Los personajes de Ranma ½ pertenecen a la mangaka Rumiko Takahashi y solo escribo para los fans por diversión que aman esta genial serie de Anime y manga sin obtener algún ingreso económico.
—Es hora de comenzar—dijo Izanami.
Izanami y Akane estaban en el salón de clases de Izanami enfrente de diez alumnos que hacían sus exámenes extraordinarios. Akane e Izanami decidieron juntar sus dos grupos para terminar con el curso antes de tiempo.
—No se estén viendo Haruka y Hirai—dijo Akane.
—No nos estábamos viendo—contestó Haruka—. Solo estábamos comparando respuestas.
—¡Prácticamente estaban copiándose! —se quejó un alumno.
—¡Sepárense! —ordenó Akane.
Los chicos obedecieron.
Nuevamente se quedaron en silencio hasta que Izanami habló en voz baja.
—Supe que papá nuevamente le pidió dinero prestado a Emi.
—Solo que esta vez deje que él lo resolviera él—respondió Akane—. La verdad no sé que hace con el dinero que gana si recibe lo suficiente.
—Eso quiere decir que le esconde algo—comentó una alumna.
Akane la vio y la chica se asustó.
—O eso pienso—dijo la chica.
—A ver, ¿Tú que piensas? —le preguntó Akane.
—Tal vez lo usa para algo que no le quiere decir—siguió la chica—. Eso le sucedió a mi mamá y lo que pasaba era que lo usaba con su amante.
El rostro de Akane se endureció.
—Cálmate, no creo que haga eso—la calmó Izanami—. Sabes bien que él no es así.
—Paso lo mismo con papá—habló otro chico—. Mi papá siempre salía de noche y regresaba tarde y para no sentirse culpable abrazaba a mamá porque cuando llegaba, ella ya estaba dormida.
El rostro de Izanami se endureció.
—Maru hace eso cada miércoles.
El chico brincó del susto.
—Pero calme, maestra. No creo que su esposo lo haga. No todos son iguales—dijo una alumna.
—Mi mamá siempre le decía que iba a caminar—siguió el joven.
—Él dice lo mismo—dijo Izanami.
Los chicos se asustaron.
—Te dije que era un desgraciado.
—También le decía que iba a comprar leche y pan, y eso era todos los días.
—Ranma lo hace cada noche.
Los chicos se asustaron.
—¡Suficiente no hay que seguir hablando de esto! —exclamó otra alumna—. No todos son iguales y posiblemente ellos si hacen lo que dicen.
—¿Posiblemente? —preguntaron Akane e Izanami apretando los dientes.
La chica brincó del susto.
—¡Mejor nos callamos! —exclamó un chico.
Los alumnos regresaron a sus exámenes. La puerta se abrió y era Ranma.
—Akane, ¿No tienes dinero que me prestes?
Se sintió la tensión en el salón.
—¿Qué haces con ese dinero? —le preguntó Akane con una voz grave.
—¡Creo que se lo tomó en serio! —exclamó un alumno.
—¿Eh? No entiendo.
—¡Me estas engañando ¿Verdad?! —gritó Akane.
—¿De donde sacas eso? —preguntó Ranma arrugando el ceño.
—¡Dime la verdad! —exigió Akane.
—¡Yo no te engañó! —se defendió Ranma.
El teléfono de Izanami sonó y ella contestó.
—Hola—contestó—. ¿Qué sucede?... Que en la noche saldrás—alzó una ceja.
—¡Creo que también se lo tomó en serio! —exclamó el mismo alumno.
—Dime la verdad, ¿A dónde vas cada noche? —le preguntó Izanami—. A caminar... En ese caso, hoy te acompañare... Ah, que puede hacerme daño en mi estado porque hace frío... Que quieres estar solo... ¿No será que te va a caminar con alguien?... ¡Dime la verdad! ¡Tienes a otra ¿Verdad? —le gritó.
—¡No seas tonta Akane! ¡¿Cómo crees que te voy a engañar?! ¡Después de todo de lo que vivimos no confías en el amor que te tengo!
—¡Entonces iré contigo en la noche!
Ranma se quedó serio.
—Pero es el momento en que estoy solo y necesito a veces estar solo—respondió Ranma rascándose la mejilla.
—¡Ves! ¡Te vas con otra!
—¡Claro que no! ¡Que terca eres!
—¡¿Tanto te molesto?! —gritó Izanami que seguía en el teléfono—. Tu momento a solas, ¿Pero si ni te molesto en el trabajo?... Bueno si, te pido que vayamos a comer, ¿Pero que tiene de malo? ¿No podemos comer juntos?... Entonces si no estas con otra ¿Por qué cuando llegas me abrazas por atrás? ¡Te mata la consciencia ¿No?!
—¡No seas ridícula Akane! ¡Me tiene harto tus malditos celos! ¡Yo no te celo y eso que estas con muchos hombres en el trabajo y yo no me pongo en la manera en la que te pones! ¡¿O quieres que piense mal?! ¿La consciencia te esta molestando?
—¡¿Me estás diciendo que te engaño?!
—Estuviste mucho tiempo sola—se cruzó de brazos—. ¿Quién me dice que no tuviste algún encuentro con alguien? Eras soltera, ¿No?
—¡Eres un desgraciado! —le gritó Akane.
—¡¿Ahora te pones celoso de mis alumnos?! ¡¿Quién te dijo que querían tener una foto mía?! ¡No me cambies de tema! ¡Dime la verdad! ¡¿Te parezco poca cosa?! ¡Porque a mi no se me olvida que cuando comenzamos me llevabas a la azotea para hacerlo y solo nos hicimos novios ni me tocabas!... ¡Si ya sé que tuvimos esa pelea hace años! ¡Pero dime la verdad!
—¡Siempre me decías que estabas muy cansada y por eso no querías! ¡¿Tú como crees que me siento?!
—¡¿Y solo por eso buscas a otra?! —le contestó Akane—. ¡¿Por qué no te complazco?!
—¡No seas exagerada Akane! ¡Yo no quise decir eso, pero, así como tú tienes tus quejas yo también tengo las mías! ¡Yo ni siquiera se me había pasado por la cabeza de que podrías tener otro por eso, confío en ti y es el colmo que no confías en mí!
—¡Pues entonces iremos por el pan y leche en la noche!
—¡Quiero mi momento a solas! —se negó nuevamente Ranma.
—¡Pero que rayos! ¡Es obvio!
—¡¿Será que te vas a caminar con una mujer mejor que yo?! ¡¿No te complazco?! ¡Claro, como la señorita mejor cuerpo 2009 que tenías de doctora pudo complacerte mejor que yo ¿No?!... ¿En serio piensas que tengo mejor cuerpo que ella? —se calmó y sonrió—. ¿Y cómo sabes que tengo mejor cuerpo que ella? —entrecerró los ojos—. ¡Y luego dices que exagero!... Si, estoy en clases haciendo exámenes extraordinarios... Pues sí, ellos comenzaron a decirme eso... ¿Darme cuenta de qué? ¿De que me dijeron todo eso para que nos entretuviéramos y copien en sus exámenes sin que nos diéramos cuenta?
Izanami volteó y efectivamente era lo que hacían. Tocó el hombro de su mamá e Izanami señaló al grupo. Akane no se calmó, pero olvido por completo a Ranma.
Los chicos notaron que había silencio. Levantaron la vista y comenzaron a sudar de los nervios. Ranma no comprendía lo qué pasaba.
—¿Chicos, tienen tiempo en vacaciones de venir a cursos para sus exámenes especiales? -preguntó Izanami amablemente.
—¡¿Ehhh?!
—¡Te dije que no iba a funcionar! —dijo un alumno a su compañero.
—Pero al menos ya terminé mi examen—sonrió mostrando la hoja.
—¿Y no te gustaría otro? —le preguntó Akane con una sonrisa amable.
—¡No! —gritó el chico con mucho miedo.
—¡No es justo! —señaló el otro compañero—. ¡Posiblemente era mentira lo que dijimos, pero lo que es verdad es que la hermana de su esposo es maid en la cafetería de la esquina!
—¿Qué? —preguntó Akane.
Akane se dio la media vuelta y Ranma no estaba. Entrecerró los ojos y salió del salón caminando lentamente. Izanami miraba la puerta y después vio de reojo a sus alumnos.
—¿En que está pensando? —preguntó un alumno.
—Pienso en cuantas hojas usare para su próximo examen, hasta creo que me acabaré la tinta de mi impresora.
—¡Nooo!
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Yo recuerdo que cuando hacía uno, mi maestro se durmió y pudimos copiar u otra que reutilizó el examen semestral en el extraordinario porque se había ido de fiesta y no alcanzo a escribir el examen -_- Pero me ayudó porque saqué 9 XD
Saludos.