Para un niño, su madre es lo primero que él reconoce desde antes de nacer. La unión del cordón umbilical no es solo para que él o ella reciba nutrientes, no, es mucho más que eso. Sus corazones laten como uno mismo, incluso después que este nace.
Esa conexión, es algo que Han no sabía cómo lograr comprender, hasta que él mismo fue testigo de ello en el preciso instante que su esposa lo convirtió en padre.
Estas un poco pensativo -dijo Leia analizándolo con detalle.
Algo sin importancia -dijo Han asegurado.
No debe serlo si te tiene así -dijo ella- Saber que puedes hablar conmigo con toda confianza de lo que sea
Lo sé, pero este será mi secreto por ahora -dijo él sonriendo levemente.
Se inclinó lentamente sobre ella, dispuesto a besar sus rosados y tentadores labios, pero algo se interpuso...
Mama no, mía -dijo su hijo de un año, lo cual hace unos segundos estaba entretenido alimentándose del biberón, se había levantado y cubierto la boca de su esposa, dándole una mirada con recelo- Ma... Mama mía
Han gruño bajo. Últimamente cada vez que trataba de besar y abrazar a su esposa y estaba presente su hijo, se metía en medio de ellos dos.
Mama fue mía primero -reclamó desafiante Han.
Mía -dijo aferrándose con fuerza de su mama.
Mama es de papa -dijo Han desafiante mientras la abrazaba por los hombros a Leia.
¿Enserio vas a pelear con tu hijo de un año, por mí Han? -dijo ella dándole una mirada como si estuviera loco.
Él puso los ojos en blanco, odiaba cuando ella lo regañaba por ponerse territorial en lo que respecta a ella y a su adorable hijo.
No, mía -balbuceó Ben, con ganas de llorar mientras se aferraba más a Leia.
Sí, mi pequeño Ben, mama es tuya -dijo ella acurrucando con ternura, mientras sus palabras eran dagas para su marido.
Han se encontraba de espaldas al lado de la cama que le pertenecía a ella, desde que ella lo hizo quedar como un completo idiota, no le había dirigido la palabra.
Finalmente se durmió -suspiró ella con cansancio, lanzándose a su lado de la cama- Querido, ya estamos finalmente a solas -susurro ella abrazándolo por detrás y comenzado a darle besos.
No -pronuncio con dificultad, ya que quería vengarse de ella por lo que paso.
Estas haciendo un berrinche -dijo sentándose en la cama indignada- ¿Este berrinche es porque me puse de lado del bebé, tu bebé es una discusión sin sentido ¡Jamás creí verte así! ¡El gran Han Solo haciendo berrinche por culpa de un bebe!
Sonrió sin proponérselo cuando ella siguió vociferando acerca sobre su inmadurez. Ya después se encargaría de ella, cuando finalmente baje la guardia con él...