XI - Celos

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-Oye Magnus, ¿Te gustaría asistir a Hogwarts? -Hablo la castaña parándose de su asiento en la biblioteca.

-Claro, todo es mejor que Igor y Viktor.

-Sí... seria bueno, porque ya sabes, la biblioteca parece estar harta de nosotros. -El chico rió

-Sí, seria bueno tener una sala común en la que platicar.

-Oh tenemos la de mi casa.

Magnus rió, rodando los ojos.

-Sabes que Cedric nos echaría.

La castaña asintió y rió.

-Ese loco...

-Oye Mina.
-¿Sí?

-¿Tu quieres a Cedric?

-Por supuesto, es parte de mí.

Magnus asintió.

-Lo se, se conocen de hace mucho, pero... y tu lo, ¿amas?

-Mhhh... no lo sé, amo a mi papá y a mi abuelo pero ¿amo a Cedric?

-Yo creo que sí y el te ama a ti.

-Oh entonces nos amamos, que bonito.

El chico frunció el ceño.

-Mina, tu no entiendes.

-¿Entender que?

-Tu... el, aaaah, olvídalo, cuéntame de ti... ya sabes, de tus amores.

Mina abrió los ojos sorprendida.
-Bueno, Zacharias Smith me besó un día.

Magnus rió.

-Entonces fueron novios.

-¿Qué? No, no, es un idiota, luego los gemelos y yo le hicimos una broma.

-¿Algo más?

-Mhhh, ¿cuenta Oliver Wood? Aunque bueno, el solo me dijo que era linda y me dijo que soy buena en el quiddicth pero ya no me ha vuelto a hablar.

-Eso es estupido, ¿quién te dejaría de hablar?

-Mhh, él, supongo.

Magnus se acercó más a la castaña.
Estaban acostados en una parte de la biblioteca un poco escondida, habían traído cojines para hacer su pequeña estadia, más cómoda.

-Oye Mina... ¿yo que soy? -Susurró el azabache.

-Un chico.

Magnus rió.

-No, ya sabes, sobre... ¿Qué somos?

-¿Una chica y un chico que me quiere invitar al baile para pasar un buen rato?

-Y...¿esto cambiaría algo?

-¿Qué?

Magnus se sentó y Mina imitó su acción, sin saber que es lo que él azabache hacía.

Magnus tomó aire y se acercó a Mina rápidamente, tomó su mejilla con la mano y junto sus labios tiernamente.

La castaña había esperado ese momento, pero, no fue como lo esperaba, de hecho fue bueno pero... ¿Por qué simplemente no le agradaba?

El azabache se separó de la castaña y sonrió.

-¿Cambio algo?

-Eh...

La castaña salió tranquila de la biblioteca, con Magnus atrás de ella esperando alguna respuesta.

-Perdón.

DARE© Where stories live. Discover now