44| Señora Potter

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Dumbledore observaba a ambos muchachos con una sonrisa.

-¿Podrian explicarme que paso?-preguntó sin dejar de sonrier.

Jean observó al pelinegro con irritacion y luego regreso su mirada fria y gris al director.

-Potter me estaba molestando-contestó la chica cruzandose de brazos y sonriente.

El chico solamente negó divertido

-¿Y qué fue lo hizo exactamente?-preguntó Albus.

-Estaba felizmente leyendo un libro cuando este...- observó al chico fulminandolo con la mirada-...llego a molestarme, no quería discutir con pero me altere.

-Tu siempre te alteras por todo- contestó James en defensa- Te alteras por que te molesto, te alteras por que te miró, te alteras porque toco tu cabellera pintada.

-¡Mi rubio es natural Potter!- contestó observandolo.

-Si, si, como no- contestó, sonrió maliciosamente- Rubia oxigenada.

La rubia apretó la mandíbula y lo señaló enojada.

-¡Cruzaste la línea Potter!- gritó sin dejar de verlo.

-Tu la cruzaste desde hace rato rubia- contestó James.

Ambos chicos se empezaron a maldecir mientras que Albus observaba con diversión.

-James Sirius Potter Weasley y Jean Cassiopea Malfoy Granger ¡silencio!- sentenció golpeando con su mano la mesa.

La mirada gris y cafe regresaron a la vista del profesor.

-Ambos pierden 50 puntos para sus casas- sentenció el director.

-¿Sólo 50?- preguntó Jean con el ceño fruncido, James observó a la chica sin entender-¿Que? Yo me esperaba mínimo 200 puntos pero como quiera.

-Esta bien- contestó el director- Que sean 200 puntos.

-¿¡¡Que!!?-preguntó James alterado-¿Pero por que?

-Peticion de tu compañera-contestó el director con una sonrisa.

-¿Qué Potter?- preguntó Jean arrastrando las palabras-¿Es algo que no está en tus posibilidades lograr 200 puntos?

La vista del chico se poso en la rubia quién reia.

-¿Sería todo?-preguntó Jean parandose de la silla y observando al director, este asintió.

La rubia le sonrió al chico y este negó divertido. Corrió hacia la chica y se poso al lado de ella.

-No sabes como te odio Potter-habló Jean con los brazos cruzados hacia el chico.

-Del odio al amor hay un paso-contestó con picardía el castaño.

-Paso, que jamás dare, antes me convierto en monja- contestó con seguridad.

James siguió con una sonrisa a ala chica quien caminaba sin esperarlo.

-Sólo imaginalo- la tomo de la mano deteniendola, obligándole mirarlo a los ojos- Serias la señora Potter.

La rubia hizo cara de asco al escuchar eso.

-Nunca- contestó con seguridad.

Sin decir nada más se alejó del chico.

James observó a la rubia retirarse, este sonrió.

Jean Potter, si, no suena mal penso

HP| Cambio de Cuerpo³Donde viven las historias. Descúbrelo ahora