Enseñando A Sentir (Segunda E...

By Awoken1213

7.1K 479 114

Una historia basada en el eroge de Ray-K, en la cuál se contará la vida de Sylvie y las personas que la rodea... More

Aviso
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 2.5: "A Sylvie le...¿gusta?"
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo extra - Sachi
capítulo 6 - "Santa Mónica" 1a parte
capítulo 7 - "Santa Mónica" 2da parte
capítulo 7.5 - "Alejenla de los teléfonos"
capítulo 8
capítulo 9
capítulo 10
Capítulo extra - "Nephy" 1a parte
capítulo extra - "Nephy" 2da parte
capítulo 11
Capítulo extra - "Sylvie"
capítulo 12 - primera parte
capítulo 12 - segunda parte
capítulo 13
capítulo 14
capítulo 15
capítulo 16
capítulo 17
capítulo 18
capítulo 18.5 - Historias de la clínica 1
capítulo 19
capítulo 20
Historias de la clínica - El extraño
capítulo 21 - parte uno
Capítulo 21 - parte dos
FELÍZ AÑO NUEVO!!!!
capítulo 22
23 - pequeño día de paz
24 - Larga noche de consuelo
25
26 - Noche especial
27 - Inesperado
28 - Viaje
29 - veo el fuego en tus ojos (parte 1)
30 - De vuelta a casa
Historias de la clínica - Viejas amistades
31 - Un día más
32 - un día menos (parte 1)
Un día menos (parte 2)
Epílogo
Gracias

29 - veo el fuego en tus ojos (parte 2)

38 3 1
By Awoken1213

Holaaaa genteee, se que este tipo de notas suelo ponerlas al final pero ahora va al principio pq sí.

En este capítulo utilizo una canción para que el ambiente sea más adecuado a la situación, coloqué el link en la parte de comienza a sonar, obviamente no es obligatorio que la escuchen pero si pueden escucharla mucho mejor, creo que le aporta mucho a la escena.

Igual terminé separando este capítulo en 2 porque salieron más de 10 mil palabras pipipi si me inspire y para que no sea tan pesado de leer pues aquí está jeje.

Bueno, sin más que decir, disfruten el capítulo.

--------------------------------------------------------------

Luis

No se si es por el hecho de que acabo de despertar o por las palabras que dijo Nephy que siento cómo mi corazón golpea mi pecho con cada paso que doy.

Siento las piernas y la cabeza ligera, ni me di cuenta que ya estoy frente a la habitación de Vid.

Sacudí la cabeza y traté de peinarme un poco, giré la cabeza buscando algún reloj para saber la hora.

A lo lejos logré ver uno, me costó un poco leer pero lo logré, la una y media de la mañana.

Volví a suspirar, no era la primera vez que hacía esto.

Abrí la puerta y entré, las luces estaban encendidas y pude ver a Vid en su cama, fue como la primera vez que la ví hace rato aquí, pero ahora yo no me sentía igual.

Me acerqué a ella y noté que le costaba más respirar, aún no daba bocanadas de aire, pero si era visible el esfuerzo en su pecho.

-hey doc- dijo con dificultad, incluso hacia pequeñas pausas entre palabras.

-¿Cómo sigues?, ¿Y tú oxígeno?- pregunté sentandome al lado de ella y colocando una de mis manos sobre la suya

-bueno la verdad me lo quité hace rato, no me está haciendo ningún efecto y es molesto tener esa cosa en la nariz y con respecto a la otro, algo mal yo creo, en realidad siento como se me va la vida, no creí que así se sintiera morir- dijo viendo al techo

-aún no he muerto así que no podría decirte si así se siente-

-je, supongo tienes razón, aunque para lo que tengo me alegra poder morir de forma tan tranquila-

-te tengo que dar la razón en eso, si hubieras muerto el primer mes bueno, no sería tan bonito-

-lo sé, Nephy me dijo que la gente que dura más de un mes suele morir con complicaciones muy feas-

-sí, incluso en eso estás teniendo suerte-

-ja, mi vieja amiga- dijo sonriendo, guardó silencio por unos segundos y luego volteó a verme -abajo de mi cama hay una caja morada ¿Me la podrías pasar?-

Yo asentí y me arrodille en el suelo, la parte de abajo de la cama estaba bastante limpia y ví rápidamente la caja, la subí a la cama, no era tan pesada como yo esperaba.

-gracias, sabes... En esta vida te dí a tres hermosas niñas y-

Vid se quedó en silencio por unos segundos.

-bueno, eso suena peor de lo que imaginaba, no le digas a Sylvie, no quiero que ella termine siendo mi causa de muerte- dijo sonriendo

-ella nunca haría algo así- respondí imaginando la escena, sería algo gracioso

-bueno, cómo decía, está caja es un último regalo que tengo para tí, antes de que hables, te conozco poco lo sé, pero a pesar de que seamos prácticamente desconocidos fuiste a ayudar a mis niñas cuándo te lo pedí, las adoptaste y trataste cómo si fueran tuyas, me recibiste en tu casa e hiciste que me encontrara con la mujer que más he amado en mi vida, lo mejor que puedo hacer es darte esto-

Sus palabras me habían dejado mudo, literalmente, sentía ese nudo en la garganta tan característico de situaciones difíciles y sentía cómo mis ojos se comenzaban a llenar de lágrimas, tal vez ni siquiera yo estaba listo para esto.

-Vid, no es nada de verdad, todo lo que hice lo hice con el corazón, no me debes nada, las niñas me han hecho muy feliz e incluso ayudaron a Sylvie a mejorar, hiciste a mi mejor amiga muy feliz y siempre nos has tratado bien, yo soy el que debería darte un regalo- dije, por suerte la voz no se me quebró

Ella sonrió y asintió.

-no tiene sentido que veamos quién fue mejor, abre la caja- dijo ella

Yo asentí, la caja parecía ser un pequeño cofre, tenía una cerradura pero no tenía seguro. La tomé con ambas manos y la puse en mi regazo.

La abrí y me encontré con que la parte de adentro estaba forrado por un material muy suave al tacto y del mismo color que por afuera, aunque lo que más me sorprendió es la botella que se encontraba dentro de la caja.

La tomé con cuidado, sin duda la reconocería.

-este perfume- dije recordando

-nunca lo vendí- dijo Vid con una sonrisa -nunca necesité hacerlo más bien, se que tal vez no vaya bien contigo ya que es para mujer, pero si lo vendes tendrás algo de dinero-

Miré a Vid, ella igual estaba viendo a la botella.

-gracias Vid, me aseguraré de mantenerla fuera del alcance de las niñas- dije sacudiendo un poco la botella

-espera, aún hay más-

-¿Sí?-

Miré de nuevo la caja pero estaba vacía.

-tranquilo, es de doble fondo, me ayudó mucho en algunas ocasiones, solo mete tu mano y empuja-

Hice lo que ella me dijo y escuché un pequeño click, ahora el fondo se había levantado de un lado, tomé ese lado y lo levanté más dejando ver el contenido.

La sorpresa en mi rostro fue evidente ya que Vid se apresuró en hablar.

-lo sé, no es lo que esperas de un regalo de despedida, pero tengo motivos para dártelo-

Metí la mano hasta el fondo de la caja y tomé una de las dos cosas que había ahí.

Era un arma, se diseño me resultaba familiar, su metal era totalmente negro y una serie de garabatos dorados la adornaban.

-¿es una 1911?- pregunté en voz baja

-una 1911A1- afirmóella

-vaya Vid, gracias pero, no sé si debería tener un arma, solamente disparé una vez y fue parte de un entrenamiento en el que no duré mucho- dije algo nervioso, para ser sincero las armas siempre me dieron mala espina

-entiendo, pero por favor, quédate con esta Luis, fue mi compañera por bastante tiempo y me sacó de más de un apuro... ¿Puedes ver la otra cosa que hay en la caja?-

Yo asentí, deja la pistola a un lado y volví a meter la mano, ahora para sacar una extraña jeringa de vidrio grueso, venía cargada con un líquido color azul brillante.

-vaya, se parece a un medicamento que usamos por la zona, ¿Quién te la dió?- pregunté con curiosidad

Vid no respondió.

-¿Vid?-

-se que pensarás que estos no son nada más que las alucinaciones de una loca terminal, pero necesito que me creas, ¿De acuerdo?- dijo ella con más energía que antes

-eh, claro...-

Ella suspiró y me miró.

-cuando te dije que podía sentir que la muerte venía por mí no era una metáfora, la he visto Luis o al menos a alguien que se hace pasar por ella, me vino a ver hace unas semanas y me encargó que hiciera unas cosas, aunque yo moriría pronto aún podía cuidar a los que más me importaban- dijo ella con seguridad

-¿La muerte?-

-se que suena ridículo pero me pidió que fabricara ese líquido y que te diera mi arma, no sé porque pero lo hice sin dudarlo, me dijo que te dijera que siempre cargues ambas cosas contigo, dentro de poco las va a necesitar-

Sus palabras me helaron la sangre, normalmente pensaría que es solo otro caso de demencia, pero en esta ocasión en verdad sentía que sus palabras tenían peso en mí.

-ya veo, tienes razón en que es algo difícil de creer Vid pero confío en tí- dije con una sonrisa

-gracias Luis, espero estar haciendo lo correcto- dijo ella

Hubo un momento de silencio entre nosotros.

-¿Sabes cómo usarla cierto?- dijo viendo su pistola

-eso creo, es algo diferente a la que usé esa vez-

-ja, vamos tómala, te enseñaré-

...
...
...

-no es tan difícil ¿No?- preguntó ella

Vid me dió una rápida explicación del arma, prácticamente fue como funciona, como limpiarla y como quitar el seguro.

-sí, creo que lo aprendí ahora sí, siete tiros ¿No?-

Ella asintió.

-ahora guárdala, no creo que las niñas tengan que verla-

Le hice caso, cómo pude acomodé todo de nuevo en la caja y la cerré.

Vid comenzó a toser de forma bastante violenta, tapaba su boca con una de sus manos y parecía estar buscando algo.

En su mesita de noche ví un pañuelo blanco que tomé y se lo dí.

Ella siguió tosiendo cubriendo su boca con el pañuelo.

Después de unos segundos se comenzó a calmar y separó el pañuelo de sus labios, dejando ver qué estaba cubierto con sangre, sin duda era mucho más que la servilleta que manchó en mi casa.

-mierda, parece que tengo menos tiempo del que esperaba doc- dijo con una sonrisa triste -lamento si parece que te uso de sirviente pero ¿Podrías hablarle a las niñas y Aurelia?- dijo ella

-claro Vid, tú solo relájate en lo que ellas vienen- dije tomando la caja

-gracias Luis y por favor, vuelve con ellas-

Su petición me extrañó pero solamente asentí, no soy quien para no hacerle caso a una persona en ese estado.

Salí de la habitación y caminé hacia la habitación de las niñas, tomé con fuerza la caja y toqué la puerta, para mí sorpresa Aurelia abrió bastante rápido.

-hey Luis- dijo ella, no tenía su sombrero y parecía que usaba una pijama negra que se componía de una playera de manga larga y un pantalón.

-hey Aurelia, ¿Qué haces despierta?- pregunté

-oh, Nephy y Sylvie nos despertaron hace unos minutos, dijeron que, bueno, Vid- Aurelia no terminó la frase

-sí, es cierto, de hecho ella quiere hablar con ustedes- dije

-bien- Aurelia abrió más la puerta y giró -niñas, Vid quiere hablar con nosotras-

Las tres niñas estaban de pie y bien despiertas, usaban sus pijamas que Aurelia les había dado y no parecían estar tristes, espero que entiendan bien el estado de Vid.

Ellas asintieron tranquilamente y Retina tomó la mano de Aurelia, la cuál las guío hasta el cuarto de Vid.

Tal y como ella lo pidió, yo también entré.

Vid las vió y sonrió, Aurelia y las niñas se acercaron a ella mientras yo me quedé un poco atrás.

-hola pequeñas- dijo Vid haciendo un esfuerzo por estirar su mano hacia ellas

-hola señorita Vid- dijeron Retina y Tibia, mientras que Ulna corría hacia su mano.

-¿Cómo están?- preguntó ella acariciando la cabeza de Ulna

-señorita Vid, ¿Ya se siente mejor?- preguntó ella

El tono de voz de ella hizo que incluso a mí se me hiciera un nudo en la garganta, Aurelia dió unos pasos hacia atrás y se colocó a mi lado, por el rabillo del ojo pude ver cómo sus ojos comenzaban a llenarse con lágrimas.

-bueno, sobre eso niñas... yo dentro de muy poco me voy a ir, tengo un viaje importante que hacer- respondió

-pero estás muy enferma- dijo Tibia

-lo sé, pero al lugar donde iré no importa si estoy enferma, se cómo llegar rápido y de hecho me sentiré mucho mejor ahí- respondió ella con una ligera sonrisa

-¿Vas a estar mucho tiempo ahí?- preguntó Retina

-me temo que si pequeñas, iré para curar mi enfermedad así que tardaré bastante años pero prometo que volveré, nunca las dejaría solas por tanto tiempo-

Retina asintió con una pequeña sonrisa y luego volteó a ver a sus dos hermanas, bueno, no las vió directamente pero si miró en sus direcciones, ambas niñas notaron esto y ambas asintieron con entusiasmo.

Ulna se movió de lugar y se subió a la cama de Vid, colocando su cabeza al lado de la de ella, Tibia subió a la cama y se colocó sobre el abdomen de Vid y finalmente Retina avanzó un poco y sujetó con ambas manos su mano.

-señorita Vid, muchas gracias por preocuparse mucho por nosotras, entendemos que su intención no es hacernos sentir mal, pero como tía Nephy nos lo dijo, somos muy per... Muy perpi, no, muy persic-

-perceptivas- dijo Aurelia aclarandose la garganta

-eso, gracias tía. Sabemos que usted está muy enferma, tal vez demasiado como para recuperarse, pero aunque seamos pequeñas sabemos bien que le va a pasar, recuerde que a veces algunos niños en el orfanato no lo lograban, no somos ajenas a esto-

Vid no dijo nada, solamente ví cómo unas pocas lágrimas recorrían sus mejillas.

Aurelia había volteado su cabeza a otro lado, mientras que con una mano trataba de ocular el ruido de su llanto, aunque al estar a su lado aún era bastante audible.

Dejé la caja en el suelo y tomé su mano que tenía libre.

Ella se sobresaltó un poco por esto, pero cuándo me volteó a ver yo solo le dí una pequeña sonrisa, ella se quedó viendo nuestras manos por unos segundos y luego me vió a los ojos, ella también sonrió un poco.

-así que, no nos importa que nos diga esas cosas señorita Vid, le agradecemos que intente darnos una noticia así de una forma tan amable- Retina giró su mirada hacia el suelo -pero a pesar de eso, quiero que sepa que usted fue la mejor persona que se pudo cruzar en nuestro camino, si no fuera por usted -Retina comenzó a llorar -no habríamos llegado tan lejos, usted nos salvó a pesar de no conocernos y a pesar de nuestros problemas nos cuidó-

Pude observar cómo las otras dos niñas también estaban llorando, aunque hacían lo mejor por no hacer mucho ruido.

-ven aquí- dijo Vid, haciendo un movimiento con su mano para guiarla

Retina seguía llorando pero le hizo caso, subió a la cama y se colocó sobre el pecho de Vid.

-mis niñas hermosas, ¿En qué momento crecieron tanto?- preguntó con voz quebrada y una sonrisa en su rostro, una de sus manos acariciaba la cabeza de Tibia, otra la espalda de Retina y juntó su cabeza con la de Ulna.

Esa escena tan bonita duró un par de minutos, a decir verdad no quería que terminara, las cuatro se veían muy tranquilas.

-¿Nos vas seguir cuidando?- preguntó Retina que ya había dejado de llorar

-claro que sí, no importa a donde vaya, siempre lo haré- respondió

-pero no solo a nosotros, cuida a todos los niños que lo necesiten, aunque tengas que dejarnos solas un momento, tenemos a papá y a mamá para cuidarnos- dijo Tibia

Vid soltó una risa y me miró.

-claro niñas aunque tal vez ustedes tengan que cuidarlos a ellos-

Las tres niñas rieron por su comentario y Vid las soltó a lo que ellas se bajaron de la cama, excepto Ulna.

-buen viaje mamá- dijo ella para luego darle un beso en la frente a Vid

Está escena hizo que Aurelia no pudiera controlar su llanto y se volteara para que no la vieran llorar, soltando mi mano en el proceso.

Yo solo sentía como algunas lágrimas caían por mis mejillas.

Vid no dijo nada, solamente sonrió y vió cómo Ulna se bajaba de la cama, por fortuna yo conocía esa mirada, fue la misma que me dió hace unas horas cuándo prometí cuidar a Nephy, era una buena señal, ya no sentía miedo por dejar a las niñas solas.

Ulna me volteó a ver.

-papá, se que la señorita Vid no es nuestra mamá, pero ella nos cuidó por mucho tiempo, ¿Crees que mamá se moleste por lo que dije?- preguntó de manera inocente

-para nada pequeña, incluso se sentiría bien si sabe que tan respetuosa eres- dije tratando de que mi voz no se quebrara tanto

Las tres niñas rieron y se acercaron a nosotros.

Pasaron unos minutos en silencio, hasta que Vid habló, había controlado muy bien su llanto.

-bueno, no quiero poner presión pero, ¿Podría la señorita Aurelia venir?- preguntó con un tono extraño, aunque fue algo gracioso

Aurelia volteó y trató de limpiar sus lágrimas.

-c-claro- dijo Aurelia caminando

Las niñas se quedaron conmigo, Retina tomó mi mano y Tibia sujetó una de mis piernas, Ulna estaba al lado de Retina.

-hola- dijo Aurelia en voz baja, sentandose en la cama

-hola- dijo Vid sonriendo

-lo siento, no soy muy buena en estas situaciones- dijo Aurelia mientras aún se limpiaba las lágrimas

-no pasa nada Au, te entiendo, aunque debo de admitir que te ves muy diferente con tu pijama-

Aurelia río por esto y giró un poco su cuerpo.

-lo sé, me gusta estar bien vestida pero, para dormir suelo ser un desastre-

-para nada, te vez muy linda, aunque es raro verte sin tu sombrero- dijo Vid

-jeje, lo sé, es una pequeña historia personal la que tengo con ellos, algún día te la contaré- dijo Aurelia

-oh claro que lo harás, no podré quedarme con la duda por mucho tiempo- respondió Vid riendo

El ambiente era mucho más relajado mientras veíamos a esas dos platicando, tal vez en otra vida sean muy buenas amigas.

-Aurelia- dijo Vid

-¿Sí?- dijo Aurelia

Vid extendió su mano y Aurelia la tomó.

-cuidalos, ¿Sí?, A todos, las niñas te aman y eres una gran amiga de esos tres adultos que pueden ser más infantiles que las niñas-

Aurelia sonrió y asintió.

-creo que desde que los conozco tengo el rol de mamá-

Vid río por su comentario.

-lo imagino, pero cuídalos bien, Nephy necesitará apoyo, confío en que tú se lo darás... y bueno, ya sabes, tienes mi bendición para cualquier otra cosa- dijo en voz baja

Las mejillas de Aurelia se pusieron rojas.

-n-no Vid, ya te expliqué que todo eso fue culpa de las flores rosas, solo somos amigas-

Vid soltó una carcajada, aunque eso le produjo un poco de tos.

-lo sé, tranquila, desde que te pregunté eso hace rato y ví tu reacción supe que tenía que verla de nuevo-

-vamos- dijo Aurelia -no me digas que me acabo de encontrar con otra Nephy- dijo ella con una sonrisa

Ambas sonrieron y soltaron sus manos.

-sigue siendo la mejor diseñadora que existe- dijo Vid

-lo haré, prometo ponerle tu nombre a algún proyecto especial- respondió ella

-no habría honor más grande-

Ambas chicas sonrieron por una última vez y Aurelia se levantó para luego caminar a nosotros.

-despidanse niñas- dijo Aurelia, colocándose al lado de Ulna

Las tres asintieron.

-hasta luego mamá- dijo Retina

-nos vemos luego mami- dijo Ulna

-hasta pronto mamá- dijo Tibia

Después de esto Aurelia las guío a la salida de la habitación, Retina soltó mi mano y tomó la de Tibia en su lugar.

Yo tomé la caja del suelo y las seguí.

-Luis- dijo Vid

Yo voltee a verla.

-ahora me gustaría hablar con Sylvie y Nephy por favor-

Yo asentí.

-pero ahora, no vuelvas con ellas, tengo que hablar más en privado con ellas, deberías aprovechar a guardar esa caja- dijo con un tono misterioso

-sus deseos son órdenes señorita- dije con tono elegante antes de salir de la habitación

Pude ver cómo Aurelia y las niñas entraban de nuevo a su habitación y yo me dirigí a la mía.

Toqué un par de veces la puerta y abrí, pude ver una escena curiosa.

Nephy estaba acostada sobre el regazo de Sylvie, mientras ella acariciaba su cabello y parecía que le contaba alguna historia.

-hey Luis- dijo Nephy

-hola amo- dijo Sylvie

-que hay chicas, lamento interrumpir, Vid quiere hablar con ambas-

-claro, ¿Vamos Nephy?- preguntó Sylvie

Nephy asintió y se levantó.

-espero que no te moleste, tomé prestado un momento el regazo de Sylvie- dijo Nephy

-ja, de hecho si me molesta Nephy, ahora tendremos que buscar un castigo para tí-

Nephy sonrió al escucharme.

-s-sí amo lo desea también se puede recostar- dijo Sylvie algo nerviosa, pero sin apartar su mirada de la mía.

La idea no me molestaba.

-bueno, tal vez pronto Sylvie, por ahora deben de ir a ver a Vid- dije

-oh cierto, vamos- dijo Sylvie levantándose de la cama

-por cierto, ¿Qué es eso?- me preguntó Nephy viendo la caja

-oh, un pequeño regalo de Vid, luego se los muestro-

Ambas asintieron.

Nephy extendió su mano y Sylvie se la dió, para luego salir de la habitación.

"Bien, ahora tengo que ver dónde guardo esto"

Sylvie

Salimos de la habitación y amo se quedó dentro, la caja que tenía me pareció algo extraña pero al menos dijo que nos la mostraría luego, aunque me siento aliviada de que entró poco después de que le termine de contar todo a Nephy, no sabía que le gustara tanto oírme hablar sobre cómo había sido mi vida desde que llegué a casa de amo y aunque no tengo mucha experiencia en estos temas espero que mis palabras le sirvieran para sentirse mejor.

Nephy ahora está sujetando fuerte mi mano mientras caminamos, le costó bastante dejar de llorar, al parecer amo y Aurelia la apoyaron para que no pensara en la muerte de la señorita Vid como algo malo, pero ahora se dió cuenta que aún así se siente asustada.

Llegamos al cuarto, bueno, frente a la puerta más bien, Nephy parece estar nerviosa por entrar.

-puedes hacerlo- dije mientras apretaba su mano

Ella suspiró.

-puedo hacerlo-

Colocó su mano sobre el pomo y abrió.

La señorita Vid estaba acostada, cómo cuándo la ví en cuánto llegamos, parecía que estaba igual que antes.

-hola Sylvie- me saludó

Nephy me soltó la mano y comenzamos a caminar hacia ella.

-hola señorita Vid, me alegra verla de nuevo-

Pude notar como le faltaba el aliento y hacía una pequeña pausa entre palabras.

-ah que educada eres, a veces lo olvido, Nephy me platicó un poco sobre tí pero, ¿Te molesta si te pido que me cuentes más?- preguntó ella

-oh, claro que no, ¿Que quisiera saber?-

A decir verdad no solía gustarme hablar de mi pasado, aunque últimamente me dí cuenta que esas cosas quedaron atrás.

-bueno, primero que nada- dijo ella dando pequeñas palmadas al costado de su cama

Yo asentí y me senté dónde ella quería.

-ahora sí, primero lo primero- dijo viéndome -¿De dónde salieron esas cicatrices tan curiosas?-

-mmm verá señorita Vid, yo viví cómo una esclava toda mi vida, fue algo bastante feo, incluso todavía existen días en los que aún tengo pesadillas sobre esos tiempos, mi antiguo amo solía disfrutar haciéndonos sufrir y yo fui una de las que más sufrió, parecía disfrutar mis gritos así que cuándo se dió cuenta que no gritaba lo suficientemente fuerte comenzó a usar diferentes cosas para hacerme sufrir, la verdad no puedo recordar con que me hizo cada cicatriz, pero estoy segura que la mayoría de mi cuerpo fue con algún tipo de ácido extraño- dije mientras sentía cómo un escalofrío recorría mi cuerpo

Miré a la señorita Vid y en su rostro tenía una expresión muy extraña, nunca antes le había visto en alguien más pero si tuviera que describirla sería como una expresión de arrepentimiento.

-vaya uh, yo emmm... Lo siento por todo lo que te pasó- dijo en voz baja

-no se preocupe, aunque tenga sueños malos con esos días amo siempre suele tranquilizarme, a veces me llegan esos recuerdos en el día y siento miedo, pero Nephy, Aurelia o las niñas me ayudan a superarlo, no me molesta hablar de eso- dije con una sonrisa

Su expresión cambio por completo a una más relajada.

-ya veo, me alegra saber que estás mejor, aunque otra duda que tengo es, ¿Porqué le sigues diciendo amo a Luis?-

La pregunta me tomó un poco por sorpresa y sentí que mis mejillas se calentaron un poco.

-b-bueno, desde el primer día que llegué a casa de amo lo llamo así, aunque con el paso del tiempo el me ha pedido que lo llame por su nombre, no sé, me siento más cómoda diciéndole amo, aunque el me ha dicho que soy una chica libre y puedo hacer lo que quiera, supongo que algunos hábitos son difíciles de cambiar- dije algo apenada

-oh, eso es bastante lindo, me alegra que el sea tan bueno contigo-

Yo asentí con felicidad.

-amo siempre suele hacer todo por nosotras, aunque a veces se estresa mucho así que últimamente lo he ayudado en su clínica y siempre encontramos tiempo para nosotros y quitar todo ese estrés-

Su mirada cambió a una de sorpresa y luego volteó a ver a Nephy.

Nephy rio y asintió.

-lo sé, no lo parece pero está pequeña es toda una experta en si nos referimos a esos temas- dijo colocando una mano en mi cabeza

Me dí cuenta de cómo sonaba lo que había dicho y sentí de inmediato el calor en mi rostro.

-n-n-no es así, no me refería a eso-

-lo sabemos Sylvie tranquila- dijo Nephy -obviamente tú nunca harías algo así, menos en el lugar de trabajo y con tú uniforme o con invitados en tu casa-

Sentía cómo mi cara ardía más que nunca mientras los recuerdos me llegaban a la mente.

La señorita Vid pasó de tener una cara de sorpresa pequeña a una de total conmoción.

-vaya y yo que pensaba que eras más inocente en esos temas- dijo ella

-n-no, y-yo, eso f-fue- intentaba formular alguna frase pero nada salía de mi boca

La señorita Vid comenzó a reír junto con Nephy, hasta que ella comenzó a toser.

Fue una tos muy violenta, incluso parecía que le dolía.

Nephy quitó su mano de mi cabeza y se apresuró a colocarse al lado de la señorita Vid, dándole un pañuelo blanco que guardaba en uno de los bolsillos de su pants, el cuál ella usó para cubrir su boca.

La señorita Vid pasó unos segundo más tosiendo y cuándo terminó retiro el pañuelo, tenía mucha sangre en el.

Ella suspiro y pude ver cómo abrió la boca para tomar aire, puede que no sepa mucho sobre el cuerpo pero se que eso está mal.

-hey Sylvie- dijo la señorita Vid, sin duda se escuchaba mucho peor que antes -¿Me prometes que me contarás todo con detalles luego?- preguntó

Yo me acerqué un poco más a ella y tomé su mano con ambas manos, sabía bien que estaba por suceder.

-se lo prometo señorita Vid- dije con voz tranquila

-gracias pequeña- dijo ella -tambien, cuida de todos ¿Sí?, Eres una gran chica y llegarás lejos, lo sé, solo sigue siendo cómo eres-

La señorita Vid en ese momento me sonrió, pero fue una sonrisa algo extraña, no fue forzada ni nada así, fue una sonrisa totalmente sincera que incluso me transmitió algo de tranquilidad.

-lo prometo señorita Vid, cuidare de todos lo mejor que pueda- dije mientras sentía un nudo en la garganta

Aunque no la conocí por mucho tiempo logró caerme muy bien.

-gracias Sylvie, ahora, ¿Podrías ir a buscar a Luis?- dijo con dificultad

-claro- dije soltandola y levantandome de la cama para caminar a la puerta, antes de abrir volteé y hablé -nos vemos luego-

Nephy y la señorita Vid voltearon, aunque Nephy sonrió de manera triste, la señorita Vid sonrió de nuevo de esa manera tan tranquila, lo cuál me hizo sentir un poco mejor.

Salí de la habitación y pude ver a amo fuera de nuestro cuarto.

-amo- dije avanzando rápido hacia el -la señorita Vid quiere hablar con usted-

-ya veo, gracias Sylvie- dijo amo acariciando mi cabeza -¿Puedes ir al cuarto de Aurelia y las niñas?, No quiero que estés sola- amo se escuchaba algo preocupado

-claro amo, ahí estaré- dije asintiendo

-gracias Sylvie- dijo para luego darme un beso en la frente y comenzar a caminar hacia el cuarto

-ánimo amo- dije en voz baja mientras sentía un nudo en mi garganta de nuevo al imaginar que estaba por pasar

Luis

Escuché como Sylvie abrió la puerta del cuarto y yo me quedé parado frente a la puerta de Vid, sabía que estaba por pasar y por desgracia eso solo hacía que me sintiera mucho más nervioso.

Sujeté el pomo y entré.

Al parecer ninguna de las dos me escuchó entrar, Nephy estaba a pocos centímetros del rostro de Vid mientras lo sujetaba con ambas manos.

-eres lo que más amo en esta vida- dijo Vid

-¿Y qué tal en la siguiente?- preguntó Nephy

-bueno, si nos encontramos de nuevo tendrás que enamorarme desde cero-

-que injusto, yo fuí la que dió los primeros pasos está vez, tu deberías ser la que los dé ahora-

-bueno, creo que puedo hacerlo, si te vuelvo a invitar a mi habitación en las noches puede que lo logré en menos de un mes-

Ambas rieron por ese comentario.

-puede que en menos de dos semanas- dijo Nephy para luego acercarse más a Vid y darle un beso

Fue un beso lindo, supongo que así es cómo a veces nos vemos Sylvie y yo, un beso tranquilo y que duró mucho más que uno normal, un beso de amor.

Cuándo se separaron Vid colocó una de sus manos en la mejilla de Nephy.

La verdad me sentí algo culpable por estar ahí, probablemente era uno de esos momentos que sólo se dan cuándo están solas, así que me dí la vuelta y abrí la puerta de nuevo, solo para cerrarla con algo de fuerza y que pareciera que acababa de entrar.

-hola Luis- dijo Nephy

-lamento la demora- dije acercándome a ellas

-no pasa nada doc- dijo Vid

Supongo que por la distancia a la que estaba y por el momento no la había visto bien, sin duda estaba mucho peor que antes, realizaba mucho más esfuerzo para respirar e incluso a veces abría un poco la boca para hacerlo.

-oye Nephy, ¿Podrías pasarme el reproductor de música?-

Nephy asintió, soltó a Vid y comenzaba a buscar algo en su mesa de noche.

-¿Tienes uno?- pregunté

-bueno, es el de Nephy, ella lo trajo cuándo vino y con ayuda de Samuel aprendimos cómo cambiar las canciones-

-oh, bueno menos mal, cuándo lo usamos en navidad no teníamos ni la menor idea de que hacer- dije sonriendo

Nephy encontró el reproductor y lo sacó.

-¿Podrías cantarme la que cantaste la última vez?- preguntó Vid

Nephy se sonrojó un poco por la petición y luego me miró.

-¿Cantas?- alguna vez en la escuela había escuchado que cantaba bonito pero eso fue hace mucho

-eh, algo así, no es la gran cosa-

-claro que lo es, y canta muy bien en inglés- dijo Vid

Nephy solo sonreía mientras rascaba la parte de atrás de su cabeza.

-vaya, sabía que te iba bien en inglés pero no sabía que lo sabías hablar bien, algún día tendrás que enseñarme-

A decir verdad mi inglés era bastante malo.

-claro, pero mis lecciones salen caras-

-de acuerdo, le pagaré lo que tenga que pagar a tan buena maestra, aunque deberíamos descontar todas las veces que has entrado a la casa de forma poco legal o las veces que has roto algo-

Nephy me miró con una sonrisa algo incómoda.

-ahora que lo pienso bien, nada me haría más feliz que ayudar a mis amigos sin costo-

Vid río ante esto, comenzó a toser un poco pero afortunadamente no fue tanto como otras veces.

-Luis, ven aquí- dijo ella señalando el otro extremo de su cama

Yo asentí y fuí ahí, me quité mis zapatos y me subí a la cama, quedando a su lado.

-dame una mano, quiero sentarme- dijo ella extendiendo su brazo

Yo la tomé y con algo de esfuerzo logró sentarse, recargandose contra la cabecera de su cama, aunque parecía que se había quedado sin aliento al hacer esto.

Nephy estuvo un rato con el reproductor de música, hasta que sonó una canción en muy bajo volumen.

-lo tengo- dijo ella mientras se acercaba a Vid

Ella colocó su mano contra la mía y se acercó un poco a mí.

-gracias- dijo para después volver a su posición

Yo tomé con fuerza su mano y asentí, podía sentir el nudo en la garganta.

Vid también le dió la mano a Nephy.

Ella me miró y yo asentí tratando de sonreír.

Nephy apretó un botón del reproductor y una canción comenzó a sonar.

(See The Fire In Your Eyes - Red Dead Redemption 2)

Era una canción bastante lenta, relajaba bastante y comenzaba con un canto tranquilo.

Hmmm, hmmm, hmmm
The day is done, the time has come

Vid suspiró y bajó su cabeza, mientras sentía cómo apretaba mi mano con más fuerza.

You battled hard, the war is won
You did your worst
You tried your best

La voz de Nephy es muy bonita, aunque su voz se quebraba por momentos, lograba recuperase rápido.

Now it's time to rest
Now it’s time to rest

La respiración de Vid se relajaba cada vez más.

Hmmm, hmmm, hmmm

See the fire in your eyes

Por unos segundos me llegó el recuerdo de la primera vez que conocí a Vid, su traje de monja y su actitud no concordaban para nada.

See the fire in your eyes

La reacción que tuvo Nephy a verla de nuevo.

See the fire in your eyes

Incluso todo el viaje que tuvimos que hacer para llegar aquí.

See the fire in-

Sentí cómo la mano de Vid dejó de apretar la mía, Nephy dejó de cantar aunque la música siguiera sonando y me miró. Fue la mirada más dolorosa que alguna vez hubiera visto.

No me dí cuenta en que momento pasó, pero comencé a sentir cómo las lágrimas corrían por mis mejillas.

-nononono- murmuró con miedo mientras soltaba la mano de Vid y sujetaba su rostro

Y entonces comenzó a llorar, no era un simple llanto de tristeza, era un llanto de dolor.

Nephy abrazó a Vid y acarició su cabello.

Tomé la mano de Vid y coloqué mis dedos en su muñeca tratando de buscar su pulso, pero no sentí nada.

-Nephy...se fue-

Ella no me hizo caso y siguió abrazándola mientras sollozaba.

Probablemente Sylvie y las demás ya la escucharon, solo espero que no vengan a verla ahora.

Nephy volvió a sujetar el rostro de Vid y la recostó con cuidado en la cabecera, su rostro tenía una extraña expresión, parecía estar tranquila y feliz.

-por favor despierta- dijo ella

Yo coloqué mi mano sobre el hombro de Nephy y ella volteó a verme, su expresión era más penetrante que antes, incluso diría que podía sentir su tristeza y desesperación.

Tratando de no llorar cómo ella me acerqué y le dí un abrazo.

Ella me regresó el abrazo con mucha rapidez y siguió llorando en mi hombro.

Intenté hablar, pero las palabras no salieron de mi boca.

-solo un poco más, por favor- dijo ella entre sollozos

La abracé con más fuerza, nuestras lágrimas caían y no parecía que fueran a parar pronto.

Pero le hice una promesa a Vid y pienso cumplirla.

Continue Reading

You'll Also Like

1M 53K 37
Melody Roberts es una chica muy sencilla, no es muy sociable y solo tiene una mejor amiga. Vive sola en un pequeño departamento, el cual debe de paga...
1.9M 135K 90
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...
14.1K 879 14
Historia alternativa donde Sylvie nunca llegó a quedarse con el Doctor, y él siguió su día a día como siempre, hasta que llegó hacia aquel restaurant...
457K 29.6K 29
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca. -¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen. -Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a e...