"El frio de esta lluvia no se compara con la que habita en mi corazón"
Siwon miraba fijamente la puerta por donde hace unos minutos salió Heechul, sintió la vibración de su teléfono móvil en el bolsillo de su pantalón, sacándolo de sus pensamientos. Miro fijamente la pantalla, donde se podía leer la palabra "amor" lo cual era irónico, porque su verdadero amor acababa de salir por la puerta frente a él.
-Hola Amor- contesto el teléfono.
-Hola mi Siwie, que haces-
-Terminando una negociación y luego iré a casa, estoy bastante cansado- respondió sin ánimos.
-Ummm, quería invitarte a comer a un nuevo restaurante- decía una dulce voz masculina por el teléfono.
-Lo siento, será otro día, solo quiero descansar- decía Siwon tratándose de zafar de la invitación de su prometido.
-O.K. nos vemos mañana, que descanses mi Siwie-
-Bye, Amor- contesto Siwon secamente. Después de cortar la llamada, comenzó a buscar en la lista de contactos, se situó sobre el nombre HyukJae y marco, esperando que contestara.
-Hola amigo ingrato, milagro que me llamas- respondió una alegre voz al otro lado de la línea.
-Hola dirás que solo te llamo cuando te necesito, pero requiero de tus servicios como amigo, confidente y compañero de copas- dijo Siwon.
- Como digas, nos vemos en el bar de siempre en una hora-
-Hasta pronto-
Una hora después Siwon se encontraba en una mesa de un bar esperando que su gran amigo hiciese acto de presencia, mientras tanto recordaba los dos años más felices de su vida, al lado de la persona que amo, amaba y amaría hasta el último momento de su vida. De pronto sintió un apretón amistoso sobre su brazo derecho, no necesito voltear para saber de quién se trataba.
-Y... para que soy bueno- dijo HyukJae.
-Para muy pocas cosas en verdad, pero una de ellas es ser mi amigo-
-Está bien, ¿qué paso?, te diste cuenta que casarte con alguien que no amas es un error-
-No, hoy volví a ver a mi princesa-dijo esto mientras daba el último sorbo a su bebida y perdía otra.
-Y aun así no piensas terminar esta farsa de compromiso e ir a buscar al amor verdadero-
- Sabes que no puedo- guardo silencio mientras que el mesero traía su nueva bebida y otra para su acompañante –no puedo fallarle a mi padre, sabes que soy su único hijo, con el único que cuenta para que perdure todo aquello por lo que ha luchado-
-Eso lo sé, pero también sé que existen muchas formas de triunfar en los negocios, las cuales no involucran un matrimonio por conveniencia. Piensa un poco, someterás a Henry a un matrimonio sin amor y te condenaras a ti a una vida mediocre sumergido en la monotonía sin sentido-
-Necesito tu apoyo, no un sermón-
-Soy tu amigo, por lo tanto estoy en la obligación de decirte la verdad, me dijiste que viste a Heechul y que pasó-
-Nada, lo trate con indiferencia, cuando lo vi dude en hablarle, él no hubiese percatado de mi presencia si no le hubiere hablado-
-Porque lo hiciste-
-Egoísmo, quería escuchar su voz, sentir su mirada sobre mí-
-Estás loco, porque no lo buscas y dejas toda esta estupidez que te metió en la cabeza tu padre atrás- decía seriamente HyukJae a su mejor amigo, por más que él ha intentado hacerlo reaccionar y que no cometa el error más grande de su vida no ha podido. –Pero si tienes razón, mejor no lo busques-
-Que fue lo que te hizo cambiar de opinión-
-Heechul merece alguien con más carácter que luche por él, que se enfrente al mundo para salir adelante a su lado, no a ti que solo se deja manipular por su propio padre- ya HyukJae estaba molesto, se sentía frustrado de no lograr avance con su amigo.
-Creo que es mejor que me vaya a casa a descansar, esto se está saliendo de control-
-Tienes razón vámonos- Siwon dejo el dinero de la cuenta sobre la mesa y ambos salieron al parqueadero se despidieron y se dirigió cada uno a sus respectivos autos, los dos con un mal sabor de boca por la conversación en el bar.
Siwon llega a su departamento y se dirige directamente a su cama, conciliar el sueño con facilidad gracias al alcohol de las bebidas anteriormente consumidas. En sueños comenzó a balbucear:
-Heechul mi princesa... te amo,... te extraño... soy un idiota y por eso no te merezco... - solloza entre su estado somnoliento.