai no es tu amigo —touché.

—Está poniendo todo de su parte...

Él niega con la cabeza.

—Esto no se trata de ser amigos... de todas formas, no tienes por qué consentir que elija con quién quedas o qué amigos tienes. No es nadie para controlarte.

—¿Y quién te ha dicho que sea así? Yo salgo con quien quiero y cuando quiero y no tengo que dar explicaciones ni a Kai ni a nadie —al final voy a cabrearme en serio. Estoy harta de esta lucha de testosterona típica de niños de quince años, me tienen harta.

—Entonces, ¿por qué no quieres salir conmigo? No te estoy pidiendo nada del otro mundo, simplemente ir a dar una vuelta, no entiendo por qué con Main lo harías y conmigo no.

Al fin y al cabo tiene razón. Si somos amigos no hay nada de malo en ir a tomar algo o salir a algún sitio de vez en cuando.

—Vale, saldremos —levanto un dedo advirtiéndole —, pero ni se te ocurra utilizarlo para hacer enfadar a Kai. Si tanto te importa mi amistad, sabrás hacer las cosas bien —explico con la intención de que entienda las cosas. Quiero de verdad poder llevarme bien con él al igual que con Main, pero no me lo están poniendo nada fácil. Saber que Kai va a partirle la cara cada vez que lo vea me hace pensármelo dos veces antes de acceder a quedar con él, aunque sea a tomar un café o dar una vuelta.

—¿Esta noche? —la pregunta me pilla de sorpresa y ladeo la cabeza —¿Te va bien esta noche?

—Bueno... en principio sí —acepto mirando hacia detrás. Main está muy ocupada intentando no quemarse con algo que ha metido en la sartén.

Si a Kai no le ha importado dejarme sola durante todo el día dos días seguidos, no le importará tampoco que vaya a dar un paseito con Adán.

—Perfecto —una sonrisa de oreja a oreja se dibuja en su cara —, pues sobre las nueve paso a buscarte.

No sé dónde me he metido, pero sé que me apetece salir con Adán. Quiero conocerlo porque me parece la mar de interesante y no es justo no poder disfrutar de su compañía solo porque a él no le caiga bien.

—Probablemente esté en la habitación de Kai, así que lo mejor será quedar en cualquier otro lugar...

No me apetece empezar la noche con otra pelea.

Él frunce el ceño y niega:

—Te recogeré en la habitación de Kai, no pasará nada. Estoy seguro de que él saldrá a alguna parte, al fin y al cabo es su cumpleaños.

Espera.

Esperaaa.

Esperaaaaaa.

Creo que el golpe de mi mandíbula contra el suelo se ha escuchado hasta en Kuala Lumpur.

¿Es el cumpleaños de Kai? ¿Cómo puede ser que nadie me lo haya dicho?

Una punzada de decepción cruza mi pecho y me cuesta tragar.

—¿Es su cumpleaños?

—Sí, ¿tampoco te lo ha dicho? —pregunta incrédulo y a mi me dan ganas de darle una patada en el culo.

Niego con la cabeza.

—¿Va a hacer una fiesta?

—Eso parece —dice él —. Creo haber escuchado que han quedado con él sobre las siete en casa de Cristian. Son muy amigos y tiene una casa muy grande con piscinas y todo eso, así que seguro que harán algo allí. A mí esas cosas no me van... —hace una mueca y se encoje de hombros.

Una bombilla se enciende en mi cabeza y esbozo una sonrisa.

Vaya, de pronto me han entrado ganas de ir a esa fiesta de cumpleaños y felicitarlo en persona. Con Adán.

—Podemos ir allí —espero que el golpe que se dé la mandíbula de Kai contra el suelo cuando me vea no le duela mucho. O bueno... sí. Se lo merece —, por favorrrrrr —pido poniendo las manos una junto a la otra, rogando.

—No creo que sea una buena idea... —inclina un poco su cabeza y hace un gesto con sus labios.

—Por favor, merezco al menos eso. Me ha ocultado que era su cumpleaños y...

—Está bien, iremos —accede. Vaya, ha sido fácil. Pensé que me costaría un poquito más, pero parece ser que a estos dos les estimula discutir.

—¡Muchas gracias! —no puedo evitar que una sonrisa triunfal se dibuje en mi cara. 

—A las nueve entonces —se despide tocándome un brazo.

—Hasta luego —sonrío.

Cuando entro en la cocina, veo que Main ya se está desayunando.

—Que sepas que me parece fantástico que no le hagas caso a Kai con lo de salir a tomar un café con quien te salga del mismísimo, pero quiero que sepas que aquí hay que tener mucho cuidado con todo el mundo —me dice señalando la puerta con la cuchara —. Adán es un asmodeus, igual que...

—Lo sé, lo sé. Pero no soy una niña y sé cuidarme yo solita —pongo mis brazos en jarra y le pregunto: —Por cierto, perra de Satán, ¿sabías que era el cumpleaños de Kai?

Casi se atraganta con los cereales y me mira con los ojos muy abiertos.

—¡Kai me dijo que no te lo dijera! ¡Te lo juro, de verdad, no ha sido cosa mía!

—Me parece fatal —pataleo sentándome delante de ella y cogiendo un trozo del bizcocho de chocolate —, eres una traidora.

—Sabes cómo es Kai, además, no sabía que te iba a molestar. Sino, desde luego que te lo hubiera dicho —asegura encogiéndose de hombros —. Palabra de girl scout —añade en un tono de lo más solemne.

—Ya, ya —respondo sarcásticamente —, ¿también sabías que hoy le van a hacer una fiesta?

—¿Una fiesta? ¿A Kai? Lo dudo —el escepticismo se dibuja en rostro —. No ha celebrado nunca su cumpleaños y mucho me temo que este año no será distinto.

—Pues será sorpresa, pero fiesta hay porque me lo ha dicho Adán.

El bizcocho de chocolate está buenísimo y parece que me encuentro un poco mejor que ayer, porque no me duele tanto la cabeza y tengo un hambre canina.

—Pues que le den a Kai. He escuchado que vas a salir con Adán esta noche, así que céntrate en eso.

—Vamos a ir a la fiesta —río de forma pícara, aún con la boca llena.

—¡¿Qué?! —los ojos casi se le salen de las órbitas y tiene la boca completamente abierta —No te creo.

—Main, pienso ir a esa fiesta. No me parece bien que me prohíba estar con alguien a quien considero mi amigo, me abandone a mi suerte durante casi dos días sin dar explicación, no me deje salir de su habitación y luego encima me esconda que es su cumpleaños.

—¿Sabes qué? —hace una pausa dramática y luego asiente con la cabeza —¡Di que sí, se lo merece! De hecho, tengo una idea.

—Tengo una relación amor–odio con tus ideas —admito riendo.

—Vas a ir a esa fiesta, pero no vas a ir vestida de cualquier manera. A Kai se le va a caer la baba y se va a volver loco, pero se lo merece. Así sabrá cómo funcionan las cosas.

La niña inmadura que hay dentro de mí da saltitos de alegría por lo que acaba de decir Main... y la adulta sensata también.

¡Se se le van a quitar las ganas de encerrarme en su habitación de golpe!

—Brindo por eso —acerco mi vaso de café al suyo y los chocamos mientras reímos a carcajadas.


_________________


Hola chiquissssss ✨

¿Qué os ha parecido el capítulo? 

¿Creéis que Jade ha hecho bien en aceptar la "cita" con Adán?

¿Sabrá Kai lo de su fiesta de cumpleaños...?

Muchísimas gracias por leer periódicamente la novela, sois lo mejor de lo mejor 😍😍😍

Gracias por el apoyo y por los comentarios positivos, ¡son una motivación increíble! 💖

Gracias también por votar y en general por dedicarle tiempo, aunque sean unos minutos, a la historia de estos dos loquillos. El tiempo es algo irrecuperable y que lo dediquéis a un fruto de mi trabajo, me hace requetefeliz  🙏

Os quiero de aquí a la Luna 💘

Continue Reading

You'll Also Like

8.9K 556 44
Dos años depués de ver a un hombre morir a sus pies, Aina ha superado su trauma y decide vivir el mejor verano de su vida antes de ir a la universida...
356K 28.1K 76
(Serie Amores Destinados, libro 2) Kylie y Jake eran amantes. Kylie y Jake eran desconocidos. Ambos están apunto de reencontrarse, solo que esta vez...
42.1K 3.6K 28
Carolina Diaz se mudó a España siguiendo sus ilusiones y sus sueños más locos. Tenía en su corazón una quimera a la que dejó de cuidarla lo suficient...
10.5K 1K 29
Tercer y último año de universidad: Traicionada y con el corazón roto; así se siente Lía después de ser abandonada por su Ladrón Bipolar. Ella se af...