Me desperté eran las 8 de la mañana, Alex aún dormía a mi lado, me monte encima de él, y le tome el rostro y comencé a besarle los labios para que despertara, rápidamente sentí sus manos en mi cintura y de un momento a otro él era el que estaba encima de mí.
-¿Cómo amaneciste? - dijo sonriendo.
-Perfectamente- le besé los labios.
El sonido del celular Alex aparto nuestras miradas, el tomo su celular, y su expresión cambio repentinamente, su piel se tornó pálida y yo me asusté.
-Ma... mamá?
Estaba confundida porque no entendía por qué se había puesto así por una llamaba de su madre, él colgó el teléfono, me miró fijamente.
-¿Quieres conocer a mi madre?
Un frío me paso por la espalda al escuchar eso
-Pero como... ¿Ella está aquí?
-sí.
Note la angustia en su rostro, así que me levante de la cama, rodee mis brazos en su cuello y lo bese.
-Me gustaría conocerla- dije con una sonrisa
-lo siento... Ella es algo... Intensa, gracias.
-Arréglate, tenemos que conocer a tu madre- le dije sonriendo y le plante un beso en los labios
Salimos de la de la ducha y nos vestimos, él se puso un traje negro con camiseta azul y los botones desabrochados, y yo me puse un vestido negro pegado al cuerpo y arriba de la rodilla.
Salimos del hotel y nos subimos al auto.
-¿A dónde iremos?
-A... su casa.
Vaya su madre vivía aquí en París, despertarse y ver esa ciudad tan hermosa debe ser maravilloso.
Después de un rato llegamos a una casa, era muy grande con un Jardín Gigantesco.
-Vengo a ver a mi madre- Alex le dijo al guardia de la puerta
-Adelante señor y señora Fernández.
Al escuchar eso de inmediato Alex y yo nos miramos, él solo sonrió tal vez para no hacerme sentir incómoda,
Su madre tiene demasiado dinero, ¿y su padre?, Alex nunca me ha comentado nada de él.
-Alex querido- era su madre que corría para abrazarlo
Alex y ella se abrazaron por un buen rato, se notaba el amor que se tenían
-ya basta mama me vas a ahogar.
La mamá de Alex me miro detenidamente.
-Quien es esta hermosa señorita?.
-mucho gusto señor, soy Camila.
Ella me jalo de un brazo y me abrazo, sorprendida por lo que había hecho, decidí abrazarla también.
-Y yo soy esperanza- dijo con una sonrisa mientras me abrazaba
-mama para ya la vas a lastimar.
-ay Alex, todos aman los abrazos, y dime Alex, ¿es tu novia?.
-Si madre es mi novia- me miro y me planto un beso en la mejilla
Quede sorprendida al oír eso, ya que nunca Habíamos formalizado nada
-Alex por favor espéranos en la sala, ven querida tengo algo que mostrarte.
Me tomo de la mano y me llevo hacia una Habitación bastante amplia
-Que desea mostrarme? - dije con timidez
-mira, este es mi Alex cuando pequeño, pero no le digas que te mostré o me mata.
Era una foto de Alex cuando pequeño se veía bastante tierno y lindo, estaba junto a dos hombres, tal vez uno de ellos era su padre.
-y dígame señora, ¿quiénes son los hombres en la foto?
-uno es su abuelo y el otro es su padre- dijo algo melancólica
-Disculpé, Su marido, ¿dónde está?.
-No te preocupes, querida, él falleció cuando Alex tenía 15 años, tuvo un accidente en auto, pero no creo que Alex lo allá comentado, ya que no le gusta hablar de eso.
Alex nos interrumpió entrando a la habitación
-Mamá, no me la robes por favor.
Yo me acerqué a él y lo tomé de la mano
-Mamá, puedes salir un momento, tengo algo que hablar con Camila.
-claro amor, los dejo solos.
La madre de Alex salió de la habitación dejándonos solo, pero... ¿Qué quería hablar conmigo?.
-no soporto que te alejes de mí tanto tiempo.
Me tomo de la cintura y me levanto, me recostó en la cama y comenzó a besarme, pero que estaba pasando, íbamos a tener relaciones en la casa de su madre, el saco mis bragas y se desabrochó el pantalón, comencé a retorcerme en placer, Alex solo tenía su mano en mi boca evitando que hiciera ruido.
Escuchamos pasos acercándose a la habitación, acto seguido era la madre de Alex golpeando la puerta
-Vamos a comer la cena esta lista, los espero abajo.
Nos apuramos a vestirnos y dirigimos al comedor, donde su madre nos estaba esperando.
Toda la cena fue muy divertida, hablamos de Alex cuando estaba pequeño, y de su madre cuando era pequeña, la mamá de Alex era una mujer realmente encantadora, sin duda alguna, mi cariño por ella iba a crecer.