Narra Lali
Ya estaba llegando al final de mi embarazo. Los últimos meses habían sido relativamente tranquilos sacando aquellos momentos en los cuales creí que mis antojos me matarían.
-Como anda la mujer más hermosa de la tierra?- dijo Maríano mientras entraba a la habitación con un paquete gigante.
-Y eso?- pregunté haciendo referencia a lo que traía en las manos.
-Un regalo para vos, tomá. Abrilo-
Empece a romper el papel y me encontré con 3 cosas preciosas. La primera era una cadenita que tenía grabada las iniciales de los 2, el segundo era un collage de fotos en donde podía ver a toda la gente que amaba, y por último un cuaderno bordado con hilos dorados que decía: Lali.
-Ay mi amor! Es muy hermoso todo! Gracias!!!- grite y lo bese en los labios con pasión.
-Me alegro tanto que te guste mi vida, en este cuaderno vas a poder escribir todas las nuevas canciones que se te vengan a la mente. Por que me imagino que seguiras cantando no?-
Su pregunta me dio vuelta. Hacia mucho que no cantaba ni escribía y que mejor que un momento tan feliz como el que atravesaba al tener a mi bebe dentro de mi...
-Si, la verdad es que si. Quiero seguir cantando, quiero que nuestro bebe me escuche.-
En ese momento se sintió el timbre.
-Son Oli y Milo seguro, Juli dijo que los iba a traer.- mi novio bajo a abrirles y efectivamente los dos pequeños rubios entraron corriendo y me vinieron a abrazarme.
-Hola Bonitos!- exprese.
-Hola Lala.-dijo Oli- como anda mi hermanita hoy?- me pregunto mientras tocaba mi panza.
-Manito Oli- dijo Milo, él quería que fuera varón.
Por nuestro lado con Mariano habíamos decidido no saber el sexo del bebe así nos encontrábamos con la sorpresa en el momento, aunque debíamos admitir que lo mas gracioso era ver como nuestras familias se rompían la cabeza pensando nombres y comprando cosas azules o rosas.
-Yo estoy segura que es nena.- dijo Oli- se te nota en los ojos Lala, acá dentro hay una muñequita para que juegue conmigo.-
Mariano rió y abrazo a la pequeña señorita quien se tentó al sentir los besos de su papá en el cuello.
3 semanas después...
Eran las 4 de la mañana cuando un dolor insoportable golpeo mi zona baja. Si, eran contracciones.
-Mi amor, despertate- dije mientras sacudía a Mariano con la poca fuerza que me permitían mis brazos.
-Mmm.- balbuceo.
-Amor, el bebe. Ya viene!- grite mientras sentía como rompía bolsa en la cama.
Mi novio salto de la cama y comprendió la situación, agarro el bolso y en pijama salimos corriendo hacia el auto.
Durante el viaje las contracciones no frenaron, si no que por el contrario siguieron y mucho mas fuerte. Ingresamos a la clínica que habíamos elegido para tener al bebe.
-Un doctor! Mi mujer estar por dar a luz- grito Marian y aparecieron como por arte de magia dos enfermeros que me subieron a una silla de ruedas y me llevaron volando a la sala de partos.
Luego de acomodar todas las cosas y yo, ya con lagrimas en los ojos nos dispusimos a traer al mundo a mi hijo o hija. Mariano sostenía mi mano,la cual yo apretaba con fuerza y me alentaba a que pujara.
-Vamos mi amor, vos podes. Un par mas y ya esta!.-
Puje dos veces mas y sentí un llanto que me hizo estremecer.
-Felicitaciones.- Dijo el doctor.- Es una nena.-
Lo mire al papá de mi hija y al igual que yo tenia lagrimas en los ojos. Y casi sin darnos cuenta en el momento en que me entregaron a mi hija en brazos, los dos dijimos:
-Hola Esperanza.-
HOLA HOLA HOLA
QUE TUL TODO POR AQUÍ?? ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO EL CAPITULO!!!
LES PROPONGO UN JUEGO SI LES COPA, ME PUEDEN PREGUNTAR LO QUE QUIERAN SABER DE MI Y SE LOS VOY A RESPONDER!!!!!
UN BESO GRANDE, GRANDE!
GUAAAAAAAAAAAADA