10 De septiembre.
Narra David.
Traquearon la puerta del apartamento diciendo las siguientes palabras:
-Policía, abra la puerta o se la echaremos abajo.
Abrí y en menos de media hora me encontré entre rejas por secuestro.
Ya está.
*Narra Lorena*
No sé ni cuanto tiempo llevo aquí.
Pero mucho.
Me he pasado casi todo el rato durmiendo para que se me hiciera más corto.
Me he guiado en los horarios por las veces que me entraba hambre o cuando me daba más sueño, asi que si mis cálculos no han fallado llevo aquí metida siete días.
Osea, hoy es diez de septiembre.
Derepente escucho a alguien corriendo y susurrando que se acercan al trastero en el que yo estaba.
Me asusté.
Era la primera vez en los siete días que estaba despierta cuando había alguien.
Pegué varias palmadas en la puerta.
-EEH! Aquí!! Ayuda por favor.
Se acercaron rápido hacia allí y me dijeron:
-Policía, apartese de la puerta, la echaremos abajo.
Y les hice caso.
Me aparté a pasos rápidos y echaron la puerta abajo.
Una policía se acercó y me abrazó.
-Dónde está?
-Quién?-Dice la mujer.
-David.
-En la cárcel, tranquila, ya no te podrá hacer nada.
Salí de allí corriendo como si se estuviera incendiado el sótano.
Subí al apartamento de David, el que algún día fue mío, y entré, a pesar de que había policías que me lo intentaban impedir.
Mi teléfono estaba en la encimera de la cocina.
Lo cogí.
-Eh, chica, no puedes coger eso.
-Mira, tío, todos fuera de aquí, este es mi teléfono, y esta mi casa, y quiero ver ahora mismo una orden judicial para poder haber entrado aquí.
Llamé a Blas.
Vino a por mí.
Me llevó a donde tenían a David.
Y me tuvieron dos horas esperando.
Pero me dejaron verlo.
-QUÉ MIERDA PRETENDES?
-Yo? Nada, por qué?-dijo bastante tranquilo.
-No te hagas el tonto, has hecho toda esta mierda para que pensaran que yo no fui la que secuestro a Ada, si no tú. Me secuestras para que no me culpen a mí? Y en el trastero del sótano para que fuera fácil encontrarme. Estás loco?
Suspira.
-No tenías culpa de nada no? Bueno, entonces qué más te da?
-Me da lo que Jorge piense cuando no pueda ver a su padre.
-Y qué hago?-dice encogiendose de hombros.
-Cuándo es el juicio?
-Pregúntale a tu novio, ha sido el que ha puesto la denuncia.
-Jodeer... Mira, cuando sea el juicio se dice la verdad y ya está, la culpa no es tuya David.
-En parte sí, ya sabía que seguías sintiendo algo por mí, no sé para que te pregunté esa noche
-No siento nada por ti. Al contrario que tú.
-Puede, pero yo me voy a casar y lo poco que me quedé de ti se me olvidará.
-Poco? Estás en la cárcel por protegerme. A caso has pensado en lo que dirá tu futura mujer cuando se entere de que estás en la cárcel a penas un mes antes de vuestra boda, para que no me metan a mí?-sonrío.-Buena suerte entonces.-me pongo de pié y el guardia de seguridad se acerca.
Le pone a David las esposas.
-Adiós.
-Denada eh, denada.-me dice sonriendo.
-Gracias.-dije por lo bajo, casi en un susurro.
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Menuda monosidad conio.
Sigooo??
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