Zona de Amigos

By PinkGlitterKiss

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Traducción de mi novela 'Friend Zone' ¿Qué es lo que harías si cada chico que te gusta te coloca en la zona d... More

Zona de Amigos
¡Sigo viva!
Capítulo 1: Dicen Por Ahí
Capítulo 2: Al Fin Te Encontré
Capítulo 3: Todo Cambió
Capítulo 4: Déjalo
Capítulo 5: Dime Que No
Capítulo 6: No-Oh Se Apaga
Capítulo 7: No Me Digas Que No
Capítulo 8: Déjame Ir
Capítulo 9: Duele Amarte Así
Capítulo 10: Un Nuevo Amor
Capítulo 11: ¿Qué Me Faltó?
Capítulo 12: Suerte
Capítulo 13: Entra En Mi Vida
Capítulo 14: Volverte a Amar
Capítulo 15: Paraíso en Destrucción
Capítulo 16: Simplemente Amigos
Capítulo 17: Deseo de Cosas Imposibles
Capítulo 18: Otras Se Pierden
Capítulo 20: De Verano a Invierno
Capítulo 21: Qué Vida La Mía
Capítulo 22: Si Te Vas
Capítulo 23: No Fue Suficiente
Capítulo 24: Entrega Total
Capítulo 25: Ni Rosas Ni Juguetes
Capítulo 26: Ahora Entendí
Capítulo 27: Propuesta Indecente
Capítulo 28: Hasta Que Llegaste Tú
Capítulo 29: La Duda
Capítulo 30: Inocente
Capítulo 31: Por Última Vez
Capítulo 32: Goma de Mascar
Capítulo 33: Dolerá
Capítulo 34: Buena Señal
Capítulo 35: Un Vicio Caro Es El Amor
Capítulo 36: Mal Acompañados
Capítulo 37: Sin Querer Queriendo
El Flashback
Capítulo 38: Ayúdame
Capítulo 39: Volver a Comenzar
Capítulo 40: Cuarto de Hotel
Capítulo 41: En Ésta No
Capítulo 42: Vengo del Futuro
Capítulo 43: Amor Del Bueno
Capítulo 44: Sabes Lo Que Quieres
Capítulo 45: Más Que Amigos

Capítulo 19: Bailar

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By PinkGlitterKiss


ANTERIORMENTE EN ZONA DE AMIGOS:

Luego nuestros labios colisionaron a toda fuerza cuando mis brazos me fallaron y caí rendida sobre él.

—¿Qué estaban haciendo? —Dyl nos preguntó. —Ari no me quería enseñar sus fotos así que traté de arrebatárselas, pero las escondió y me caí —intenté sonar indiferente.

—Hernán va a hacer una fiesta el viernes después de la ceremonia de graduación —Dyl nos informó.

—¡Wow! Tu papá si que odia a Aarón —Libby comentó cuando mis papás se fueron. —¡¿Que?! ¿Por qué? —Aarón me preguntó. —Piensa que todos los hombres se quieren acostar conmigo —me encogí de hombros.

—¡Ah, lo olvidaba! Elena, él es Dyl. Dyl, ella es Elena —los presenté.

—Ahora que ya te vi sonrojarte, mi nueva meta en la vida es verte ebria —Dyl me informó.

—Sabes, las despedidas contigo son mil veces más largas que las de Emily, literalmente sólo me dice "adiós" —Dyl comentó.

—¿Por qué no besaste a Aarón? —Elena preguntó curiosa. —Tengo miedo. A pesar de que fue una cosa mutua, estoy segura de que después me va a decir que fue un error —les dije mirando hacia abajo. —¿Por qué? ¡Se ven lindos juntos! —Libby dijo. —Libby, Aarón esta jugando con Minnie, al bastardo sólo le gusta la atención —Kayla interrumpió.

"¡PASÉ! ¡WUJUUU!" grité mirando mi celular.

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Porque cuando se encuentra la pareja ideal
Todo buen bailarín no la suelta jamás
- Bailar de Leonel García -


       El vestido que estaba usando me hacía lucir espectacular, si me permitía decirlo yo misma, mi maquillaje estaba impecable y mi cabello rizado a la perfección. Caminaba hacia la entrada del salón, donde era la fiesta de graduación, sintiéndome segura de mi misma.

       La fila para entrar era larga, así que tuve que pararme ahí y esperar mi turno, pero desgraciadamente la suerte no estaba de mi lado. Justo después de tomar mi lugar en la fila, Celia y Sandra llegaron y se pararon detrás de mí.

       —¡Amo tu vestido, Sandra! —Celia exclamó, ojeando el vestido amarillo de Sandra. No pude evitar observar por el rabillo del ojo. Lucía como una pelota de playa, definitivamente una mala elección.

       —¡Gracias! Tu vestido está bonito también, verde es el color del verano —Sandra aprobó. Mis ojos casi se salieron de sus órbitas al escuchar eso y ahogué una risita. ¿Desde cuando el verde-vómito era un color de verano? Ewwww.

       —¡Ya sé! Ósea, ¿quién usa naranja en verano? —oí la observación sarcástica de Celia. Yo estaba usando naranja. ¿En verdad creen que me voy a sentir mal por eso? No puedes escuchar consejos de moda de alguien que usa converse, rodé mis ojos por su ridículo intento de hacerme sentir insegura.

       —Que bueno que ordené mi vestido con un montón de tiempo de anticipación porque Gucci tenía una larga lista de espera —Celia comentó.

       —Sí, Ralph Lauren también. Si no hubiéramos ordenado a tiempo, hubiéramos terminado comprando vestidos en el mercado como el resto de la chusma —Sandra me escaneó de la cabeza a los pies.

       Primero que nada, no compré mi vestido en el mercado y si lo hubiera hecho, ¿qué les importa? Mi vestido está bonito. Segundo, yo no me veía como una pelota de playa. Y tercero, naranja era un color hermoso, no como el verde-vómito. Las miré divertida sin decir una palabra; no valía la pena gastar saliva con ellas.

       Cuando finalmente entramos al salón, casi corrí para buscar a mis amigas. Encontré a las chicas en una esquina tomándose fotos y me uní a la diversión. Hicimos diferentes poses tontas y tomamos turnos para tener una foto con cada una. Estaba tan feliz de haberlas conocido y de estar ahí con ellas, realmente las iba a extrañar.

       —Quiero una foto con ustedes cuatro —Cam apareció junto a nosotras.

       —Pues una foto con nosotros es costosa —Libby bromeó.

       —Puedo arreglar todo con un beso —Cam guiñó un ojo.

       —Yo lo haré gratis —contesté rápido y me fui a parar junto a él. No quería que Cam me robara otro beso. Sabía que era capaz de hacerlo.

       —Bueno, pero yo quiero estar en el medio —Cam sonrió satisfecho.

       Nos abrazó y le pidió a un chico que tomara la foto, luego continuó su camino.

       Después de las fotos con cada una de las chicas, fui a buscar a Ari, Dyl y Hernán. Tenía que tomar todas las fotos que quería antes de estar toda sudorosa y arruinar mi cabello y maquillaje. Eso y podía olvidar tomarlas.

       —¡Chicos! Es hora de las fotos —grité emocionada, ignorando a la bruja, quien estaba pegada a Dyl como garrapata.

       Me estaba tomando selfies con ellos hasta que la bruja decidió arruinar el momento.

       —Vamos a tomarnos una foto todos juntos —dijo y le pasó su celular a una chica mientras me orillaba para esperar a que terminaran.

       —¿Qué estas haciendo, Minnie? Ven para la foto —Hernán dijo. Ari y Dyl estaban sonriendo, mostrando que estaban de acuerdo, mientras que la bruja me estaba dando una mirada asesina.

       —¡Oh! Bueno —me les uní, disfrutando como Emily se retorcía del coraje.

       —Uno... dos... tres —la chica dijo y tomó la foto.

       —¡Los veo mas tarde, chicos! —decidí darle un respiro a la bruja y pasar tiempo con mis amigas, me di la vuelta para alejarme, pero Ari tomó mi muñeca.

       —Sepárame una canción —me susurró en el oído. Giré un poco mi cabeza y le guiñé antes de irme.

       ¿Alguna vez han notado como al principio de todas las fiestas, la pista de baile siempre está vacía porque nadie quiere ser el primero en bailar? Bueno, la fiesta de graduación se estaba volviendo aburrida, sin alcohol en las venas nadie tenía el valor para ser salvaje y bailar.

       Libby y Kayla estaban intentando meter alcohol de contrabando, mientras yo me quejaba con Elena.

       —Estoy aburrida como una ostra —gruñí. —¡Quiero perrear!

        —Definitivamente no te imagino perreando —Elena soltó una carcajada.

        —¡Hey! Si sé perrear —me defendí.

        —Me encantaría ver eso —Dyl se sentó con nosotras.

       —No lo harás —respondí aún mirando la pista de baile, deseando un milagro.

       —Claro que sí, sólo espera a que te ponga ebria —Dyl dijo con confianza.

       —¿Te vas a emborrachar? —Elena me preguntó con cautela.

       —¡No! Dyl esta mal de la cabeza —rodé mis ojos.

       —Mi nueva meta es ver a Minnie ebria —Dyl le dijo orgulloso a Elena.

       —No deberías hacer metas sobre mi vida —lo reprendí.

       —Vamos, Minnie, ¡vive un poco! —Dyl exclamó. Era frustrante cuando las personas comenzaban a hacer ese tipo de comentarios, sabía que era lo que otros podían llamar "remilgada" pero ¿quiénes eran para juzgar? Podía vivir mi vida como yo quisiera, e iba a hacer las cosas a mi paso y cuando me sintiera cómoda, si es lo que lo hacía. Así que, cambie el tema.

       —¿Dónde está tu novia y por qué no estas con ella? —le pregunté a Dyl.

       —Está enojada —Dyl se encogió de hombros.

       —¿Por qué?

       —No sé, siempre está enojada por algo —Dyl rodó sus ojos.

       —Tu noviazgo es un ejemplo para seguir —Elena soltó una risilla.

       —Deberías de aprender del noviazgo de Elena —le dije a Dyl señalando a Elena.

       —¡Ah! —Elena abrió sus ojos grandes y dijo —ahorita regreso —antes de huir rápidamente.

       —¿Hace eso seguido? —Dyl preguntó viéndola ir.

       —Sólo recordó a su novio y fue a buscarlo —me encogí de hombros.

       —Al menos yo no olvido a Emily.

       —Es imposible olvidar a esa chica tan molesta —me estremecí y Dyl puso un brazo sobre mis hombros.

       —¿Vas a bailar conmigo hoy? —lo miré, batiendo mis largas pestañas.

       —No sé bailar, corazón —dijo en tono de disculpa. —Sabes que lo haría, pero me vería como un tonto —pasó un mechón de pelo detrás de mi oído.

       —Los tontos son sexys —lo miré inocentemente. —Bueno... a veces —agregué.

       Soltó una carcajada. Amaba coquetear con Dyl y juro que no estaba jugando con él porque cada palabra que le decía era verdad. Era sólo que, había algo sobre Dyl que me hacía lo suficientemente descarada como para decir en voz alta mis pensamientos.

       Entonces, música más movida comenzó a sonar y yo no pude quedarme quieta un solo segundo más.

       —¡Anda, Dyl! Vamos a bailar —tomé su mano y lo arrastré.

       —En verdad no sé bailar —dijo caminando detrás de mí.

       —No necesitas bailar mucho, sólo párate ahí con todos los demás, mueve tu cabeza y sonríe como si fuera lo mejor que te ha pasado —lo instruí.

       Encontré a Kayla y Libby, quienes, por fin, habían triunfado en meter alcohol, y las arrastré a la pista de baile también.

       —¿Dónde esta Elena? —Kayla preguntó.

       —Con su novio... creo —contesté. Kayla se encogió de hombros y comenzó a bailar.

       Estabamos bailando, principalmente brincando y cantando, parecíamos dementes. En algún momento Hernán, Ari, Ed y Cam se nos unieron. Ed comenzó a perrear enfrente de mí, lo cual era graciosísimo, mientras yo simulaba darle nalgadas.

       Me la estaba pasando de lo mejor y la cereza del pastel era que Celia y Sandra estaban paradas en una esquina, fulminándome con la mirada.

       De repente, el género de música cambió y ahora estaban sonando canciones de salsa. Hernán tomó mi mano para bailar, lo hacía bien, estabamos girando alrededor de la pista como profesionales.

       Cuando me dio sed, fui a buscar algo de beber, dejando a Hernán para que bailara con alguien más, de preferecia su novia ya que no quería más problemas.

       Libby y Kayla estaban junto a la mesa de los refrescos, bebiendo "jugo." Evité esa área y elegí algo más seguro.

        —¿Aún no ha regresado Elena? —les pregunté.

        —No —Libby dijo, tomándole a su bebida.

       —Ha pasado mucho tiempo —Kayla lucía preocupada.

       —Voy a buscarla —les dije alejándome.

       —Voy contigo —Libby me siguió.

       El lugar estaba enorme; encontrar a Elena nos tomó más tiempo de lo que esperábamos. Estábamos a punto de abortar la misión cuando Libby se detuvo en seco. Volteé para mirar que había pasado y la quijada se me cayó al piso. Unos segundos más tarde reaccionamos y salimos corriendo.

       —¡Oh por Dios, no vas a creer lo que acabamos de ver! —le dije a Kayla.

       —¿Qué?

       —Elena... —pausé dramáticamente. —Se estaba besando con su novio en público, pero ¡apasionadamente! —dije emocionada.

       —Aww, está creciendo —Libby balbuceó.

       —Así que, se andaba besuqueando mientras nosotras nos preocupábamos por ella —Kayla rodó sus ojos. —Necesito besarme con un chico —dijo escaneando la multitud.

       —Vamos a bailar, Minnie —Cam de repente apareció y me tomó de la mano para arrastrarme a la pista de baile.

       Amaba la salsa; podías mover tus caderas sensualmente y no importaba si no conocías la canción porque el ritmo te guiaba, no como las nuevas canciones electrónicas donde si no conoces la canción sólo te paras ahí moviendo tu cabeza aburridamente.

       Cam me enredó en sus brazos, dejando mi espalda pegada a su pecho y luego me dió vuelta para poder quedar de frente y ver su sonrisa maligna.

       —Te voy a pagar por esa foto ahora —declaró.

       —¿Qu... —me silenció con un corto beso.

       —¡¿En serio, Cam?! ¿Otra vez? —exclamé indignada mientras él seguía bailando conmigo en sus brazos.

        —Te voy a empezar a vender besos —murmuré irritada.

        —Te harías millonaria —soltó una risita.

        —Ya me voy, no me voy a arriesgar a otro beso —le dije alejándome.

        —¡Adiós! —se despidió felizmente.

       La pista de baile estaba llenísima, no cabía ni un alfiler; Estaba sorprendida de como podíamos bailar ahí, ya que después de unos minutos las probabilidades de morir por falta de oxígeno eran muy altas. Fui a tomar aire fresco en la gran terraza. Me senté en una silla a ver las estrellas. La noche estaba hermosa, había unas cuantas nubes, pero aún se podían ver las estrellas.

       —Aquí estas, Minnie Mouse —Ari dijo sentándose en la silla junto a la mía.

       —Aquí estoy —sonreí.

       —Te he estado buscando por todas partes.

       —Quería aire fresco —cerré los ojos e inhalé profundamente. El aire estaba soplando ligeramente, haciendo que mi cabello castaño bailara.

       —Por cierto, tu corbata debería ser naranja y no negra, combinamos todo el año ¡¿y tú decidiste romper la tradición el día de la fiesta de graduación?! —negué con la cabeza, abriendo los ojos de nuevo. En lugar de responder comenzó a romper una hoja que se encontró en el suelo.

       —¿Qué pasa? —le pregunté preocupada.

       —¿Besas a todos los chicos con los que bailas? —me preguntó irritado. No podía creer que hubiera visto eso.

       —¡¿Qué?! ¡Ari! Ese fue sólo Cam siendo Cam —rodé mis ojos. —Pensé que no lo haría otra vez, pero creo que me equivoqué.

       —¡¿Otra vez?! ¿Esa no era la primera vez que te besaba? —lanzó los pedazos de hoja a un lado y yo lo miré con los ojos bien abiertos.

       —Mmm... ¿no? —sonreí timidamente.

       —Bueno, en ese caso, aún me debes un baile —comentó inocentemente.

       —Sí, pero no te preocupes, no beso a mis parejas de baile —traté de tranquilizarlo, y él rodó sus ojos.

       —Por cierto, ya bailaste con todos menos conmigo —me hizo un puchero.

       —No he bailado con Dyl.

       —Y no lo harás —giró su cabeza hacia mí.

       —¿Cómo sabes? —lo reté mirandolo.

       —Porque yo voy a ser tu pareja de baile y voy a monopolizar tu tiempo por el resto de la noche —dijo con confianza.

       —¿Y qué si no quiero? —le dije sólo para irritarlo. Claro que, sí quería, ¿Quién en su sano juicio rechazaría bailar con Aarón?

       Se acercó a mi rostro y me congelé.

       —No está en mis planes dejarte ir —susurró en mi oído antes de arrastrarme hacia adentro.

        Aún estaba sonando música salsa y comenzamos a bailar. Bailé con muchos chicos esa noche y todos eran buenos bailando, pero pasaba algo extraño con Aarón, era como si nuestros cuerpos estuvieran sincronizados a la perfección.

       —¿Dónde está Dyl? —pregunté cuando me di cuenta de que no estaba en los alrededores.

       —No sé —Aarón se encogió de hombros.

       —Vamos a buscarlo —dije, alejándome de sus brazos mientras él resoplaba irritado.

       Encontramos a Dyl sentado en una silla junto a la bruja; lucían como si esa fuera la peor noche de sus vidas.

       —¿Qué estas haciendo sentado aquí? —le pregunté a Dyl.

       —¡Párate y baila, amigo! —Aarón dijo para complacerme.

       —No quiero bailar y ella no quiere bailar —Dyl dijo en tono severo, señalando a la bruja.

       En el fondo escuché que cambiaron la salsa por canciones más lentas y románticas. No le presté mucha atención porque en ese momento estaba ocupada con otro asunto.

       —No puedes estar aquí todo aburrido —argumenté.

       —No importa... en serio —me dio una mirada significativa.

       Suspiré y miré a Aarón, quien se encogió de hombros. Caminamos a las orillas de la pista de baile y noté que estaba llena de parejas bailando muy acaramelados. Miré a Aarón por el rabillo del ojo y traté de escapar.

       —¿A dónde crees que vas? —susurró en mi oído, poniendo su brazo alrededor de mi cintura para guiarme hacia la pista. ¿Qué pasa con él y susurrar en mi oído el día de hoy?

       —No sabía si aún querías bailar —mentí. La verdad era que no quería tener más momentos románticos con él.

       —Te dije que iba a bailar contigo el resto de la noche —dijo con su más linda sonrisa.

       La canción que estaba sonando no sólo era romántica, sino que también tenía un ligero toque sensual. Me ponía nerviosa.

       —Pon tu mano en la mía, hazme todo el honor —tomó mis dos brazos y los puso alrededor de su cuello, luego regresó los suyos a mi cintura y comenzó a balancerse al ritmo de la música, tarareando la letra de la canción "bailar" de Leonel García.

       —Eres tú con quien quiero bailar, por favor, amor, una pieza más —comenzó a cantar más fuerte. Me dio una media vuelta dejando mi espalda contra su pecho y se balanceó de lado a lado. Recargué mi cabeza sobre su hombro y cerré los ojos.

       —Porque cuando se encuentra la pareja ideal, todo buen bailarín no la suelta jamás —me desenredó estirando un brazo y me guiñó un ojo. Me mordí el labio para suprimir una sonrisa.

       Me acercó a él de nuevo y me guió perfectamente con el ritmo. Amaba ese lado despreocupado de Aarón. La mala noticia era que estaba en territorio peligroso porque su lugar en mi corazón estaba creciendo, si es que eso era posible.

       La atmosfera se volvió intensa cuando la canción terminó y Aarón alejó un poco su cabeza para poder atrapar mi mirada con sus penetrantes ojos turquesa. Mi corazón latió rápidamente, y no fue porque estaba cansada.

       —Esta es la manera en la que debe de ser —dijo de repente.

       —¿A qué te refieres? —pregunté confundida.

       —Tú y yo juntos. Definitivamente hubieras sido mi cita —sonrió.





Esta fiesta la acabo contigo, lo sé
Yo me muero bailando en tus brazos, mujer
- Bailar de Leonel García -


Copyright © 2019 PinkGlitterKiss
Pendientes el 31/03 para el próximo capítulo: De Verano a Invierno de Kany García


N/A:

Hola sensuales fans de zona de amigos!

Gracias por leer, votar y comentar (:

Le dedico este capítulo a Fena_onedirection Gracias por seguir leyendo y votar :')

Quiero aclarar que no he desaparecido haha solo he estado muy concentrada en escribir. Estoy a punto de escribir una escena muy importante y lo que llevo no me convence, estoy de perfeccionista 🤭

Les escribo luego (:

Bye 👋🏽
Los quiero ❤️
Besos color rosa y con brillitos 💋

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