Bajaron con mucho cuidado para no ser escuchados por nadie, lograndolo, pero al instante la voz de don Pablo resonó en todo el lugar antes que pudiesen salir.
—¿A donde van? —Pregunto acercándose a ellos con los brazos cruzados a la altura de su pecho.
—Padre, ¿no estabas dormido? —
—Pablo me estas viendo, y todavía me preguntas —Respondió brusco, Pablo miró hacia un lado para no avergonzarse —Mírame cuando te hablo —Replicó, asintió volviendo su mirada hacia él.
—Perdón, queríamos salir para dar un paseo fuera de casa, pero ya no lo haremos si a ti te enfada eso —La sonrisa ampliable apareció en los labios de Don Pablo, Gavi le miro extrañado sin poder comprender ese cambio tan repentino en su padre
—Vale, si es por ello, podéis salir, pero tengan cuidado eh...
—¿A donde irán Pablo? —La voz de Belén irrumpió el lugar, bajo por un vaso de agua pero vaya suerte que lo hizo, ya que Pablo y Sara no pueden salir a esta hora, ya es tardísimo para que lo hagan
—Saldrá con esta hermosa chavala su nombre es eh... —Volteo donde Pablo, preguntándole con la mirada cual es su nombre.
—Sara —Le respondió en un susurro, este asintió, regreso su mirada a su esposa
—Con Sara a dar un paseo, así que déjalos cariño que ellos tienen mi permiso —Dijo cariñoso, Belén le miro fijamente analizando la situación.
Sara miro a Gavi , incrédula por la actitud de don Pablo, el pequeño le hizo una señal con su mano, diciéndole así que después le dirá.
Ella entendió así que volvió a mirar hacia los padres de Pablo, a tiempo que Belén se paró a lado de su esposo.
—Es tardísimo, es mejor que vayan a dormir si les apetece salir a dar un paseo, mejor háganlo mañana, y Sara bienvenida a vuestra casa, siéntate cómoda —Ella le sonrió, Belén es totalmente lo opuesto a don Pablo
—Vale señora, perdón por inconvenientes —Se disculpo tímida, pero Belén negó con la cabeza restando importancia
—No os preocupéis, vayan a dormir mañana daremos un paseo —Los dos asintieron —Pero, Pablo por favor quédate necesito hablar contigo —Pidió Belén, antes que subiera al segundo piso, este asintió quedándose en su lugar
—Si madre —Sara se despidió de los tres, alejándose de ellos subiendo al segundo piso.
—Cariño por favor déjame a solas con mi hijo —Comentó para su esposo, quien se le borro la sonrisa
—¿Yo? —Ella asintió —Pero, ¿por que? —
—Porque quiero hablar con Pablito, sin tener la presencia de alguien que solo le hace sentir intimidación sin razón —Contestó demandante, su esposo asintió, dejando de oponerse a la orden de su esposa, beso su moflete alejándose de ellos.
Después de unos segundos y que Belén se asegurará que ya están completamente solos, cogio de las manos a Pablo, haciéndole sentar en el sofá, dándole un poco de nervios a Gavi, por la manera tan seria que esta actuando su madre.
—Pequeño, quiero hablar contigo, de algo importante —Pablo le miro atento —Pero quiero que estés completamente seguro y confiado en responder en lo que te pregúntare —
—Dime madre —Ella sonrió, acaricio su torso mirándole compasiva.
—Tú sabes que te amo, ¿no? —Pablo asintió —y que estoy orgullosa de ti en todo lo que has estado haciendo, ¿verdad? —Volvió asentir —Si estas seguro de todo esto, ¿por que no me dijiste sobre lo horrible que te trato tu padre? —Pablo trago en seco.
Lo que menos quiere es que su padres tengan, problemas por su culpa, por eso en ocasiones se ha quedado callado, en algunos tropiezos que ha tenido con su padre
—Pablo eres lo más importante que tengo, junto con Aurora, yo a los dos los quiero por igual, ambos son mi vida entera, y los tengo que proteger de todos e incluso por encima de su padre, si es necesario, así que por favor, si de nuevo ocurre algún problema con tu padre, dímelo, eres mi hijo, y siempre te veré como un crío que tengo que cuidar por siempre —
La palabras sinceras y dulces de su madre le hicieron sentir mejor, se abrazaron por inercia, con todo el cariño del mundo, su madre siempre ha sido un amor con él, sin importar su orientación sexual.
—Perdón madre, pero no que quería que tuvieses problemas con mi padre .—Se disculpo con una sonrisa nerviosa, mientras la sigue abrazando
—Si yo tengo algún lío con tu padre nunca es por tu culpa mi pequeño, es culpa suya por ser algo sin corazón, nunca pienses que tú me ocasionas problemas porque nunca ha sido así y nunca lo será —
—Pero...
—Pero nada, no tienes porqué sentirte de esa manera, tú siempre serás importante para mí, así que cualquier cosa que te esté pasando y no tenéis más fuerzas, no dudes en decirme —
—Si madre —Murmuró
Se alejaron después de unos segundos, dejando el tema en claro.
—Ahora dime, ¿hay algo que deseas contarme? —Pregunto acomodándo su pelo, Pablo suspiro, sabiendo que ella sí sabe que esta pasando algo.
—¿Como que? —
—Cariño sabes a lo que me refiero, dime que esta pasando entre tú y pedro —
—¿Pe-pedro y... yo? —Preguntó haciéndose el desentendido, Belén asintió, acercándose más a él
—Si, ¿es él quien estas enamorado? — Pregunto sin preámbulos, Pablo entrecerro los ojos mirando sorprendido a su madre —¿Por qué me miras así? —Pregunto divertida.
—Es que me lo preguntas así como si fuese algo normal —
—Cariño si es algo normal, amar es normal, y si tú amas a Pedro, yo te apoyo, además le conozco se que te cuidara, así mismo te amara muchísimo, no tienes porqué sentirte anormal o cualquier sentimiento negativo, eres mi hijo Pablo, y yo te amo tal como eres, el amor que te tengo no cambiará por nada —
—Madre —Se abalazando a ella, abrazándola con pequeñas lágrimas en su ojos, era lo que necesitaba para sentirse bien, consigo mismo, y tranquilo —Te quiero mucho —
—Yo también cariño, así que nunca olvides que me tienes para defenderte cuando lo necesites, no le hagas caso a tu padre él es un cabezón que no entiende razonamientos, solamente cuando son a su favor —Pablo asintió, alejándose del abrazo.
—Gracias madre, eres la mejor —Ella sonrió, acaricio su moflete con ternura, le miro a los ojos, dándose cuenta de lo enamorado que está Pablo.
Así que deseo que Pedro no le haga daño, porque Pablo es alguien tan único que no cualquiera merece tenerle.
—Hay un dormitorio que no está ocupado, si quieres dormir con Pedro, puedes hacerlo cariño —
—¿En- enserió? —Belén asintió, sonriendo enternecida por la manera tan mona en que Pablo le preguntó.
—Confío en ti cariño, y se que respetas la confianza que te tengo — Pablo sonrió ampliamente, abrazando de nuevo a su madre.
Gracias a ella ahora se siente mejor, tener su confianza y su apoyo es lo mejor que le ha pasado esta noche, ahora no le importa la aprobación de su padre, ahora lo único que le importa es el apoyo de su madre, la persona más noble de su familia, la abrazo por unos segundos más, antes de alejarse de ella beso su moflete.
—Descansa cariño, y no te preocupes por tu padre, yo veré la manera en que te dejé en paz, no voy a permitir que te siga materizando con su comentarios tontos, disfruta de tu amor con Pedro nada más, así mismo de tu universidad y las cosas que disfrutas hacer en tu vida —Dijo sincera.
—Madre... —Dejo salir las lagrimas de alegría que estaba comprimiendo, Belén le abrazo acariciando su espalda con tanto cariño
—Te quiero muchísimo, y como te dije tenéis mi apoyo, en tu relación o casi relación con Pedro —Pablo asintió, alejándose del abrazo, Belén quito todo rastro de lágrimas con su pulgares
—Te amo madre, eres la mejor del mundo, gracias, gracias por apoyarme en esto, no sabes lo mucho que significa para mí —
—No me agradezcas, mi deber como madre es cuidar de ti y apoyarte, pero también guiarte si estas por tomar una mala decisión como la que casi ibas a tomar con Sara —Pablo le miro perplejo.
—Tú... ¿sabías? —Ella asintió, escucho un poco de la conversación que Pablo tuvo con Sara.
—Por eso les dije que se fueran a dormir, no podía permitir que fuesen a esta hora a un lío a un lugar desconocido —Le respondió, Pablo torció un poco su boca en una mueca nerviosa —No importa lo que pase, recordad que sois un chaval con un corazón así —Extendió sus brazos en par en par —De grande, y que no le haría daño a nadie, no vale la pena que lo ensucies por alguien que quizás le ira peor —Pablo asintió.
—Si madre, no volverá a pasar —prometió entendiendo lo que ella le dijo.
—Te creo, vale, ya hemos dejado las cosas en claro, podemos ir a dormir, ten —Le entrego —Descansa pequeño —Besó su frente haciéndole sonreír —Y dile a Pedro que quiero hablar con él mañana —
—¿Hablaras con Pedro? —Asintió
—Tengo que hacerlo pequeño, tengo que hablar con él para decirle que te cuide y valore, además quiero asegurarme que no esté jugando contigo, lo aprecio y le conozco hace muchísimo tiempo, sin embargo me enteré que tenía novia y... pues... —Pablo comprendió que intento decirle en lo último.
Teniendo razón en desconfiar un poco sobre los sentimientos de Pedro hacia él.
—Vale, le diré, gracias por todo —Agradeció sintiéndose feliz de esta noche gracias a su madre.
—En absoluto, ya te dije que no me las des, mejor vamos a dormir, mañana será un día largo —Pablo asintió, le siguió el paso subiendo al segundo piso.
Hablar con su madre fue lo mejor que le ha pasado, sabía que le apoyaba porque fue la primera en saber su orientación y no le trato diferente desde que se lo dijo, siempre le apoyo y amo de la misma manera, sin embargo, no se esperaba que fuese tan obvio para que se diese cuenta de su relación con Pedro y que le apoye, realmente es un gran paso a su felicidad.
Belén se despidió de Pablo, yéndose a su dormitorio, Gavi se acercó al suyo golpeando la puerta despacio para no molestar a Fer o Pedro este último espera que todavía no se haya dormido porque él quiere dormir a su lado, ahora que lo de Sara se arreglo, necesita dormir a su lado para sentirse muchísimo mejor.
—Le diré a mi madre que te encierre en el baño por una semana —Escucho amenazar Pedro, a Fer, antes que la puerta se abriera —Digo, le diré a mi madre que te llene de muchos abrazos y que te un viaje a donde tú quieras —Dijo intentando arreglarlo, al ver la presencia de Gavi, este se mordió los labios para no sonreír.
—Hola —Pedro no respondió a su saludo, por lo contrario, lo abrazo sin decir nada, achuchurando su cuerpo como si fuese un felpa gigante.
—Te eche de menos, muchísimo —Pablo sonrió enternecido por lo dramático que puede ser Pedro.
—No nos separamos por mucho tiempo, solo fue una hora —Dijo cuando Pedro lo dejó libre, Pedri negó repetidas veces
—Claro que si, para mí si que lo fue — Se quejo formando un adorable puchero, el cual Pablo dejó un beso sobre él.
—Te quiero y....
Nuevamente lo abrazo como la primera vez, con el corazón latiendo con rapidez, por esa dos palabras, cada vez que las escucha salir de Pablo, le emociona mucho.
—Yo también te quiero y mucho más — Le susurró, pasando su manos por su cintura, mirándole con una sonrisa y ojos brillantes.
Pablo también sonrió de la misma manera.
—Yo te quiero más —Cubrió su boca antes que hablase —Podre dormir contigo así que coge lo que necesitas para venir con...
Alejó rápidamente la mano de Pablo de su boca, dándose la vuelta para volver a entrar y a toda prisa fue a coger lo que necesita para dormir con Pablo, como si su vida dependiera de ello, Gavi le miro asombrado por la manera en que se fue, no se esperaba una reacción así de Pedri.
Fer el cual todavía no se había dormido sonrió burlesco al ver lo desesperado que Pedro esta, por encontrar su móvil, sin imaginarse que Fer se lo oculto debajo de su almohadón, y que no se lo dará hasta que se dé cuenta por él mismo.
—¿Que buscas? —Pregunto fingiendo que no sabe, Pedro resoplo rascándose su nuca tratando de recordar donde dejo el móvil
—Mi móvil, ¿lo has visto? —Fer negó —¿Seguro ? —Asintió ahogado una carcajada por la frustración de su hermano.
—Seguro, y ¿por que tanta urgencia en encontrar tu móvil? —Pedro puso los ojos en blanco, empezando a levantar almohadón por almohadón.
—Porque veo videos con Pablo, antes de dormir así reír un momento —Contestó, siguiendo levantando los almohadones.
—Oh, pero enserió, no lo he visto quizás lo dejaste en el baño —Comentó, mirando con diversión a su hermano, quien le hizo caso fue al baño a buscar, casi corriendo.
—¡AAAH! —grito del susto, Fer empezó a reírse a carcajadas, cogiendose de la tripa, y Pablo entró corriendo a ver que esta pasando.
Es la primera vez que escucha a Pedro gritar como una chica en una película de terror o quizás peor que ello, entro sin avisar, encontrándose a Fer en ese estado, dando vueltas sin parar de reír, le miro confundido pero fue donde Pedro abriendo la puerta del baño, encontrándose con este, subido en el inodoro temblando, y con las manos en su pecho como si estuviese protegiéndose de algo.
—¿Que ocurre Pedro? —Pregunto preocupado, el canario señaló el lavabo, y Pablo se dio la vuelta para ver, percatandose de una cucaracha
Dio dos pasos hacia adelante para acercarse y así quitarla pero la voz repentina de Pedro le hizo sobresaltar un poco.
—¡No! —Detuvo desesperado —Te puede morder y convertirte en una cucaracha, para después obligarte a casarte con ella o él —Pablo suspiro ante lo absurdo de su palabras, se acerco y cogio la cucaracha —¡Que coño!, ¿¡por que la coges!? —Exclamó asustado, haciéndose hacia atrás.
—Porque es una cucaracha falsa —Respondió, Pedro le miro confundido , pues se mira que es una cucaracha real.
—¿Enserió? —Pablo asintió —¿Segurisímo? —Volvió asentir, acercándose con la cucaracha en mano, Pedro casi cae al hacerse hacia atrás
—Es verdad, créeme que si fuese real, no la hubiese cogido, porque las cucarachas son asquerosas —Hizo una mueca de; desagradó
—Y aterradoras —Dijo, bajándose a pasos lentos del inodoro, mirando con miedo lo que Pablo tiene en la mano, el cual le acercó poco a poco para no asustar a Pedro.
—Es falsa, Pepi, no tienes porqué tenerle —Pedri se acerco un poco más, confirmando las palabras de Pablo, es una cucaracha falsa que parece real, si le ves de lejos.
—Fer —Dijo de mala manera, dándose cuenta que cayo en la broma pesada de su hermano —Por favor dame pequeñín —
—¿Que harás? —Pregunto al verle una sonrisa dibujaba en su labios, la cual es maliciosa.
—Nada malo pequeñín —No le convenció, y más cuando salió del baño con la cucaracha en mano
Al encontrarse a su hermano riéndose, todavía cogiendo su tripa con ambas manos, fue algo que le hizo enfadar más, así que se acerco a él a pasos apresurados, cogiendo su pierna para darle la vuelta, tumbando su cuepro boca arriba, Fer dejándose, sin darse cuenta de quien es, Pedro le cogio ahora del rostro y entonces su hermano detuvo su risa.
—Dime a que sabe —Le obligo abrir la boca, metiendole la cucaracha en ella, alejándose enseguida mirando a Fer potar el juguete.
—Que asco tío, esto estaba en el baño — se quejo, levantándose de la cama para ir a limpiarse.
—Eso te pasa por cabrón —Le metió una colleja cuando pasó a su lado, Fer gruñó bajito, metiéndose al baño, pasando a lado de Pablo.
Quien negó con la cabeza divertido, por la manera tan única que se tratan los hermanos, deseando poder tener la relación así con su hermana mayor.
—Y el gilipollas me oculto el móvil aquí —Dijo cogiendo este, indignado por la broma pesada y sobre todo por la humillante escena que vio Pablo.
—Así que le temes a las cucarachas —
—No, que va —Respondió con los mofletes rojizos, desviando la mirada de Pablo.
—Se me hace mono que le temas a algo tan pequeño —Comentó, haciendo que Pedro le mire
—¿Por qué? —
—Porque estoy empezando a conocer al verdadero Pedro, que realmente es, no te avergüences de algo así, porque créeme que es muy mono verte asustado —Pedro somrio tímido, Pablo se acerco a él cogiendo su manos
—Entonces le diré a Fer que me asuste más seguido para darte esta faceta mía —Pablo negó divertido
—No hace falta, no quiero que te de un infarto de tanto susto —Le tranquilizo —Y te aseguro que aquí no hay ninguna cucaracha en ningún rincón, todo esta limpio y muy desinfectado, así que no temas que haya alguna por allí que me quiera convertir en una para obligarme a casar con ella o él —Mencionó divertido lo último, Pedro sonrió avergonzado por lo le dijo en el baño:
No le iba a decir todo eso, pero en ocasiones piensa que es lo que realmente haría una cucaracha
Iba a besar a Pablo cuando justo Fer salió limpiándose con una toalla la boca.
—Perdón por interrumpir —Se disculpo dándose la vuelta para pirarse pero Pablo le detuvo.
—No te preocupes, ya nos íbamos —
—¿A donde? —Pregunto con clara preocupación.
—Iremos a dormir a otro dormitorio, no te preocupes puedes quedarte aquí —Dijo tímido, conoce a Fer pero hablarle de esta manera de Pedro todavía le avergüenza un poco.
—No me estaba preocupando por eso — Dijo divertido —pensé que saldrían a esta hora a...
—A dormir por supuesto —Interrumpió Pedro sabiendo perfectamente que Fer diría otra cosa.
—Ya, vale, gracias por llevarte a Pedro ya no le soportaba ni un segundo más, estaba lloriqueando como un crío que le quitaron su chuches, haciendo rabieta y quejándose que ya no tenia sentido su vida por no poder dormir contigo — Pablo le miro enternecido y Pedro se avergonzó más de lo que ya estaba
—Cállate Fer —Dijo entredientes, Fer no le hizo caso, cogio un lazo de regalo que Pablo tenia en una de las mesillas, se acerco a su hermano colocándo este en su cabeza.
—Te lo regalo futuro cuñado, quizás tú si le soportas, no ronca, no se mueve mucho cuando duerme, come todas su comidas, tiene buen aliento, se baña seguido, es feo el gilipollas pero sirve —Explicó pujando con su mano a pedro, hasta acercarlo a Pablo
—Fer —Se quejo mirándole con el ceño fruncido.
—Y como puedes ver también es algo gruñón, oh casi se me pasa decirte que también es un chulo que le encanta hablar de lo "guapo" que "es" —Dijo haciendo énfasis en dos palabras, recalcando con una voz divertida, Pablo sonrió nervioso.
—Gra- gracias... supongo —Le respondió, entrelazando los dedos con Pedro.
—Al contrario gracias a ti por quitarme de encima a un chulo tan pesao....
—Vale, ya mucho cotilleo —Cogio a Pablo de la cintura dándole la vuelta — Es hora de dormir, no vayas a dejar tu olor horrible en la cama de mi futuro novio, plátano feo —Replicó haciendo caminar a Pablo — mejor si duermes en el suelo —
—Pepi —Regaño Pablo, Pedro no le hizo caso, miro por encima de su hombro a Fer y antes de salir le saco la lengua.
Fer le saco una peineta que ya no fue vista por Pedro, pues salio con su futuro novio encaminandose hacia el dormitorio que le dijo Gavi.
—¿Donde es? —Pregunto caminando por el largo pasillo Pablo camino hacia la derecha donde está el dormitorio que le hablo Belén.
—Aquí —Abrió la puerta, entrando con un Pedro detrás suyo abrazado de su cuerpo.
Busco a ciegas el interruptor, al encontrarlo le presiono para que las luces se enciendan, enseguida todo el dormitorio se ilumino, Pedro se separo de Pablo para ir casi corriendo hacia la cama tumbandose cómodamente, Pablo rió bajito.
—Iré a cepillarme para...
—No, ven ya te arreglaste para dormir —Dijo con una sonrisa en su labios, con un leve puchero, Pablo se miro de arriba, abajo.
Dándose cuenta que tiene la pijama puesta, y que casi salía así para enfrentar a Lucía, su mofletes se tornaron en un adorable color carmín.
—¿Por qué te avergüenzas pequeñín? —Pregunto, Pablo sonrió tímido
—Por nada —Se acerco a él, apagando algunas luces, dejando solo las que están cerca.
—¿Que paso con Sara? —Pregunto recibiendo entre su brazos el cuerpo de Pablo, quien se acomodó pegando su cabeza al pecho de Pedri.
—Fue un malentendido, tenias razón —
—Te lo dije —Contestó orgulloso de si mismo —Pero, ¿como fue? —
—Lucía le mando un video a Sara de Ansu besándose con una chavala, en una discoteca, pero fue hace dos años, si no mal recuerdo era ex-novia de Ansu, de seguro que obtuvo el video en instagram —
—¿Por qué lo haría? —
—Porque tuvo un lío en la cafetería con Sara, así que intento dañarla de esa manera para vengarse —Respondió —Por ende íbamos a ir donde ella para reclamarle pero mi madre no nos lo permitió —
—Me hubieses dicho que iras, con esa tipa esta como una cabrá, no entiende razonamientos y lo único que le importa es dañar a las personas sin importar que —Replicó —Te ibas a poner en peligro pequeñín, le tengo que agradecer a mi futura suegra, que no dejo que fueses —
—Y hablando de mi madre, ella quiere hablar contigo —Pedro se tenso, empezando a ponerse nervioso.
—¿De que quiere hablar? —Pregunto, Pablo noto lo nervioso que se puso así que hizo un poco su cabeza hacía atrás, para poder besar su cuello
—Quiero saber que intenciones tienes conmigo, pero no te pongas nervioso porque ella te quiere mucho y me dejo en claro que hablara contigo de manera pacífica — Respondió, Pedro aún así siguió nervioso.
Nunca ha dado la cara por alguien, y es la primera vez que tendrá que hacerlo sin embargo, por Pablo hará lo que sea para ganarse el cariño de su padres, aunque ya lo tiene de Belén, por lo cual tendrá que esforzarse por la aprobación de don Pablo.
—Es la primera vez que hablaré con mi futuro suegra, pero entonces eso quiere decir que tú y yo... somos... ¿novios? —Pregunto bajando la mirada para poder verle cara a cara, Pablo sonrió tímido, sonrojandose
—Todavía no me lo has pedido, así que tienes toda la noche para pensar como hacerlo antes de hablar con mi madre —Respondió dándose la vuelta enseguida con una vergüenza que no puede controlar.
Pedro lo abrazo por detrás besando su nuca repetidas veces, erizado y llenado el corazón de Pablo.
—Te prometo que lo haré lo más especial que pueda, te haré feliz Pablo, y poco a poco vamos a poder dejar de ocultar este amor secreto que nos tenemos y decirle al mundo que nosotros somos la otra mitad de nuestros corazones —
Pablo se dio la vuelta enseguida conectado mirada con Pedro, sintiendo las manos de este deslizarse a medida que se daba la vuelta, sintiéndose aún más cómodo con él.
Se acerco a su labios rozando estos, para después juntarlos en un beso tierno y delicado, demostrando lo mucho que esta enamorado de él, Pedro lo sintió así que se pego más su cuerpo disfrutando del beso más dulce que alguien le ha dado en toda su vida.
Pablo es el mejor en todos los aspectos y eso no lo duda, así que lo valorara como no lo había hecho hace unos años atrás y antes de que Pablo le diera esta nueva oportunidad, ya no hay vuelta atrás y no piensa retroceder con lo que siente por el pequeño, ahora más que nunca está seguro que quiere tenerle para siempre a su lado.
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