Una Mirada (Dramione) •EDITAN...

By MaCa744

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Después de la Segunda Guerra Mágica, Hermione regresa a cursar su séptimo y ultimo año en Hogwarts, junto con... More

Capítulo 1: Callejón Diagon.
Capitulo 2: Expreso de Hogwarts.
Capitulo 3: Besos en el pasillo.
Capitulo 4: Revelando temores.
Capitulo 5: ¿Celos?
Capitulo 7: Te quiero.
Capitulo 8: Revelaciones.
Capitulo 9: Dolor.
Capítulo 10: Fuga masiva y ¿despedida?
Capítulo 11: Venganza y vacaciones
Capitulo 12: La partida.
Capitulo 13: "Perdoname, Hermione"
Capitulo 14: Confrontación.
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Nota final.

Capitulo 6: Cumpleaños ¿feliz?

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By MaCa744

Normal POV

Hermione estaba plácidamente dormida en al comodidad de su cama, hasta que unos rayos de sol que se colaban por la ventana la despertaron. Abrió lentamente los ojos, aun adormilada. Lo primero que vio fue una hermosa rosa roja. Sonrió mientras la tomaba en sus manos y se sentaba sobre la cama, la acerco a su nariz, y aspiró su delicioso aroma. Sabía quien la había dejado ahí. Después de desperezarse, se dio una larga ducha. Se puso a pensar en los sucesos que habían pasado en las ultimas semanas. A pesar de sentir un poco de remordimiento, ya que aun no se lo había dicho a sus amigos por obvias razones, se sentía feliz. Disfrutaba de cada momento que pasaba junto a Draco, disfrutaba de cada caricia, cada palabra, cada beso lento o apasionado y sobre todo, disfrutaba la forma en que la hacia sentir. No sabía que eran, pero de lo que estaba segura, era de que ellos, eran un no sé que, que le encantaba. No eran amigos, tampoco novios. Eran mas un intermedio, un doloroso pero hermoso intermedio. Podían dejarlo cuando quisieran, el problema era querer dejarlo. Aunque la mayoría del tiempo se la pasaban discutiendo, que jamás estaban de acuerdo en algo, los dos sabían perfectamente que estaban locos el uno por el otro.

Salió de la ducha, se arregló y bajo las escaleras. Era sábado, por lo que no tenía que preocuparse por las clases. Abajo, se encontró con el causante de sus desvelos y suspiros involuntarios. Su corazón comenzó a palpitar rápidamente, como pasaba cada vez que lo veía. Él, por su parte, esperaba paciente a que ella bajara. Esa chica se había convertido en su adicción, a cada momento quería tenerla junto a él, besarla a cada instante. Sabía que esto se le estaba yendo de las manos, pero poco le importaba, Hermione le daba todo lo que necesitaba. Se giró al escuchar pasos bajar. Ahí estaba, tan hermosa como siempre, con esa sonrisa tan perfecta. Quizá no fue como sus antiguas conquistas, tan deslumbrantes, pero para él, para sus ojos, ella era la mujer mas hermosa que existiera.

-Feliz cumpleaños, Hermione- dijo mientras se acercaba a ella y depositaba un suave beso en su mejilla. Si, hoy era el cumpleaños numero diecinueve de Hermione Granger.

-Gracias- dijo ella con un leve rubor en sus mejillas. Aun no se acostumbraba a que le llamara por su nombre, aunque le gustaba. El sonrió mientras le extendía su mano para ayudarla a bajar los escalones restantes.

-¿Bajarás para desayunar?- preguntó. Ella sonrió de nuevo y asintió.

-Si, Harry y Ron me dijeron que me verían en la sala común de Gryffindor al medio día- respondió ella. Él asintió.

-Te veré en la noche, entonces- anunció mientras salía de la sala. A Hermione se le hizo extraño, ya que él, siempre, antes de irse le daba un beso. No pudo no sentirse un poco desilusionada.

Salió de la sala común, mientras caminaba, todas las personas con las que se encontraba, le deseaban un feliz cumpleaños. No le gustaba llamar mucho la atención, pero el ser la heroína de guerra, no le ayudaba mucho.

Llego al gran comedor, se sentó junto con sus amigos. Ginny le dio un abrazo mientras le deseaba feliz cumpleaños. Ron y Harry también le dieron un abrazo. Además de que cada uno le dio un detalle como obsequio.

-Gracias chicos- agradeció mientras les sonreía a todos.

-Hermione, yo tengo algo más para ti- anunció Ron mientras sacaba una pequeña cajita de su túnica- espero te guste- dijo mientas se la entregaba. Ella lo abrió y se sorprendió al ver una hermosa pulsera con su nombre incrustado.

-Es hermosa, Ron- lo volvió a abrazar, él le devolvió el abrazo- gracias- dijo ella aun abrazándolo. Cuando se separaron él la ayudo a ponersela. Se le veía satisfecha.

Lo que ninguno de los dos imaginaba, era que un Slytherin de cabello rubio platinado los miraba con la quijada y puños apretados. No toleraba ver como la comadreja abrazaba a Hermione, su Hermione. Si se abrazaban por un segundo mas, estaba dispuesto a irle a romper la cara al idiota ese. No sabía lo que sentía por Hermione, pero tan sola verla cerca de alguien mas, hacia que su sangre hirviera. Ella era suya.

-Hola, Draco- dijo Lantrange mientas se sentaba enfrente de él, interfiriendo con sus pensamientos asesinos.

-Hola- dijo seco mientras tomaba de su copa. Ella lo miro por unos segundos, inspeccionándolo- ¿qué se te ofrece?- trató de sonar amable, pero no estaba de humor en esos momentos.

-Bueno, seré directa. Tu me interesas- dijo mientras sonreía coquetamente. Draco la miró serio por unos segundos, para después sonreír de lado.

-Lo siento, pero como te había dicho antes: tú a mi no me interesas- dijo mientras le miraba a los ojos. Ella alzó una ceja, entre ofendida y enojada.

-Ya veremos, mientras tanto, sigue disfrutando de tu sangre sucia- espetó mientras se ponía de pie y se dirigía a la salida. Draco quedo sorprendido unos segundos, ¿cómo lo sabía? Se puso de pie y la siguió, no podía dejar que se lo contara a alguien más.

Antes de salir la tomo del brazo y abrió las puertas paras salir. Ella sonrió triunfante mientras se soltaba del agarre de él.

-¿Cómo lo sabes?- preguntó al dar vuelta en el pasillo.

-No soy estúpida, ¿sabes?- rodó los ojos- ¿Crees que no me daba cuenta como la mirabas desde nuestra mesa? ¿Como tenías una sonrisa estúpida cada vez que la veías?- él se quedo callado, ya que era cierto, pero no podía evitar hacer eso- ¿quién se imaginaria que el gran Draco Malfoy se relacionaría con una san..?- antes de terminar, Draco la interrumpió.

-No te atrevas a insultarla- su tono de voz era frío. No dejaría que nadie la insultara mientras él estuviese.

-¿La quieres?- esa pregunta descolocó totalmente a Draco. ¿La amaba? No lo sabia- la quieres- aseguró al verlo dudar.

-No, no la quiero- afirmó- y no le digas nada de esto a nadie- a el no le importaba que alguien se enterara de su romance con Hermione, pero él sabía que para ella era muy importante mantener el secreto, por sus estúpidos amigos. A Draco no le importaba ya los estatus de sangre.

-Bien, pero con una condición- dijo mientras una sonrisa malévola aparecía en su rostro. Draco sabía que no era buena señal.

Mientras tanto...

En la sala común de Gryffindor, se encontraban en una pequeña reunión, aunque parecía mas una fiesta, por el cumpleaños de Hermione. Había cerveza de mantequilla, charolas con comida y además algo de música. Todos se estaban divirtiendo, a excepción de la festejada. Ella no podía dejar de pensar en como Malfoy tomo del brazo a Lestrange y salieron juntos. Le dolía el pensar en lo que pudieran estar haciendo. No supo en que momento, pero ahora lo sabia, ella quería a Draco Malfoy, Demasiado.

Se despidió de todos y se dirigió a su sala, no tenia ánimos para festejar, se sentía extrañamente exhausta. Al llegar a su sala, dijo la contraseña y se dirigió hacia el sofá. Recordó la primera noche, cuando le confeso a Malfoy que tenia miedo, en ese momento no sabia de que, pero ahora si, tenia miedo a sentir algo más por él. Y lo que no quería que pasara, pasó. Y es que, ¿cómo no enamorarse?, si cada vez que la besaba hacía que se sintiera en el mismísimo cielo, si cada vez que estaba entre sus brazos se sentía segura, completa. ¿Como no enamorarse de sus ojos mercurio? si cada vez que la miraba con esa intensidad, hacia que se sintiera única y especial. ¿Cómo no enamorarse de él?, si el tan solo escuchar su voz, se le erizaba la piel. Sin darse cuenta, unas lágrimas silenciosas comenzaron a resbalar por su rostro. Ella tenia miedo, tenia miedo de decirle lo que sentía y que él la dejara, porque sabia perfectamente que Draco jamás se enamoraría de una despreciable sangre sucia como ella. Su llanto se acrecentó más al recordar la cruel realidad. Y se sintió estúpida, por eso intentó limpiar su rostro de las lágrimas.

-¿Hermione?- escuchó la voz aterciopelada que tanto adoraba. Ella aun más rápidamente se limpio las lágrimas y giró su rostro para que no pudiera verla- ¿qué tienes? ¿qué te pasa?- preguntó al ver sus ojos rojos e hinchados. Tomó su barbilla y con cuidado hizo que lo viera, y comprobó que había estado llorando- ¿por qué lloras?- ella podía ver preocupación en sus ojos, pero sabia que su mente estaba jugando con ella. Volvió a soltar en llanto, él no sabia que era él el causante de su dolor. La abrazó, le dolía verla así, tan frágil. Ella se aferró a él como si su vida dependiera de ese abrazo, no quería seguir llorando en frente de él, pero no tenia fuerzas para dejar de hacerlo. Aspiró el delicioso aroma que él desprendía, su fragancia tan varonil y seductora. Después de tranquilizarse un poco, levantó su cabeza y lo miró a los ojos.

-Lo siento... Arruine tu camisa- dijo al ver el poco maquillaje que se había puesto embarrado en su camisa gris. Draco se encogió de hombros.

-Nada que con un hechizo no salga- la apretó mas a su cuerpo- ¿me vas a decir que te pasa?- pregunto mientras recargaba su cabeza en su coronilla. Sintió como negaba- ¿no?- ella volvió a negar- bien, entonces te convenceré- se separó de ella y le robo un beso. Para ella era una tortura hermosa. Pero ya había tomado una decisión.

Lo tomó por el cuello y lo besó apasionadamente, él se sorprendió, pero aun así la besó con la misma intensidad. Ella, con desesperación empezó a desabrocharle la camisa. Draco no estaba muy consciente de lo que pasaba, pero sabia que tenia que detenerla.

-Hermione, no...- susurró con voz ronca mientras tomaba las manos de ella para detenerla. Ella pareciera que no lo había escuchado, ya que comenzó a besar el cuello y la parte del pecho que había descubierto. Él estaba perdiendo la razón con las caricias que ella le hacia. Lo empujo con fuerza en el sofá, asiendo que ella quedara arriba de él- No- dijo y con cuidado la aparto, sentándose de nuevo. No sabia lo que pasaba con ella, pero no se aprovecharía de la situación, por más que quisiera, debía respetarla, y eso haría. Ella se sintió una estúpida, probablemente él no la deseaba como mujer. Aguanto el llanto, y con paso firme se dirigió a su habitación. Él estaba confundido, no entendía lo que pasaba con ella, pero decidió que lo mejor seria dejarla pensar, y en otro momento hablaría con mas sensatez con Hermione. Subió a su habitación, a darse una ducha fría, vaya que la necesitaba.


*******
E

ditado√√ 10/01/12

Hola!

Este capitulo es un poco largo, gracias a los casi 100 leídos. Estoy muy agradecida con todos aquellos que se han tomado la molestia de leer mi historia. También con aquellos que se toman el tiempo de votar y comentar.

Buno, ¿que les pareció este capítulo? ¿les gustó? Si les gusto por favor voten y comenten.

Los quiere. MaCa744

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