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La pelirroja estaba explorando el Bosque, claramente en conjunto con su brazalete

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La pelirroja estaba explorando el Bosque, claramente en conjunto con su brazalete. Sentía una que otra vez ojos por doquier, la sensación cada vez se volvía más escalofriante.

Al cerrar los ojos la pelirroja pudo ver lo que en realidad ocultaba el bosque. El lugar estaba tintado de un azul rey y de uno que otro color agua marina y negro.

Ese color no dejaba de atormentarle, y justo cuando unos susurros se oían más cerca abrió los ojos.

Se llevó la grata sorpresa de estar parada enfrente de una lujosa mansión, inmediatamente tomo sus binoculares y leyó lo que la entrada decía“the gleeful's mansion.”

Ese lugar parecía estar cubierto de ese extraño líquido azul en sus pisos exteriores, además, las flores también lo emitían y los susurros se hicieron ahí aún más fuertes.

—(este es la fuente)— pensó la pelirroja mientras retrocedía.

— ¿A dónde creés que vas?— una fría,masculina y escalofriante voz sonó justo detrás de la pelirroja, quien no dudo en cerrar los ojos para observar quien era.

—l-lo siento, me he perdido...— se disculpo la pelirroja mientras caminaba en otra dirección.

— Ahí queda la casa de los Corduroy— el castaño detrás de ella siguió observandola, hasta que por fin ella abrió los ojos— Y dime, ¿Cómo es posible que una sepultera como tú esté aquí en mi sueño?— el castaño se acercaba de poco en poco a la pelirroja quien retrocedía.

— ¿Sueño..?

— Así es... Sueño

—¿ Por qué soñarías ver tu mansión?

— ¿He dicho que he soñado eso?— el castaño siguió acercándose a la pelirroja hasta el punto de dejarla contra un árbol.

Era posible, al igual que Dipper Pines, el también estaba encantado por las pelirrojas, en su caso, la prima de los sepulteros alegres.

La respiración del castaño choco con la de la pelirroja quien solo lo miraba fijamente.

— ¿No te enseñaron a respetar el espacio personal?— está intento empujar al castaño pero este tomo sus manos.

— No, pero si a irrumpirlo— el chico sonrió levemente mientras observaba a la pelirroja fruncir el ceño— No lo entiendo, todas caen ante mi— el castaño dirigió su mano a la mejilla de la pelirroja y la acaricio— pero tú al parecer eres más testaruda.

— ....— la pelirroja solo lo miro antes de que todo volviera a ponerse borroso.

— ¿Estás despertando?, Bien también despertaré e iré a arreglar unos asuntos conti...

La pelirroja se exaltó al ver que su cama estaba completamente mojada, al parecer alguien le había arrojado un líquido sobre de ella.

— Bella durmiente, el desayuno está listo— como siempre su prima la despertada y esta le hacía compañía.

— Oh, gracias Gwen.— está le sonrió antes de cambiarse.

Era agobiante pensar que en cualquier segundo ese tipo vendría a hablarle, ella estaba totalmente paniqueada pero no lo demostraba.

Sus orbes indicaban fatiga y desánimo, ella no quería hacer casi nada y más si se trataba de ir y hacerle frente a los gemelos como hacían los Pines.

—¿Irás a la cabaña del misterio?— la pregunto su tío colocando sus brazos en la cintura.

— No, hoy no— ésta solo mordió su chocolate y tomo su mochila— iré a el bosque.

—¿Tu sola?— su prima se le acercó—¿ Estás peleada con Gideon y Pacífica?

— No, solo no tengo ganas de verles el rostro a tus otros amigos Gwen.

Wendy solo relajo su ceño y asintío mientras que la pelirroja menor salía del lugar.

Hojas secas, aves soltando un irritante cantico que podía parecer mortal y uno que otro animal como venados saltando y escabullendose por doquier.

Le pareció extraño, parecía haber tenido un déjà vu, era extraño volverse a ver con la misma ropa, los mismos pasos y hasta el mismo clima que en aquel sueño, aunque ella quisiera huir no podía, algo se apoderaba de su cuerpo y le guiaba hasta la perdición.

Otra vez, cerro sus ojos dejándose guiar por el sonido de los susurros y caminando hacia lo que ella veía y se hacía imaginación por los susurros.

Podría ser más extraño que todo ocurriera de la misma manera y que todo se viera y viviera igual, desde el bosque tintado de azul hasta los animales soltando lágrimas de este llamativo color y cuando ella iba a intentar regresar alguien la tomo de le cintura y había estado oliendo su cuello.

— Es bueno verte, Valentino.

— Quisiera decir lo mismo Gleeful pero estás inquietandome tan cerca.

— ¿Te molesta si hago esto?— el de orbes aguamarina había comenzado a lamer el cuello de la pelirroja quien intentaba mover su pulcera.

— Dime Valentino, ¿Por qué no te gusto?— está se acercó al oído de la pelirroja y lo mordió.

— Porque tienes complejo de Playboy y esos tipos son un asco.

— ¿Play... qué?, ¿Me comparas con alguien más? Tienes agallas Valentino.

— Sí, eso me han dicho ahora aparta— la pelirroja hizo un movimiento brusco con sus manos y logro safarse del fuerte agarre del castaño.

— Oh con que la sepultera resultó ser...

— no soy una sepultera— grito a el castaño el cuál se le quedó viendo— soy solo una estudiante que viene aquí solo para hacer su actividad de turismo y que se quedó en casa de su prima.

— ¿ Con qué chica de ciudad ,eh? Me gusta.

— Que te jodan Gleeful

— Ja, quisieras

──Si, quisiera al menos así estarías satisfecho de una vez por todas.

── ¿Tanto te gustaría que eso pasará? ──El castaño sonrió de lado acercándose peligrosamente donde la pelirroja y tomando descaradamente su mejilla── Cariño, ¿tienes idea de lo muy poco que me importan tus malos comentarios?

La pelirroja casi se cae de espaldas al oír aquel comentario y la risa del castaño, quería huir de ahí lo más pronto posible,  sabía que muy pronto Dipper Gleeful descubriría su secreto para poder ver lo que otros no y para tener visiones.

—“Solo quienes han sido testigos en el mundo original del gran poder podrán verlo en cualquier otra dimensión, ya sea para bien o para mal ”

—“ Phoenix Corduroy, destructora de demonios número 3”

Era posible que gracias a su contra—parte y a su pulsera ella pudiera seguir observando el mundo de reverse falls tal y como era: tétrico, aterrador y podrido.

Puede que si la pelirroja se hubiera quedado pensando de más el castaño hubiera entrado en su mente pero no, ella se detuvo y siguió caminando en compañía del castaño.

Puede que si la pelirroja se hubiera quedado pensando de más el castaño hubiera entrado en su mente pero no, ella se detuvo y siguió caminando en compañía del castaño

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𝘕𝘰𝘵 𝘴𝘰 𝘦𝘢𝘴𝘺•| Dipper Gleeful •| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora