Lord Vader marchaba lentamente por las calles de Theed mientras los Stormtroopers vigilaban los alrededores, los edificios ardían a su alrededor Darth Vader avanzo hasta encontrarse ante la entrada de la tumba de su esposa.
Vader subió los escalones lentamente acercándose al costado del ataúd tallado de la figura de la ex senadora, él extendió su mano enguantada de mental, sobre la mejilla de su esposa. Vader miro en silencio, su respiración hacia ese sonido que tanto odiaba con cada respiración que daba. Ya no era él hombre que sonreía alrededor de ella, eso era lo que ella amaba de él, pero ahora ese hombre había muerto hacía mucho tiempo... Reemplazado por el monstruo que es ahora atrapado en un caparazón de mental.
Anakin... -susurró una dulce voz.
Vader se tensó levemente al escuchar la voz detrás de él, sus ojos comenzaron a arder por las lágrimas, ella no estaba; ella está muerta... Todo por su culpa ¿Por qué iba a escuchar su voz?
Vader comenzó a recordar todos los momentos a lado de su esposa.
¡ANAKIN! -grito la voz con dolor y tristeza.
El gritó hizo que Vader se diera la vuelta para salir del mausoleo de su esposa, el sistema de respiratorio de su traje emitía un leve pitido para decirle al Sith que calmara su respiración. Pronto su respiración se hizo más lenta y bajó los escalones de la tumba, cuando se acercó a él, un soldado Stormtrooper.
Destruimos todo; Lord Vader ¿Comenzamos con la destrucción de la tumba de la senadora Amidala? -pregunto él soldado.
Al escuchar eso el Sith levanto su mano y con la fuerza apretó la garganta del soldado. Los cuales los ojos se agrandaron bajo el casco mientras el miraba al Sith con ojos aterrorizados, pronto hubo un crujido enfermizo cuando Vader cerró el puño, acabando con la vida del soldado.