Adachi to shimamura Novela Volumen 2 al 11

¿Son almas compartidas? (Parte 2)

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Habiendo salido del gimnasio, nos encontramos al azar con la madre de Shimamura. Esto es lo que ella tenía que decir:

"Pasa por la tienda de carne y compra algunas croquetas."

"Hmm, creo que olvidaste decir algo. ¿Alguna idea de lo que podría ser?

"Asegúrate de no ser atropellada por algún automóvil."

"G-R-A-C-I-A-S."

Al observar esta interacción desde un lado, una vez más me quedé con la impresión de que las dos estaban realmente cerca.

Incluso yo podría decir lo mismo.

De todos modos, Shimamura se subió a mi bicicleta y juntas comenzamos a dirigirnos hacia nuestro nuevo destino: Carne Nagafuji. Una vez allí, nos recibió un hada con el pelo azul dibujado en la entrada. ¿Qué estaba haciendo tal cosa allí? No estaba muy segura. Además, aunque no pude señalar exactamente dónde, realmente sentí que había visto a este personaje antes.

En ningún momento apareció Nagafuji mientras elegíamos nuestro pedido.

"Ella aparece con poca frecuencia, ¿eh, esa Nagafuji?"

"Sin lugar a dudas. Ella es totalmente inútil" el hombre detrás del mostrador, presumiblemente el padre de Nagafuji, respondió a la pregunta de Shimamura, mientras sacudía su mano sudorosa de lado.

La puerta de atrás tembló ligeramente como si hubiera alguien detrás, pero voy a fingir que no vi eso.

De todos modos, ahora podía tachar Ir de compras con Shimamura de mi lista.

Espera... ¿podía?

Con la guarnición para la cena comprada, regresamos a la casa de Shimamura. Era solo la segunda vez que me quedaba allí y, sin embargo, a diferencia de antes, ahora tenía mi propia silla colocada junto a la mesa.

Me pareció un poco incómodo lo apretado que estaba debido a mi presencia. Todos nuestros hombros se frotaban, y prácticamente podía sentir el calor que se liberaba como resultado. Aunque ciertamente no es algo que deba decir una persona que se queda en la casa de otra persona, si soy completamente honesta, no era una gran fanática de comer así.

O más bien, lo había experimentado tan pocas veces que aún tenía que desarrollar el tipo correcto de anticuerpos.

Incluso la mejor nutrición era venenosa a menos que tuvieras inmunidad contra ella.

"Perdón por todos los problemas..."

"No, está bien" dijo la madre de Shimamura.

"No te preocupes por eso" agregó la chica con el pelo azul.

"Hey, cállate."

"Jejeje."

La chica de cabello azul (olvidé su nombre) había aparecido en la mesa casi como si fuera parte de la familia, llegando a tener una conversación amistosa con la madre de Shimamura. Su padre y su hermana también parecían no tener en cuenta su presencia.

"No te preocupes, no te preocupes."

La oradora esta vez fue Shimamura misma, aconsejándome con la boca llena de sopa de miso.

Me pregunto, ¿fue crecer en una casa como esta lo que la llevó a ser tan tolerante? Espera, no, esa no era la palabra correcta... ¿De mente abierta?

Algo así nunca podría pasar en nuestra casa. En el peor de los casos, sería mamá llamando a otras personas.

"Así es siempre mamá."