-Camila yo...-lo interrumpí con una voz fuerte
-¡que carajos te pasa!-lo mire furiosa
El tomo rápidamente la llave de mi habitación y me subió rápido al elevador, sin pensarlo dos veces Alex entro a mi habitación y cerro la puerta.
Estaba confundida y no sabía exactamente lo que pasaba y la razón de que Alex estuviera aquí.
Tome paso determinado a mi habitación, toque la puerta dos veces, pero nadie contesto, la toque una vez más.
La puerta se abrió rápidamente y Alex me metió a la habitación, me puso contra la puerta y comenzó a besarme, intente parar, pero no lo conseguía, ya estaba sumergida en su beso.
Después de unos minutos nos separamos para tomar aire, nos quedamos mirándonos por un buen rato, él me planto un dulce beso en los labios, se acercó a mi oído y me susurro.
- no logro estar sin ti.
Esas palabras me estremecieron todo el cuerpo, me levanto del suelo mientras me besaba, mis piernas estaban apoyadas en su cintura, me acostó en la cama y nos seguimos besando. Retiro sus labios de los míos.
-solo hay una cama- dijo con picardía.
-pues dormirás en la bañera- dije con una sonrisa en mi boca, el río ante mi comentario.
Se levantó de la cama y tomo paso a la puerta.
-tenemos una cita para esta noche paso por ti a las nueve- dijo sonriendo, y salió de la habitación cerrando de la puerta.
No podía creer lo que había pasado, pero la pregunta de cómo Alex me había encontrado retumbaba en mi cabeza, pero nada de eso me importaba en ese momento, me levanté rápidamente y fui a la bañera, me quedaba una hora para arreglarme.
Me dirijo a la ducha y abro la llave, el agua estaba caliente y hacía que relajara mi cuerpo, pero aun así saber que iba a pasar después de la cita con Alex me ponía tensa, pero decidí dejar de pensar en eso y cerrar la llave y salir de la bañera.
Fui a mi maleta y me vestí elegante.
La puerta sonó, por suerte estaba lista, Alex entro y tenía un traje el cual lo hacía lucir más guapo, Alex se acercó a mí y me beso seguido de decirme que me veía hermosa, me tomo de la mano y nos subimos al elevador.
El elevador se detuvo y sus puertas se abrieron, unas personas de edad avanzada se subieron y se dieron un tierno beso, la cual me produjo bastante ternura.
Mire a Alex y tenía una sonrisa plantada en la boca mientras me miraba, las puertas se abrieron y las dos personas que estaban con nosotros se bajaron.
Las puertas se cerraron y Alex me tomo y me comenzó a besar, me tenía contra la pared del elevador, las cosas cada vez se estaban poniendo más intensas, por desgracia las puertas se abrieron, lo cual nos indicaba que llegamos al último piso.
Alex me tomo de la mano y nos subimos al auto, comenzó a conducir, me quede distraída viendo su boca, luego su voz me saco de mis pensamientos.
-llegamos- dijo sonriendo
levante mi mirada y estábamos en el famoso restaurante thoumieux, era realmente hermoso el restaurante, toda la cena fue bastante agradable, terminamos de comer y nos fuimos al auto de Alex, todo el viaje fue divertido, nos reímos mucho.
Al llegar al hotel no fuimos a la habitación, Alex sacó la llave y la introdujo en la puerta, los nervios me comían por dentro, no sabía qué pasaría, no me daba nervios, estar con un hombre, ya que no era virgen, los nervios eran por Alex, pero aún no sabía por qué me sentía así, nunca antes me había sentido nerviosa de estar con un hombre.
Alex empujo la puerta y me tomo de la cintura y comenzó a besarme, luego me llevó a la cama.
-¿aún quieres que duerma en la bañera? -me miro con picarda
yo negué con la cabeza y comenzó a besarme, estaba sumergida en él, me quito el vestido y yo le retiré la camiseta, su cuerpo era fenomenal.
Él soltó mi sostén y se retiró el pantalón, bajo mis bragas y comenzamos a besarnos, era realmente grandioso en la cama, era la mejor sensación que había tenido en años.
-eres lo mejor que me ha pasado-dijo sonriendo.
Terminamos durmiendo abrazados.