DIANA:
Después de tanto desperté, rodeada de una habitación de cuatro paredes blancas, observe aquellos aparatos conectados a mí, fue cuando deduje que estaba en un hospital ¿Cómo fue que llegue hasta aquí? Recuerdo esa noche de la carrera de motos, Louis, mi novio si no recuerdo mal, sufrimos un accidente ¿Y él? ¿Dónde está?
Seguí mirando aquella habitación, a lado de la camilla en donde estaba chico rubio descansa en el pequeño sillón, Niall, sonreí al verlo tan profundamente dormido. Es tan hermosos. Lo mire por un par de minutos hasta que sus ojos azules, se abrieron en par en par. Paralizado se quedó al verme, sus ojos ahora radiaban sorpresa y alegría
— ¡Diana! ¡Jesucristo! ¡Despertaste!— se levantó del pequeño sillón y fue directo a abrazarme. —Tengo que avisarles a todos— Y comenzó a decir cosas muy rápidamente.
—Tranquilo Niall...
—Por poco me muero si tú no regresabas
—Por favor, Niall.
Comenzó reír— ¿Cómo te fue en tu viaje largo?
— ¿Largo?—fruncí mi ceño— ¿Cuánto tiempo estuve así?
—Por dos meses, algunos creían que no regresarías, pero aquí estas—dijo señalándome.
Un largo silencio entre los dos. Fue cuando lo observe mejor, hace tanto no lo veía y quería recordarlo siempre. Aunque ahora se veía cansado, ojeroso, pálido y delgado pero se seguía viendo hermoso. ¡Oh Niall!
—Todos los días estuve aquí— rompió el silencio—Esperando a que despertaras y volver a ver tus ojos, Diana. — Sus ojos comenzaron a cristalizarse —Tengo que avisarles a tu familia— dijo levantándose y yendo camino a la puerta.
Lo mire, pero de inmediatamente reaccione y sin detener mis palabras lo dije—Te amo, Niall.
En seco él se detuvo, lentamente giro sobre sus talones, no deje pasar desapercibido dos lagrimas rodear sus mejillas, mi chico rubio lloraba. — Y yo te amo a ti— luego de esto salió de la habitación dejarme sola.
A los pocos segundos mi madre entro por aquella puerta, corrió a abrazarme y yo volví a sentir los cálidos abrazos de mamá.
—Mi niña ¿Estas bien?
—Sí mami, lo estoy
—No me vuelvas a hacer esto.
—Te lo prometo mami, no lo hare nunca más.
El tiempo paso volando rápidamente hablando con ella, mi madre y yo recuperamos esos tiempos y dos meses perdidos, no me imaginaba la cercanía que ahora tenía con mamá, cómo fue que abrió y me conto todo sobre mi padre, todo sobre ella y cómo yo fui de chiquita, todo ahora parecía tan distinto.
—Mamá ¿Tú sabes cómo esta Louis?
La sonrisa de ella cayo por los suelos, ahora su mirada era temerosa con una mezcla de tristeza—Diana...
Eso me daba la sensación de que no iba nada bien— ¡Dime cómo esta Louis!
—Hija—tomo un suspiro profundo—Louis está en un estado de coma muy grave, él está luchando entre la vida y la muerte.
Al escucharla tape mi boca con mis manos tratando de ahogar el llanto, mis lágrimas están al borde de mis ojos—Tengo que verlo...
—Hija no puedes— me interrumpió—Y no lo harás
— ¡Claro que lo hare!
Desesperada comencé a desatar los cables de mí, impresionante me levante de la camilla, mi madre trato de detenerme pero no lo logro, corriendo salí de la habitación en busca de la de Louis, en el pasillo me encontré a una enfermera. Le pregunte en donde se encontraba él y en su tablilla reviso.
— ¿Puede apresurarse?—dije desesperada
—En el piso de arriba pasillo 230.
—Gracias— Dije y comencé a trotar por las escaleras
Al llegar planta arriba, en el pasillo la madre de Louis y sus hermas lloraban a mares, su padrastro las abrazaba fuerte, me asusté mucho al ver esa escena. Mire más a las personas presentes ahí, mis dos primos, Michael y Rosali ahí estaba y también Niall, quien me miraba con los ojos muy abiertos.
—Necesito ver a Louis— le dije al rubio
—No puedes pasar, Diana. —me tomo de la cintura al ver que yo abriría la puerta
—Suéltame, Niall—trate de zafarme y lo hice.
Rápidamente abrí la puerta. Mi vista se quedó paralizada cuando vi a varios doctores y enfermeros tratando de revivirlo por medio del desfibrilador (electroshok). Toda una imagen aterradora.
—Louis...
Mi vista se nublo, lo único que recuerdo es haber golpeado mi cabeza contra el suelo y ver a Niall y varias enfermeras acercarse, de ahí no sé nada más.
Mamá comenzó a hablarme, decía que de nuevo la había asustado, Niall también dijo lo mismo y escuchaba las voces de mis dos primos, pero no los podía ver, todo era oscuro, tan oscuro y nada visible.
—Mamá ¿Qué sucede aquí?—Dije interrumpiéndola. Escuche un silencio apoderarse de la habitación— ¡No veo nada!
Michael llamaba al doctor. Pero no era necesario que viniera el doctor cuando yo comprendía lo que sucedía: Mi vida desde ese momento cambio mucho, mi cuerpo y yo estábamos bien, pero mi vista no lo estaba.
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Es demasiado para una sola noche. Gracias por leer y estén al pendiente, ya que estos son los últimos capítulos. Estare dedicando estos últimos capítulos, si quieres que te los dedique solo comenta poniendo una buena resaña de la historia ;)
Gracias por todo. Las amo mil :)