Todos conocemos la historia del mayordomo demonio favorito de todos y el joven Conde, pero ¿y si tuvieran un tercer socio en el crimen? Reescribamos la historia agregando una nueva cara, ¿de acuerdo? ¡La vida de Chêne está a punto de volverse mucho...
Era extraño ... En lugar de sentirse como si se precipitara hacia su perdición, Chêne se sintió como si estuviera flotando. Lentamente abrió los ojos y vio que en lugar de caer por un agujero, estaba rodeada de extrañas luces que formaban un vórtice. A Chêne le recordó a esos protectores de pantalla que intentaban imitar el efecto de volar por el espacio a una velocidad vertiginosa. Fue un efecto genial, definitivamente no es algo que encontrarías en un hoyo promedio en el suelo.
-"Eso es lo británico para ti, supongo"- pensó Chêne. Incluso sus pozos sin fondo son elegantes.
De repente, Chêne sintió que otra fuerza tiraba de ella y una luz la cegó. Cerró los ojos e hizo una mueca de dolor cuando se estrelló contra algo realmente duro. No es genial. Chêne gimió y trató de incorporarse, sin lograrlo. Esperaba no tener una conmoción cerebral ...
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{1886: la sede de cierto culto: Inglaterra, en las afueras de Londres}
POV de Ciel
¿Cuánto tiempo había estado aquí? Ser torturado, golpeado, reducido a nada más que un animal inmundo y degradado. Ciel no podía estar seguro. Le pasó de nuevo hoy. Fue obligado a entrar en la jaula con los otros niños. Había menos de ellos ahora, y se vieron obligados a ver cómo aún más de ellos eran asesinados por uno de los rituales enfermos del culto. Afirmaron que podían convocar al diablo para que cumpliera sus órdenes al hacerlo. En lo que a Ciel se refería, eran el mismo diablo, el mal. Ciel miró con ojos apagados y desesperados mientras la niña del pentagrama exhaló su último suspiro. Como siempre, no pasó nada. Los miembros del culto claramente no estaban contentos y discutieron entre ellos.
-No lo entiendo. ¡Las condiciones para convocar a un demonio son perfectas esta noche! - dijo un hombre corpulento de bigote gris.
Aunque Ciel no sabía ninguno de los nombres de los miembros, y siempre usaban máscaras y capas para disfrazarse, supo al verlos que este hombre era el líder.
-De hecho. -continuó el líder. -las condiciones para convocar a un demonio de alto nivel no serán tan buenas durante otros diez años una vez que termine esta noche.
Los miembros del culto comenzaron a susurrar entre ellos. Estas personas, si se les puede llamar así, eran codiciosas y egoístas. No había forma de que estuvieran dispuestos a esperar tanto.
-No hay otra alternativa entonces. -dijo el líder. -Tendremos que seguir realizando la ceremonia hasta que responda un demonio o nos quedemos sin corderos para el sacrificio, lo que ocurra primero.
El líder se acercó a la jaula en la que estaba Ciel mientras los demás sacaban el cadáver de la niña del altar. Ciel se arrastró lo más adentro de la jaula que pudo. Él era el único que quedaba ahora, y por miserable que fuera su situación actual, Ciel no quería morir, no así. Cuando el hombre alcanzó la puerta de la jaula, sucedió algo increíble. El pentagrama brillaba. Todos en la habitación se congelaron al ver a una chica materializarse de la nada, justo frente a sus ojos. Ciel estaba realmente sorprendido.
