capitulo 8.

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[¿Acaso eres bruja? Porque me tienes en tu hechizo.]

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Después de esquiar fuimos a busear, nunca lo había hecho, por lo que era una nueva experiencia para mí, una experiencia muy buena a decir verdad. Entre al agua con el equipo y comencé a nadar más profundo, había un límite para nosotros los principiantes y no podía ir después de dicho límite.

Mikasa parecía que ya lo había hecho mucho antes, su forma de nadar era buena y delicada. Jean no parecía tener dificultades, y Connie y Sasha no pasaban los 3 metros de profundidad...

Al salir del agua me quedé en la orilla sentado por un momento, mire por la ventana y Vi una chica rubia pasar, ¿Podría ser ella?

Me acerque a la ventana y en efecto, era ella, no me acerque y espere a que de casualidad nuestro encuentro fuese más... Directo.

No quería llegar confiado de que ella me reconoce o recuerda, por lo que preferiría evitar una humillación pública.

—Bien Armin, creo que ya podemos irnos, no falta mucho por oscurecer, y escuché que habrá un pequeño carnaval, podemos ir si quieres.

—¿Uh? Oh sí, está bien, por mi no hay problema.

—¿Estás bien? Te noto un poco extraño...

— Estoy bien, Mikasa, vamos, los demás deben estar esperando.

— Uhm... Bien, vamos.

Caminamos hasta el estacionamiento, dónde los demás nos esperaban, subimos al auto y fuimos todos a la playa, donde sería el carnaval, no teníamos planeado ir en un principio, pero parece que Jean lo escucho de unos empleados, y después de una pequeña plática le dió información de dicho evento.

Llegamos y había demasiada gente, todos llevaban varias máscaras y ropa llamativa, incluso vendían varios artículos que podían usar, a los cuales Sasha y Connie no se pudieron resistir y los terminaron comprando.

Después de estar entre la multitud nos separamos, yo intenté buscarlos pero no parecía dar resultado alguno.

De pronto sentí que alguien choco contra mi, y seguido de que había caído, atrape a la persona antes de que cayera. Era ella.

—¿Annie?

—¿... Armin?

—¿Estás bien?

— si... Gracias... ¿Que haces aquí?

— Vine con unos amigos a la playa para pasar el rato y distraernos... ¿Y tú?

— Solo vine con mis padres...

—¿Tus padres? Entiendo...

— El carnaval aquí es lindo, aunque yo solo vengo por cuestiones de empleo de mis padres.

—¿Tus padres de que trabajan?

— Son narcotraficantes.

—¿Qué? ¿E-es una broma?

— Obviamente que lo es.

La rubia empezó a caminar entre la gente y yo fui tras ella, al fin tenía la oportunidad de conocerla mejor que solo por mensaje.

Me sorprendió que me dieras tu número, pocos hombres lo hacen si mides 1.55.

—¿Qué? No, no lo había hecho tanto por eso... Es solo que no tengo muchos amigos.

—¿Y con los que viniste? ¿No cuentan?

— Son solo cuatro, y ni sé si realmente me quieren...

— Apuesto a qué sí, si no no hubiesen aceptado venir, ¿No es así?

— Es un buen punto jaja, tienes razón, espero que así sea...

— Me sorprendió encontrarte aquí... Naturalmente siempre estás en el Casino o la escuela...

— Si.. es ver- Espera, ¿Me estás acosando?

— No, simplemente que un amigo mío estudia en tu universidad, y lo del casino es normal, siempre que voy te encuentro jugando, aunque algunas veces te noto aburrido.

— Uhm... No sé si creerte o no...

— Eso depende de tí... Si creer en mi o no.

— Uhm.. confiaré en ti, y... Ya que estamos aquí, ¿Te gustaría ir a comer algo?

— ¿Uh? Esta bien... No tengo problema, ¿Y tus amigos?

— Estarán bien, les mandaré un mensaje de texto más tarde, no te preocupes.

— Está bien, vamos, Armin.

Salimos de entre la multitud y nos acercamos a un pequeño restaurante cercano con vista al mar, escogimos una mesa cerca de la terraza y nos sentamos.

El ambiente era tan tranquilo, la música de violín que acompañaba el momento lo hacía mejor, ordenamos nuestra comida y nos quedamos ahí a esperar un buen rato.

Yo me quedé mirando a la puesta de sol, el cielo comenzaba a tornarse de colores rojos y naranjas, la luna ya hacía presencia y el leve frío que hacía aumentaba poco a poco.

En un momento voltee a mirarla... Era tan hermosa... El aire movía sutilmente el mechon de cabello que traía suelto, sus ojos soltaban un brillo azul claro que hacía contraste con sus ojos azul oscuro... En ese momento supe que me enamore...

No sabía si lo más hermoso en el momento era la vista o ella, pero haría lo que fuera para conquistarla...

Por lo que hemos estado hablando es alguien de pocas palabras, y yo llego a ser muy hablador, por lo que será difícil pero estoy dispuesto a correr el riesgo por ella...

Nunca antes había experimentado algo como esto... Podía decir que una mujer era bonita y ya, pero no tendría algo serio con ella, pero con ella... Era diferente... Con ella quería demasiado... Pero no sé que me depare el destino... Tampoco se si ella esté dispuesta...

Solo espero... Que en un futuro no muy lejano pueda decir... "Al final lo logré, logré conquistar a la chica de cristal".

Solo espera Annie... Yo seré el que robe tu corazón...

//Recordatorio de que las actualizaciones son cada viernes para cada historia//

Todo o Nada.Where stories live. Discover now