Tres ninjas corrían a toda velocidad dentro del oscuro bosque, saltando de rama en rama.
Naruto se tiró al suelo boca arriba, suspirando pesadamente.
-Ya no puedo más 'ttebayo.-
El pálido y la rubia lo rodearon. Ino cruzó los brazos molesta mientras que Sai se agarraba el mentón divertido.
-Apenas llevamos veinte minutos. Nos falta mucho, y al ritmo en que vamos nunca encontraremos a Sasuke.-
Soltó la rubia sentándose frustrada en el suelo al lado del Uzumaki.
-No hay que apresurarnos, Sasuke también se toma su tiempo.-
Ambos que estaban en el suelo levantaron una ceja.
-A veces pienso que eres igual a Sasuke, sólo que estas hecho de leche.-
Un golpe cayó en la cabeza de Naruto, provenido de Ino.
-O-oye...-
-A veces es mejor que te calles... tonto.-
Un sonrojo se formó en las mejillas de la Yamanaka.
Naruto le miró extrañado mientras se sobaba la cabeza en la zona del golpe.
¿Acaso había dicho algo malo?
-Descansemos.-
~~~
-Muchas gracias, Mia.-
La enferma hizo una reverencia antes de salir de la oficina.
Sakura miraba determinada un papel que le había entregado aquella enfermera.
'Nuevo Paciente: Matzu Kei.
Edad: 28 años.
Presenta síntomas de fiebre alta, amarillez en la piel, vomitos, y delgadez.'
Volteó la página, volteó la mirada hacia la puerta que estaban tocando nuevamente.
-Adelante.-
La pelirosa dejó el informe del nuevo paciente en su escritorio escuchando la puerta abrirse.
-¿Doctora Haruno?
Sakura volteó presenciando al chico que acababa de llegar.
Un pelirrojo de ojos azules. Le llevaba una cabeza de altura a la pelirosada, aunque también vio el detalle que llevaba una bata blanca haciendo saber que era doctor también, o que trabajaba en el hospital.
-Lo siento, la enfermera Mia trajo un informe equivocado hacia usted de un paciente que debo atender yo.-
La Haruno abrió los ojos sorprendida, pues él mismo se había tomado la molestia de buscar hasta su despacho para recobrar el informe.
-Oh... claro.-
Ella volteó hacia su escritorio agarrando el papel, notando que no le apartaba la mirada de encima.
-Aquí tiene.-
Le extendió el documento y este lo recibió.
-Muchas gracias.-
Le dedicó una sonrisa, el cual Sakura le pareció bastante lindo por lo que le correspondió también con otra sonrisa.
-Lamento haberla molestado, ha recompensa la invitaré a comer cuando termine la jornada.-
Ella intentó decirle que no, pero este ya había salido casi corriendo.
Una gota animada salió de la cabeza de la rosada.
Bueno... los doctores siempre son ocupados.
Ella bufó a lo bajo, no pudo haberle negado antes de que se fuera.
Ni siquiera sabía su nombre o apellido, pues no tuvo tiempo de ver su plaquilla.
Era la primera vez que un doctor se había atrevido a hablarle después de meses de haber estado en ese hospital trabajando.
Sólo con ciertas enfermeras, una de esas era la tal Mia.
Matsuri después de lo ocurrido en el restaurante, la ojijade ya no la había visto.
Ni siquiera con el Kazekage.
Ladeó la cabeza cuando pensó en cierto pelirrojo. Y ahora que se daba cuenta... aquel doctor de hace pocos minutos tenía un cierto parecido al Sabaku no.
¿Acaso el destino le estaba jugando una mala pasada?
Debe ser pura coincidencia.
~~~
-Muchas gracias, señor Sasuke.-
-Que no me digas señor, además... ¿Por qué me seguiste?-
La fogata era lo único que los reconfortaba del frío, la pequeña peliblanca se frotaba las manos por encima del fuego sin quemarse.
-Usted me salvó, le debo mi vida.-
El azabache se sorprendió ante su respuesta, pero luego volvió a su repetitivo semblante frío.
-¿Dónde están tus padres?-
-Murieron.-
Dijo sin demostrar alguna pizca de tristeza, simplemente estaba neutral.
-¿Fue aquel...?
-Si.-
El Uchiha lo meditó. Ahora estaba cargando con una niña de más o menos siete años, del cual a visto con sus propios ojos la muerte de sus padres a sangre fría y la salvó antes de que la asesinaran.
Volteó la mirada hacia la pequeña, quien estaba sentada en un tronco aún con sus manos en el fuego.
-No te puedes quedar conmigo.-
-Entonces, ¿por qué me salvó?-
Buena pregunta.
Solo estaba caminando por el bosque y por casualidad se encontró con aquella niña indefensa que necesitaba ayuda.
Había podido pasar de largo, pero no lo hizo y prefirió matar aquel desgraciado.
No se arrepentía de haberlo hecho. Pero no esperaba a que ella lo siguiera durante horas sin haberse dado cuenta.
Solo era una niña sin nada especial.
Lo único que le hacía llamar la atención era su cabello blanco, aunque sucio de lodo y otras cosas.
-¿Preferiste haber muerto?-
-Tienes razón.-
Le sonrió apartando sus manos del fuego, frotándose los pies.
Sasuke lo notó y se reincorporó.
-Vamos, necesitas un baño y ropa nueva.-
Le dio la espalda caminando hacia al frente, la pequeña niña notó que estaba comenzando a llover así que lo siguió.
~~~
-Sasuke se dirige hacia al País del Rayo. Tiene una niña consigo, pero no sabemos quien sea.-
-¿Una niña?
-Si Hokage-sama, no debe aparentar más de siete años.-
La rubia de coletas se rascó la cabeza. No esperaba que Sasuke estuviera con una niña, pues ahora lo complicaba más vigilarlo.
-No lo pierdan de vista, y si pueden averigüen de donde salió esa niña y porque Sasuke Uchiha la tiene con él.-
-Hai.-
El anbu desapareció casi al instante.
Ahora tenía que mandar más anbus para notificar ahora al equipo de Naruto que Sasuke se estaba dirigiéndose hacia el País del Rayo.
~~~
-¿Estás puto loco? El Kazekage claramente esta interesado en esa pelirosada. Es por eso que ninguno se ha acercado a ella.-
-Me da igual, además... ella no está tan mal.-
-Que santos huevos tienes. Luego no vengas a lloriquear si ella te rechaza.-
-No lo hará, créeme.-
El pelinegro miraba con confusión a su compañero, pues él no se comportaba de esa manera.
-Ella va a ser mía.-
______________
Likes -Estrellas, mongólica(?)- comentarios para el siguiente cap '-' Os quiero <3.
Venus. ➰