Fotografías
- Bella -
Llegamos al parque y las chicas y yo decidimos separarnos para buscar un buen lugar dónde poder tomar buenas fotos, caminaba tomando fotos de algunos animales, plantas e incluso del cielo, no encontraba nada interesante, caminé hasta llegar a una parte vacía, donde no se encontraba ninguna persona y a pesar de que la luz del sol aun estaba presente había algo en ese lugar que me ponía nerviosa.
Seguí caminando y encontré un pequeño arbusto con rosas casi marchitas y una hermosa mariposa se posaba en ellas, comencé a tomar fotos de lo único que me había llamado la atención en ese momento hasta que la mariposa voló lejos, pero no me importaba, ya tenía lo que necesitaba y entonces decidí volver para encontrarme con Grecia y Mery.
Comencé a caminar mirando la cámara fijándome en las fotos que había tomado sin prestar atención de por donde caminaba, tropecé con alguien y dijo:
– ¡Presta atención de por dónde vas!, ¿quieres?
– Lo siento, lo siento, es que estaba... – dije levantando la mirada.
Era un chico que no conocía, nunca lo había visto en el pueblo, era alto, rubio y de ojos grises muy profundos.
– No importa, tranquila, no hay problema – dijo él sonriéndome.
– ¿Eres nuevo en el pueblo? – le pregunté.
– Sí, ¿cómo lo sabes? – me preguntó levantando una de sus cejas.
– Es un pueblo pequeño, todos conocen a todos, ¿ya sabes?, pueblo pequeño, infierno grande – le dije sonriendo.
– Bien – dijo él extendiendo su mano hacía mí – Soy Jared.
– Y yo Bella – dije estrechando su mano.
– ¿Es tu nombre o lo que eres?
– ¿Lo qué soy? – le pregunté.
– Sí, bueno... Es que eres muy hermosa.
– ¡Oh!, gracias – le dije.
– ¿Tú has vivido aquí mucho tiempo?
– Toda mi vida, ¿de dónde eres?
– De la ciudad... Ya que has vivido aquí siempre, ¿me mostrarías los mejores lugares de este pueblo?
– Yo... – dije pensando en que dejaría solas a Grecia y Mery si aceptaba – Es que estoy con unas amigas.
– Pero yo te veo sola – me dijo riendo pobremente.
– Bueno sí, pero es porque nos separamos.
– Estoy seguro de que tus amigas van a estar bien, acabo de llegar al pueblo, llevó un apenas un par de días y enserio quiero conocerlo.
– Está bien, supongo que ellas estarán bien, vamos – le dije.
Llevé a Jared a la mayoría de los lugares del pueblo y todos le parecieron muy interesantes, caminábamos en dirección a su casa cuando le pregunté:
– ¿Y por qué te mudaste aquí?
– Pues mis padres... Murieron hace un año cuando mi antigua casa fue incendiada – dijo bajando el rostro.
– Lo siento – le dije.
– Tranquila, fue hace un tiempo y yo supero las cosas muy rápido, soy un chico fuerte – dijo sonriéndome.
– Eso está muy bien, ¿qué edad tienes?
– Cumplí los dieciocho hace un par de meses.
– Ya eres todo un dinosaurio entonces – le dije riendo.
– Sí, soy un fósil prehistórico – dijo riendo también – Llegamos – dijo deteniéndose.
– Bien, yo debo irme ya – le dije – Está oscureciendo y mis padres deben estar preocupados.
– Me gustaría volver a verte.
– Seguramente nos encontremos por allí.
– No me refiero a eso – dijo sonriendo – Yo... ¿quieres salir alguna vez?
– ¡Oh! – dije pasando mi cabello por encima de mi oreja – Es que... Yo ya tengo novio.
– Sabía que una chica cómo tu no podía estar sola, pero al menos debía intentar – dijo sonriendo levemente.
– Pero podemos ser amigos – le dije.
– Está bien, amigos... Por ahora – dijo mirándome a los ojos.
– Ya debo irme – dije apartando la mirada – Adiós, nos vemos algún días de estos.
– Está bien – dijo – Adiós Bella.
Me despedí de Jared y caminé hacia a mi casa, llegué y ya todos estaban en la mesa cenando, me miraron y mi padre preguntó:
– ¿Dónde estabas?
– Conocí a un chico que se mudó aquí y le mostré el pueblo – dije.
– ¿Un chico?, ¿Qué chico? – dijo Adam.
– Se llama Jared.
– Siéntate hija iré a servirte la comida – dijo mi madre.
– No mamá, primero quiero ir a bañarme, yo caliento mi comida cuando tenga hambre, ¿sí?
– Está bien – dijo ella.
Subí a mi habitación, me duché, tomé un libro de mi biblioteca y me acosté en la cama a leer... Pasó un rato, tocaron a mi puerta y entraron.
– Hola – me dijo Adam – ¿Cómo estás? – dijo sentándose junto a mí.
– Bien, un poco cansada solamente – le dije sonriendo – ¿tu?
– Yo estoy muy bien... ¿oye quien es Lucy?
– Es una compañera del colegio, me odia y la llamaría perra pero le falta lo fiel, la odio, es mi peor enemiga, una consentida que se cree lo ultimo del desierto – dije.
– ¿Cómo Grecia? – me dijo él.
– Quizá hasta peor, pero Grecia y yo ya somos amigas así que no se comporta mas así conmigo.
– Igual yo no me confiaría tanto de ella.
– ¿Y por qué preguntas por Lucy? – le dije mirándolo.
– No, por nada, solo la escuché nombrar alguna vez y me dio curiosidad saber – me dijo Adam – Y ese chico conociste...
– ¿Jared?
– Sí, él, ¿cómo es?, ¿qué te dijo? – preguntó.
– ¿Acaso me estás haciendo una escena de celos?
– ¿Yo? – me preguntó señalándose a sí mismo – Pero por supuesto que no Bella... Yo estoy muy seguro de que tú no serias capaz de engañarme y también estoy muy seguro de mi mismo.
– Porque eres muy guapo, el chico más guapo que he visto en mi vida – le dije mirándolo y sonriéndole.
– Y tú la chica más hermosa que hay en el mundo – dijo comenzando a hacerme cosquillas.
Adam pasaba sus manos por mi cuello, mi estomago, mis brazos y yo solo peleaba con él para que dejara de hacerlo, riendo e intentando hacerle lo mismo. En un momento Adam quedó sobre mí, me miró y bajó su cabeza hasta que sus labios estuvieron junto a los míos.
– Sabes que adoro tus besos pero no creo que sea el momento adecuado para hacer esto – le dije.
– Ya todos están dormidos – dijo volviéndome a besar.
Yo le sonreí y comencé a quitarle la camiseta, él quitó la mía, y así hasta que ambos estuvimos desnudos dejando que el amor y la pasión surgieran entre nosotros haciendo de esa noche otra de las mejores de mi vida.
Adam se acostó junto a mí, me miró y solo se que quedó así por algunos minutos hasta que dije:
– Creo que deberías ir a tu habitación.
– ¿Estás echándome? – me dijo riendo.
– Claro que no, me encanta estar contigo, solo dijo que quizá alguien pueda entrar en cualquier momento.
– Tienes razón – dijo levantándose y vistiéndose – Te amo, te adoro Bella Thompson.
– Y yo a ti, con todo el corazón.
– Descansa – dijo regalándome un último beso antes de salir de la habitación.
Adam salió, fui al baño y me duché, me vestí, salí de la habitación y bajé a la cocina, abrí el refrigerador y saqué la comida que mi madre había preparado, la puse en el microondas y esperé a que está se calentara.
– ¿Qué haces despierta a esta hora? – oí decir a Grecia.
– Hola, pues tenía un poco de hambre.
– Yo vine por un vaso de agua – dijo ella sirviéndose uno.
El microondas sonó, saqué la comida y comencé a comer.
– ¿Qué hicieron tu y Mery luego de que me fui? – le pregunté.
– Nos cansamos de esperarte y ya estaba oscureciendo así que yo me vine a la casa y Mery se fue a la suya – me contestó ella.
Estaba comiendo hasta que mi estomago comenzó a dar vueltas, la comida volvió a mi garganta y entonces salí corriendo al baño y Grecia me siguió, me incliné en el inodoro y comencé a vomitar lo poco que había comido, bajé la llave del inodoro y lavé mi boca en lava manos.
– Bella... ¿Te puedo hacer una pregunta y me la respondes con sinceridad?
– Claro, somos amigas, ¿no? – le dije.
– ¿Tu y Adam ya tuvieron relaciones?
Levanté mi mirada y con vergüenza le respondí.
– Sí – dije volviendo a bajar mi rostro.
– No te avergüences – dijo ella – Eso es algo normal en las parejas pero al menos dime que se protegieron... ¿Lo hicieron?
– Yo... – dije para luego quedar en silencio.
– ¡Bella! – dijo Grecia acercándose a mi – ¿No crees que podrías estar embarazada?
– Yo, no lo sé – dije volteando y mirándome al espejo.
– Yo tengo una amiga en la ciudad que pasó por lo mismo – dijo Grecia – Los mismos síntomas y la misma situación.
– Yo no lo creo, es decir hasta ahora solo han sido dos veces nada más...
– A veces solo se necesita una vez para quedar embarazada Bella pero para estar seguras mañana iremos a una farmacia y compraremos una prueba, ¿vale?
– Está bien, pero ahora tengo miedo.
– Tranquila, eres una chica inteligente, sabrás que hacer y además no diré nada si eso te preocupa también.
– Gracias – le dije.
– Ahora creo que lo mejor es que vayas a dormir y descanses.
Las dos subimos y entramos en nuestras habitaciones, estaba muy cansada y quería dormir pero mi mente no paraba de pensar en las posibilidades que existían sobre lo que me había dicho Grecia y si era cierto... ¿Qué haría?, ¿tendría que contárselo a Adam?, ¿y si reaccionaba mal?... No podía imaginarme a mi misma criando a un bebé, mis padres me matarían si se enteraran o peor... Matarían a Adam... Pasaron pocos minutos antes de que mis ojos se cerraran y quedara completamente dormida.
(...)
Desperté en la mañana, me levanté y preparé para ir al colegio, salí de mi habitación para ir a desayunar, vi a mi madre colocando los platos en la mesa, la saludé y comencé a ayudarla, todos salieron de sus habitaciones y llegaron sentándose en la mesa, saludé a Adam con un beso y me senté junto a él.
Para cuando terminamos de comer, tomé mi mochila y salí de la casa junto a Grecia, Kate y Clara para ir y subir al auto, mi padre nos dejó en el colegio y se marchó a su trabajo.
– ¿Los planes de hoy siguen igual? – me preguntó Grecia.
– Sí, cuando salgamos vamos.
– Está bien.
– ¿Qué onda chicas? – dijo Mery pasando sus brazos por el cuello de ambas quedando en medio de nosotras – ¿Cómo están?
– Nosotras muy bien – dijo Grecia.
– Cuando venía vi a Nick entregarle un paquete extraño a un chico.
– ¿Tú también? – le pregunté.
– Sí, ¿Acaso ustedes...?
– También lo vimos, pero fue ayer, yo tengo que hablar con él – dije.
– ¿Revelaron sus fotografías? – preguntó Mery.
– ¡Yo aun no! – dije deteniéndome – Iré rápido, ya vuelvo.
Me alejé de las chicas y caminé rápido al lugar donde hacían ese tipo de cosas, tenía que revelar las fotos rápido para no llegar tarde al colegio, llegué, saqué la cámara de mi mochila y le dije al chico que atendía sin mirarlo.
– Hola, necesito revelar unas fotos, pero las necesito para ya, por favor – dije levantando la mirada – ¿Jared?
– Hola Bella – dijo acercándose y sonriendo.
– ¿Qué haces aquí?
– Aquí trabajo – dijo riendo.
– ¡Qué bien! – dije – Enserio necesito las fotos – le dije entregándole la cámara.
– Vale, espérame aquí y déjame ver qué puedo hacer por ti – dijo alejándose y entrando en un pequeño cuarto.
Hice lo que él me había indicado y solo me senté a esperar, los minutos pasaron, miré el reloj y me di cuenta de la clase ya había comenzado, justo es ese momento Jared salió con las fotos en sus manos.
– Vaya, eso fue rápido – le dije acercándome.
– Tengo mis trucos – dijo guiñándome un ojo.
– ¿Cuánto te debo? – le dije.
– Tranquila, déjalo así, mi jefe no está, tómalo como un favor de mí para ti.
– Gracias Jared – le dije guardando las fotos en mi mochila sin mirarlas – Debo irme o si no llegaré más tarde.
– Vale, nos vemos luego – dijo él.
Salí y corrí al colegio, llegué y me dirigí al salón de artes, llegué a la puerta y entré...
– ¿Puedo pasar? – dije.
– Ya estás adentro, ¿no? – preguntó la profesora – Siéntate Bella...
Me senté frente al lienzo, junto a Mery y Grecia, y la profesora continúo diciendo:
– Como les decía chicos, ya trajeron sus fotografías, ahora las intercambiaran entre ustedes, no me interesa con quien, solo pinten lo que sus compañeros le den, allí tienen todo lo necesario, lienzo y pintura, y además el mejor trabajo recibirá el primer diez del año, ¿De acuerdo?
– Sí – contestamos todos al mismo tiempo.
– ¡Profesora! – dijo Lucy alzando su mano – Yo quiero intercambiar con Bella.
– Pues háganlo – dijo la profesora.
– Aquí tienes Bella – dijo Lucy entregándome la carpeta con las fotos.
Abrí mi mochila y le entregué a Lucy mi carpeta con las fotos dentro, y todos los demás intercambiaron tal y como la profesora lo había indicado.
– Comiencen que tenemos poco tiempo – dijo la profesora.
Abrí la carpeta y saqué las fotos, me sorprendí y me llené de rabia al verlas, era Adam, el chico que yo quería, él estaba besando a Lucy, la chica que mas detestaba en mi vida.
Hola chicos y chicas que leen mi historia, de verdad se los digo de corazón: ¡MUCHÍSIMAS GRACIAS! Ya son más de 40k en visualizaciones y 16k en votos, no saben cómo me alegra leer todos sus comentarios y saber que la historia les está gustando.
Espero actualizar pronto... Si te gusto el capítulo entonces regálame una estrella o dime que piensas.
Gracias :)
Att: MoonGoes_