El Triunvirato👩🏻🧑🏻🦱👩🏻🍷
🌸🌈Amelia🌈🌸
Grupito, tenemos que hablar.
Luego de enviar ese mensaje de alerta a su equipo de soporte, coordinaron para cenar juntos ese lunes luego de que salieran de sus compromisos de trabajo, pues cuando intentaban desayunar o almorzar, últimamente algo ocurría que tenían que posponer.
El ritmo de trabajo de Amelia se estaba volviendo uno muy pesado. El caso de corrupción y el litigio legal en el que se había involucrado su jefe, estaba salpicando a otras personas muy conocidas por la morena, lo que ocasionó un desgaste mental, físico y emocional. Su día consistía últimamente estar de reunión en reunión, llamadas, juntas con ejecutivos, juntas con el equipo legal, delinear estrategias efectivas en medio de una gran crisis e implementarlas a su vez, añadiendo el apoyo que tenían que brindarle al departamento de recursos humanos para comunicar un buen mensaje a sus empleados para retenerlos y evitar el éxodo masivo de personas claves en el banco.
El nivel de estrés estaba en su máximo nivel, pero ante Luisita, debía aparentar que todo estaba bajo control para no preocuparla más de lo que la rubia podría estar pues ella estaba manejando lo del restaurant.
Incluso cuando estuvo alejada de Luisita, en ese periodo de tiempo experimentó unos fuertes dolores de cabeza, los mismos que estaban volviendo esporádicamente, que la llevaron a realizarse unos estudios. María e Ignacio nunca la dejaron sola, mucho menos en esos días donde la espera de los resultados se hacía una eternidad. Hasta que llegó el día.
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FLASHBACK
-"María, estoy cagadísima del miedo. Y si tengo un tumor?" decía apretando la mano de María buscando esa fortaleza y agarre para no dejarse caer mientras esperaba en el Cuarto B de la oficina del Dr. Nieto, quien era el esposo de una de sus compañeras de universidad y colega en el mundo de las comunicaciones.
-"Pero vamos Amelia, un poco de optimismo por Dios. Lo que sea lo vamos a enfrentar y a darle la batalla. Y si todo está bien pues muchísimo mejor! No crucemos el charco sin llegar a la orilla. Respira y tranquilízate. Estoy contigo. Le digo a Nacho que te traiga una manzanilla?" le preguntaba mientras acurrucaba a su amiga.
-"No te preocupes, si no me pasa nada por la garganta ahora mismo. Ayyyyyy! no llega el doctor!" decía con desespero.
-"Si algún día decides quedarte embarazada no quiero ni imaginarte en la sala de partos" dijo María en un intento por destensar a su amiga.
-"Por favor, no añadas más ansiedad a la que tengo. Lo menos que puedo pensar ahora es en un embarazo porque para empezar no tengo con quien...o tenía con quien y ahora no se. Da igual" dijo a regañadientes en clara referencia a su separación con Luisi.
-"Nunca hablaste de este tema con la rubia? Ni siquiera como una posibilidad futura?" curioseaba María.
-"La verdad es que se quedaron muchas cosas por hablar..."dijo con tristeza.
-"Me hace mucha falta María, y quisiera que ella estuviera aquí o por lo menos saber que está en este momento donde siento que todo se me tambalea".
Los ojos se le comenzaban a humedecer cuando tocan a la puerta y entra el doctor al cuarto. Amelia se limpia los ojos, respira y pone su mejor cara, aunque por dentro la incertidumbre hacía su entrada también junto al galeno.
-"Buenas tardes Amelia, que bueno verte de nuevo!" dijo mientras se sentaba en el escritorio y comenzaba a entrar sus credenciales en la computadora.
-"Hola Alfonso, como está Aimeé y los nenes?" preguntó por cumplir con el protocolo de saludo, ya que estaba desesperada por saber los resultados.
-"Todos bien gracias a Dios! Bueno, vamos a ver que tenemos por aquí. Por suerte hoy estoy en oficina, tenía guardia pero me la cancelaron, sino te hubiera atendido otro colega. No sabía que venías hoy" dijo mientras ojeaba el cartapacio con unos cuantos papeles llenos de gráficas y números.
Luego de una espera de varios minutos que parecieron horas para Amelia, al fin el doctor comienza a hablar.
-"Bueno Amelia, básicamente, por lo que puedo observar de tus análisis de sangre y el estudio de resonancia magnética que se te hizo a la cabeza, no tienes nada de qué preocuparte"
Amelia soltó una bocanada de aire y sus lágrimas ahora eran de felicidad y tranquilidad. María la miró con alegría y ternura. Ella también estaba cagada del miedo pero no podía demostrarlo. Era su amiga y la necesitaba fuerte.
-"Y entonces a qué se deben los dolores de cabeza?" preguntaba sin entender.
-"Te pregunto, estás con mucho estrés en tu trabajo? En tu famila? Alguna situación particular que entiendas pudiera estar afectando tu sueño, el descanso, tus horas de comida, ciclo menstrual, si lo que comes es alto en sal, posible embarazo?"
Embarazo. Otra vez la palabrita que ni remotamente estaba en su pensamiento. O por lo menos no por ahora.
Pensó en su trabajo, todas las horas que le estaba dedicando, y últimamente más que nada, en Luisita. Todo ese distanciamiento y como terminaron las cosas le estaba afectando, quizás mucho más que su mismo trabajo.
-"Pues sí Alfonso, no te niego. Cosas de trabajo y personal"
-"Si es eso nada más, aquí claramente estás presentando ciertos episodios de migraña. No es para alarmarse, pero sí necesitas hacer unas modificaciones en tus actividades diarias. Por ejemplo, hacer tus tres comidas y merendar, descansar por lo menos 8 horas, tomar clases de yoga o meditación, ejercitarte aunque sea caminata por 30 minutos, es cuestión de bajar el ritmo de las cosas poco a poco. Evita cenar muy tarde y el consumo de alcohol y cigarrillo. Trata de lograr un balance, es todo, y eso incluye la parte emocional. Busca ayuda de sicólogo si es necesario, no te niegues nunca la ayuda. Muchas veces pensamos que somos capaces de resolver todo lo que no rodea, y no es así"
Amelia se quedaba muy pensativa al escuchar todas las recomendaciones del doctor.
-"No se preocupe doctor, que yo personalmente me voy a encargar de que enderece su vida" dijo María muy seriamente y mirando de reojo a una Amelia que continuaba absorta en sus pensamientos.
-"Voy a recetarte un medicamento que es para esta condición y otro que es como la melatonina pero un poco más fuerte para que solo la tomes cuando sea necesario, vale. Debes beberla cuando vayas a dormir y no haber ingerido alcohol. De todas formas, si los dolores de cabeza se agudizan, me llamas o vienes para acá inmediatamente para hacer otro tipo de estudios. De lo contrario, si haces los ajustes que te mencioné, debe bajar la frecuencia y la intensidad de los mismos. Estamos? Alguna pregunta o duda que tengas o tu acomapañante?" preguntó mientras escribía unas últimas notas en el récord.
-"No, por ahora no" respondió esta vez Amelia.
-"El resto de los análisis, como te dije, todo bien. Niveles de glucosa, hemoglobina, colesterol, trigilcéridos, glóbulos blancos y rojos, orina y escreta y tiroide muy bien, y negativo en enfermedades de transmisión sexual, y covid"
-"Miraaaa...negativa...te estás portando bien amiga" le dijo María acercándose y en voz baja.
-"María por favor!" le dijo con mirada asesina.
-"Alguna duda?" volvió a preguntar a lo que ambas contestaron que no.
-"Pues eso sería todo. Ya sabes que estamos a la orden y si notas algo raro no dudes en llamarme" le informó el doctor en medicina interna mientras le entregaba el expediente para que lo hiciera llegar en la recepción.
-"Muchísimas gracias Alfonso, de verdad siento un gran peso menos. Mis cariños a Aimeé y a ver cuando planificamos para cenar" dijo mientras se despedía del médico.
-"Claro! Se los daré! Cuídate mucho!" Se despedía mientras se dirigía al cuarto del lado para ver otra paciente.
-"Amiga ya sabes, a bajarle tres rayitas a tu intensidad laboral. Lo relacionado a Luisita pues creo que es cuestión de tiempo, ya verás"
-" Pues será" dijo con resignación.
Amelia pudo eventualmente aminorar esos ataques de migraña. Luego, su regreso con Luisita ayudó aún más a que continuara en plena mejoría.
FIN DEL FLASHBACK
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El triunvirato decidió ir a un restaurant oriental cerca de la Plaza Mayor, ordenaron unos eggrolls vegetarianos, sushi y vinito como siempre.
-"Y a qué se debe esta convocatoria si se puede saber?" preguntaba Ignacio mientras bebía de su copa de vino.
-"Estoy cansada" dijo con desgano.
-"Ah bueno pero eso lo estamos todos y más cuando quieren que dure cinco rounds jugando a pillo y policía"
-"Nacho de verdad, duras tan poco?" preguntó Amelia que no perdía oportunidad para molestar a su amigo.
-"Pero que te importa si vinimos a hablar de ti no de mi vitalidad sexual masculina varonil de macharrán pecho peludo. No te desenfoques Amelia, no desvíes el tema"
María solo reía a carcajadas.
-"El caso...que todo este asunto judicial me tiene muy agotada y desgastada. Yo me imagino que ustedes están igual"
-"Pues sí, aunque nosostros estamos acostumbrados por los diferentes tipos de casos que nos llegan. Y son tantos años ya en el bufete que uno trata de buscarle la vuelta. Pero claro, ciertamente nos han tocado algunos clientes que ni te cuento" dijo María.
-"También es que delegamos o pedimos colaboración si es un caso muy complejo, pero aquí esta guapura de mujer lleva razón. Debe haber algo más que nos has dicho, porque por trabajo no lo es todo. Siempre has sido muy responsable y eres una crack en tu campo. Así que cuenta" dijo Nacho sabiendo muy bien por donde iba la cosa, solo que quería escucharlo de la misma Amelia.
-"Amiga, es la rubia boricuizada verdad?"
-"Pues sí. De verdad que me he enamorado profundamente, se que ella es la persona, la extraño muchísimo, la amo con todo y creo que no soportaría otra separación o estar mucho tiempo en distancia. Tengo mil ideas dando vueltas en la cabeza pero todas me llevan a una...a ella" dijo sincerándose.
-"Y de todas esas mil ideas, hay una preselección para bajar la cantidad a 10 por lo menos?" decía entre risas Nacho.
-"He pensado ir de sorpresa; he pensado renunciar y dejar todo; he pensado proponerle que ella regrese a España; he pensado en no hacer absolutamente nada y dejar que el tiempo pase y decida...no se que coños hacer"
Sin planificarlo, los tres bebían de sus copas a la vez.
-"Tal vez deberías preguntarle a ella sus planes futuros en cuanto a la relación, o decirle esto mismo y ver que ella piensa, no crees?" dijo María.
-"Ella no va a dejar el restaurante, si apenas lo acaba de remodelar y está reabriendo al público. Aunque por otro lado, tiene su familia acá en Valencia. Tampoco quiero que se vea presionada al tener que decidir, no sería justo de mi parte ponerla en esa situación, no creen?" preguntaba muy dudosa de todos sus pensamientos y a la vez, buscando la aprobación de alguno de sus amigos.
-"Y si decides irte tú, que harás con tu carrera, con tus cosas que están acá?" preguntaba Nacho de cierta forma por cumplir, porque muy adentro extrañaría a su mejor amiga y eso ya le calaba hondo, aunque fuera una mera posibilidad. No podía ser egoísta. La decisión de su amiga era solamente de ella y de nadie más.
-"Pues aunque no lo creas, he estado pensando en eso también. He navegado unas cuantas páginas en internet. Podría ofrecer mis servicios como consultora, igual aplicar a una posición disponible en compañías o agencias de publicidad de la isla. Tengo un dinero ahorrado. Ustedes saben que yo no soy de lujos ni de malgastar dinero. No tengo hijos, ni perros, así que igual puedo vender todo o alquilar" dijo mientras tomaba un sorbo de su copa bebiendo lo que quedaba de cantazo.
Pensar en todo lo que estaban conversando era como tener a un huracán categoría 5 en su cabeza.
-"Amelia lo único que quizás podemos decirte Nacho y yo es que primero, cualquier decisión debes tomarla tú y discutirla con ella"
-"Con su novia" dijo Nacho.
-"Por eso, con Luisita"
-"Por eso, con su novia"
-"Pero Nacho que carajos te pasa! Su novia... la rubia.. Luisita... es la misma persona de quien hablamos! Joder hombre!" decía María chocando sus manos al aire buscando la paciencia. Nacho sabía muy bien como poner a su mujer así, fúrica.
-"Es que te ves tan jodidamente sexy cuando reaccionas así que me encanta provocarte. Te amo mujer! Dame un beso acá..." le dijo mientras se acercaba para tomarle la cara a María y besarla.
-"Tú no piensas madurar verdad?" preguntaba Amelia muerta de la risa. Disfrutaba muchísimo cuando Nacho hacía enfadar a María a modo de broma.
-"Jamás! Las frutas son las que se maduran, yo no!" dijo riendo.
-"Bueno, lo que decía antes de que el payasín frutero me interrumpiera...Que debes hablarlo CON TU RUBIA NOVIA LUISITA, y vas viendo las opciones que tú misma has dicho. Lo que sea te vamos a apoyar, como siempre."
-"Yo tengo más que claro que cuento con ustedes siempre. Su apoyo ha sido trascendental en mi vida y yo estoy más que agradecida por eso. Son los mejores amigos que puedo tener" decía mientras agarraba las manos de cada uno y sonreía.
El triunvirato continuó con su cena esa noche, conversando de todo un poco, mientras la cabeza de Amelia no paraba de barajear las ideas que tenía presentes.
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Habían pasado ya varias semanas. Luisita continuaba teniendo éxito con la reapertura del restaurant, sobretodo en las noches y fines de semana. Siempre buscaba cualquier momento libre para comunicarse con su novia, contarle lo que pasaba diariamente, le enviaba videos de nuevos platos que quería incluir, entre otros.
Amelia por su parte, estaba hasta el tope en su trabajo. El juicio ya había finalizado. El presidente del banco fue convicto a 15 años por lavado de dinero, transferencia ilegal en comercio internacional, fraude al erario público, aparte de violar las pólíticas y código de conducta de la empresa. Poco a poco volvía la calma.
Una de esas noches donde Luisi estaba libre y Amelia había regresado temprano de su trabajo, se llamaron como siempre hacían. Esta vez había mucha nostalgia en esa llamada.
-"Amor, te extraño demasiado. Pienso en los días y noches que pasamos juntas cuando estuviste aquí y no puedo borrar esas imágenes de mi mente. Teniéndote cerquita, tu calor, tu olor..."
-"Amelia no empieces que nos conocemos. Me hablas así y me prendes de una"
-"Besándote el cuello...tocando tus senos...chupándolos..." decía mientras dejaba escapar unos supiros, pero de deseo. Se autoacariciaba imaginado las manos de su rubia en ella.
-"Amor, estás cachonda. Te va a llegar la menstruación pronto?" le preguntaba pero ella estaba igual o más cachonda. Escuchar a hablar a Amelia en ese tono bajo y muy insinuante, la descontrolaba.
-"Puede ser pero no necesito que llegue mi periodo para sentirme tan caliente. Tienes eso que no se yo que me pones, y quisiera hacerte el amor todas las veces posibles, como conejas"
Luisi soltó tremenda carcajada.
-"Como conejas...vale, pero...encima de ti? Que me vayas quitando la ropa poco a poco?"
-"Mmmmmm si...donde estás ahora mismo?" preguntó la morena.
-"En camita. Nos cambiamos a video?" preguntó Luisi
-"No, todavía no, necesito escucharte e imaginar primero. Quiero sentir que me tocas mientras me hablas"
-"Pues imagina que en estos momentos solamente tengo un camisón de seda negro, sin nada debajo, y que me estoy acercando poco a poco a ti, gateando en la cama, y que comienzo a dejar besos en esas piernas tan hermosas que tienes, y a acariciarlas, porque están muy suaves..." dijo la rubia comenzando el juego de procovación.
-"Pues imagina que yo te espero semisentada en la cama, solo con el sostén y el tanga negro de encajes, y que al besarme las piernas todo se me estremece..." contestaba Amelia.
-"Y voy subiendo recorriendo tus muslos y cuando estoy llegando a tus caderas, me desvío porque no es momento todavía, aunque ganas no me faltan de llegar a ti..."
-"Dios Luisi...de imaginarlo no me puedo aguantar"
-"Ah que no te puedes aguantar? Pues no te aguantes...tócate...de seguro estás tan húmeda como yo"
-"Confirmadísimo..."
-"Confirmo también. Estoy tan mojada como la charca a la que te llevé en el Yunque"
-"Como olvidar...nuestro primer beso fue allí, recuerdas?"
-"Claro que recuerdo Amelia. Si desde que te vi en el restaurant y nuestras miradas se encontraron, no ha habido ni un solo momento en que he dejado de pensarte, ni de amarte, ni desearte. Incluso cuando nos separamos. Fui una estúpida, porque moría por llamarte y saber de ti" dijo mientras recorría mentalmente esos momentos claves pero a la vez no dejaba de tocarse también.
-"Ya cariño, no pensemos en lo triste. Quizás fue necesario para que lleguemos hasta donde estamos hoy, aquí, teniendo sexo telefónico porque ni la distancia puede con nosotras. Somos unas enfermas"
-"Yo estoy muy enferma, me siento caliente y el cuerpo extraño, porque reacciona cuando toco ciertos puntos..."
-"Mmmmm ya veo. Creo tener la solución señorita Gómez..."
-"A ver doctora Ledesma. Que debo hacer?"
-"Escuche bien. Esto lo puede repetir cuantas veces sea necesario, entendido?"
-"Entendido. Dígame que la escucho atentamente..."
-"Muy bien. Preste atención. Suavemente, acerque uno o dos de sus dedos a su área genital. Encontrará esa área más húmeda de lo normal. Ahora, puede realizar movimientos suaves, de arriba hacia abajo o circulares. Toda esa humedad puede esparcirla por las áreas que estén menos húmedas...me sigue?"
-"La sigo" contestó en un jadeo.
-"Luego, dirija sus dedos un poco más abajo y tocará un área más húmeda aún donde hay una cavidad. Puede ir introduciendo uno o dos dedos, como guste, muy suave. Ahora puede repetir este movimiento un poco más rápido según vaya sintiendo placer..."
-"Doctora, la calentura va en aumento, y siento palpitaciones muy rápidas. Me falta un poco el aire y la acuosidad aumenta también..."
-"Eso está muy bien, no pasa nada, al contrario. Ya vamos entrando a la fase dos del trataniento"
El alto nivel de exitación en ambas era inevitable. Les encantaba provocarse de todas las maneras posibles.
-"Ahora, vaya subiendo sus dedos suavente, acariciando y explorando todo su centro. Sienta que sus dedos son los míos, porque los míos son los suyos..."
-"Amelia no aguanto" dijo con desespero.
-"Tiene que aguantar un poco nada más señorita Gómez. Recuerde que este tratamiento tiene que hacerlo conmigo paso por paso y las dos veremos los resultados al final...que todavía no es..."
-"Cabrona"
-"No me hable así, respete..."
-"Eso quiero, que me respetes...doctora"
-"Muy bien, repetiremos esa parte luego. Ahora, mientras sube sus dedos, va a encontrar un bultito protuberante que se llama clítoris, deténgase ahí, continue movimientos circulares en él, arriba hacia abajo, ejerciendo un poco de presión, todo según entienda que le cause máximo placer, más rápido, más lento, que sienta una electricidad en su cuerpo..."
-"Amelia joder..."
-"Siga...sin parar...no pares...no pares..."
-"Mierda..."
-"Véngase conmigo...conmigo...no pares...no...pa...ahhh"
-"Ahhhh...no...p...amor!
-"Sigue...sigue... sig...ahhhh"
Los jadeos, gemidos y palabras ahogadas no cesaban entre ellas. Se conocían tan bien que lograban esa conexión inexplicable en todo. Ambas sabían como llevar a la otra al placer extremo con tan solo escucharse.
Luego de que calmaran sus respiraciones, continuaron la conversación con unas cuantas palabras de amor y agradecimiento. Siempre se agradecían el tiempo que compartían, los momentos de conversar y los momentos de placer absoluto, aunque quedaran extenuadas.
-"Amelia, te amo. Eres lo más importante en mi vida y te quiero en ella para siempre. Yo se que ahora la distancia la estamos manejando lo mejor posible, pero no puedo evitar pensar si estuvieras aquí conmigo o yo allá contigo" decía con pesar.
-"Lo se amor, yo también te amo y no deseo algo más en la vida que podamos estar juntas, hacer una vida juntas. No nos pongamos tristes vale, vamos a ver que pasa. Por lo pronto, guárdame un besito más..."
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Como preguntaría mi amiga Lauryj8 como va su nivel de fatal?🤣🤣🥵
Gracias como siempre por esperar y leer estar histora que ya está llegando a su final. Gracias por compartir esta aventura conmigo!🫶🏻🫶🏻😘
Gracias por sus comentarios y estrellitas. Espero que les haya gustado.🌊
A ti❤️