POV JAMIE
Luego de terminar con nuestra maratón de sexo, que consistió en: el sillón de la sala, la barra, mueble y refrigerador de la cocina, las escaleras y hasta una mesita de centro que tiene papá en su despacho, subimos a tomar una ducha para después bajar y dejar toda la casa decente.
Nuestras sonrisas no se borraban por nada del mundo, justo cuando estábamos terminando de arreglar todo, sentimos la llave de papá en la puerta seguido del inconfundible gritito de Dul.
-¡Paaaaaapi! ¡Maaaaaami!.
Dakota y yo nos volteamos para ver entrar a nuestra princesita con un globo de jirafa casi de su tamaño.
-¡Miren lo que el abu Jim me regaló!- dice muy emocionada.
-¡Wow, ese si es un gran globo princesa!- se escucha la voz de Dakota seguido de su carcajada.
-¡Sí, es gigante!- nos dice Dul con sus ojitos expresivos, idénticos a los de su perfecta madre.- ¿Quieren saber por qué me lo compró?
Dakota y yo asentimos y Dul comienza a contarnos.
-Fuimos con el abu Jim al zoológico, ¡y habían muchos animalitos! Más que así.- dice levantando sus deditos pero sin soltar el globo.- Y un señor que nos guiaba, nos pidió que nos portáramos bien y que no metiéramos las manos en las jaulas de los animalitos, porque ellos podían molestarse y dañarnos.
-¿Y qué hiciste tú, princesa?- pregunto.
-Yo hice lo que el señor dijo, papi. Otros niños feos, metieron las manos a las jaulas y terminaron llorando, pero yo no.- responde orgullosa.
-¡Oh! Mira que obediente terremotito tenemos aquí ¿no, Jamie?- dice Dakota tomando a Dul en brazos y llenándola de besos.
-Cierto, mi vida.- digo acercándome a su lado y dándole un beso a ambas.
Cuando levanto la vista me encuentro con papá que no había dicho ni una palabra, parado en el marco de la puerta con una sonrisa partiéndole la cara en dos.
-Y ustedes ¿qué hicieron mientras no estuvimos?.- pregunta papá sin perder su sonrisa.
Dakota y yo nos miramos, y deduzco que el brillo en nuestros ojos y las mejillas sonrojadas de Dakota le dieron una idea a papá de lo que estuvimos haciendo porque comienza a reírse sin parar.
-Oh, ya veo...también se divirtieron.-dice parando su risa.- Muy bien muchachos, así me gusta. Disfruten de su amor.
Creímos que el tema quedaría ahí, pero como las orejitas biónicas de Dul todo lo captan, y ella siempre quiere saber más, no se guardó su duda.
-No entiendo ¿qué hizo mamá y papá en casa, abu?
Jim deja reír y ahora es nuestro turno de hacerlo. Veremos que le inventa a Dul.
-Sí, viejo. Cuéntale a Dul que estábamos haciendo con Dak y veremos si te sigues riendo.- le digo para picarlo más.
-Eh...mamá y papá, em...estaban...-pasa una mano por su cabello como buscando una idea.- mamá y papá estaban...¡estaban jugando a las escondidas por toda la casa! ¡Sí, eso estaban haciendo!
Dul abre sus ojitos y se remueve para que Dakota la ponga en el suelo. Una vez ahí, suelta el globito de Jirafa y se pone a saltar haciendo pucheros mientras nos mira alternadamente a cada uno.
-¡Yo también quiero jugar a las escondidas por toda la casa! ¡Porfis! ¿Sí?
Nosotros comenzamos a reír, y una vez que paramos nuestras carcajadas, papá le responde.
-Otro día, Dul. Ahora debemos preparar la cena.
Y antes de que Dul le diga nada, le dice algo que logra sacarle la idea de jugar de su pequeña cabecita.
-¿Qué te parece si dejamos que mamá y papá descansen un rato, y tú me ayudas a cocinar una rica lasaña?
-¡Sí!- grita entusiasmada.
-Mmm...lasaña hecha por Jim, mi favorita.- dice Dakota con una sonrisa.
-Todo para mi nuera favorita en este mundo.- le responde papá con una sonrisa enorme.
Le tiende la mano a Dul y ambos desaparecen por la puerta de la cocina.
Dakota y yo nos miramos antes de pensar en lo mismo.
-¿Carrera para ver quién gana la televisión?-decimos al mismo tiempo.
-Prepárate para morder el polvo, Dornan.- dice Dakota comenzando a correr.
-¡Hey! ¡Eso es trampa! Ni siquiera contamos.- digo corriendo detrás de ella.- ¡Dakota, ven aquí!
Escucho sus carcajadas y cuando estoy cercano a ella, la elevo del suelo y sigo corriendo con ella entre mis brazos.
Llegando a la sala nos dejo caer en el sillón y Dakota ríe sobre mí.
-Entonces...¿quién ganó?-pregunta.
-Dejémoslo en empate ¿te parece?- le respondo con una sonrisa.
-Me parece.- deja un pico en mis labios y se acomoda sobre mí.- Ahora, prende la bendita pantalla, Dornan.
Le hago caso, y luego de divagar un poco por los canales, ambos nos quedamos mirando un capítulo de Los Expedientes X.
Amábamos esta serie de niños, siempre jugábamos a ser Mulder y Scully. Podíamos pasar horas inventando nuevos casos en el jardín de nuestra casa, de hecho, recuerdo un halloween en que nos disfrazamos de estos personajes.
Río al recordarlo.
-¿De qué te ríes?-pregunta Dak curiosa.
-Es que, me estaba acordando de aquel halloween en que nos disfrazamos de ellos.- digo apuntando a la pantalla.- Y me dio mucha risa, ¡nos veíamos horribles!
Dakota comienza a reír.
-¡Dios! ¿Recuerdas que quise teñirme el pelo como Scully con un bote de témpera rojo?.-pregunta entre sus carcajadas.
-¡¡Oh, tienes razón!!.- respondo comenzando a partirme de la risa.- Nunca voy a olvidar la cara de Mel y Don al verte, ni lo que dijeron después.
Nos miramos y ambos decimos al unísono.
-Dakota Mayi Johnson, ¡no hay más Expedientes X para ti!.- y volvemos a romper en carcajadas.
-Y luego mamá le dijo a papá que llamara a Gill y David para decirles que su serie estaba arruinando a su pequeña princesa.
-Y Don estaba muy en plan "Melanie, cálmate. No podemos culparlos, sabemos que Dakota es de temer."
-Y después nos castigaron a ambos cuando se enteraron que el que me trajo las pinturas fuiste tú.-dice secando sus ojos por las lágrimas de la risa que ha votado luego de este recuerdo.
-¿Cuántos capítulos nos perdimos esa vez?-pregunto.- ¿Dos? ¿Tres?
-Creo que fueron tres, recuerdo que estuvimos como dos semanas sin televisión.- responde sonriendo.
-Ahora que lo pienso.- digo acariciando su cabello.- De pequeños, éramos un dolor de cabeza estando juntos.
-Sí, pero aún así, crecer juntos y hacer todo lo que hicimos, no lo cambiaría por nada del mundo.- me responde Dakota con los ojos brillantes.- Incluso, ni siquiera cambiaría los castigos.- me dice riendo.
-Estoy de acuerdo contigo, Coqui. Nuestra infancia no hubiera sido la misma estando separados.
-No. Tú hubieras terminado siendo un tonto que no se metía en problemas nunca, y yo habría terminado en la correccional por loca.
Me río por su comentario. Aunque puede que tenga razón.
-Mmm...posiblemente. Pero igual, todo fue mejor al estar a tu lado.-digo atrayendo su rostro al mío.
-Concuerdo contigo, gran James.- responde Dakota uniendo nuestros labios.
Después de eso, terminamos de ver el capítulo justo en el momento exacto en que Dul y Papá nos llaman a cenar.
Pasamos la cena recordando momentos de cuando éramos pequeños y hacíamos alguna travesura. Después de escuchar tanto es obvio que todas nuestras dudas de por qué Dul es como es quedaron completamente saldadas.
Seamos sinceros, la pequeña tiene a quien salir.
Y aunque no lo queramos aceptar, y compartamos la culpa. Sabemos que el mayor grado de locura viene por parte de Dakota.
Dul es exactamente igual de imaginativa que ella de niña, y sé que al tener mi grado de locura también corriendo por sus venas, en un futuro nos sacará canas verdes con todo lo que va a hacer.
Pero bueno, me encanta que sea como es. No le cambiaría absolutamente nada.
Y ahora que la veo reír sentada al lado de Dakota por algo que contó papá, con toda la cara con salsa de la lasaña, agradezco poder ser parte de su vida.
Y aunque puede que su nacimiento fuera muy rápido, en una edad donde ambos éramos unos niños aún, no me arrepiento de haberla creado junto a Dakota.
Nunca lo voy a hacer.
Salgo de mis pensamientos en el momento en que Dakota nos ofrece a ambos para lavar los platos de la cena.
-Vamos, gran James. Es nuestro momento de dejar brillando esta vajilla.
Así que, levantando todo en mis brazos, la sigo hasta la cocina.
Dul y papá van un rato a ver televisión hasta que terminemos aquí y subamos a dormir. Cenamos muy tarde, ya son cerca de las 11pm, la sobremesa se nos extendió demasiado. Pero bueno, me encanta que así sea, pasar momentos con la familia es lo mejor.
Quedamos en que yo lavo y Dakota seca y guarda. Una vez terminamos todo, cuando Dak se levanta en puntitas para dejar el último vaso en el mueble, la abrazo por detrás haciendo que ría en mis brazos.
-Hueles exquisito.-digo aspirando el aroma de su cuello mezclado con el de su cabello.
-Me alegra oír eso, así mi perfume carísimo no será en vano.- me dice soltando una risa.
-Es el mejor perfume, nunca lo cambies.- le digo.
-Tomo nota, gran James.
-Ahora...¿está lista para ir a acostar a nuestra hija y luego ir a dormir conmigo, futura señora Dornan?
Dakota se queda quieta en mis brazos y temo que el apodo la haya molestado. Lo dije tan naturalmente que no pensé que podría molestarse.
-¿Cómo me llamaste?- susurra bajito.
-Futura señora Dornan.- le respondo un tanto asustado por su reacción.
Me fijo en que Dakota no hace nada, y al girarla entre mis brazos descubro que sus ojos están llenos de lágrimas.
-¿Qué pasa, amor?- pregunto preocupado.- Si te espanté, lo siento. Es solo que lo quiero todo contigo, sé que tú eres la mitad perfecta que me falta. Siempre lo has sido y siempre lo serás.-le digo sinceramente.- No te asustes por favor, entiendo que es muy pronto, lo decía a futuro...
No pude seguir hablando porque los labios de Dakota me callaron con un beso.
-Jamie, cállate.- dice rompiendo el beso.- Ahora ya sabemos por qué Dul habla tan rápido cuando tiene nervios o está emocionada.- me dice apretando mi nariz.- No me asustaste bebé, solo que el hecho de que me dijeras así movió la vena sensible que tengo dentro. Sabes que yo también deseo compartir todo contigo.
-Uff, y yo que ya me veía siendo perseguido por Don y sus escopetas por asustar a su niñita.
Dakota me golpea en el pecho.
-Eres un idiota.
-Bueno, futura señora de idiota.- digo tendiéndole la mano.- ¿Vamos por nuestra pequeña princesa?
-Vamos, señor idiota.- me responde con una sonrisa.
Así que tomados de las manos vamos hasta la sala donde nos encontramos a Dul durmiendo con su cabeza apoyada en el muslo de papá.
-Se durmió apenas se recostó aquí, estaba exhausta.- nos dice papá al llegar a su lado.
-Bueno, será mejor que llevemos a esta señorita su cuarto.-digo tomando a Dul lentamente en brazos.- Hasta mañana, papá. No te quedes hasta tan tarde y descansa.
-De hecho, iba a subir ahora, hijo.- dice con una sonrisa.- Buenas noches, muchachos. Descansen.
-Buenas noches, Jim.- le responde Dakota antes de que comencemos a subir las escaleras.
Una vez en la habitación en la que se debía quedar Dul desde el primer día, pero que estaba utilizando yo, acomodamos a la pequeña entre las mantas de la cama y luego de dejar un beso en su frente y de acercarle al señor osito para que duerma tranquila, nos vamos susurrando bajito un "buenas noches, amor".
Cuando estamos por fin en nuestra habitación, Dakota va derechito al cajón donde están mis poleras y tomando una al azar, se desnuda quedando solo en bragas y se la pone como pijama.
Van a pasar los años y a mí me va a seguir encantando que use mi ropa para dormir.
Cambio mi ropa por mi pijama, que es en realidad una polera vieja y para abajo mis bóxers, y luego de cepillar nuestros dientes, nos tendemos abrazados en la cama.
-Extrañaba dormir así.- dice Dakota dejando un besito en mi pecho.- Dios, no vuelvas a dejarme dormir sin ti. Las pesadillas eran horribles.- comenta apretándose más contra mi cuerpo.
-¿Cómo? ¿Tú también tenías pesadillas?- le pregunto.
-Sí, en todas de perdía y volvíamos a ser solo Dul y yo.- comenta bajito.- Espera, dijiste "tú también" eso quiere decir que tú igual las tenías.
-Sí, y también trataban sobre perderte.- le respondo dejando un beso en su frente y acariciando su espalda.- Cuando no estábamos juntos, también las tenía. En aquellos años, no había noche en que no tuviera una, pero todas se fueron cuando volviste.
Dakota me mira fijamente y cuando creo que me va a decir algo solo se dedica a darme un profundo beso.
-Te adoro, James Dornan.- dice rompiendo nuestra conexión.
-Te adoro, Dakota Mayi Johnson, futura señora de idiota.- le digo ganándome un golpe en las costillas.- Okey, okey, futura señora Dornan.- digo riendo.
Dakota se ríe y se acomoda mejor, pasando una mano por mi vientre y metiendo su pierna entre las mías.
-Mejor vamos a dormir, Dornan.- dice.- Y recuerda, ninguna pesadilla vendrá por nosotros esta noche. Y jamás me volverás a perder porque estoy completa e irremediablemente enamorada de ti.
Sus palabras llenan mi interior y todo ese miedo que alguna vez formó parte de mí, se desvanece. Las palabras de Dakota y la convicción con que las dice son un bálsamo para mi alma.
-Eres lo mejor que me pudo dar la vida, Dakota. Nunca lo olvides.- respondo con la voz entre cortada dejando un beso en lo alto de su cabeza.- Y por si lo dudabas, yo también estoy completa e irremediablemente enamorado de ti.
-Descansa, mi vida.
-También descansa, mi amor.
Y sin decir más, caemos juntos a los brazos acogedores de Morfeo. En los que por fin, luego de dos días, ninguna pesadilla nos espera.
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HOOOOOWAAAA! :3 jajajaja espero que se encuentren muy bien, les dejo el cap de hoy! Enjoy darlings<3
Hoy es el último día de grabación, my heart is broken:( but...hay un par de fotillos damie! Espero que las estén disfrutando también:3 y no se me pongan tristes, que el término de las grabaciones quiere decir que falta poquito para el trailer y para la peli! :D
Eso, nos leemos el Jueves!
PD: Aguante The X Files!!! Jajaja
PD2: Damie is forever, dont be sad<3
PD3: SIGAMOS MURIENDO CON LAS FOTOS AH JAJAJAJA
PD4: no se rían de mi gran "edit" en la foto, paint no apaña(? Ah jajaja