Capítulo 50

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Elena

Me duele la cabeza, no me puedo mover y no reconozco dónde estoy, ni cómo llegué hasta acá porque lo último que recuerdo es estar saliendo del hospital. Al levantar la cabeza me doy cuenta que estoy atada a una cama. Quiero pedir ayuda pero no puedo porque tengo la boca tapada. Por qué me está pasando esto ahora que todo en mi vida está encaminado y por fin soy feliz. Escucho abrir una puerta y alguien que se acerca.

-Te despertaste desgraciada. Ahora sos nuevamente una mujer casada y no pensabas contarnos a nosotros tus padres.

-Lorna creo que está quiere decir algo.

Mi padre se acerca y de un tirón me saca la cinta que tapa mi boca, duele muchísimo.

-Qué quieren de mí, porque no me dejan en paz para poder vivir mi vida.

-Jamás lo haremos, somos tus padres y nos debes la vida. Porque nosotros nos sacrificamos para criarte y darte la mejor vida posible.

-Ustedes nunca se sacrificaron por mí, más bien me usaron siempre para mantener su estilo de vida y cuando pudieron me vendieron para asegurarse su futuro.

Mi madre llena de furia me pega reiteradas veces hasta que mi padre la frena.

-No le pegues porque si la ven golpeada el maridito no nos va a pagar por tenerla de vuelta.

-Tienes razón, esta mal parida para lo único que sirve es para darnos plata.

-Déjenme ir y les doy lo que ustedes quieran.

Me vuelven a tapar la boca y antes de irse se ríen como locos.

-Ni locos lo hacemos. Ya nos comunicaremos con tu esposo para pedirle una buena cantidad.

Me dejan nuevamente sola, intentó con desesperación desatarme pero me es imposible. Solo espero que Christian me pueda salvar de estos desgraciados.

-Señor volvió todo el equipo.

-Alguna novedad sobre la señora, Taylor.

-Ahora ellos se reunirán con nosotros para darnos el informe.

Christian

Espero que la hayan encontrado, temo mucho que si no es así le pueda pasar algo. El primero que entra es Sawyer, que tendría que haberla cuidado.

-Señor no entiendo como paso todo, siento que fue por mi culpa.

-Ahora no quiero culpar a nadie, solo quiero saber si lograron encontrarla.

-Buscamos por todo el hospital, incluso nos ayudaron los guardias del lugar. Pero no la encontramos, como si la tierra se la hubiese tragado. Pedimos las grabaciones de los videos de seguridad y nos prometieron mandarlos la recopilación de todas.

-¿Señor trató de comunicarse con su celular?

-Lo hice Taylor, pero siempre salta el contestador.

-Me voy a comunicar con un amigo que es especialista en informática y nos puede ayudar a localizar el celular.

-Muchas gracias Taylor. Ya salgo para nuestra casa para ver si ella fue para allá. Ni bien tengas novedades de tu amigo por favor comunícate urgente conmigo.

-Muy bien señor, ya mismo lo hago. También voy a mandar un grupo que siga buscando en los alrededores del hospital.

Se van todos, me derrumbo en mi silla y no puedo contener la angustia de no saber dónde está mi dulce esposa.

Justo en el momento que llego a casa suena mi teléfono, solo espero que sea Elena pero no, es mi papá el que me llama. Quizás sepa algo de ella.

-Hola papá. ¿Paso algo?

-Hola hijo. Creo que si, porque tu madre encontró la cartera de Elena tirada en la puerta de casa.

Ya no me quedan dudas que alguien está reteniendo contra su voluntad a Elena.

-Fue a visitar a una amiga y no la podemos encontrar por ninguna parte. Por las dudas su celular está dentro de la cartera.

-La revisamos con tu madre y lo único que tenía eran los documentos, por eso sabemos que es su bolso. Necesitas que te ayudemos con algo hijo.

-Pueden venir a casa para hacerme compañía hasta que aparezca Elena.

-Claro hijo, ya estamos saliendo para tu casa.

Corto con mi papá y me encuentro con Elsa.

-¿Elsa la señora está en casa?

-Buenas tardes señor. No, estuve todo el día acá y no la vi regresar. ¿La señora no estaba con usted?

-Si, salió un momento y se desvaneció en el aire, porque no la podemos encontrar. Pensé que podía haber vuelto para acá.

-Espero que la encuentren señor porque no le puede estar pasando esto cuando es tan feliz por primera vez.

Vuelve a sonar el celular, gracias a Dios es Elena, así que atiendo rápido.

-Amor, dónde estás, estoy preocupado por vos.

-Lamento decirle que ella no puede contestar. Si quiere volver a verla sana y salva tendrá que conseguir diez millones. Ya le avisaremos como entregarlos.

-Por favor déjeme hablar con ella para saber que está bien.

-Si lo quiere hacer junte la plata y ni se le ocurra avisar a la policía si quiere volver a verla con vida.

La comunicación se corta de golpe, el miedo a que le pase algo no me deja respirar. Temo perder a la persona que completa mi vida.

-Señor la policía quiere hablar con usted y Taylor vino con alguien.

-Hágalos pasar al living y dígale a Taylor que lo espero en la oficina.

-Muy bien señor.

Me dirijo a la oficina mientras Elsa hace pasar a la policía y le dice a Taylor donde lo espero. Cuando entra viene acompañado del que supongo es su amigo.

-Taylor pase por favor. Hace un momento recibí un llamado del celular de la señora.

-¿La pudo localizar?

-No era ella, la llamada la hizo un hombre que pidió diez millones de para que la pueda volver a ver con vida.

-Señor este es mi amigo Welch, él nos puede ayudar a localizarla, más si están usando el celular de la señora.

-¿Qué necesita señor Welch para hacerlo?

-Si me permite voy a intervenir su teléfono y cuando vuelvan a llamar podemos localizarla en segundos.

-Puede trabajar acá en mi oficina, yo tengo que ir a hablar con la policía.

-Señor le puedo recomendar que todavía no le diga a la policía que recibió el llamado, solo explíquele cómo desapareció. En estos casos es mejor que la policía intervenga lo menos posible.

-Voy a seguir su consejo Taylor, se que usted la quiere encontrar tanto como yo.

-Eso no lo dude señor, incluso Sawyer sigue trabajando para saber que paso, en cualquier momento trae las grabaciones del hospital.

Los padres secuestraron a Elena para pedir plata, ya que no quieren ir presos y necesitan desaparecer. ¿Podrá Christian rescatarla y por fin los padres de Elena recibir su merecido?

Dos corazones cambiando su destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora