-¡Cedric!
-Ese soy yo...
-¡Amos!
-¡Stark! ¿Listo para el quidditch?
-Claro. Cedric, Mina, ¿No vendrá nadie más con ustedes? Necesitamos ir con Arthur Weasley.
-A Mariana no le dieron el permiso de venir ¿Cedric, qué te dijo Grace?
-No creo que haya querido venir de todos modos.
-¡Cedric! -Exclamó la castaña dándole un codazo.
El castaño corrió hacia la espalda de su padre. -¡Papá, protegeme!
Los adultos rieron, mientras los jóvenes trataban de contener una carcajada.
Después de hacer el itinerario de cosas de los Diggory y Stark, las cuatro personas siguieron su camino hacia donde quedaron de ver a los Weasley, donde se quedaron esperándolos por unos breves minutos.
-Mira esto.
-¿Qué vas a hacer, Cedric?
El castaño no respondió y escaló el árbol que tenían enfrente.
-¡Bajate del árbol, Cedric!
-Nu-
Los adultos y la joven visualizaron, cinco cabelleras rojas y dos castañas.
En cuanto se podía distinguir las cabelleras la joven salió corriendo.
-¡Espera, Mina, ayúdame a bajar!
La castaña no lo escucho.
-¡Gemelos!
Los pelirrojos abrazaron a la castaña al mismo tiempo, pero dejaron de abrazarla cuando vieron al señor de barba castaña mirarlos de una forma que no tenía explicación.
-¿Ese es tu papá? -Hablo George al oido de la castaña.
-Sí, ¿miedo?
-Para nada. -La castaña rió.
Los adultos se saludaron. Familias sangre puras pero... traidores a la sangre, ¿según quien? Según Lucius Malfoy y su séquito.
-¡Minnie! -Exclamo Hermione.
-¡Herms! -Ambas se abrazaron.- ¡Ginny!
El azabache tosio indiscretamente.
-¡¿Harry?! -Preguntó en broma.
-¡Harry!
-Y Ron, claro, olvídense de Ron.
La castaña rió y abrazó a los dos.
Pocos segundos después se escuchó un estruendo.
-Cedric. -Hablo Harry.
-Buenas tardes para todos. -Hablo el castaño con una sonrisa.
Mientras caminaban hacia la montaña, los jóvenes platicaban de cualquier cosa que recordaran de su antigua estaban en en Hogwarts y lo que esperan para su próximo año.
-Mina, ¿Dónde están Grace y Mariana?
-Ah, George... a Mariana no le permitieron venir, su padre dice que es muy riesgoso por toda la gente que hace magia.
-¿Y Grace?
-Cedric no la invitó.
El pelirrojo miró mal al castaño que se encontraba charlando con Harry y Hermione.
-Hey, hey ¿Qué pasa?
-¿Por qué no la invitó?
-Se le olvido George, sabes que a Cedric se le olvida todo.
