〡01. El ático

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Faltaban ocho minutos para que se diera la media noche, cuando de entre las sombras salieron cuatro hermanos

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Faltaban ocho minutos para que se diera la media noche, cuando de entre las sombras salieron cuatro hermanos. Ellos miraron el lugar, solamente para darse cuenta de que pocas cosas habían cambiado en aquella vieja y descuidad pista de Skate.

Aunque mucho seguía igual, la vieja piscina municipal que se rompió en el verano de 89, la cual fue abandonada y años más tarde tomado por adolescentes, obligando al alcalde a tomar medidas y terminar abriendo un sitio para que estos no banalizaran la cuidad. Los cuatro jóvenes pudieron notar que, además del piso, había barras nuevas, paredes llenas de grafitis y rampas con la altura al costado de estas.

—Llegaron antes de lo que pensé —los castaños vieron al pelinegro sentado en un columpio, llamando la atención de los jóvenes, al darse cuenta de que, además de las "nuevas" cosas en el lugar, también habían instalado un parque infantil; justo al lado de la pista.

—Eso deberíamos decir nosotros —dijo uno de ellos, obteniendo como respuesta un encogimiento de hombros por parte del contrario. —Como sea... Soy Samuel, pero dime Sam —volvió a hablar el mismo chico, causando que el de ojos celestes saliera de su pequeño trance para mirarlo.

—Soy Daniel, Danny o Danno para mis amigos. Aunque ya lo sabes —dijo mientras le regalaba una sonrisa coqueta, causando el contrario rodeara los ojos.

—No le hagas caso —soltó el más alto mientras le miraba. —Soy Jackson y dime Jack o Son, como gustes —le dijo amablemente encogiéndose de hombros, restándole importancia a su apodo.

Alex siguió con la mirada a Marck, el cual camino hasta acomodarse en el columpio que había junto a él.

—SI llegas a volver a llamarme Mac te bajo todos los dientes, niño bonito —le dijo con una sonrisa en los labios, causando que el contrario a ellos de apariencia riera negando.

—Dado que ustedes ya me conocen, iré al grano. ¿Cómo vamos a entrar? Porque vi a varios policías cuidado la casa —los cuatrillizos intercambiaron miradas, esperando a que uno de ellos hablara. Jack, al darse cuenta de que ninguno tenía un plan, suspiro y hablo.

—Hay una enredadera en la parte de atrás, que va directo al cuarto de Mayline. Si logramos movernos rápido, posiblemente no seamos atrapados —dijo rendido, sabiendo que nada bueno sucedería luego.

—Para ser uno de los que no quiere ir, te sabes los trucos sucios hermano —le dijo Danno, ganándose una mala mirada por parte de su mayor.

— ¿Y cómo llegamos a ella? —preguntó Sam, el menor de los cuatro hermanos.

Todos comenzaron a pensar en cómo entrarían a la propiedad para llegar al patio trasero. Alex recordó, de la nada, que siempre a la misma hora pasaba el borracho del barrio; el cual solía caminaba por el medio de la acera pidiendo dinero para caña. Aunque la idea de involucrar a alguien más no le agradaba del todo, pensaba que él les podría servir como distracción.

¿Quién es el asesino?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora