[Fin del Arco del cielo]
Lucifer nunca ha considerado tener hijos pero lo hizo, tuvo dos preciosos hijos. Una hermosa niña muy parecida a él y un adorable niño muy parecido a Lilith. Ambos eran preciosos y no podía dejar de atesorarlos.
Todos se regocijaron con su nacimiento pero rápidamente todo se fue en picada.
Él realmente lo intentaba, intentaba hacer lo que todos esperaban de él y así mismo ser un buen padre y esposo, pero simplemente había días realmente malos.
Los gritos y discusiones de Lilith no ayudaban y se encontraba incapaz de seguir manteniendo las discusiones para apaciguar a Lilith, estaba cansado y solo podía mirar a sus hijos, ser padre no era fácil.
Sin poder soportarlo escapo, a cualquier lado solo para darse un respiro y volver a ser fuerte para todos, no necesitaba a Lilith gritando y aun así podía entender por qué actuaba así.
— ¡Bueno tu tampoco ayudas mucho!
— ¡Soy el rey del infierno! ¡Me necesitan! — Una nueva discusión surgió, Lucifer estaba cansado de tener que pelear siempre, de tener que esforzarse tanto. — ¿Sabes que? Me canse.
Lucifer miró con dureza a Lilith quien retrocedió inesperadamente. Quizás ella no espero que Lucifer le respondiera de esa manera. La tensión surgió de una manera diferente y inesperada.
E inevitablemente separarse sonó como la mejor opción posible y la más sensata para sus hijos. Ahora el problema eran los niños, por supuesto ninguno quería dejar a los niños por obvias razones. Ambos tenían el derecho de tenerlos y después de mucho debate finalmente decidieron que cada uno se quedaría con uno de sus hijos.
Lucifer quería ser egoísta y quedarse con ambos pero finalmente no pudo ya que Lilith tan era la madre también.
Solo le bastó ver a su hijo para darse cuenta que debía empezar a mejorar ya que su depresión no podía dominar su vida más.
Lucifer realmente no culpó a Lilith por dejarlo, realmente no fue el esposo que ella necesito y lo entendió pero el conflicto no se detuvo, por supuesto nunca han peleado abiertamente frente a sus hijos y los han hecho lo mejor posible para darles algún tipo de estabilidad.
Ivan era su adorado hijo, se esforzó por ser un buen padre. Le mostró su cielo y Ivan compartió el ideal de cuidar todo lo que con esfuerzo Lucifer había creado.
El alma Ivan brillaba sin igual, por supuesto tenía matices de grises pero para Lucifer era perfecto y sin embargo también lo asustó un poco.
Mientras más crecía no podía evitar notar su parecido con los ángeles, no sabía si era normal ya que Charlie no mostraba tales rasgos y le preocupaba que el cielo pueda reclamar a su hijo, ni siquiera sabía si era posible.
Pero cuando su hijo accidentalmente curo con “bendición” a un demonio es que realmente se asustó.
“Bendición” era una habilidad solo otorgada a los arcángeles, incluso Lucifer ya no podía bendecir por que perdió esa habilidad cuando fue expulsado perdiendo el favor del cielo.
Preocupado tuvo que consultarlo en el cielo aunque tenía miedo. ¿No podrían quitarle a su hijo verdad?
Le preocupaba que Ivan pudiera usar poderes divinos, no entendía la razón ni del por qué el cielo favorecía a su hijo de esa manera, no confiaba en el cielo pero no tenía a quien preguntar.
Sin una respuesta le pidió a Ivan que no use esa habilidad, si la usaba con frecuencia el cielo podría sentirlo, no quería que su hijo estuviera en la mira del cielo.
No quería que otros arcángeles sintieran los poderes de Ivan. Por supuesto su precioso hijo no tuvo problemas con ocultarlo y limitarse en usar sus poderes demoníacos o que no estuvieran relacionados con el cielo.
Lucifer sabía que su hijo lo entendería y nunca cuestiono sus razones por que fue capaz de comprender su preocupación. El ama mucho a ese niño y le encantaría que dejara de crecer, que se quede siendo pequeño.
Quiere cargarlo una vez en sus brazos y dormirlo mientras le canta canciones suaves. Quiere vestirlo con lindos trajes de patos como cuando era pequeño.
Pero su pequeño ya no es tan pequeño, es un joven prometedor y se siente orgulloso de él, lo a visto hacer amigos, lo a visto relacionarse. Lo a visto guiar a nuevas almas redimidas a nuestro cielo, lo mira sonreir con cariño y sabe que su hijo ama el infierno tanto como el.
Lo ve bromear con la pequeña Octavia y siente que su hijo sería un muy buen padre también, no puede evitar sentirse nostálgico.
A pesar de la felicidad hay cosas que no cambian.
— ¿Cómo te atreves a golpear a nuestro hijo? ¿Has perdido la razón? — Lucifer miró con dureza a Lilith, en el pasado él hubiera retrocedido para detener la discusión pero con el paso del tiempo y teniendo un hijo al que cuidar Lucifer no pudo quedarse callado y incluso el empezó a comenzar las discusiones.
— No fue mi intención. — Era claro que Lilith no tenía una buena respuesta para dar pero al menos lucía afectada.
— ¿Por qué lo golpeaste? — Exigió saber y la tensión empezó a crecer entre ambos.
— Yo… solo quería que pasara más tiempo con Charlie.
— ¿Crees que soy idiota? Conozco a mi hijo… tienes suerte de que uno de nuestros hijos te quiera porque de lo contrario les diría la verdad. No vuelvas a tocarlo Lilith, es una orden. — Lilith se tenso, era raro que Lucifer se enojara, por supuesto ella también se enojó.
— ¡Por supuesto! ¡Siempre muestras preferencias por el! ¡Casi ni te has involucrado con Charlie!
— ¡Eso fue por tu culpa! ¡Te pregunte por ella tantas veces! Tu no me dejabas verla, no te hagas la santa Lilith, te conozco mejor que nadie y lo sabes. — Lucifer apretó los puños. — ¿A cambio tu? Te deje pase libre para acercarte a Ivan pero nunca fue suficiente, ¿No es así? ¡Ivan nunca fue suficiente para ti! — Lilith no lo pensó tanto antes de darle una bofetada a Lucifer, por supuesto no es la primera vez que hace eso.
— T-tu
— No trates de ser una buena madre Lilith, podrás ser la adoración de Charlie pero para Ivan solo eres la mujer que lo engendró, ¿Y sabes que? Que bueno que no te acercaste a él, mi hijo no necesita mendigar el amor de nadie. — Lucifer gruñó con dureza. — Más vale que dejes de promover los sueños tontos de Charlie, se me hace hipócrita que le digas que crees en la redención sabiendo cuánto odias el cielo para empezar.
— Los sueños de Charlie no son tontos. — Lucifer se burló de ella.
— Por supuesto que no y cuando yo hablaba de redimir demonios tu nunca me apoyaste en lo más mínimo, sabes de lo que él cielo es capaz y expones así a Charlie. — Lilith se mordió el labio, fue lo mismo que dijo Ivan.
— Ella si va a poder.
— ¿A qué juegas? ¿Es alguna manera retorcida de sentirte mejor contigo misma después de todo lo que has hecho?
— ¡No me trates como si fuera la única culpable!
— ¡No lo hago! ¡Pero al menos yo asumo mi parte de la culpa! Busco siempre lo mejor para todos pero eso nunca fue suficiente para ti. Si algo le pasa a mi hija no te lo voy a perdonar y la única culpable de todo serás tú. — Lucifer le dio una última mirada antes de irse de ahí.
Lucifer suspira cuando vuelve a casa, puede escuchar las risas y no se sorprendió de ver a Ivan cargando a Octavia en sus hombros corriendo de Velvette, Stolas solo suspiraba al verlos y fue él primero en notar su presencia.
— Lucifer, es bueno verlo. ¿La reunión ha ido bien? — Lucifer sonríe y asiente con calma. A los demás les toma otro rato notarlo pero es tiempo suficiente para que Lucifer haya tomado varias fotos.
— Padre. — Ivan lo saluda amablemente como suele hacer.
— Es bueno verte así de animado, ¿Has terminado el trabajo? — Puede ver que su hijo se tensa y es divertido jugar con el.
— Si, si obviamente si.
— Ajam si lo dices con tantas convicción a de ser cierto. — Lucifer no lo presiona, quiere que Ivan pueda tener estos momentos tranquilos para él.
Todos pasan el tiempo juntos y Lucifer no tarda en consentir a Octavia.
— ¿Han escuchado de ese nuevo demonio? — Velvette dijo tomando su celular.
— ¿Hablas del que está transmitiendo por radio varias masacres? — Dijo Stolas pensativo, nadie más que Lucifer noto la mueca de Ivan ante la mención de eso.
— Muchos Overlords han desaparecido. Es un problema porque son los más influyentes. Una total molestia, también eran dueños de pequeños territorios del infierno, no pasará mucho para que se coloque como un nuevo Overlord. Pero hasta que eso pase los contratos con Ivan se han roto, ya ha empezado a haber quejas. — Velvette sonó exasperado por eso.
— Bueno, si es un tipo listo estoy seguro de que pronto vendrá a Ivan para poder hacer negocios. — Stolas dijo con calma.
— Mnh puede ser el caso, ¿Crees que puedas encargarte de eso, Stolas? — Y eso fue sorprendente, generalmente sería Ivan quien daría la bienvenida a un nuevo Overlord. Pero se negó sin más, Ivan se rió un poco pero Lucifer conocía muy bien a su hijo.
— ¿Estás preocupado por lo de la embajada? — preguntó Lucifer a su hijo, este lo miró brevemente confundió antes de asentir.
— Ah- sí eso es.
— ¿Habla de la embajada del cielo Lucifer? — preguntó Stolas y este asintió.
— Le pedí a Ivan que resolviera asuntos políticos. Últimamente el cielo se ha estado quejando de la sobrepoblación, como si mandar exorcistas no fuera suficiente. — Todos hicieron una mueca.
— No te preocupes padre, podré hablar con ellos sin problema. — Lucifer tarareo un poco, Ivan se salvo de las preguntas pero no se salvaría del interrogatorio de su padre.
— Entonces… — Ivan se movió incómodo y suspiró. Ambos estando solos.
— Cómo sabe padre me ha dado el libro del infierno, se cuantas almas hay en el infierno, así mismo se cuando una nueva llegue, registre el alma de ese demonio…
— ¿Entonces…?
— Esto… bueno veras… puede… que me haya liado con un humano por accidente. Bueno puede que este se haya obsesionado un poco conmigo. — Lucifer se quedó perplejo.
Su hijo que suele pensar las cosas detenidamente, verlo nervioso porque cometió un error era sinceramente divertido para él.
— ¿Al menos era atractivo? — Lucifer pareció divertido y Ivan al menos tuvo la decencia de admitir que sí. — Dime que al menos le invitaste un café, no te eduque para no ser un caballero.
— Bueno… puede que lo haya dejado solo después de… — Lucifer quería reírse bastante.
— Lo dejaste necesitado y solo. ¿Ahora tienes a un demonio persiguiéndote? Estoy pensando seriamente que tus amigos no son buenas influencias para ti. — Ivan resoplo un poco. — Bueno, tienes que arreglar las cosas con tu pequeño amante, siempre te he dicho que no puedes dejar tirado así a alguien. — Decía todo esto para molestar a su hijo, si realmente este demonio no fue a su cielo aquí, era probable que no fuera una buena alma.
Eso explicaba la molestia de su hijo que quería meter el problema bajo la alfombra, posiblemente porque sus amigos harían un escándalo por eso. Ivan era popular entre jóvenes de su edad aunque la edad es irrelevante en el infierno.
Podía ver a su hijo con un dolor de cabeza pero no podía saber que es todo lo que pensaba por ella.
— ¿No puedo simplemente ignorarlo?
— Podrías, has lo que quieras con tu amante.
— Papá enserio, es mejor que tú consigas uno. — Lucifer iba a protestar pero su hijo se fue rápidamente después de eso. Lucifer no pudo aguantar la risa.
Su surgía el rumor de que Ivan se acostó con un humano sería un caos, quizás por eso su hijo estaba inquieto. Sería interesante ver cómo lidia con algo a lo que no está acostumbrado.
Por estas cosas Lucifer amaba el infierno.
Notas de Autor
Lucifer adora jugar con Ivan. Por su parte Ivan esta en problemas, uno grabes con cierto demonio jajaj
Ivan conserva rasgos divinos asociados con los ángeles lo cual preocupa a Lucifer, teme que le quiten a su hijo por ellos. Bendecir no es su única habilidad.
Ese es el fin del Arco del cielo.
Comenzamos con la trama principal. Que emoción.