-No vuelvo a hacer apuestas contigo Potter- habló Draco preocupado.
La apuesta entre ambos habia finalizado y ya sabian quién correría desnudos al buscar a sus hijos.
-De que te quejas, ambos perdimos-contestó Harry enojado.
-Debi apostar por Revenclaw- murmuro el rubio enojado.
-¿Listo?-preguntó Harry hacia el rubio.
-¿Listo? Por favor Potter yo nací listo y lindo- contestó el rubio con una sonrisa.
El ojiazul rodo los ojos y ambos salieron del pilar tapados únicamente por un barril que les cubría el tronco de su cuerpo, dejando al aire sus brazos y piernas.
Muchos magos observaron a ambos sorprendidos, unos tapaban los ojos de sus hijos.
-Pero mamá, yo quiero ver a la rubia princesa- decía una niña de Hufflepuff quién su madre le tapaba los ojos.
-¿Rubia princesa?-preguntó ofendido el rubio- Rey por favor.
Ambos suspiraron cuando observaron a sus familias recibiendo a sus hijos, se observaron una última vez y salieron corriendo entre la gente mientras gritaban.
-¿Papá?- preguntó Albus con la boca abierta al ver su papá pasar corriendo desnudo con un barril.
Scorpius observó al chico y ambos hicieron una mueca de asco.
-¡Te voy ganar Potter!- gritó Draco cuando vio la meta que habían puesto. El puesto de dulces de la señora Roz.
La señora hizo una mueca al ver al rubio aproximarse a ella. Harry corrió mas rapido; no tener zapatos dificultaba todo y habia sido pisado por varias personas.
Draco perdió el equilibrio y cayo encima del carrito de dulces, este se empezó a mover.
-¡Draco!-gritó Hermione, el carrito estaba yendo cuesta abajo junto con el rubio, este hizo una mueca de temor.
El carro tomo la cuesta hacia abajo y con velocidad se alejó del lugar mientras que todos gritaban.
-¡Draco!- gritó Hermione.
-¡Los dulces!- gritó Roxanne y Ron al mismo tiempo.
El carrito de dulces paseaba de un lado a otro mientras las personas gritaban.
Fred sacó la cámara y salió corriendo detrás del rubio sonriente.
Draco alzo la vista, varias personas gritaban cuando el pasaba, un policía del ministro intentó detenerlo pero fue imposible, el pobre policía terminó en el piso.
El carrito agarraba cada vez más velocidad.
-¡Mi presioso rostro! - gritó el rubio cuando se dirigía a un pilar de acero.
Una roca hizo que saliera volando y cayó en el cemento, a su lado los dulces caían.
-¡¿Oh están bien?!- preguntó Ron corriendo hacia el rubio, Draco alargo el brazo hacia el pelirrojo pero este ni le hizo caso-¡¡Mis preciosos y amados dulces!!
Draco hizo una mueca, Hermione venía corriendo hacia el rubio.
-¿Estás bien?- preguntó preocupado ayudando a parar al rubio, este tomo con fuerza el barril.
- Oh, ¿estas bien Draco?- preguntó Pansy riendo al ver la cara del rubio.
-Cierto ¿Estás bien?-preguntó el pelirrojo recogiendo del piso los dulce.
-¡Ronald! ¡Pareces pordiosero deja esos dulces en el piso!- gritó Pansy hacia su esposo.
-Si deja ahí Ron, ya lo chupo el diablo- habló Marcos sonriente- Draco los toco.
El rubio fulminó con la mirada al chico mientras se paraba, con un movimiento de varita se vistió.
-¡Me toca!- gritó Fred refiriendose al carrito.
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