Entre Mares

By Loki_One

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Cuando las emociones y los sentimientos son verdaderos, podrán estar entre mares y tierras de distancia, y se... More

Cap. 1 - Todo Listo
Cap. 2 - Resurgiendo
Cap. 3 - Oportunidad
Cap. 4 - Está Bien
Cap. 5 - Trance
Cap. 6 - Qué
Cap. 7 - Especial
Cap. 8 - Reto
Cap. 9 - Tour Guide
Cap. 10 - Invitación
Cap. 11 - Amistad
Cap. 12 - Confía
Cap. 13 - Lo Mismo
Cap. 14 - Siempre
Cap. 15 - Hablemos
Cap. 16 - Y Podemos
Cap. 17 - Seguramente
Cap. 18 - Te Acuerdes de Mi
Cap. 19 - Conmigo
Cap. 20 - Me Dejo
Cap. 21 - Sin Ti
Cap. 22 - Brindmise
Cap. 23 - No Merezco Esto
Cap. 24 - Quédate
Cap. 25 - Recuérdame
Cap. 26 - Peace and Love
Cap. 27 - Perfectamente Perfecta
Cap. 28 - Puta Distancia
Cap. 29 - Llueve Por Dentro
Cap. 30 Qué Pasó
Cap. 31 - Llamada de Emergencia
Cap. 32 - A Medio Vivir
Cap. 33 - Solo Escucha
Cap. 34 - Plan, Duelo y Conquista
Cap. 35 - Back to Back
Cap. 36 - No Me Equivoqué
Cap. 37 - Muralla
Cap. 38 - La Señal
Cap. 39 - Sentir Profundo
Cap. 40 - Tropicaleo
Cap. 41 -Para Sorprender
Cap. 42 - Complácete y Compláceme
Cap. 43 - Todo Estará Bien
Cap. 44 - Decisiones
Cap. 45 - Birthday Girl
Cap. 46 - Mentirita Piadosa
Cap. 47 - Tomando Riesgos
Cap. 48 - Cajita de Sorpresas
Cap. 50 - Me Encanta Que Te Encante
Cap. 51 - Como Al Principio
Cap. 52 - Tiempo De Ellas
Cap. 53 - Quererte Bonito
Cap. 54 - Me Quedo A Tu Lado
Cap. 55 - Consentido y Con Sentido
Cap. 56 - Todo Contigo

Cap. 49 - Todo Por Ti

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By Loki_One

-"Cómo dices? Com...qué?" trataba de pronunciar palabra mientras retrocedía un poco. Se le fue la mente en blanco. Hasta dudaba de  haber escuchado bien lo que dijo Amelia.

-"Que he venido para quedarme dije" dijo preocupada al ver la reacción de Luisi.

-"Yo se, cariño, que lo tenemos que hablar, lo se, y que ahora no es el momento porque estamos en tu fiesta, pero me moría de ganas por decírtelo. Perdóname por soltarlo así. Es lo que siente mi corazón y lo que realmente quiero, porque lo quiero todo contigo, todo"

Luisita seguía en un estado de shock momentáneo. Trataba de seguir procesando todo lo que decía Amelia sin parar.

-"Amelia...pero...o sea...tú estás segura de lo que me estás diciendo? Me estás soltando esto sin avisar, no creo que hayamos hablado de esto anteriormente, no así tan..." decía mientras manoteaba tratando de buscar las palabras.

-"Ya, creo que me equivoqué entonces" dijo desilusionada y con algo de malestar. Pensaba que su rubia estaría contenta.

-"No, Amelia...espera"

-"Está bien Luisita, está bien. Creo que me precipité un poco y debí haber puesto el tema antes. Ya...no pasa nada. Voy a...a.. a buscar algo de tomar" dijo mientras se daba la vuelta.

-"Noooo! Amelia! Espera! Espérate un momento joder! No te pongas así" le dijo agarrándola por el brazo para que no se fuera.

Amelia estaba sintiendo todo tipo de emociones. Tristeza, desilución, enojo, preocupación. Y ganas de llorar también.

-"Amelia, solo que este es un tema que tenemos que hablarlo las dos y las decisiones las tomamos entre las dos. Eso no significa que no te ame, que no quiera estar contigo, porque si piensas así estás mal. Yo lo que no quiero es que tomemos decisiones por impulso"

-"Y tu crees que yo no lo he pensado? Llevo muchísimo tiempo haciendo las movidas necesarias porque esto es lo que quiero, estar contigo" dijo con coraje. No se explicaba porque Luisita no podía entender su sacrificio.

-"Pero y cuando me lo ibas a decir? Yo no estoy pensando en mi, estoy pensando en ti! En tu buen trabajo, tu apartamento, tu familia, tus amigos. Que no es una decisión fácil Amelia, y me hubiera gustado pasar ese proceso contigo, conversarlo, buscar los pros y los contra, porque es una decisión que nos afecta a las dos a la final. Me entiendes?"

Amelia trataba de calmarse pues entendía las razones que le daba Luisita.

-"Amor, mírame" le dijo Luisita colocando su mano en la barbilla de la morena para que alzara la vista hacia ella.

-"Te amo Amelia. Claro que quiero estar contigo y nada me haría más feliz que estuviéramos juntas aquí, allá, en la luna o en marte. Pero, debemos hablarlo. Así que mejor vamos a hacer una cosa..." le hablaba en un tono más bajo, acercándose nuevamente a ella haciendo que la morena bajara la guardia. Cuando Luisi le hablaba en ese tono particular, la desarmaba por completo.

-"Por qué mejor terminamos de disfrutar lo que queda de la fiesta, que es poco, nos vamos a la villa, y conversamos si quieres. Igual podemos hablarlo mañana" le decía mientras acariciaba un lado de la cara.

-"Pero, estás molesta conmigo Luisi?" le preguntaba preocupada.

-"Amor, solo me tomó por sorpresa. Me soltaste eso de zopetón, sin anestecia, y no lo habíamos conversado antes, así como formal, no? Pero que sepas que me hace ilusión. Me has llenado de muchas sorpresas hoy! Jamás pensé que estarías aquí, que me cantaras...y luego esto pues...sigues siendo una cajita de sorpresas" le dijo llegando a sus labios y aprisionándolos lo mejor que pudo.

Amelia sintió un poco más de tranquilidad al escuchar a Luisi. Le hace mucha ilusión. Pero algo muy importante había pasado por alto la rubia. "Quiero que te cases conmigo". La rubia no había mencionado nada sobre esa declaración. Lo habría escuchado? No quiere hablarlo? Bueno, quizás es una buena oportunidad para volvérselo a pedir de una forma más tranquila, más romántica tal vez, pensó.

Las chicas volvieron a la fiesta. Ya el grupo musical anunciaba la última canción. Ellas iban a la pista a darlo todo. Se iban a disfrutar hasta lo último.


... Dame una noche a puerta cerrada
Será el secreto entre los dos
Dejando el alma tatuada en la cama
Quiero entregarte el corazón
... Qué no te olvides de mí
De la magia que te hacía con mi boca, oh-oh
Qué lo quieras repetir
Para hacer que cumplas lo que te provoca, oh-oh

-"Esa canción, madre mía, me está poniendo malita" le susurró al oído Luisita a Amelia mientras continuaban bailando pegaditas.

... Y es que me muero de ganas tantas ganas
Qué van muchas noches que te sueño en mi cama
Y es que me muero de ganas tantas ganas
Qué haría cualquier cosa por besarte hasta el alma
Y es que me muero de ganas, tantas ganas
Y es que me muero de ganas, tantas ganas
Besarte hasta el alma sin prisa y con calma, oh

-"Yo sí que me muero de ganas Luisi" esta vez era Amelia quien le decía y la rubia solo sentía que una humedad asomaba entre sus pliegues.

-"Esto es muy fuerte Amelia..." decía mientras se aguantaba las ganas de salir corriendo de allí y comerla a besos.

... Un beso que recorra tu espalda
Qué hagamos lo que nos dé la gana
Y que sea nuestra noche de gala
Qué volemos sin salir de la cama
Y que perdamos el control
Que te entregues sin temor
Que me bañe tu sudor
... Qué no te olvides de mí
De la magia que te hacía con mi boca, ouh-oh
Qué lo quieras repetir, oh
Para hacer que cumplas lo que te provoca, ouh-oh

-"Quiero saber qué te provoca" le preguntó la rubia de de frente aunque sus ojos bajaron a los labios de la morena.

-"Todavía no lo sabes?" contestó sabiendo muy bien a lo que jugaba.

-"Recuérdamelo..."

-"Cuando quieras..."

... Y es que me muero de ganas, tantas ganas
Qué van muchas noches que te sueño en mi cama
Y es que me muero de ganas, tantas ganas
Qué haría cualquier cosa por besarte hasta el alma
Y es que me muero de ganas, tantas ganas (Eh)
Y es que me muero de ganas, tantas ganas (Yeah)
Besarte hasta el alma sin prisa y con calma
... Yeah-yeah-yeah

... Dame una noche a puerta cerrada
Será el secreto entre los dos

Se había picado el bizcocho y la mayoría de los invitados se despedían. Todos le agradecían a Luisi por la invitación y volvían a felicitarla. Marcelino y Manolita, junto con el equipo del restaurant, iban recogiendo, guardando los regalos de Luisi en un cajón para luego llevarlo a su auto.

-"Quieren venir con nosotros? Vamos a la discoteca del hotel. Sylvia y Pepa me llamaron que están allí y parece que hay buen ambiente. Si las dejan, se trepan en la tarima y hasta son capaces de escribir una canción" preguntaba Naya agarrada de la mano de Miguel Angel. Todo indicaba que una nueva parejita se estaba cocinando.

-"No Naya, de verdad, estoy muerta del cansancio, y tengo una conversación pendiente con Amelia, así que...dale mis saludos a las chicas"

-"Ah...te dijo?" soltó su amiga.

-"Cómo? Lo sabías?" preguntaba extrañada Luisita.

-"Bueno, habló algo conmigo horita, pero no es que sabía todo ni lo que haría. Solo le dije que hablara contigo" dijo tratando de salir de la situación incómoda.

-"Mmmmm ya veo..."

-"Bueno amiga pues si no vienes me voy yo que la noche aún es joven" dijo tirándole una guiñada.

-"Juiciosita por favor eh!" dijo riendo pues conocía a su amiga y su nivel de fiesta en el cuerpo.

-"Luisi, me adelanto un momento para subir mi equipaje a la habitación" le decía Amelia mientras agarraba sus maletas.

-"Pero por qué no te quedas conmigo? Reservaste una habitación para ti?"

-"La reservé por si acaso pasaba algo. Lo que puedo hacer es cancelarla, aunque creo que me cobrarán la noche"

-"Por eso no te preocupes. Conozco al gerente de las villas y hablo con él para que no te cobre la penalidad. Si puedes dame unos minutos para ver que falta y nos vamos, te parece?"

-"Me parece" respondió Amelia dando un pico.

Terminaron de recoger el salón y se despidieron entre todos. Algunos se regresaban a sus casas, otros a la villa, y ellas hacían lo propio también. De camino a la entrada de la villa, Luisita pudo divisar a Marcos, su amigo y el gerente del complejo hotelero.

-"Marcos!" le gritó Luisita a la vez que le hacía señas de que se acercara.

-"Hola Luisa! Felicidades amiga! Cómo estuvo todo? Algún inconveniente?" preguntó mientras la saludaba con un beso y abrazo.

-"Todo excelente Marcos. Mira, ella es mi novia Amelia que llegó hoy de sorpresa desde España" dijo mientras se giraba hacia Amelia para presentarla.

-"Un placer Amelia" dijo muy amablemente extendiendo su mano.

-"Mucho gusto Marcos" respondió Amelia al saludo.

-"Oye Marcos, te iba a comentar. Amelia se va a quedar conmigo pero ella había reservado habitación. Crees... que.. podrías...cancelar la reserva y no cobrarle la penalidad? Por fa? Por fa?" dijo casi rogando.

-"Eah! Pues déjame verificar qué puedo hacer. No es lo común, pero bueno, a ver que puedo hacer"

-"Dale y te invito una noche al restaurant! Es bueno este trueque jajaa" decía Luisita mientras Amelia solo se limitaba a observar la capacidad de su novia para conseguir lo que quiere.

-"Estoy terminando de organizar uno de los salones para mañana, voy a la recepción y te envio mensaje de texto, vale?"

-"Vale, yo sigo a la Villa. Muchas, muchas gracias por tu ayuda y por todo Marcos. Cuídate!" se despedía Luisita mientras ayudaba a Amelia con las maletas y se dirigían hacia el lugar de la rubia.

Ambas caminaban por aquel pasillo, locas por llegar. Al abrir la puerta Amelia quedó maravillada con aquel lugar, pues dentro de lo espacioso que podía ser, tenía un aire íntimo, ese aire era ella. El lugar olía a ella.

-"Luisi esto es espectacular!" decía mientras sus ojos recorrían cada esquina.

-"Y eso que no has visto el amanecer. Es una belleza de matar" afirmó mientras los ojos de Amelia se posaban en ella.

-"Amanecer el que quiero tener todos los días de mi vida contigo Luisita" dijo mirándola con ojos cristalinos. Ya no quería esperar más. Para ella funcionaba el refrán que dice al mal paso dale prisa, o el trago amargo se pasa rápido. Y esa conversación pendiente no se prolongaría más.

-"Mira Luisita, quiero que sepas que mi decisión no ha sido un capricho, un arranque de pasión, no, ha sido bien pensada, consultada con mis amigos más cercanos, con mi familia, hasta con la gente de mi trabajo porque quería irme con las puertas abiertas. Yo estoy muy segura de lo que quiero, de lo que decidí para mi y en esa decisión estás tú, siempre estarás tú, y siempre serás tú" decía mientras agarraba las manos de la rubia. Sentía el corazón a mil. Cada palpitación se manifestaba en las palabras que salían de su boca.

Luisita solo la escuchaba. Era el momento de escuchar y no hablar. Sabía que tenía que darle el espacio a Amelia para que le dijera todo lo que pensaba y sentía, aunque se moría por decirle todo lo que eso le provocaba.

-"Creo que ya lo he dicho varias veces, pero no me canso ni me cansaré nunca de decirte que le diste color a mi vida cuando era todo gris. Volver a enamorarme no estaba en mis planes. Simplemente existía, pero no tenía ningún propósito de vida. Quizás me negaba la posibilidad por no volver a sufrir, y me autoconstruí una coraza para evitar. Hasta que llegaste tu. Hasta que nos encontramos en el pasillo de tu restaurant."

Luisi sonreía al recordar esos comienzos, cuando Amelia solo preguntaba donde quedaban los lugares. Estaba respirando fuerte y aguantando. Escuchar a la morena hablarle así fue un bálsamo a su corazón, que también estaba necesitado de alguien que lo cuidara bonito.

-"Y se que hice mal en no hablarlo contigo, pero entendía que también era una desición muy mía y que asumí que estarías de acuerdo porque a la final queremos estar juntas, y yo simplemente entendí que de las dos era la que mejor podía hacer el movimiento. Así que te pido perdón por asumir y no hablarlo contigo" terminó diciendo mientras que de sus ojos ya brotaba una pequeña lagrimilla.

Hubo un pequeño silencio entre las dos. Se miraban y esa conexión se activaba inmediatamente.

-"Puedo hablar?" preguntaba Luisi en un tono bajo, mientras se acercaba más a Amelia, esta vez, entrelazaba sus dedos a los de ella.

-"Sí, sí puedes..."

-"Amelia...mi amor..." dijo mientras llevaba una de sus manos y colocaba el cabello de la morena detrás de la oreja. -"Yo quiero que tengas muy claro que nada me hace más feliz que tenerte aquí conmigo. Que tu sonrisa ilumina mis días más oscuros, que tocarte es la sensación más placentera que puedo experimentar. Que doy gracias todos los días por haberte conocido y que a cada momento me demuestras ese amor que sientes por mí. Yo no dudo de tus decisiones, solo que aún me cuesta creer que alguien sea capaz de dejarlo todo por mi, porque nadie nunca lo había hecho. Así que tranquila. Perdóname tú a mí por como reaccioné, pero es que aún asimilaba que estuvieras aquí y luego me soltaste esa bomba, y me cogiste fuera de base..."

-"Y si te cojo ahora?" preguntó Amelia mientras se pegaba más, soltando las manos para colocarlas en la espalda baja de la rubia. Estaba a escasos milímetros.

Luisita podía sentir el aliento y la respiración un poco agitada de la morena, y su boca solo tenía un propósito: llegar y saborearla.

-"Pues alguien me prometió unos fuegos artificiales por ser mi cumple..." ripostó rozando sus labios con los labios de la otra. Sus manos iban a las caderas de la morena en un sube y baja suave.

-"No se diga más..."

Amelia atrapó el labio inferior con sus dientes para luego succionarlo. A Luisi se le escapa un gemido al sentir como la de rizos mojaba los alrededores de su boca con su lengua para luego besar apasionadamente como si no hubiera mañana. Y aunque era apasionado, a la vez era delicado. Todo lo que había dicho se reflejaba en ese beso. El que dice "ya estoy aquí", "ya llegué", "estoy en casa", "eres mi lugar seguro", "que bueno verte otra vez", "te extraño", "contigo siempre", "no me iré".

Luisi respondía de la misma forma. Ambas sabían muy bien como hablarse en un beso. Porque no era uno cualquiera. Porque este beso significaba un nuevo comienzo en ellas y entre ellas. Una nueva oportunidad para vivir ese amor bonito, pero esta vez juntas.

Amelia agarraba a Luisi y fue dando unos pasos hasta recostarla de una de las paredes de aquella sala. Lentamente fue quitando su vestido para dejarla en ropa interior. La oji marrones, como podía, intentaba hacer lo mismo desabrochando cuanto podía dejando a la morena en igualdad de condiciones.

Luisi intentaba safarse de aquella prisión de placer en la que estaba, pero Amelia no la dejaba. Ella continuaba con aquel despliegue de besos desesperados, agarrando sutilmente la cara de rubia.

-"Te amo Luisi. No sabes cuanto te he extrañado. Necesitaba besarte, tocarte, apretarte toda. Me vuelves loca, mujer" exclamaba entre jadeos.

-"Si hablamos de locura, tu eres la reina de todas. Por mí, que me encierren en un manicomio" respondía mientras seguía en aquel beso interminable.

Amelia fue trazando un camino de besos mojados desde la boca, pasando por el cuello, hasta llegar al pecho. Con sus hábiles manos desabrochó el sostén de la rubia e iba atrapando poco a poco los senos, y luego acercaba su boca para deleitarse lamiendo aquellos pezones erectos por la exitación provocada.

-"Vamos a la cama porque siento que perderé las fuerzas para estar de pie en los próximos segundos..." pidió la rubia agarrando la cara de Amelia y tomándola de la mano hasta llevarla al borde de la cama.

Luisita se sienta y Amelia se acomoda en su falda de frente a ella. La oji marrones queda sin habla al tener justo de frente los pechos de la morena y como señal automática, se moja los labios mientras los admira. Como quería deleitarse completamente con aquellas vistas, procedió a desabrochar el sostén, quedando ambos pechos al descubierto.

Amelia sintió eso como una provocación y comenzó un movimiento sutil de caderas más mientras intentaba acercarse lo más posible a ella.

La rubia posaba sus manos en las caderas de la oji verdes que se contoneaba como el vaivén de las olas mientras que a la vez atrapaba con su boca el pezón derecho. Lo lamía alrededor, lo chupaba suavemente procurando no causar dolor. Luego dirigía su boca lentamente hacia la derecha dejando un camino de besos mojados, para finalmente llegar al otro seno y dedicarle el mismo tiempo.

Amelia jadeaba de placer mientras sentía que su humedad aumentaba por la exitación y estaba dejando huellas en los muslos de Luisi. Agarró el cabello rubio para despegarla brevemente y llegar a su boca para comenzar un gran duelo de lenguas.

Aunque Amelia llevaba aparentemente "el mando" del momento, Luisi no desaprovechó la oportunidad de la posición en que estaba la morena, todavía sentada sobre ella, y sin titubear, llevó su mano a la entrepierna, acariciando toda el área y mojando sus dedos en sus fluidos. Aunque fue desprevenido para Amelia, aquello logró exitarla muchísimo más de lo que estaba, y un gran gemido sonó en aquella habitaciôn al sentir los dedos de su amada dentro de ella.

El vaivén de caderas de Amelia encima de Luisi era un poco más fuerte esta vez, cual marejada en pleno huracán. Mientras, la rubia volvía a deleitarse con los senos de la morena. Los gemidos y jadeos eran continuos, ya en ambas, pues el nivel de deseo, de exitación y desenfreno estaba alcanzando el límite.

Amelia estaba llegando al punto de máximo placer cuando decidió cambiar de posición dejando a Luisi sorprendida y pensando si había hecho algo mal.

-"Amor, que pasó? Estás bien?" preguntó la rubia un poco confusa ante el cambio abrupto.

-"Todo perfecto. Solo que que dije que tendrías fuegos artificiales y tu me estás encendiendo la mecha. Tranquila y déjate llevar..." dijo mientras empujaba delicadamente a Luisi hacia atrás haciéndola acostarse en la cama.

-"Me preocupa tu gusto repentino por la pólvora" dijo a milímentros de la cara de Amelia.

-"Por los polvos dirás..." dijo mientras comenzaba otro ataque inmisericorde de besos apasionados y encaramándose nuevamente encima de la rubia, quien colocaba ahora sus manos en cada muslo de la morena. Su boca iba de lado a lado viajando por el cuello. Lentamente se movía tratando de recorrer todo espacio posible de aquel cuerpo de tez clara.

Luisi, al sentir los labios y lengua en su piel, se retorcía levemente buscando un contacto más directo con la entrepierna de la morena. Amelia, se dio cuenta de esos leves movimientos y se reacomodó para sentirla a ella también. Mientras, continuaba con sus besos, sus manos acariciando los hombros, los brazos, bajando un poco más hacia el pecho. Se detenía en cada seno al encontrar los pezones erectos, listos para ella deleitarse y a la vez darle placer. La única pieza que faltaba por quitar era el diminuto panty que vestía la rubia, y fue cuando al bajar al área del abdomen y luego de recorrer hasta la saciedad esa parte del cuerpo tan sexy para la morena, decidió removerlo atrapando con sus dientes la parte superior y con sus dedos bajaba la parte lateral, dejando sentir su aliento en la piel de Luisi que sentía una humedad incontrolable y unos pinchazos que le indicaban que estaba poco a poco llegando a ese clímax.

Amelia terminó de quitar ese fino pedazo de tela y esta vez fue directo a donde quería llegar. Abrió un poco las piernas de la rubia y comenzó a dejar lamidas alrededor de los labios exteriores, luego en el llamado monte venus, y Luisita solo jadeaba y movía su pelvis buscando continuar con el contacto de los labios y lengua de la oji verdes.

-"Amelia, no me puedo aguantar! No aguanto! Hazme tuya por favor. Como lo sabes hacer..." dijo en un resoplido ya que hasta su respiración se entrecortaba.

-"Feliz cumpleaños amor!" le respondió a la vez que acercaba su boca y comenzaba a besar e introducir su lengua para jugar con aquel clítoris que la llamaba a gritos. Aquella lengua juguetona estaba haciendo escantes. Andaba por la libre, acariciando todas las esquinas e intentando penetrar un poco más. Volvía y se retractaba para producir movimientos circulares en el clítoris, y volvía a su intento de penetrar esta vez más adentro, logrando saborear aquellos fluidos que desbordaban sin parar.

Sin previo aviso, Amelia acercó dos de sus dedos para adentrarse en aquel canal que estaba sobrelubricado. Movía suavemente sus dedos hacia adentro y hacia afuera, mientras su boca no paraba de besar y lamer los alrededores. Con su otra mano acariciaba de arriba a abajo todo el torso frontal y lateral de Luisi que ya no aguantó más.

-"Me co... me corro...Amelia... puta m...ahhh...no pares Amelia...no pares amor...mierd...ahhjj..." fue lo único que alcanzó a decir cuando sintió su cuerpo estremecerse por completo, una electricidad recorría sus adentros, jadeos, gemidos, todo a la vez. Amelia no tenía ninguna intención de parar aquel momento tan esperado y deseado. Al contrario, continuaba su labor haciendo que Luisi tuviera unos cuantos orgasmos adicionales.

-"Eres tan maravillosa Amelia. Es tan rico sentirte de esta forma que no lo cambio por nada" decía mientras intentaba bajar sus pulsaciones y recomponerse en la cama.

-"Me haces tanta falta mi niña hermosa. Y me pasa lo mismo. Estaba deseosa de tenerte y hacerte mía una y otra vez" contestaba mientras se acomodaba al lado de ella y dejaba pequeños besos en su cuello y oreja.

-"Los fuegos artificiales se quedan cortos mi amor. Esto fue a nivel de bombardeo y contraataque intenso jajaa! Te amo, bella" dijo volviéndose de lado para quedar frente a la morenaza.

-"Me haces inmensamente feliz Amelia. Gracias por llegar y estar aquí, de verdad. Por todo lo que hiciste por mi. Dejarlo practicamente todo y lanzarte a una aventura"

-"Bueno, cariño, es por las dos, lo hice por las dos. Y es una aventura que me llena de mucha ilusión, de ver que nos depara la vida, juntas, ir de la mano contigo y descubrir todo lo hermoso que tenemos por vivir. Con todo lo que venga, con lo bueno, lo malo, porque nos merecemos todo. Reir juntas, sentir miedo juntas, soñar, caminar de la mano, y que seamos lo primero que veamos cuando despertemos, y lo último cuando vayamos a dormir. Hasta viejitas"

-"Hasta viejitas...No te exagero cuando te digo todo lo que siento por ti, Amelia. Gracias por llegar, por estar y por quedarte".

-"Yo tampoco exagero cuando te digo que soy bendecida en tenerte. Te amo inmenso rubia hermosa" dijo besando suavemente a Luisi.

-"Te amo más morenaza"

Se dejaban tiernas caricias y besos mientras hablaban porque para ellas luego de hacer el amor, esas conversaciones eran con el corazón desnudo y sincero. Un corazón que palpitaba con nuevas fuerzas y lleno de amor bonito.

~~~~~~~~~~~~~~

Aquí de vuelta con este capi un poco 😍y🥵

Qué les ha parecido?? Cuéntenme!

Gracias por estar y continuar leyendo esta historia. También por sus comentarios que me encanta leerlos😍 y sus ⭐️.

Les deseo muchísimas felicidades!💥Que la pasen bonito junto a sus familias y amigos, y que el año nuevo 2024 sea uno lleno de bendiciones y salud para ustedes y los suyos🎄😘🌊🌊🌊

A ti mi amor bonito😘🌹

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